La cirugía cardiovascular ha evolucionado desde sus inicios en Egipto y Roma, donde se practicaba la cirugía y se empezó a entender la anatomía humana, hasta llegar a ser una especialidad moderna con logros como el primer trasplante de corazón y el desarrollo de prótesis valvulares. Figuras clave como William Harvey, que describió la circulación de la sangre, y Michael de Bakey, llamado el padre de la cirugía cardiovascular, han impulsado el progreso de este campo.