Este documento presenta 5 principios rectores de la educación inicial: 1) que los niños son aprendices competentes capaces de pensar y decidir según su desarrollo, 2) que deben recibir servicios educativos de calidad que garanticen su seguridad, protección y aprendizaje, 3) que se debe orientar a los padres para enriquecer las prácticas de crianza y atender las necesidades de los niños.