Suplemento en ABC de Sevilla: Patrimonio de la US: el pasado convertido en futuro
1. Patrimonio de la US:
el pasado convertido en futuro
Patrimonio de la US:
2. Un Patrimonio
rico y diverso
a Universidad de Sevilla ha ido acumulando
a lo largo de la historia un valioso conjunto
de obras de carácter monumental y artís-
tico. Describir este ingente patrimonio es
tanto como narrar la propia historia de la
institución universitaria.
Puede decirse que la Universidad de Sevilla
nunca ha manifestado, salvo en contadas oca-
siones, la voluntad expresa de formar una colección
artística propia y, sin embargo, hoy la riqueza de sus fondos
es algo que sorprende.
Pero sí ha puesto siempre un fuerte empeño en conservar
esos conjuntos y colecciones, que el tiempo y el azar le
han ido confiriendo, a través del fomento del estudio y el
conocimiento de estas obras.
Fruto de ello es un patrimonio de más de 4.000 obras
con un carácter muy heterogéneo debido a la distintas
formas de ingreso y procedencias que han tenido cada
una de las piezas.
Hay, por ejemplo, una colección arqueológica y numis-
mática, representación del arte de la antigüedad, junto a
la colección egipcia.
Se conserva una mínima representación del patrimonio
del siglo XVI procedente de las escasas piezas de la Iglesia
de la Anunciación, destacando en especial las obras del
escultor Juan Bautista Vázquez el Viejo.
La expropiación del patrimonio jesuítico dejó una colec-
ción de arte barroco del siglo XVII, tanto de pinturas como
de esculturas de autores como Martínez Montañés, Juan
de Mesa, Pacheco, Juan de Roelas, Pablo de Céspedes o
Herrera el Viejo.
De la Real Escuela de las Tres Nobles Artes, germen de
la Academia de Bellas Artes de Sevilla y de la Facultad de
Bellas Artes, se conserva una colección de dibujos acadé-
micos de los siglos XVIII y XIX.
Además, también posee una colección de reproducciones
de esculturas en yeso, de los siglos XVIII, XIX y XX realizadas
mediante la técnica del vaciado, que son en su mayoría de
carácter clásico, aunque también contiene obras de arte
sevillano.
Destacable es también la colección de retratos de los
siglos XIX y XX representando a rectores, obispos doctores
y personajes ilustres universitarios, a la que se suma una
serie de retratos de sevillanos ilustres, encargada por la
antigua Biblioteca Provincial y Universitaria.
La Fototeca del Laboratorio de Arte, por su parte, posee
una riquísima colección fotográfica de principios del siglo XX.
El profesorado también ha colaborado en numerosas
ocasiones a aumentar esta colección, como el de Bellas
Artes, gracias al que hay una muestra de pinturas y escultu-
ras contemporáneas: o los jóvenes creadores, que también
han donado sus obras, como es el caso de los premios del
Concurso Nacional de Artes Plásticas, convocados por la
Universidad de Sevilla desde 1994.
L
Escultura de Maese Rodrigo de Santaella
Iglesia de la Anunciación, antigua sede de la Universidad
Editado por:
ABC de Sevilla
C/ Albert Einstein, 10
954 488 600
Diseño y maquetación:
3dsignia
Fotografía:
Luis Serrano
Pepe Morón
Marta Morera
3. 3Patrimonio de la Universidad de Sevilla
El Comité que vela por el
Patrimonio de la Universidad
a conservación y gestión del amplio patri-
monio de la Universidad de Sevilla está
encomendado a un órgano consultivo que
se encarga de asesorar técnicamente a los
órganos competentes sobre esta materia.
Es el Comité de Patrimonio de la Universi-
dad de Sevilla, que se creó en abril de 2012
y actualmente es presidido por la directora del
Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de
Sevilla (Cicus), Concepción Fernández.
Con el objetivo de preservar dicho patrimonio y realizar
la mejor y más eficiente gestión del mismo, el comité des-
empeña distintas funciones. Informa sobre los proyectos
de conservación y restauración de las obras pertenecien-
tes al patrimonio artístico de la Universidad de Sevilla, así
como sobre la urgencia y prioridad de los mismos; emite
informes sobre las peticiones de préstamo de obras de
arte de la institución universitaria; ofrece asesoramiento
sobre la programación anual y la realización concreta de
exposiciones relacionadas con el patrimonio; desarrolla
propuestas de actuación relacionadas con el patrimonio
histórico artístico; elabora informes sobre los procesos de
gestión, así como sobre cualquier cuestión vinculada con el
patrimonio que sea solicitado por los órganos competentes
de la Universidad.
Para ello, se cuenta con un equipo de expertos que acom-
pañan a Concepción Fernández en esta labor. El organis-
mo está compuesto por Luis Méndez, profesor titular de
Historia del Arte y director de la Fototeca, que además en
este curso ha sido nombrado director del Secretariado de
Patrimonio Histórico-Artístico y subdirector del Cicus; José
Fernández, catedrático de Historia del Arte; María Arjonilla,
vicedecana de Cultura de Bellas Artes; Miguel Ángel Tabales,
arqueólogo y profesor titular de Ingeniería de la Edificación;
Víctor Pérez Escolano, catedrático de la Escuela Técnica
Superior de Arquitectura; y Juan Bosco Díaz de Urmeneta,
profesor titular de Estética e Historia de la Filosofía y crítico
de Arte Contemporáneo.
Acceso al patrimonio a través de la web
El patrimonio es un elemento vivo no sólo físicamente, sino
también de manera virtual. A través del portal www.patri-
monioartistico.us.es se puede acceder a cualquier servicio
relacionado con los distintos edificios de la Universidad de
Sevilla y que están a disposición de la comunidad y de la
sociedad. Son numerosas las visitas diarias que se reciben
para solicitar algún servicio relacionado con la investigación,
la difusión o la exhibición de las obras.
Además, también se incluyen las actualizaciones en la
catalogación de nuevas piezas y su correspondiente estudio
identificativo. Frente a las 1.700 piezas catalogadas en la
primera versión del portal, este nuevo sitio abarca más de
2.500 obras. Entre las novedades destacan las colecciones
de arqueología, antropología, cerámica, numismática y de
patrimonio científico-técnico.
Igualmente, se puede acceder a todo tipo de información
relacionado con la exposición de este patrimonio, tanto
dentro como fuera del ámbito universitario.
L
Miembros del comité de Patrimonio de la Universidad de Sevilla. De izquierda a derecha José Fernández, Juan Bosco Díaz de Urmeneta, María Arjonilla, Concepción Fernán-
dez, Luis Méndez, Victor Pérez Escolano y Miguel Ángel Tabales
4. 4 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
uál es el valor patrimonial de la Universidad
de Sevilla?
