El documento argumenta que el software libre debería usarse en la educación por varias razones: 1) permite el acceso libre al conocimiento humano al igual que la educación pública; 2) reduce costos al evitar licencias y permitir el reciclaje de equipos; 3) permite a los estudiantes usar el mismo software que en la universidad sin incurrir en piratería. El software libre crea profesionales independientes de entornos propietarios, ofrece control sobre el software y es el futuro de la informática, por lo que las universidades deberían adoptarlo