El documento enumera varios recursos tecnológicos que pueden usarse en la educación, incluyendo libros electrónicos, pizarras digitales, aplicaciones para estudiar, tabletas y teléfonos móviles. Estos recursos pueden ayudar a los estudiantes a tomar apuntes, organizar su tiempo de estudio, aprender idiomas y más, mientras que también permiten a los profesores hacer el proceso de aprendizaje más visible.