El valor patrimonial de la Universidad de Sevilla
se lo da la propia historia de una Universidad
más de cinco veces centenaria. Conocer la
historia de la US nos permite comprender cómo
se ha ido formado esa colección, ese conjunto
valioso de obras tan diversas, sin que necesa-
riamente haya tenido que haber una conciencia o
voluntad expresa de «formar» una colección. Pocas, muy
pocas universidades tendrán un patrimonio comparable, en
cantidad, calidad y variedad, al de la US.
—¿Cuáles son las principales actuaciones y/o proyectos
que desde la US se acometen para preservar y potenciar
este patrimonio?
—La US vive pendiente de su patrimonio histórico-artístico.
Son muchas y de muy diversa índole las actuaciones que
impulsan su preservación, conocimiento y difusión. Una
actuación fundamental y muy propia de la identidad uni-
versitaria han sido y siguen siendo las iniciativas relaciona-
das con la investigación, el estudio, la docencia. Trabajos
continuados a lo largo de muchas décadas confieren al
patrimonio la mejor arma para su protección. Pero a todo ello
hay que unir una decidida voluntad política de protección
activa, a través de programas de conservación preventiva y
de intervenciones oportunas. En la actualidad, es el Comité
de Patrimonio, interdisciplinario y formado por académicos
expertos en muy diversas áreas patrimoniales, el órgano que
asesora e impulsa múltiples acciones relacionadas con la
catalogación, tutela, conservación, restauración, difusión y
gestión del patrimonio. Recientemente se ha creado tam-
bién, dependiendo orgánicamente de la dirección del CICUS
un Secretariado de Patrimonio dirigido por el profesor Luis
Méndez, doctor en Historia del Arte.
—¿Cómo se está trabajando para incrementar el fondo
patrimonial de la US?
—Además de las tareas relacionadas con la tutela y con-
servación —conservar es, a la larga, incrementar—, y de las
donaciones que con no poca frecuencia llegan a la Univer-
sidad, bien por parte de artistas, bien de coleccionistas (hay
de hecho un protocolo de actuación para la admisión y el
registro de tales donaciones), en los últimos años, desde
2008 se ha iniciado un fondo de arte contemporáneo (que
puede contemplarse en la galería junto al Paraninfo), y del
que forman parte ya obras de Paco Reina, Manuel Barbadi-
llo, Juan Suárez, Carmen Laffón, Gordillo, Lacalle, Miki Leal,
Parrilla, José Soto y Gerardo Delgado.
—¿Cuál es el mayor «tesoro» de la Universidad de Sevilla?
—En un patrimonio tan rico es difícil inclinarse por desta-
car algún tesoro único. Siendo muy esquemática, podría
mencionar algunos realmente ineludibles; dentro de la
arquitectura civil, naturalmente la antigua Real Fábrica
de Tabacos; como arquitectura religiosa, la Iglesia de la
Anunciación; en paisajismo, los Jardines de Forestier; como
patrimonio bibliográfico, la Biblia de Gutenberg; y dentro
del patrimonio mueble, podríamos destacar, además de las
obras de la Anunciación, los cuadros de Pablo de Céspe-
des «Aparición de Cristo a San Ignacio», y el de Francisco
de Herrera, «Éxtasis de San Francisco Javier», ambos en
el Paraninfo de la Universidad; asimismo, no podríamos
dejar de mencionar las esculturas de San Ignacio y San
Francisco de Borja, de Juan Martínez Montañés, y el Cristo
«Todos tenemos
que hacer un
esfuerzo para poner
la cultura en el lugar
que le corresponde»
CONCEPCIÓN FERNÁNDEZ
Presidenta del Comité de Patrimonio
C
5. 5Patrimonio de la Universidad de Sevilla
de los Estudiantes de Juan de Mesa. No es poco, como ves,
y aún podríamos alargar la lista, sin desmerecerla.
—¿Tienen algún programa en marcha para poner en valor,
por ejemplo, los jardines Forestier o algún otro patrimonio
que no tenga vida universitaria?
—Tenemos, como es natural, programas de visitas guiadas
para todos nuestros BIC, entre ellos los Jardines de Forestier.
El Comité de Patrimonio ha impulsado además reciente-
mente la publicación de unos polípticos patrimoniales, con
información histórica, gráfica y planimétrica que sirva de
complemento a estas visitas guiadas. Ya se ha publicado el
primer número, centrado en la iglesia de la Anunciación; está
a punto de salir el segundo, sobre el Panteón de Sevillanos
ilustres; y en el plazo de un año completaremos los doce
números de la colección.
—¿Alguna actuación de urgencia porque algún patrimonio
de la Universidad esté en peligro?
—Más que de actuaciones de urgencia, porque la tute-
la constante impide que el patrimonio esté en peligro, yo
hablaría de actuaciones planificadas para la mejora de las
colecciones. En estos momentos, por ejemplo, se está lle-
vando a cabo un plan integral de restauración y limpieza de
las esculturas en yeso ubicadas en el edificio del Rectorado,
en colaboración con la Real Academia de las Bellas Artes
San Fernando, que culminará en una exposición permanente,
con la debida señalética, que será incorporada también a
las visitas guiadas del edificio, con la intención además de
dar a conocer el valor histórico y artístico de esta colección.
Recientemente también se ha trabajado sobre la muy valiosa
colección arqueológica, hoy ya catalogada por completo y
debidamente custodiada, y estamos a punto de terminar
los dibujos artísticos de una buena selección para su uso
didáctico.
—La Universidad cuenta con un patrimonio ingente, ¿somos
conscientes en Sevilla de ello?
—Sin duda. La Universidad de Sevilla tiene su campus in-
tegrado en la ciudad; a través de sus edificios, muchos de
ellos BIC y alguno Premio Nacional de Arquitectura (como
la Facultad de Matemáticas, de Alejandro de la Sota), los
ciudadanos abren la puerta hacia el conocimiento de sus
bienes patrimoniales: colecciones artísticas, fototeca, her-
bario, minerales, fondo antiguo bibliográfico. En todo caso,
es nuestra responsabilidad contribuir a su difusión.
—Y las administraciones públicas, ¿son conscientes de
ello? ¿Colaboran en su conservación?
—Sí, sí, naturalmente que lo son. Otra cosa es ya la cola-
boración para su conservación, no siempre fácil, dadas las
circunstancias presupuestarias. Es frecuente, de hecho, la
búsqueda de patrocinios privados o mecenazgos para su
preservación. Todos tenemos que hacer un esfuerzo para
poner la cultura —y, dentro de ella, el patrimonio— en el
lugar que le corresponde. Desde la Universidad lo hacemos
sin duda.
