5. VARÓN MUJER
> Ángulo peneano-abdominal Tamaño ovario, trompa y útero
Tamaño testicular Longitud vagina y menos elástica
< Ascenso testicular con la
erección
Atrofia de labios mayores, menores
y resto de la vulva
Tamaño prostático
Atrofia de la mucosa de
endometrio, cuello y vagina
Mamas: tejido glandular sustituido
por grasa, piel menos elástica
6. VARÓN MUJER
Erección más lenta y menos
completa
Hormonas sexuales circulantes
Lubricación vaginal
Erección tras eyaculación
Número contracciones
orgásmicas
Eyaculación menos intensa Intumescencia clítoris
Orgasmo duración corta Orgasmo duración corta
7. • Duración e intensidad de su ciclo sexual
cambia incluso en ausencia de patología
Excitación
Tiempo
erección
Menos Firme
< Respuesta
visual y táctil
Meseta
+ Larga
Fuerza del
cremáster
Elevación
testicular
Orgasmo
+ Corta
- Vol líquido
seminal
Resolución
Rápida Vol
peneano
Período
refractario
alargado
8. • Todas las fases del ciclo se mantienen
pero con una intensidad menor.
Excitación
Expansión y
lubricación
vaginal
alargada
Meseta
> Estímulos
para lograr
orgasmo
Orgasmo
Contracción
musculares
(algunas
dolorosas)
Resolución
Capacidad
multiorgasmo
9. La disfunción eréctil (DE) se define como la incapacidad
persistente o recurrente para conseguir o mantener la
suficiente rigidez del pene que permita una relación sexual
satisfactoria.
El riesgo de padecer DE es superior en hombre con
Diabetes Mellitus, enfermedad cardíaca tratada e
hipertensión tratada.
10. • Edad
• Diabetes mellitus
• Enfermedad cardiovascular
• Tabaquismo
• Fármacos y consumo de drogas
• Trastornos afectivos
11. • Fármacos de acción central y periférica: Yohimbina,
Trazodona, Apomorfina, Fentolamina, Inhibidores selectivos
de la fosfodiesterasa-5 (PDE-5) como el citrato de sildenafil
(Viagra®), Tadalafilo (Cialis®) y Vardenalfilo (Levitra®),
Alprostadil.
• Prótesis peneanas.
12. La atrofia vaginal o vaginitis atrófica, es un trastorno que
consiste en un adelgazamiento de las paredes de la vagina y
en una disminución de su lubricación, lo que produce una
mayor sequedad e inflamación vaginal.
Está causada fundamentalmente por una disminución de
los estrógenos, que son la principal hormona sexual
femenina, por lo que es un problema muy frecuente en la
mujer durante la menopausia.
13. • Menopausia.
• Fármacos
• Radioterapia sobre la región pélvica o quimioterapia.
• Extirpación ovárica.
• Lactancia
• Ausencia de parto por vía vaginal.
• Estrés
• Ejercicio físico excesivo.
• Consumo de tabaco
14. • Modificaciones de los hábitos: Abandono del consumo de
tabaco, Práctica de ejercicio físico, Mantener una dieta
equilibrada, Mantener una vida sexual activa.
• Tratamiento no hormonal: los hidratantes y los lubricantes
vaginales.
• Tratamiento hormonal: aplicación de estrógenos de forma
local o sistémica.
15. La Dispareunia o coito doloroso es el síntoma más frecuente
dentro de las disfunciones sexuales en la mujer.
La causa más frecuente de su aparición es la disminución de
la producción de estrógenos debido a la menopausia, como
ocurre en el 30% de los casos en mujeres
postmenopáusicas.
16. • Lubricación insuficiente
• Lesión, trauma o irritación
• Inflamación, infección o enfermedad de la piel
• Vaginismo
• Algunas enfermedades y condiciones
• Cirugías o tratamientos médicos
• Factores emocionales
• Problemas psicológicos
• Antecedentes de abuso sexual
17. • Cambiar los medicamentos que se sabe causan problemas de
lubricación también puede eliminar los síntomas.
