2. INTRODUCCIÓN
La úlcera por presión se presenta como una lesión localizada en la piel y/o tejido
subyacente, sobre prominencias óseas, provocada por la presión y/o asociada a
cizallamiento, con una prevalencia de 18%, existiendo múltiples factores de riesgo.
La dimensión y el impacto que producen las ulceras por presión hace que éstas sean
consideradas un problema de salud, social y económico; además de un generador del
deterioro de la calidad de vida del paciente.
Estas lesiones constituyen una puerta de entrada para la invasión de microorganismos
patógenos que provoquen infecciones, además la edad avanzada, confinados en cama
o a silla de ruedas, desnutridos, pluripatologicos, comprometidos de conciencia y mal
apoyo familiar; complican el estado de salud de la persona hasta causarle la muerte, es
así que la enfermera siendo un miembro primordial del equipo de salud realiza
intervenciones encaminadas a conseguir un objetivo previsto, basado en el conocimiento
y juicio clínico, para favorecer el resultado esperado del paciente. Por esto las
intervenciones del profesional de enfermería para la prevención de UPP son un conjunto
de acciones específicas basadas en el cuidado; que buscan evitar la aparición y
formación de una lesión sobre la piel, incidiendo sobre los factores intrínsecos y
extrínsecos dirigidas a individuos con riesgo a desarrollarlas.
Los cuidados para la prevención de UPP inician desde la valoración del paciente
mediante una escala de riesgo de UPP, a partir de esto se identifica al paciente y se
planifican los cuidados directos e indirectos como medidas para el control de la presión,
alimentación y nutrición, cuidados de la piel, educación familiar – paciente y registro en
la historia clínica respectivamente.
OBJETIVO GENERAL
Brindar información sobre la prevención de ulceras por presión y que factores le
conlleva a estas lesiones en la piel.
ONBJETIVOS ESPECIFICOS
Identificar los factores intrínsecos y extrínsecos que influyen a la formación de las
ulceras presión.
Identificar las medidas de prevención de las UPP.
Concientizar la importancia de los cambios de posición para la prevención de
ulceras por presión.
Identificar la importancia de la aplicación de la escala de Braden.
3. MARCO TEÓRICO
DEFINICIÓN
La ulcera por presión es de origen isquémico localizado en la piel y tejidos
subyacentes con pérdida de sustancia cutánea producidas por presión prolongada o
fricción. Se define una úlcera por presión o úlcera por decúbito (UPP) como un
deterioro de la integridad cutánea en cualquier persona que experimente una
restricción de la movilidad, alteración neurológica, reducción circulatoria o cualquier
factor que interfiera en el metabolismo celular, sea, por falta de oxígeno o falta de
nutrientes alterando una correcta circulación sanguínea lo que provoca una isquemia
tisular.
ANATOMÍA DE LA PIEL
La piel o membrana cutánea es un órgano extenso del cuerpo humano que cumple
algunas funciones.
Funciones de la piel
Función protectora (epidermis, dermis, hipodermis).
Función secretora (epidermis y dermis)
Función termorreguladora (dermis)
Función sensorial (dermis)
Función metabólica (Hipodermis) (25)
Capas De La Piel
a). Epidermis: Su espesor varía según el sitio de ubicación, el lugar más grueso es la
planta de los pies y las palmas, donde alcanza un espesor de 1,5 milímetros. Su epitelio
es pluriestratificado compuesto por láminas de keratina. Esta capa de la piel 15 también
contiene células con pigmentos llamados melanocitos, que son los que dan el color de
la piel, las células de Langerhans cumplen funciones defensivas y células nerviosas con
funciones hormonales (células de Merkel). Esta capa no posee vasos sanguíneos.
b). Dermis: Tiene un espesor variable, que alcanza los 3 milímetros en la planta de los
pies. Es tejido conjuntivo sobre el que descansa la epidermis y que consiste
principalmente en fibras (colágenas), células de tejido conectivo (fibroblastos), fagocitos
inmunológicamente activos (macrófagos) y mastocitos que median reacciones alérgicas
e inflamatorias. Esta capa dérmica contiene vasos sanguíneos y linfáticos, al igual que
receptores sensitivos, pelos, glándulas sebáceas y sudoríparas. Las glándulas
sudoríparas producen una secreción acidita que actúa como una capa protectora que no
permite el crecimiento bacteriano sobre la piel.
c).Hipodermis: Está compuesta por el tejido conjuntivo laxo, uniendo de manerapoco
firme la dermis con los órganos subyacentes y está formada por una capa variable de
4. tejido adiposo con una función de aislamiento, que permite que la piel se modifique y
proteja contra la perdida de calor y traumatismos superficiales.
