Colombia vivía una época de convulsión política y violencia en 1989 que llevó al llamado de una Asamblea Nacional Constituyente para redactar una nueva constitución. La Asamblea fue elegida democráticamente en 1990 y redactó la Constitución de 1991, la cual transformó políticamente el país e introdujo reformas como la participación ciudadana y los derechos humanos.