• Para las mujeres posmenopáusicas, la dispareunia es causada
por lubricación insuficiente como resultado de niveles bajos
de estrógeno. A menudo, esto puede ser tratado con una
crema, tableta o anillo flexible que libera cantidades muy
pequeñas de estrógeno directamente a su vagina.
• Los diferentes tipos de terapia también puede ser útil:
» Terapia de desensibilización
» Consejería o terapia sexual
Notas del editor
Edad: la prevalencia así como su severidad, se incrementan conforme aumenta la edad, aunque no debe ser considerada como una consecuencia inevitable de la misma.
Diabetes mellitus: es la enfermedad endocrina más frecuentemente asociada a la DE. La probabilidad es tres veces superior a la de la población general. (25%-75%). El 15% de los varones sanos con DE presentan una sobrecarga de glucosa alterada. Los mecanismos etiopatogénicos implicados en el desarrollo de DE en diabéticos serían vasculares, neuropáticos y por disfunción gonadal.
Enfermedad cardiovascular: se ha demostrado en diversos estudios epidemiológicos, la asociación entre la presencia de cardiopatía, hipertensión arterial (HTA), enfermedad vascular periférica y descenso del colesterol HDL, con la DE.
Tabaquismo: se ha asociado como factor de riesgo de DE, de forma independiente a las enfermedades crónicas relacionadas con el consumo de tabaco.
Fármacos y consumo de drogas: fármacos con acción hormonal, psicotropos, antihipertensivos, así como el abuso de alcohol, cocaína, heroína, etc.
Trastornos afectivos: se ha relacionado con la disfunción eréctil tanto las causas psicológicas como baja autoestima, conflictos de pareja, estrés, educación sexual muy prohibitiva, traumas o abusos sexual en la infancia, trastornos de la identidad sexual o trastornos psiquiátricos como depresión, ansiedad y psicosis.
Los fármacos de acción central que se pueden utilizar para tratar la DE son la yohimbina que es un antagonista α 2- adrenérgico, la trazodona con doble efecto periférico (bloqueo α-adrenérgico y central como inhibidor de la recaptación de serotonina con aumento de la expresión de ciertos receptores.
La apomorfina es un agonista dopaminérgico activador de los receptores D1 y D2, relacionado químicamente con la morfina pero que no actúa como opiáceo, sino en el núcleo paraventricular del cerebro, estimulando señales proeréctiles aunque es preciso el impulso sexual.
Respecto a los fármacos de acción periférica, la fentolamina es un antagonista α1-adrenérgico inespecífico con afinidad similar por los receptores adrenérgicos α1 y α 2. La inyección directa de fentolamina en los cuerpos cavernosos determina la tumescencia peneana pero sin rigidez.
Uno de los cambios más importantes de la urología ha sido la introducción de la Inyección intracavernosa de agentes vasoactivos para el diagnóstico y el tratamiento de la DE. Los tres fármacos más utilizados son los siguientes:
1. Papaverina es un alcaloide aislado del opio cuyo mecanismo de acción molecular implica la inhibición de la PDE, con un aumento resultante de los niveles de cAMP y cGMP en los tejidos eréctiles del pene. La papaverina también bloquea los canales del calcio dependientes del voltaje, lo que interfiere con el ingreso celular de calcio, y también podría interferir con las corrientes de potasio y cloro activadas por el calcio. La dosis en monoterapia varía entre 20 y 80 mg.
2. Fentolamina es un antagonista de los receptores adrenérgicos competitivo con igual afinidad por los receptores α 1 y α 2. La inyección intracorpórea de fentolamina aumenta el flujo sanguíneo en las arterias cavernosas pero no se asocia con unaumento significativo de la presión intracorpórea.
