El documento habla sobre los problemas que resultan del uso masivo de mentiras en la política en Colombia. Menciona que esto ha afectado gravemente a la sociedad, ha desconocido el valor moral del adversario político, ha ignorado la fuerza renovadora de las nuevas generaciones, y ha negado la posibilidad de que el país supere la polarización, la violencia y el odio que ha vivido desde el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán hace 68 años.