—¿Qué visibilidad tiene el patrimonio de la US en relación
con otras universidades?
—Las universidades españolas son conscientes del patrimo-
nio de nuestra universidad, muy bien conocido, no ya sólo a
través de la muy completa página web, sino de numerosas
publicaciones y estudios a cargo de grandes especialistas. Es
más, también fuera de España es muy conocido el patrimonio
de nuestra universidad. Piezas nuestras han viajado, incluso
allende los mares, a formar parte de grandes exposiciones;
a la National Gallery de Londres y la National Gallery of Art
de Washington, al International Museum of Art de Indianá-
polis; y próximamente la imagen de San Ignacio de Loyola
de Martínez Montañés formará parte de una exposición
sobre Velázquez que tendrá lugar en París, en las Galeries
Nationales du Grand Palais, del 25 de marzo al 13 de julio
del próximo año.
—¿Debería ser el patrimonio un tema transversal en todos
los estudios universitarios?
—Es un hecho que el patrimonio se aborda desde muchas
disciplinas y áreas de conocimiento. Yo misma soy filóloga
clásica, latinista, y al trabajar sobre inscripciones latinas
tratando de interpretar sus textos, me topo con piezas patri-
moniales… y necesito la intervención de arqueólogos, histo-
riadores, paleógrafos, arquitectos, físicos… Muchos estudiosos
podemos encontrar un punto común en el patrimonio.
6. 6 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
l edificio de la antigua Fábrica de Tabacos
representa la importancia de la industria-
lización emprendida durante la Ilustración
para el progreso de la economía del país.
Su construcción, además de cumplir con el
propósito de modernizar la producción de
tabaco sustituyendo a la antigua Fábrica de
San Pedro, fue determinante para la expansión
de Sevilla hacia el Sur.
Edificio de colosales dimensiones, su arquitectura neo-
clásica conjuga características propias de la fábrica, el
palacio y la fortaleza. Su organización original respondía
con pragmatismo a los requerimientos de una industria
avanzada: en su lado Norte, próximo a la ciudad, se situaba
el área residencial de la fábrica, donde se localizaban
las casas de los jefes y superintendentes, mientras que
la zona fabril se ubicaba en el Sur, extendiéndose sobre
dos terceras partes de la superficie total del edificio, y
resuelta mediante un sistema estructural abovedado que
permitiese tanto la instalación cómoda de la maquinaria,
como la flexibilidad compositiva ante posibles modifica-
ciones obligadas por el uso.
Fue concebida por diversos ingenieros y arquitectos,
que dirigieron su construcción entre 1728 y 1766. Entre
ellos, destacan las figuras de Ignacio Sala y Diego Bor-
dick, autores de los proyectos iniciales del edificio, y
especialmente la del holandés Sebastián van der Boch,
quien redactó el proyecto definitivo y estuvo al frente de
las obras desde 1750 hasta 1766.
Dentro de una composición general austera y rotunda
en su volumetría, la fachada Norte se ofrecía como la
principal del conjunto, con una singular portada barroca
E
De Fábrica de Tabacos
a sede universitaria
Patio del Reloj, en el Rectorado de la Universidad de Sevilla
7. 7Patrimonio de la Universidad de Sevilla
esculpida por el artista portugués Cayetano da Costa,
que se corona con la estatua de la Fama, convertida hoy
día en emblema de la Universidad. Otros elementos sin-
gulares de esta gran estructura son el amplio vestíbulo,
con grandes arcos rebajados, y los llamados patios del
Reloj y de la Fuente, que forman parte de la estructura
original.
Su conversión a uso universitario fue resultado de un
proceso de intervención que se extendió entre 1950 y
1972, que aprovechó la regularidad de su estructura fabril
para la apertura de nuevos patios, aulas y despachos,
así como de las nuevas portadas de las fachadas Sur,
Este y Oeste. Esta ambiciosa reforma estuvo a cargo de
destacados arquitectos modernos de la ciudad, como
Antonio Illanes del Río, Alfonso Toro Buiza, Alberto Bal-
bontín de Orta y Antonio Delgado Roig.
Vista aérea de la Universidad de Sevilla, antigua sede de la Real Fábrica de Tabacos
Atrio de la Facultad de Filología
Patio de la antigua Casa de Ingenieros
8. 8 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
odrigo Fernández de Santaella fue
el artífice de la Universidad de Se-
villa. A comienzos del siglo XVI,
tras su paso por Bolonia e Italia, se
encargó de organizar los estudios
universitarios en torno al colegio de
Santa María. Fue exactamente en 1505
cuando el sacerdote obtuvo una bula del
papa Julio II para erigir en la ciudad hispalense un colegio
y una Universidad.
Aunque la institución continúa su labor desde entonces y
ya suma más de 500 años de historia, convirtiéndose en uno
de los centros docentes españoles más antiguos, a nivel de
infraestructura lo único que se conserva de aquella primera
sede universitaria es la antigua capilla de Santa María de
Jesús, en la esquina de la Puerta de Jerez.
La Universidad siguió transformándose en los siglos
siguientes. Con la llegada del carácter reformista de los
Borbones en el siglo XVIII se produjeron importantes mo-
dificaciones en la enseñanza. Entre ellas, una de las más
destacadas, la expulsión de los jesuitas en 1767, ya que
supuso el traslado de la institución a la Antigua Casa Profesa
de la Compañía de Jesús en 1771.
Durante los siglos siguientes se continuaron ampliando las
disciplinas, conllevando a su vez la adquisición de nuevas
sedes. Fue a mediados del siglo XX cuando surgió la idea de
trasladar la primitiva sede de la antigua Universidad Literaria
al edificio de la Fábrica de Tabacos en la calle San Fernando.
Buscando los orígenes
El 2 de septiembre de 1565 se colocó la primera piedra
de un templo que se convertiría, poco más de 200 años
después, en sede de la Universidad de Sevilla. Se trata de
la Iglesia de la Anunciación, que formó parte del conjunto
original de la casa profesa de los jesuitas.
Fue declarada Bien de Interés Cultural en la categoría
de monumento en 1931, junto con la antigua Universidad
Literaria, que ocupaba el espacio de la casa profesa. Este
edificio tenía en su origen tres plantas en torno a un patio
central, aunque actualmente sólo se conserva la Iglesia.
En su solar se construyó la nueva Facultad de Bellas Artes.
Por su parte, el diseño del templo se debe al jesuita
Bartolomé de Bustamante, aunque el proyecto definitivo
corrió a cargo de Hernán Ruiz, maestro mayor de la catedral,
lo que la hermana con otros dos ejemplos destacados de
la arquitectura renacentista en Sevilla, como la iglesia del
convento de Madre de Dios y la antigua iglesia del Hospital
de la Sangre, actual sede del Parlamento de Andalucía.