Las UPP afectan a las tres capas de la piel antes mencionadas y ocurren con mayor
frecuencia en personas confinadas en cama o en silla de ruedas, comprometidos de
conciencia, aumentando el riego de presentar estas UPP, personas con déficit
nutricional, adultos mayores con dependencia en la movilización.
Los sitios comprometidos en más del 80% de los casos son: sacro, trocánteres, nalgas,
maléolos externos y talones.
Se manifiestan como una zona eritematosa no blanqueable, pérdida epitelial, solución
de continuidad o formación de escaras sobre prominencias óseas.
FACTORES DE LAS ULCERAS POR PRESIÓN
El factor causal primordial en la aparición de las ulceras es la fuerza de compresión, ya
sea fuerzas de compresión de alta intensidad por corto periodo o de baja intensidad por
largos periodos, las que pueden producir ulceraciones cutáneas.
La intensidad y duración de la compresión y una posible oclusión capilar, determina un
aumento de la presión sobre los capilares, produciendo su ruptura, lo que desencadena
micro hemorragias y áreas de necrosis.
Los efectos negativos de la presión por compresión son exacerbados en presencia de:
a) Fricción: determina un daño epitelial, por ejemplo: tracción de sabanas. La
fricción se caracteriza por afectar las capas superficiales de la piel, limitándolo a
la epidermis.
b) Humedad: condicionado por la orina y deposiciones. Facilita la maceración de
la piel.
c) Fuerzas cortantes: son la fuerza generada por los tejidos sacro coxígeos
profundos. Estos efectos pueden causar la oclusión de los vasos glúteos y/o daño
mecánico de los tejidos subcutáneos.
El segundo componente esencial en el mecanismo de génesis de las ulceras es la
isquemia, especialmente en las prominencias óseas.
CLASIFICACIÓN DE LAS ULCERAS POR PRESIÓN.
Según su extensión se clasifica en:
Estadio 1: Alteración observable en la piel integra, relacionada con la presión, que se
manifiesta por un eritema cutáneo que no palidece al presionar; en pieles oscuras, puede
presentar tonos rojos, azules o morados. En comparación con un área (adyacente u
opuesta) del cuerpo no sometido a presión, puede incluir cambios en uno o más de los
siguientes aspectos:
5. Temperatura de la piel (caliente o fría).
Consistencia del tejido (edema, induración).
Sensaciones (dolor, escozor).
Estadio 2: Perdida parcial del grosor de la piel que afecta a la epidermis, dermis o ambas.
Ulcera superficial que tiene aspecto de abrasión, ampolla o cráter superficial.
Estadio 3: Perdida total del grosor de la piel que implica lesión o necrosis del tejido
subcutáneo, que puede extenderse hacia abajo pero no por la fascia subyacente.
Estadio 4: Perdida total del grosor de la piel con destrucción extensa, necrosis del tejido
o lesión en músculo, hueso o estructuras de sostén (tendón, capsula articular). En este
estadio como en el 3, pueden presentarse lesiones con cavernas, tunelizaciones o
trayectos sinuosos.
FISIOPATOLOGÍA
“Las ulceras por presión se producen por presión externa, constante, prolongada sobre
una prominencia ósea y un plano duro que origina isquemia de la membrana vascular,
vasodilatación de la zona, extravasación de los líquidos e infiltración celular. Si la presión
no disminuye, se produce una isquemia intensa local en los tejidos subyacentes,
trombosis venosa y alteraciones degenerativas que desembocan en necrosis y
ulceración que puede continuar y alcanzar planos profundos con destrucción de
músculos, aponeurosis, huesos, vasos sanguíneos y nervios”. (
FACTORES INTRÍNSECOS Y EXTRÍNSECOS: Es importante mencionar que existen
factores de riesgo intrínsecos o internos, que predisponen al desarrollo de una UPP, así
como también la evolución de estas en cualquier edad de la persona o causa por la cual
ocurre el desarrollo de las UPP.
