1. DISPERSIÓN DE TAMAÑOS
Para determinar la dispersión de tamaños se debe medir
individualmente la longitud de por lo menos 50 postlarvas
y calcular la longitud media y la desviación estándar. El
coeficiente de desviación (CV) es obtenido de dividir la
desviación estándar entre la media.
CV 15%
CV 15 % x 25%
CV 25 %
2. CONTENIDO INTESTINAL
Los exámenes de la apariencia del tubo digestivo
(no sólo el color) y contenido deben ser hechos
para evaluar el nivel de alimentación de las PL.
La presencia de intestinos vacíos puede ser los
primeros signos de una enfermedad, o
simplemente de una alimentación inadecuada
3. COLOR DEL HEPATOPÁNCREAS
El hepatopáncreas no debe ser transparente y debe
tener una buena coloración. Generalmente, debe ser
de color amarillo oscuro ferroso u ocre.
Un hepatopáncreas de color más oscuro
generalmente indica una mejor salud.
Se debe tener cuidado con determinados piensos, ya
que pueden contener colorantes que tiñen el
hepatopáncreas prácticamente de negro, sin
contribuir necesariamente a la salud del animal.
4. CONDICIÓN DEL HEPATOPÁNCREAS
Se debe examinar el estado general del hepatopáncreas de las
postlarvas, que viene indicado primeramente por el número de
vacuolas y su tamaño en general. La presencia de un
hepatopáncreas relativamente grande con numerosas vacuolas
lipídicas es considerado como un signo de buena salud. Las
postlarvas que lo tengan pequeño y con pocas vacuolas es signo
de desnutrición, por lo que se debería mejorar su alimentación
para incrementar su calidad antes de cosecharlos
5. FOULING EPIBIONTE
Las postlarvas deben ser examinadas en busca de cualquier fouling de
materia orgánica o epibionte en el exoesqueleto o las branquias (que
normalmente consisten en protozoos como Zoothamnium, Vorticella,
Epistylis o Acineta, bacterias filamentosas, o suciedad y materia
orgánica). El fouling puede ser normalmente desprendido con la muda o
tratado con formalina de hasta 20-30 ppm durante una hora (con fuerte
aireación).
MELANIZACIÓN
Las postlarvas deben ser examinadas en busca de melanización, la cual se
origina con frecuencia donde los miembros han sido sometidos a
canibalismo, o donde se han producido infecciones bacterianas. Una
excesiva melanización es causa de preocupación y precisa de un
tratamiento a través de la mejora de la calidad del agua y del régimen
alimenticio, y a veces, de reducciones en la densidad de la siembra, para
prevenir el canibalismo y reducir la carga bacteriana.
6. Desarrollo branquial
El estado de desarrollo branquial debe ser examinado, puesto que
ofrece una buena idea del momento en el que las postlarvas son
capaces de tolerar cambios de salinidad, los cuales ocurren con
frecuencia cuando los camarones son transferidos a las
instalaciones de engorde. Cuando las lamelas branquiales se
ramifican como un árbol de Navidad, aproximadamente entre PL9-
10, son generalmente capaces de tolerar cambios bastante rápidos
de salinidad (con salinidades de agua superiores al 5‰, toleran un
cambio de 1‰/hora, por debajo del 5‰, pueden tolerar un cambio
de 0.01‰/hora) y se pueden aclimatar fácilmente a las condiciones
de engorde. Cuando las lamelas branquiales permanecen sin
ramificar, los camarones no deben ser sometidos a grandes y
rápidos cambios, y no se pueden considerar preparados para ser
transferidos desde los tanques de postlarvas.