La iglesia es de planta latina y se cubre con bóvedas
vaídas en sus brazos, mientras que el crucero se remata
con una cúpula semiesférica. La sobria apariencia exterior
de su fábrica de ladrillo contrasta con la riqueza cromática
del interior, especialmente en la zona del crucero, con
profusión de dorados, rojos y negros. Especial interés
tienen los magníficos retablos de la iglesia, elementos de
extraordinario valor.
R
Buscando
el origen
Cúpula de la Iglesia de la Anunciación
9. 9Patrimonio de la Universidad de Sevilla
En el brazo derecho del crucero se encuentra la puerta
que comunicaba el claustro con la Casa Profesa, con un
arco de medio punto flanqueado por pilastras dóricas. En
la clave del arco hay una ménsula con la fecha de 1568.
La portada principal es obra de Hernán Ruiz. Construida
en piedra, se integra gracias a un orden arquitectónico gi-
gante, constituido por dos columnas jónicas sobre el que
se sostiene un entablamento. En el cuerpo central aparece
un altorrelieve de la Virgen con el niño realizado por el
escultor Juan Bautista Vázquez el Viejo entre 1565 y 1576,
mientras que en los laterales se sitúan dos esculturas del
XVIII que representan a un arcángel y a San José.
La cúpula de la Iglesia responde al modelo sevillano de
alboaire, revestida de azulejos, con un ajedrezado de co-
lores blanco y azul. La linterna, renovada tras el derrumbe
provocado por el terremoto de Lisboa, se refuerza por gran-
des ménsulas que apean sobre plintos, con unas volutas
fingidas, realizadas a base de losetas azules de cerámica.
Panteón de sevillanos ilustres
Entre los años 1836 y 1842 se realizan reformas en la Igle-
sia y en la cripta para alojar sepulcros de altas cualidades
artísticas, así como para acoger los restos de sevillanos
reconocidos por la ciudad.
El panteón se encuentra bajo el crucero, al que se ac-
cede desde la vecina Facultad de Bellas Artes. Acoge un
conjunto de sepulcros y laudas que desde el siglo XIX se
encontraban en la Iglesia superior. En este panteón repo-
san, entre otros, los restos de Arias Montano (humanista),
Valeriano Bécquer (pintor), Fernán Caballero y Mateos
Gago (escritores), Alberto Lista (ilustrado) o Gustavo Adolfo
Bécquer (poeta).
Iglesia de la Anunciación
10. 10 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
no de los edificios más emblemáticos de la
Universidad de Sevilla es el Convento de
Madre de Dios, hoy convertido en sede
del Centro de Iniciativas Culturales de la
US (Cicus). Ubicado en el centro histórico,
en el barrio de San Bartolomé, es fruto del
trabajo de los arquitectos Juan de Simancas,
Hernán Ruiz II y Pedro Díaz de Palacios.
La intervención para convertir al edificio en sede
del Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de
Sevilla ha consistido en el rediseño del acceso princi-
pal y la provisión de espacios expositivos, así como un
auditorio y la nueva pavimentación del claustro. El patio
constituye el elemento fundamental del edificio, y hacia
él se abren galerías en sus cuatro lados, disponibles para
la realización de proyectos expositivos.
Esta galería conecta diversos elementos de especial
interés, como son:
—La galería MDD, sala multiusos y espacio expositivo
del centro, neutro en su apariencia para la mínima inter-
ferencia con el contenido expositivo.
—El auditorio, con graderío inclinado y revestido de pa-
neles acústicos, en la planta baja de la crujía hacia la
calle Federico Rubio.
La superficie del patio se reviste con un gran damero de
piezas blancas y negras, que se interrumpe para construir
los parterres de los cipreses de grandes dimensiones
que pueblan el patio.
Las últimas obras de reforma se están centrando en la
creación de un espacio expositivo singular en la primera
planta, con una superficie superior a los 500 m2.
U
Madre de Dios,
un lugar para
exponer la cultura
Patio de la sede del Cicus, antiguo convento Madre de Dios
Espacio expositivo de la primera planta del edificio
Auditorio del Cicus
Fachada del Centro de Iniciativas Culturales de la US
11. 11Patrimonio de la Universidad de Sevilla
iseñados como zona de recreo del Palacio
de los Guzmanes (actual Colegio Mayor
Santa María del Buen Aire), en Castilleja de
Guzmán, los Jardines de Forestier forman
parte del patrimonio natural y paisajístico
de la Universidad de Sevilla.
Tanto los jardines como el edificio perte-
necieron a la antigua hacienda Divina Pastora,
conjunto declarado Bien de Interés Cultural con categoría
de monumento.
El núcleo primitivo de este conjunto data de los siglos
XVII y XVIII, que pasó más tarde a ser propiedad de don
Joaquín Rodríguez de Rivas y de la Gándara, II Conde de
Castilleja de Guzmán. A principios del siglo XX este noble
mandó reformar su propiedad, de 270 hectáreas, para des-
tinarla a residencia permanente. Levantó una edificación
casa-palacio y encargó a Forestier la realización de los
jardines, que se llevaron a cabo entre 1920 y 1928. Fueron
los últimos que el arquitecto francés diseñó en España.
Como consecuencia de su ruinosa situación económica,
el Conde pierde la propiedad, que es adquirida en subasta
pública por la firma «Lissen Hermanos», en 1933, quienes,
a su vez, la ofrecen gratuitamente a la denominada «Junta
de Utilización de Inmuebles» en 1937. Es entonces cuando
el Ayuntamiento adquiere el compromiso de cuidar los
jardines. Finalmente, la cesión por parte del Consistorio al
Ministerio de Educación Nacional se produjo en 1943, con
objeto de destinarla a la residencia de artistas, estudiantes
y profesores hispanoamericanos. Su último uso ha sido
como Colegio Mayor, hasta la actualidad.
D
La belleza natural
de Forestier
12. 12 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
res de los edificios de la Universidad de
Sevilla que más valor artístico y monu-
mental tienen son los pabellones de Brasil,
Uruguay y México, que se erigieron para la
Exposición Iberoamericana de 1929 y que
están declarados Bien de Interés Cultural.
El primero de ellos, el de Brasil, fue diseñado
por Pedro Paulo Bernades Vastos, originaria-
mente en estilo neobarroco colonial. La historia
de este pabellón refleja a la perfección los cambios que
experimentaron algunos de estos edificios, aprovechando
en muchos casos la sencillez compositiva y estructural
de sus áreas expositivas, que los hacía capaces de ser
reutilizados para albergar usos enormemente diversos.