3. Alprostadil (PGE1) es una preparación sintética de un ácido graso insaturado de 20 átomos de carbonode expresión natural (el término alprostadildesigna la forma exógena y el término PGE1 laendógena). El alprostadil induce la relajación delmúsculo liso y la vasodilatación, e inhibe la agregaciónplaquetaria mediante un aumento del nivelintracelular de c AMP. El 96% del fármaco se metabolizalocalmente en el transcurso de 60 minutossin que se detecten alteraciones del nivel del fármacoen sangre periférica. La dosis habitual es de10 a 20 μg.
La combinación en un tratamiento de los tres fármacos resulta tan eficaz en general como el alprostadil solo, aunque con menor incidencia de erección dolorosa, por lo que el Trimix® se reserva para los pacientes en quienes fracasó la monoterapia con PGE1 o que padecen un dolor peneano significativo con una dosis más elevada de PGE1.
El priapismo y la fibrosis son los dos efectos adversos más graves asociados con el tratamiento con IIC y está contraindicado en pacientes con anemia falciforme, esquizofrenia u otro trastorno psiquiátrico severo, o una enfermedad sistémica grave.
La atrofia vaginal es una patología muy prevalente en mujeres postmenopaúsicas. De hecho, entre un 40% y un 60% de las mujeres sufren síntomas urogenitales relacionados con esta entidad durante esa etapa de la vida.
Sin embargo, no es un problema exclusivo de este período, ya que también puede afectar a mujeres más jóvenes, sobre todo después del parto o durante la lactancia. No obstante, la prevalencia es mucho menor.
Farmacos: los medicamentos que reducen los niveles estrogénicos, como los utilizados en el tratamiento del cáncer de mama o en enfermedades uterinas como la endometriosis o los miomas, pueden causar atrofia vaginal.
Lactancia: aunque parezca paradójico los niveles de estrógenos están bajos durante la lactancia, lo que puede producir atrofia vaginal durante dicho período.
MODIFICACION DE HABITOS:
Abandono del consumo de tabaco: se aconseja a las pacientes dejar de fumar, pues el consumo de tabaco disminuye los niveles de estrógenos y se asocia a una mayor atrofia vaginal. Esto se debe a que el tabaco aumenta la velocidad del metabolismo de los estrógenos.
Práctica de ejercicio físico (excluyendo el ejercicio físico muy intenso): se recomienda practicar ejercicio físico moderado varias veces por semana, pues la obesidad también se ha asociado con la presencia de una mayor sequedad vaginal.
Mantener una dieta equilibrada.
Mantener una vida sexual activa: tener relaciones sexuales de forma relativamente frecuente puede ayudar a aliviar los síntomas de la atrofia, porque favorece la secreción vaginal, pero no está establecida la frecuencia ni el tipo de actividad sexual requerida.
TRATAMIENTO HORMONAL: Cuando la sintomatología es moderada o severa y no cede con el tratamiento descrito anteriormente se hace necesario iniciar la terapia hormonal con estrógenos. Éstos se pueden utilizar de forma local o sistémica. El método de administración debe individualizarse después de haber evaluado cada caso en particular.
La aplicación de dosis bajas de estrógenos de forma local disminuye claramente la sintomatología de la atrofia vaginal, y además se consiguen evitar los posibles efectos secundarios que produce la administración de estrógenos a nivel sistémico. Están especialmente indicados en mujeres que presentan únicamente síntomas vulvovaginales. Existen en el mercado diferentes formas de presentación como tabletas, anillos y cremas.
Por su parte, la administración de estrógenos a nivel sistémico puede producir efectos secundarios importantes, por lo que solo se deben utilizar en mujeres muy sintomáticas.
La dispareunia o coitalgia es el coito doloroso tanto en mujeres como en hombres. Abarca desde la irritación vaginal postcoital hasta un profundo dolor. Se define como dolor o molestia antes, después o durante la unión sexual.