FACTORES INTRINSECOS
Son los factores relacionados con la condición o comportamiento del paciente como:
• Edad.
• Patología relacionada a paciente postrado en cama:
• Deficiencias motoras
• Enfermedad neurológica.
• Alteración del estado de consciencia.
• Patología traumatológica.
• Lesiones cutáneas.
• Deficiencia nutricional (desnutrición u obesidad).
1. FACTORES EXTRINSECOS
6. Son los factores relacionados con el ambiente de la persona o su interacción con el
entorno:
• Procedimientos de higiene inadecuados.
• Falta de cambios posturales.
• Fijación inadecuada.
• Uso de dispositivos médicos de forma inadecuada y no controlada.
• Ausencia de elementos de uso de protección en paciente postrado.
• Falta de insumos y medicamentos.
• Tiempo de estancia hospitalaria.
• Falta o insuficiente personal
LOCALIZACIÓN MAS FRECUENTE
Las úlceras por presión aparecen con mayor frecuencia en aquellos sitios del organismo
con una prominencia ósea y varía de acuerdo con la posición que adopte el paciente
como:
Decúbito lateral: orejas, acromion, costillas, trocánter, cóndilos y maléolos.
Decúbito prono: Dedos de los pies, rodillas, genitales en hombres, glándulas
mamaria en mujeres, mejilla .
Decúbito dorsal: Sacro, coxis, crestas iliacas, talones.
ESCALAS DE VALORACIÓN DEL RIESGO
Escala de Norton La escala de Norton-MI mide el riesgo de desarrollar UPP. La
puntuación que se puede obtener oscila entre 5 (máximo riesgo) y 20 (mínimo
riesgo), y adquiere valores de: Alto riesgo, entre 5 y 11 puntos. Riesgo evidente,
entre 12 y 14 puntos. Esta escala considera cinco parámetros: estado mental,
incontinencia, movilidad, actividad y estado físico.
Escala de Braden la Escala de Braden mide la probabilidad de que un paciente
desarrolle una úlcera por presión (UPP), consta de seis subescalas: percepción
sensorial, exposición de la piel a la humedad, actividad física, movilidad,
nutrición, roce y peligro de lesiones cutáneas.
Escala de Arnell La escala Arnell permite conocer los riesgos de úlceras por
presión a través de siete variables que consideran el estado mental,
incontinencia, nutrición, aspecto de la piel, sensibilidad cutánea, actividad y
movilidad.
Escala Nova 5 La escala Nova es una modificación de la escala Norton en
pacientes hospitalizados. Considera cinco aspectos: estado mental,
incontinencia, movilidad, nutrición e ingesta y actividad.
7. Escala Emina La escala EMINA valora cinco ítems: estado mental, movilidad,
incontinencia, nutrición y actividad. Cada uno de ellos se puntúa del 0 al 3; por
tanto, la puntuación total de la escala oscila entre 0 y 15: 0 para los pacientes
que no tienen riesgo y15 para los de máximo riesgo.
Escala de Waterlow Escala de Waterlow para la estratificación del riesgo de
úlceras por presión, tiene seis subescalas (relación talla/peso, continencia,
aspecto de la piel, movilidad, edad/sexo, apetito) y cuatro categorías de otros
factores de riesgo (malnutrición tisular, déficit neurológico, cirugía y medicación).
ACTIVIDADES PREVENTIVAS
La manera más eficaz de tratar y cuidar a los pacientes con riesgo de desarrollar Úlceras
por Presión es la prevención:
A) EVITAR Y ALIVIAR LA PRESIÓN:
Mediante la utilización de sistemas que disminuyan la presión en las prominencias óseas
y evitar la isquemia tisular, esta disminución puede obtenerse mediante las técnicas de
posición (cambios posturales) y la elección de una adecuada superficie de apoyo, y otras
específicas en función de la necesidad de cada paciente.