Así, este edificio sufrió en 1935 una reforma que modificó
por completo su apariencia exterior para empezar a fun-
cionar como cuartel de sanidad. Tras décadas de uso, una
nueva reforma trajo a este centro las primeras Escuelas
de Arquitectura y de Aparejadores de la Universidad, que
estuvieron funcionando en este Pabellón hasta que se
trasladaron a la avenida Reina Mercedes. Tras un tiempo
sin estar vinculado a la institución universitaria, se retomó
su uso como sede administrativa.
Todos estos cambios de uso desde su construcción no
han interferido en la conservación del elemento más desta-
cado de este pabellón: un singular pavimento de maderas
tropicales importado de Brasil que reviste el vestíbulo y la
escalera principal del edificio.
Por su parte, el Pabellón de México fue uno de los más
singulares de la época. El mexicano Manuel Amabilis Do-
mínguez, su constructor, trató de integrar las obras del
escultor Leopoldo Tommasi y el pintor Víctor Manuel Reyes.
Lleno de evocaciones icónicas, el edificio organiza su
planta en cruz griega, que se gira para formar las aspas
de una X, y que remite a la particularidad ortográfica del
nombre de su país. Sus fuentes de inspiración se encuen-
tran en las culturas maya y tolteca, presentes de manera
rotunda en la fachada principal, con las reproducciones
de los Chac mool y las cabañas del palacio de los Tigres
de Chichén Itzá, así como las columnas serpentiformes de
la ciudad de Uxmal que flanquean la entrada. La riqueza
decorativa de sus referencias al pasado se encuentra
correspondida con una espacialidad generosa, basada en
el empleo del hormigón armado. El vestíbulo central del
edificio, desarrollado en dos plantas de altura, y bañado
por la luz filtrada a través de vidrieras de color, constituye
sin lugar a dudas uno de los episodios más afortunados
de la arquitectura del primer tercio de siglo en la ciudad.
Por último, el Pabellón de Uruguay se sitúa en un entor-
no privilegiado, en las inmediaciones del Parque de María
Luisa, junto a otros pabellones como el de Perú, Chile o
Estados Unidos.
En este edificio se representa el eclecticismo de la arqui-
tectura de los años 20, que combina los guiños a la tradición
de su portada neobarroca, de las cresterías neogóticas y el
lenguaje popular de la teja cerámica con una composición
en planta de absoluta modernidad.
Llama la atención su vestíbulo, de dos plantas de altura,
con elementos art decó y con arcos de hormigón armado
que son deudores de la composición del revolucionario
mercado sevillano de la Puerta de la Carne.
T
Una Universidad
con pinceladas
del 29
Pabellón de México, uno de los más singulares en su época
Pabellón de Brasil, actualmente empleado como sede administrativa y de gobierno
El Pabellón de Uruguay representa el eclecticismo de la arquitectura de los años 20
13. 13Patrimonio de la Universidad de Sevilla
Hermandad de la Esperanza de Triana. 1923. Gelatinobromuro sobre vidrio. 9x12 Archivo fotográfico. SGI Fototeca-Laboratorio de Arte. Universidad de Sevilla
a Universidad de Sevilla cuenta con una de
las mejores fototecas universitarias euro-
peas. Su origen se remonta a 1907, cuando
el catedrático Francisco Murillo Herrera creó
un «gabinete fotográfico», siguiendo mode-
los alemanes y franceses, como un espacio
donde desarrollar la ciencia histórica a través
de unos estudios modernos que necesitaban la
imagen para la puesta en marcha de nuevos estudios, téc-
nicas de intervención en la restauración de monumentos
y para la elaboración de los catálogos monumentales que
por primera vez en España defienden el uso de la fotogra-
fía como instrumento de estudio del patrimonio español.
Las instituciones de mayor prestigio comenzaban a reunir
colecciones fotográficas para desarrollar sus estudios
modernos con innovadoras metodologías historiográfi-
cas. Un centro de investigación y enseñanza debía contar
con un banco de imágenes y un gabinete fotográfico que
pudiese documentar las obras de arte que se estaban
descubriendo y clasificando. Ésa fue la idea que trajo de
Europa Francisco Murillo Herrera. De este modo, la Foto-
teca tuvo un carácter pionero en la modernización de los
estudios universitarios de Historia del Arte. Fue la primera
en su género en España y estuvo orientada a recopilar la
más amplia documentación gráfica sobre los monumentos
sevillanos, andaluces y del resto de España, aunque entre
sus colecciones encontramos testimonios únicos de otros
países europeos y americanos.
A partir del año 1999 pasó a estructurarse como un Servi-
cio General de Investigación, con el objetivo de asegurar a
la colección unas adecuadas condiciones de conservación,
en un proceso continuo que además permita el acceso
de la comunidad investigadora y del resto de la sociedad
a estos fondos. Lo que conocemos actualmente como el
Servicio General de Investigación de Fototeca-Laboratorio
de Arte es un archivo histórico que alberga un conjunto de
colecciones fotográficas de gran valor. En más de cien años,
la Fototeca ha ido produciendo imágenes, enriqueciéndose
con donaciones y adquisiciones, reuniendo en la actualidad
un conjunto único de más de 150.000 fotografías, de gran
valor tanto por su unidad como por su creación pionera en
el seno de los estudios universitarios en Europa.
De todo ello ha quedado un testimonio único en la ve-
racidad de estas fotografías. Cronologías, atribuciones,
definiciones y argumentos históricos se sustentaban en
la veracidad que introducía el documento fotográfico. La
colección actual alberga imágenes en negativo y positivo
desde finales del siglo XIX en diferentes tamaños, sobre
vidrio, acetatos, nitratos, celuloides, metal, papel o cartón,
realizados asimismo con diferentes procedimientos foto-
gráficos, incluyendo además fotograbados y litografías. La
Fototeca conserva además su colección de cámaras de
manufactura alemana de inicios del siglo XX, así como un
valioso instrumental fotográfico, adquirido a la casa Erne-
mann de Dresde. Los fotógrafos aprovechaban sus viajes
para tomar un buen número de fotografías con cámaras
pesadas de madera, con unos negativos en soporte de
vidrio que transportaban en sus chasis y portaplacas. Con
todo este equipaje cargado en alguno de los coches de la
época se lanzaron a fotografiar el patrimonio, y en alguna
imagen se inmortalizaron haciendo un alto en el camino.
Estos viajes permitieron acrecentar los fondos de la insti-
tución con sorpresas tan notables como el descubrimiento
de obras de arte completamente inéditas.
