La Web 2.0 ha generado una mayor demanda de información especializada y ha permitido que los usuarios produzcan y compartan contenido, lo que ha llevado a una mayor inversión en publicidad segmentada en Internet. La Web 2.0 se basa en la interacción y redes sociales entre usuarios y en la creación colaborativa de contenido, democratizando los medios y reduciendo los costes de difusión de información.