CAMBIOS POSTURALES Para eliminar la compresión de los puntos de apoyo, es
imprescindible realizar cambios posturales cada 1 a 2 horas de manera cíclica las 24
horas del día. Dichos cambios estarán planificados y registrados en el plan de cuidados.
DECUBITO SUPINO: Las almohadas se colocarán
• Una debajo de la cabeza
• Una en el hueco poplíteo (para evitar hiperextensión de la rodilla)
sacándola entre las rodillas para evitar roce de cóndilos.
• Una bajo la parte distal de la pantorrilla, sacándola entre ambas piernas
para evitar roce de maléalos internos, dejando los talones libres.
• Los pies deben estar en ángulo recto.
DECÚBITO PRONO: Las almohadas se colocarán
• Una debajo de la cabeza
• Una debajo del abdomen
• Una debajo de los muslos
• Una debajo de las piernas,
• Dos bajo los brazos (opcional) Esta postura está contraindicada en
pacientes con lesiones torácicas, cardiacas y con respiración asistida.
DECÚBITO LATERAL: Las almohadas se colocarán:
• Una debajo de la cabeza
• Una apoyando la espalda (liberando zona sacra)
8. • Una entre las piernas.
DISPOSITIVOS PARA ALIVIAR LA PRESIÓN
• Taloneras y coderas
• Colchones y cojines: de espuma, de agua, de silicona, de aire, de aire
alternante
Los dispositivos, son útiles pero no pueden sustituir los cambios posturales.
B) ESPECÍFICAS (ÚLCERAS POR PRESION E IATROGÉNICAS):
Sonda nasogástrica: Limpieza de las fosas nasales con suero fisiológico, y
cambio de fijación de la sonda diario. Cuando precise ser cambiada, alternar con
el otro orificio nasal.
Gafas y mascarilla de O2: Limpieza de fosas nasales y protección de superficie
de apoyo del pabellón auricular y tabique nasal. Sonda vesical: Sujeción al
abdomen en varones y al muslo en las mujeres, alternando diariamente.
Tubos y cánulas endotraqueales: Utilizar tubos con balón de baja presión y alto
volumen. Mantener la presión de llenado del balón por debajo de 20 mmHg. Para
evitar las traqueo malacias, cambiar la fijación del tubo traqueal, proteger el punto
de contacto con la piel y mantener alineado el tubo o cánula con zona de incisión,
variando el punto de apoyo alternativamente.
Férulas y material de contención mecánica: Comprobar que tengan un correcto
almohadillado.
C) HIGIENE Aprovechar los momentos de cambio de posición para higienizar e
inspeccionar la piel y detectar posibles enrojecimientos o roces aplicando ácidos grasos
hiperoxigenados en las zonas de riesgo. El lavado se realizará con agua y jabón neutro
y el secado será suave y sin arrastre, haciendo hincapié en los pliegues. Mantener la piel
limpia, seca y bien hidratada.
D) NUTRICIÓN Vigilar que mantenga unos buenos parámetros nutricionales y una buena
hidratación.
TRATAMIENTO DE LA ÚLCERAS POR PRESIÓN
Un plan básico de cuidados locales de las Úlceras por Presión debe contemplar:
• Valoración Clasificar Úlceras por Presión y medir
• Limpieza de la lesión, Utilice siempre guantes estériles.
Limpie las lesiones inicialmente y en cada cura, utilice como norma suero salino
fisiológico, use una presión del lavado efectivo para facilitar el arrastre del detritus,
bacterias y restos de curas anteriores, pero sin producir traumatismo en el tejido sano.
9. Proteger la zona peliculera con un preparado a base de zinc. El apósito elegido para
ocluir la úlcera deberá siempre sobrepasar en 2,5 – 4 cm los bordes de la misma.
El plan de tratamiento de la úlcera por presión dependerá de la valoración de la lesión:
Si son lesiones de grado I Aplicar apósito hidrocoloide/hidrorregulador de baja
absorción (transparente/extrafino) en placa. Si la zona lesionada es el talón utilizar
siempre protección y dispositivo (almohadas) que evite la presión.