Hay que destacar que en este periodo como Servicio
General de Investigación se ha conservado, dinamizado y
modernizado la colección con acciones como la digitaliza-
ción del patrimonio fotográfico, la puesta a disposición de
éste a nivel mundial a través de una plataforma web (www.
fototeca.us.es) y el desarrollo de actividades formativas
encaminadas a dar a conocer los fondos mediante talleres
y cursos sobre procedimientos fotográficos primitivos, la
gestión de archivos o la protección de la fotografía.
La Fototeca ha modernizado sus instalaciones con la
creación de nuevos archivos para la conservación de sus
colecciones, en un proceso abierto, que permiten asegurar
las condiciones de protección, de identificación, cataloga-
ción y manipulación adecuadas de sus fondos. Además
se suman nuevas actuaciones que se centran en la labor
de conservación preventiva.
L
Cien años alimentando
la Fototeca
14. 14 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
a Biblioteca de la Universidad de Sevilla
custodia una de las colecciones históricas
más importantes de España. Integran este
conjunto más de un millar de manuscritos,
varios archivos privados, 332 incunables,
más de 8.000 impresos del siglo XVI y cer-
ca de 30.000 de los siglos XVII y XVIII. A ello
hay que sumar la documentación del Archivo
Histórico de la Universidad, unido a esta Biblioteca
desde 1895, el cual constituye un fondo documental que
supone la principal fuente para el estudio de la historia
de la institución desde la época fundacional.
La pieza bibliográfica más valiosa custodiada en los
anaqueles de la Biblioteca es la Biblia de las 42 líneas,
también conocida como Biblia de Gutenberg, primer
libro impreso de la historia, que salió de las prensas de
Johann Gutenberg, en Maguncia, entre 1454 y 1456.
Junto a ella figuran como auténticas joyas varios có-
dices del siglo XV, entre ellos las Apostillas de Nicolás
de Lira y otros dos códices bíblicos con una espléndida
decoración miniada.
La mayor parte de estos fondos se custodian en la
Biblioteca General Rector Antonio Machado y Núñez y
en el Archivo Histórico Universitario, aunque también hay
otros fondos en diferentes centros como la Biblioteca de
Humanidades. Está previsto que, en los próximos meses,
la Biblioteca General se traslade a un nuevo edificio en
la Avenida de Eritaña.
Todo este fondo histórico es objeto de numerosas
consultas por parte de investigadores de la Universidad
de Sevilla y de otras instituciones científicas y acadé-
micas, así como por parte de estudiantes de diversas
disciplinas como cartografía histórica, literatura, historia,
medicina, arquitectura, filosofía natural, etc.
En los últimos años, la Universidad ha llevado a cabo
una labor de difusión de este patrimonio bibliográfico
y documental a través de un ambicioso proyecto de
digitalización que permite a los usuarios consultar a
través de Internet todos los libros y otros documentos,
como una base de datos de 43.000 grabados en la que
se puede buscar por autores, títulos y materias. Este
Portal de Fondos Digitalizados, que actualmente cuenta
con un fondo de más de 6.000 títulos, ofrece también
a los usuarios la posibilidad de solicitar a la Biblioteca
la digitalización de sus libros antiguos y documentos
del Archivo.
Otra actividad encaminada a difundir la riqueza del
patrimonio bibliográfico es la de las exposiciones vir-
tuales, que pueden consultarse en el Espacio Virtual de
Exposiciones de la Biblioteca de la Universidad de Sevilla
(expobus.us.es). Cada año se realizan dos exposiciones. La
última de ellas lleva por título «Fondos y Procedencias»
y propone un recorrido por la historia de la Biblioteca,
desde el momento de su nacimiento como librería del
Colegio de Santa María de Jesús, fundado por el Arce-
diano Maese Rodrigo Fernández de Santaella en 1505.
El germen de esta Biblioteca fueron, de hecho, los
libros donados por Fernández de Santaella, a los cuales
se fueron añadiendo en los siglos siguientes donaciones
y adquisiciones realizadas con ayudas económicas de
colegiales distinguidos.
Más tarde, cuando el Colegio y la Universidad se sepa-
raron, muchos de estos libros pasaron a la Universidad,
como puede verse en algunos volúmenes que conservan
el sello de «Colegio-Universidad».
Cuando la Universidad emprendió su actividad inde-
pendiente, la formación de una colección bibliográfica
propia se vio favorecida por la incorporación de las Bi-
bliotecas de colegios de los Jesuitas y de la misma Casa
Profesa de la Compañía. Más tarde se unirían también
otras bibliotecas pertenecientes a las demás órdenes
religiosas establecidas en Sevilla y su provincia, que se
vieron afectadas por la Desamortización de Mendizábal.
Donaciones posteriores de bibliotecas públicas o
de particulares continuaron enriqueciendo los fondos
bibliográficos de la Universidad hasta nuestros días, ya
que son muchas las personas e instituciones que donan
su biblioteca a esta institución con la certeza de que los
fondos estarán bien custodiados y su consulta asegurada.
L
El Fondo Antiguo
de la Biblioteca,
un tesoro al
alcance de todos
Biblia de Gutenberg
15. 15Patrimonio de la Universidad de Sevilla
Apostillas de Nicolás de Lira Digitalización del Fondo Antiguo de la Universidad de Sevilla
16. 16 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
Un legado
pictórico
forjado
durante siglos
de historia Francicos Herrera el Viejo. Éxtasis de San Francisco Javier
a Universidad de Sevilla posee una in-
teresante colección pictórica que se ha
configurado a través de diversas cir-
cunstancias históricas.
En primer lugar, se formó con parte de
las pinturas que fueron de la Compañía
de Jesús y que se integraron en su patri-
monio por formar parte de los retablos de la
Iglesia de la Anunciación. Más tarde, en 1911, la
colección se enriqueció al recibirse como depósito del
Museo del Prado un reducido pero importante grupo
de obras que se han conservado y que se exponen con
cuidado, haciendo en este caso justificable este usufructo
de obras de pertenencia estatal.
Uno de los conjuntos pictóricos más destacados de
esta colección es el de la Iglesia de la Anunciación. Se
trata del más antiguo de la Universidad de Sevilla y es
el que figura en el retablo de la Virgen de Belén, situado
en el muro de la Epístola de la Iglesia de la Anunciación.
Presiden todo el conjunto una representación pictórica
de la «Virgen de Belén», realizada por el artista flamenco
Marcello Coffermans. Se fecha hacia 1560, en la plenitud
artística de este autor. Esta pintura fue el punto de partida
para que en 1588 los jesuitas encargasen un retablo y
un conjunto pictórico realizado sobre tabla, de amplia
iconografía. Se ignora el autor, pero puede sugerirse
que puede ser obra de algún discípulo o seguidor de
Vasco Pereira.