La dispareunia masculina es mucho menos habitual que la femenina, que alcanza, según algunos autores hasta el 4% de la población; no obstante, pese a su baja prevalencia en los hombres no puede considerarse un trastorno únicamente femenino.
Dolor durante la penetración puede estar asociado con una serie de factores, incluyendo:
Lubricación insuficiente. Esto es a menudo el resultado de los juegos previos no es suficiente. La lubricación insuficiente también es comúnmente causada por una caída en los niveles de estrógeno después de la menopausia, después del parto o durante la lactancia. Además, algunos medicamentos se sabe que inhiben el deseo o excitación, lo cual puede disminuir la lubricación y que el sexo sea doloroso. Estos incluyen los antidepresivos, medicamentos para la hipertensión, sedantes, antihistamínicos y ciertos píldoras anticonceptivas.
Lesión, trauma o irritación. Esto incluye lesiones o irritación de un accidente, cirugía pélvica, la circuncisión femenina, la episiotomía o una anomalía congénita.
Inflamación, infección o enfermedad de la piel. Una infección en el área genital o del tracto urinario pueden causar dolor durante el coito. El eccema u otros problemas de la piel en el área genital también puede ser el problema.
Vaginismo. Espasmos involuntarios de los músculos de la pared vaginal (vaginismo) puede hacer que los intentos de penetración muy dolorosa.
Dolor profundo por lo general ocurre con la penetración profunda y puede ser más pronunciado con ciertas posiciones. Las causas incluyen:
Algunas enfermedades y condiciones. La lista incluye endometriosis, enfermedad inflamatoria pélvica, prolapso uterino, el útero en retroversión, fibromas uterinos, cistitis, síndrome del intestino irritable, hemorroides y los quistes ováricos.
Cirugías o tratamientos médicos. Las cicatrices de cirugías que involucran el área pélvica, incluyendo histerectomía, a veces puede causar dolor durante el coito. Además, los tratamientos médicos para el cáncer, como la radioterapia y la quimioterapia, pueden causar cambios que hacen que el sexo doloroso.
Factores emocionales
Las emociones están profundamente entrelazados con la actividad sexual y puede desempeñar un papel importante en cualquier tipo de dolor sexual. Los factores emocionales incluyen:
Problemas psicológicos. La ansiedad, la depresión, la preocupación por su apariencia física, el miedo a problemas de intimidad o relación puede contribuir a un bajo nivel de excitación y un malestar o dolor resultante.
Estrés. Los músculos del suelo pélvico tienden a apretar en respuesta al estrés en su vida. Esto puede contribuir al dolor durante el coito.
Antecedentes de abuso sexual. La mayoría de las mujeres con dispareunia no tienen un historial de abuso sexual, pero si ha sido abusado, puede desempeñar un papel importante.
A veces, puede ser difícil determinar si los factores psicológicos están asociados con la dispareunia. El dolor inicial puede dar lugar a temor al dolor recurrente, lo que hace difícil para relajarse, lo que puede conducir a más dolor. Al igual que con cualquier dolor en el cuerpo, puede empezar a evitar las actividades que se asocian con el dolor.
Los diferentes tipos de terapia también puede ser útil, incluyendo:
Terapia de desensibilización. Durante esta terapia, usted aprenderá los ejercicios vaginales de relajación que pueden disminuir el dolor. Su terapeuta puede recomendar ejercicios del suelo pélvico (ejercicios de Kegel) u otras técnicas para disminuir el dolor durante el coito.
Consejería o terapia sexual. Si el sexo ha sido doloroso para un largo tiempo, puede experimentar una respuesta emocional negativa a la estimulación sexual, incluso después del tratamiento. Si usted y su pareja han evitado la intimidad debido a relaciones sexuales dolorosas, es posible que necesite ayuda mejorar la comunicación con su pareja y la restauración de la intimidad sexual. Hablar con un consejero o terapeuta sexual puede ayudar a resolver estos problemas.