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MONSEÑOR MIGUEL ANTONIO SALAS
PRIMER OBISPO EUDISTA DEVENEZUELA
Monseñor Miguel Antonio nació el 29 de septiembre
del año 1915 en la Pradera, Venezuela. Hijo de Francis-
co Salas y Juana Salas de Salas, de quienes aprendió la
importancia del compromiso cristiano y la necesidad
de formarse en la fe. Se dice sobre monseñor Miguel
que de niño cuando acompañaba a sus padres a la Euca-
ristía dominical se veía en él un interés por querer te-
ner y superar el conocimiento del padre José Antonio
Sánchez, su párroco. Al padre Sánchez le llamaba la
atención la actitud de Miguel y cuando fue trasladado a
otra parroquia, solicitó a sus padres que le permitieran
llevarlo con él, con el propósito de continuar su forma-
ción.
Una vez terminó la escuela, ingresó en el año 1934 al
Juniorato de Kermaría (“Casa de María” en Bretón) en
La Grita. En el año 1936 se trasladó a Bogotá, Colom-
bia e ingresó al Seminario Valmaría, administrado por
los Padres Eudistas. Allí recibió formación en estudios
filosóficos y teológicos. Culminó sus estudios en teolo-
gía y obtuvo el título de licenciado en la Pontificia Uni-
versidad Javeriana.
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En el año 1940 se incorporó a la Congregación de Je-
sús y María (Eudistas) y el 24 de marzo de 1943 fue or-
denado presbítero, siendo el primer Eudista Venezo-
lano. En ese mismo año fue enviado como profesor de
Teología al el seminario Santa Rosa de Osos
(Colombia). Desde el año 1946 inició su apostolado en
Venezuela.
Desde el año 1946 desempeñó su ministerio en la for-
mación de seminarios en Venezuela, y en el año 1960
fue enviado a estudiar a Paris. A su regreso, el Papa
Juan XXIII lo nombró obispo de Calabozo (Estado
Guárico). Fue el primer Obispo Eudista Venezolano. Al
año siguiente es nombrado de la Arquidiócesis de Mé-
rida. Estando allí reabrió el Seminario Mayor, fundó la
“Televisora Andina” y reformó el “Diario el Vigilante”.
En 1985 a su cargo estuvo preparar y recibir al Papa
Juan Pablo II a Mérida.
Cuando cumplió 80 años de edad y 52 de ministerio
sacerdotal, la población de Jáuregui le erigió un Busto
en homenaje a su obra. Falleció el 30 de octubre de
2003.
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El 30 de octubre de 2015 en la Catedral de Mérida, en
el marco del año de la vida consagrada y en el jubileo
por los 100 años de su nacimiento, se dio apertura so-
lemnemente a la causa de beatificación y canonización
de Monseñor Salas. La ceremonia fue presidida por S.E
Mons. Baltasar Porras (Arzobispo de Mérida), Mons.
AlfredoTorres (Obispo Auxiliar de Mérida) y Mons.
Juan de Dios Peña (Obispo del Vigía/ San Carlos.
El Superior Provincial del momento, P. José Antonio
Sabino, con motivo de esta celebración que alegró a la
Iglesia Venezolana y a toda la Congregación envió su
mensaje:
Caracas, 30 de Octubre de 2015
A toda la Gran Familia Eudista
Muy apreciados hermanos, la Alegría, la Esperanza, la
paz y Misericordia de Jesucristo el Buen Pastor sean
siempre con todos ustedes.
En vísperas de celebrar y recordar a todos aquellos
hermanos y hermanas que nos han precedido en el ca-
mino de la fe y que ahora gozan de la plenitud de la vi-
da con el padre Misericordioso y con Jesús Resucitado,
les comunico una gran noticia que sé que varios de us-
tedes ya la conocen... Noticia que nos invita una vez
más a dar gracias al Señor por su infinita bondad y mi-
sericordia para con todos nosotros.
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Como decía Santa María Eufrasia "La gratitud es res-
puesta del corazón”, unámonos en oración a esa acción
de gracias que se eleva a Dios por la apertura de la cau-
sa de Beatificación y Canonización del Siervo de Dios,
Monseñor Miguel Antonio Salas. Hoy a las 10:30 AM
en la Catedral de la ciudad de Mérida siguiendo las exi-
gencias de la Congregación de los Santo se abrió So-
lemnemente el proceso diocesano del Siervo de Dios,
Mons. Miguel Antonio Salas, hoy también se cumplen
12 años de su partida a la casa del padre Celestial.
La culminación del año centenario de su natalicio y
ahora la apertura de la causa de su Beatificación y Ca-
nonización, nos invitan a recordarlo siempre como un
gran pastor de la Iglesia de Calabozo (1961- 1979) y de
Mérida, que recorrió cada rincón de esas respectivas
Arquidiócesis, donde los Eudistas han dejado una gran
huella como evangelizadores y formadores de buenos
obreros del Evangelio.
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…Vale recordar también un hecho muy significativo, y
es que en la XCIX Asamblea Ordinaria de la Conferen-
cia Episcopal Venezolana celebrada del 7 al 12 de enero
del año 2014, S.E. Monseñor Baltasar Porras Cardozo,
Arzobispo de la Arquidiócesis de Mérida, pidió el voto
a los Señores Arzobispo y Obispos presentes para abrir
el proceso de beatificación de Mons. Miguel Antonio
Salas. La respuesta fue unánime. Noticia que nos alegró
muchísimo pues, fue el primer sacerdote Eudista vene-
zolano (1943-1961)…
Finalmente hermanos les digo también, que en ese ca-
mino y ejemplo de santidad tenemos otro testimonio
digno de imitar, se trata del Hermano Evaristo Jerez,
fue muy querido y recordado por todos nosotros. Co-
mo laico incorporado me decía en una de sus cartas
nuestro Superior General, "prestó un invaluable servi-
cio en la formación de sacerdotes es también una Bella
figura para una causa y una gran motivación para que
en la CJM recuperemos la figura del laico incorporado
que trabaja codo a codo con los presbíteros incorpora-
dos y no como un sirviente". Es muy importante que
todos los Eudistas nos vinculemos oficialmente a estas
causas tal como se lo manifestaba Mons. Baltazar Po-
rras al P. Camilo Bernal.
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Que animados por el ejemplo de vida y la intercesión
todos los Santos, caminemos con la esperanza de con-
seguir nosotros también la santidad. Unidos en oración
y al servicio de la misión.
“Un pastor y un sacerdote según el Corazón
de Dios es lámpara ardiente y brillante sobre el
candelabro de la Iglesia: ardiente ante Dios y
brillante ante los hombres; ardiente por su amor
a Dios, brillante por su caridad con el prójimo”
San Juan Eudes
(O.C. III, 23 -24)
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“El Papa santo Juan Pablo II nos
pidió que propusiéramos modelos
de vida cristiana de hombres y
mujeres del siglo XX. Sin duda,
Mons. Salas es uno de esos
ejemplos a admirar e imitar”.
Mons. Baltasar Porras
Arzobispo de Mérida
Sucesor de Mons. Salas
Director:
P. Álvaro Duarte Torres CJM
Diseño y compilación:
Hermes Flórez Pérez - Jorge Luis Baquero