En esta misma nave de la Epístola hay que destacar
el lienzo de Juan del Castillo, «Alegoría de la Institución
de la Eucaristía», pintada hacia 1612.
El Retablo Mayor es una obra mayor de la retablís-
tica andaluza, ejecutado por Alonso Matías entre 1603
y 1606. Las pinturas que decoran los distintos cuerpos
son la «Adoración de los Magos», de Gerolamo Lucente
da Corregio, y la «Anunciación», de Antonio Mohedano.
Juan de Roelas pintó el lienzo principal, la «Circunci-
sión», también la «Adoración de los pastores», los santos
Juanes en los laterales del ático y el «Niño Jesús del
Sagrario». De la misma época son las imágenes de San
Pedro y San Pablo, en los extremos del ático.
Entre el conjunto pictórico que decora el despacho
del rector de la Universidad de Sevilla destaca por su
antigüedad una composición que representa a «San
Jerónimo» y que puede atribuirse a un imitador de Ma-
rinus Van Reymerswaele. También son destacables dos
importantes pinturas de Francisco Pacheco pintadas
sobre cobre, una de las cuales lleva la firma de este ar-
tista con su monograma y la fecha de 1623. Representan
por separado la escena de la Anunciación y proceden
de alguna dependencia de la Antigua Casa Profesa de
los Jesuitas de Sevilla.
Otra obra de gran interés es «La Inmaculada», cuyas
características permiten ubicarla entre 1630 y1640, con
influencia de Zurbarán.
Un «Ecce Homo», pintado sobre tabla de origen fla-
L
17. 17Patrimonio de la Universidad de Sevilla
Círculo de Zurbarán. Santo Domingo de la Calzada Marcelo Coffermans. Virgen del Belén
menco y fechable en la segunda mitad del siglo XVI,
inspirado en modelos de Tiziano, se conserva en el de-
canato de la Facultad de Geografía e Historia.
Asimismo, en la capilla universitaria se guardan algunas
obras que narran el Martirio de San Cosme y San Damián,
procedentes del templo de la Anunciación.
También el Paraninfo exhibe una de las pinturas más
importantes de la Universidad de Sevilla: el «Éxtasis de
San Francisco Javier», obra de Francisco Herrera el Vie-
jo, que debió de estar situada en un altar de la antigua
Casa Profesa de los Jesuitas. También aquí se exhibe
una pintura que describe la «Aparición de Cristo a San
Ignacio camino de Roma», obra que muestra el estilo
del artista cordobés Pablo de Céspedes.
Otras obras relevantes son la representación alegórica
que muestra a Cristo y a la Virgen como protectores de la
Infancia, realizada por Esteban Márquez en 1649; el retrato
de Carlos III, fechado hacia 1760, con características de
la escuela sevillana; y el retrato de Isabel II, fechable en
1840 y relacionado con el arte del pintor romántico José
Gutiérrez de la Vega.
Galería de retratos
La Universidad de Sevilla también ha dejado constancia
a lo largo de los últimos siglos de la presencia de perso-
najes de valía, de modelos importantes en la tradición
cultural y universitaria española y de la imagen histórica
de sus principales miembros, como profesores, rectores,
etc. por medio del retrato. Cuenta así con una galería que
arranca en el siglo XVII y que ha llegado hasta nues-
tros días con obras de artistas importantes vinculados
fundamentalmente con la escuela pictórica sevillana y
española en general.
La nómina de obras cuenta con autores de la talla
de Francisco Zurbarán, Francisco Camilo, José María
Arango, José Gutiérrez de la Vega, Joaquín Domínguez
Bécquer, Manuel Cabral Bejarano, Eduardo Cano, José
García Ramos, Manuel Wssel de Guimbarda, Gustavo
Bacarisas, Manuel González Santos, Santiago Martínez,
Alfonso Grosso, Juan Miguel Sánchez, Antonio Povedano,
Amalio, Juan Antonio y un destacado grupo de pintores
en plena actividad creativa.
En el campo de la escultura también se conservan
algunos retratos de artistas como Antonio Susillo, Joaquín
Bilbao o Jesús Gavira, entre otros.
Esta colección se encuentra distribuida entre las di-
ferentes facultades y dependencias de la Universidad,
existiendo un exhaustivo control sobre ella como se ob-
serva en la clasificación minuciosa que se ha realizado y
que va desde la galería de retratos de rectores a los de
personajes ilustres, la serie de retratos de universitarios
ilustres, la de decanos y otros profesores, la de reyes
y jefes de estado, o la galería de retratos de sevillanos
ilustres, así como algunos grabados.
18. 18 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
l grueso del patrimonio de retablos y escul-
turas de la Universidad de Sevilla procede
de los jesuitas. Goza de importancia den-
tro del panorama artístico local y algunas
de sus piezas podrían figurar en cualquier
selección de obras de la escultura hispá-
nica en los períodos Manierista y Barroco.
Cuando los jesuitas son expulsados de Es-
paña por Carlos III en el siglo XVIII, la Universidad
de Sevilla se traslada a la Casa Profesa de la orden, hacien-
do suyos algunos de los bienes artísticos de los religiosos.
El patrimonio universitario aumentó con la desamortización
de Mendizábal en 1835 con otras piezas escultóricas.
Con el traslado de la Universidad a la antigua Fábrica de
Tabacos, realizado en el siglo XX, se volvió a incrementar el
número de retablos y esculturas heredados de la pequeña
capilla del siglo XVIII de este edificio.
El Retablo Mayor es una de las principales obras de la
retablística andaluza. La monumentalidad de sus propor-
ciones recuerda la arquitectura del Retablo Mayor de El
Escorial. Fue ejecutado por el jesuita Alonso Matías entre
1603 y 1606, utilizando grabados del Templo de Salomón.
Es de madera de borne de Flandes, dorado por Gaspar
Ragis, salvo el banco, de mármol, y las losas de jaspe ne-
gro. Destaca el sagrario, realizado con ricas maderas de
ébano, nazareno o caoba. Entre las pinturas que decoran
los distintos cuerpos encontramos la Adoración de los
Magos, de Lucente, la Anunciación, de Antonio Mohedano,
la Circuncisión, y la Adoración de los Pastores de Juan
Roelas. Este autor realizó también los santos Juanes en
los laterales del ático. Las imágenes de candelero de San
Ignacio de Loyola y de San Francisco de Borja son obras
de Martínez Montañés.
En el crucero izquierdo se ubica un retablo moderno
de tres calles, con la Virgen del Valle, el Cristo de la Co-
ronación y un Cristo con la cruz a cuestas. En el lado del
Evangelio se dispone otro retablo del siglo XVI con ricas
pinturas como la de la Virgen de Belén.