Si son lesiones de grado II Aplicar apósitos hidrocoloides en placa favorecedores de
la limpieza rápida de la herida, que atrapan la secreción cargada de gérmenes. En la
parte profunda de la úlcera aplicar gel, pasta o gránulos, además de la placa
superficial, y cuando haya disminuido la profundidad y la exudación, solamente la
placa.
En lesiones de grado III y IV
A veces no es posible sanar una úlcera de tercer o cuarto grado y se hace necesaria
cirugía para sellar la herida y prevenir más daños en el tejido.
Una técnica quirúrgica utilizada comúnmente para el tratamiento de escaras se
denomina reemplazo por injerto (a veces llamado también reconstrucción por injerto).
En esta técnica, el cirujano utiliza un bisturí para desbridar la úlcera de tejido
necrosado. Se toma un injerto de piel y músculo de otra parte del cuerpo y se utiliza
para sellar la úlcera.
La cirugía con injertos es de por sí complicada y puede plantear muchas dificultades
por el hecho de que los pacientes que la necesitan ya están en un estado de salud
delicado. Como resultado de estos factores de riesgo hay un gran número de posibles
complicaciones que pueden resultar de la cirugía, entre las que se encuentran:
infección,
muerte del tejido en el injerto,
debilidad muscular,
ampollas,
reaparición de las escaras,
infección sanguínea,
infección ósea,
hemorragia interna,
abscesos y
trombosis venosa profunda.
A pesar del alto riesgo de sufrir complicaciones, la cirugía es una necesidad clínica
frecuente para prevenir los efectos de las escaras que supongan una amenaza para la
vida, como septicemia o gangrena.
10. CUIDADOS DE ENFERMERÍA
Aliviar la presión estimulando la actividad el paciente.
Realizar cambio de posición cada 2 horas Colocar al paciente en las cuatro
posiciones (laterales, pronación y dorsal) en secuencia, a menos que este
contraindicado.
Emplear buenas técnicas para cambiar de lugar al paciente para reducir la fricción
y pérdida de epidermis.
Rodar y elevar el cuerpo del paciente al movilizar.
No deslizar el cuerpo a través de una superficie de apoyo.
Utilizar sábanas para el traslado.
Emplear protectores para talones y codos.
Mantener la sabana de abajo seca y bien estirada para evitar arrugas y pliegues
en el tendido de cama.
Acomodar, proporcionar confort al paciente con almohadas, cojincillos, para aliviar
la presión. Aliviar la presión sobre las salientes óseas mediante posiciones
correctas con almohadas y técnicas de puentes.
Dieta abundante en proteínas: las reservas adecuadas de proteínas son
importantes para conservar la vitalidad de los tejidos.
Administrar complementos de vitaminas y proteínas.
Complementos con zinc (mejoran el apetito y aumentan la velocidad de curación
de las heridas). Realizar una correcta curación diaria de las úlceras utilizando
un buen lavado con suero fisiológico, colocar apósitos de hidrocoloides.
Tomar cultivos de secreción de la herida para verificar la presencia de
microorganismos infecciosos.
Realizar desbridamiento de la herida retirando el tejido necrosado para favorecer
la granulación y evitar la infección.
Administrar adecuadamente y en los horarios establecidos los analgésicos
prescritos.
13. BIBLIOGRAFIA
Guía de buenas prácticas para la seguridad del paciente en la prevención
úlceras por presión en establecimientos de salud de la seguridad social de corto
plazo LA PAZ - BOLIVIA2021
ulceras.info/divulgacion/los-cuidados-de-las-upp/
https://www.msdmanuals.com/es/professional/trastornos-
dermatol%C3%B3gicos/lesi%C3%B3n-por-presi%C3%B3n/lesiones-por-
presi%C3%B3n
https://ulceras.net/monografico/112/100/ulceras-por-presion-prevencion.html
https://medlineplus.gov/spanish/pressuresores.html
Guia-Prevencion-de-Ulceras-por-Presion.pdf
http://www.auxiliar-enfermeria.com/esquemas/esquema_upp.htm
infomedula.org/?p=6292Recordando la importancia de prevenir las úlceras por
presión en la Jornada Mundial dedicada a esta patología