Los medicamentos pueden prevenir, aliviar o curar enfermedades y se administran de varias formas como pomadas, jarabes, supositorios e inyecciones. Es importante almacenarlos correctamente y no desecharlos en la basura sino llevarlos a puntos de reciclaje designados. Las bacterias han desarrollado resistencia a antibióticos a través de la evolución, por lo que es crucial usarlos apropiadamente para combatir infecciones bacterianas y no virales.