En el crucero derecho se localiza un retablo dedicado
a la Inmaculada, ejecutado por Juan Bautista Vázquez, el
Mozo, en 1585. En el muro de la Epístola se dispone un re-
tablo procedente del convento de Santa María del Socorro,
dedicado a San Juan Bautista, con un soberbio relieve del
Bautismo de Cristo, realizado por Martínez Montañés y con
pinturas de Juan de Uceda.
Sobre pedestales se conservan en la nave de la Iglesia
las esculturas exentas de San Cosme y San Damián, que
proceden de un retablo desaparecido en el siglo XIX.
E
Patrimonio escultórico y retablos
de la mano de los jesuitas
Retablo Mayor Retablo de la Inmaculada
19. 19Patrimonio de la Universidad de Sevilla
partir del primer trimestre de 2015, la Uni-
versidad de Sevilla creará una exposición
permanente con las colecciones de va-
ciado en yeso propiedad de la institución.
Las colecciones más importantes de
vaciados se ubican en dos espacios prin-
cipales, la antigua Fábrica de Tabacos y la
Facultad de Bellas Artes. En el primer edificio se
conservan conjuntos en el Rectorado y en las Facultades
de Filología y Geografía e Historia, cumpliendo una mera
función decorativa. Aquí ya han comenzado los trabajos,
dirigidos por Luis Méndez Rodríguez, director del Secreta-
riado de Patrimonio Histórico-Artístico, y en los que también
colaboran los profesores José Fernández, catedrático de
Historia del Arte, José Beltrán, catedrático de Arqueología,
y Ricardo Alario, profesor de la Escuela Técnica Superior
de Arquitectura. La Real Academia de Bellas Artes de San
Fernando colabora en el asesoramiento en las tareas de
documentación, análisis y propuestas de restauración.
Al mismo tiempo se avanza en el estudio histórico-ar-
queológico, técnico y documental de las piezas y en la
restauración.
En la segunda fase se centrarán en los vaciados de la
Facultad de Bellas Artes, que también han cumplido una
función docente en las clases de escultura o pintura.
El objetivo es presentar al público los resultados iniciales
del programa de investigación sobre los vaciados y del
estudio sobre el uso y función de las colecciones de yesos
en Sevilla a lo largo de la historia reciente.
A
Restauración del Diadumenos de Policleto
Sileno con Baco niño
El vaciado en yeso,
a exposición
20. 20 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
Cristo de
la Buena
Muerte
n la pequeña
capilla de la
Fábrica de Ta-
bacos se ubica
una de las escul-
turas más relevantes
de la Universidad de Se-
villa: el Cristo de la Buena
Muerte.
Juan de Mesa fue el artífice de esta obra
en 1620, tal y como se descubrió en 1983,
cuando el Cristo (de 1,76 metros) era trasla-
dado para celebrar el anual Quinario desde
la Universidad a la iglesia de la Anunciación.
Fue entonces cuando, al desprenderse la
cabeza de la imagen de su ensamble, fue
hallado un documento que decía «Ego feci
Joannes de Mesa, anno 1620».
Fue hecha para ser titular de una Casa Pro-
fesa de la Compañía de Jesús pero, al parecer,
la entidad no tuvo larga vida y se conservó en
el templo como imagen de devoción popular, a la
que se le puso retablo barroco en 1687.
En 1771 se incorporó al patrimonio universitario y per-
maneció en la iglesia hasta convertirse en titular de la
hermandad de los Estudiantes, fundada en 1924 por un
grupo de profesores y alumnos de la Universidad de Sevi-
lla. A esta Hermandad le está cedida para el culto. Desde
1966 reside en la capilla de la antigua Fábrica de Tabacos,
sede actual de la Universidad de Sevilla.
Se trata de una de las esculturas más logradas de Juan
de Mesa. Iconográficamente representa el momento que
sigue a la expiración, según los estudios realizados por
Delgado Roig. La imagen es de una belleza corporal de
concepciones muy humanas y de gran realismo.
Por todos estos efectos en particular, y por la producción
de Juan de Mesa en general, se puede considerar esta
escultura como una de las piezas claves en la evolución
hacia el clima del Barroco por los senderos del realismo.
E
21. 21Patrimonio de la Universidad de Sevilla
a Universidad de Sevilla cuenta con una im-
portante colección arqueológica fruto del
trabajo que viene realizando el Comité de
Patrimonio desde 2012, por iniciativa del
arqueólogo y profesor de la Universidad
de Sevilla Miguel Ángel Tabales. Concreta-
mente, ya se han reunido y catalogado más
de 2.000 piezas y fragmentos que cubren un
amplio arco cronológico en el que queda repre-
sentada la práctica totalidad de los periodos históricos.
Los materiales arqueológicos catalogados desde 2012
consisten en 300 piezas egipcias, ocho helenísticas, 523
de época prehistórica (Paleolítico superior, Neolítico, Cal-
colítico y época del Bronce), 48 ibéricas e ibero-romanas
completas y 25 fragmentos, 55 piezas completas de época
romana y 215 fragmentos, 21 piezas completas de época
tardoantigua y cuatro fragmentos, 39 piezas completas de
época medieval islámica y 423 fragmentos, 33 completas
de época bajomedieval cristiana y dos fragmentos, 29
piezas completas de época moderna y varios fragmentos
y 388 monedas (helenísticas, fenicio-púnicas,
ibéricas e ibero-romanas, romanas, islámi-
cas, modernas y contemporáneas).
El trabajo realizado para contar con esta
valiosa colección ha consistido en recopi-
lar todos los datos sobre las piezas que se
encontraban en diversas dependencias de la
Universidad y establecer un sistema de cata-
logación unitario para todas ellas, unas vez que
las mismas han sido limpiadas y adecuadas.
Todos estos trabajos han hecho posible
que en la actualidad el conjunto de la
colección arqueológica de la Uni-
versidad esté unificado, regis-
trado y fotografiado.
Las piezas se han organi-
zado en un almacén ar-
queológico
provisional y el contenido completo de la colección está
disponible en la página web de Patrimonio de la Univer-
sidad de Sevilla (www.patrimonioartistico.us.es).
En estos momentos se están concluyendo las tareas de
documentación gráfica de las piezas de especial interés
científico, mediante la realización de dibujos arqueológicos
(unas 500 piezas), que resultarán de gran utilidad para la
docencia y la investigación.
El paso siguiente será la adaptación de un espacio pa-
ra la correcta conservación, gestión y divulgación de la
colección arqueológica, que se encuentra en proceso de
constitución. El objetivo es habilitar tres espacios diferen-
ciados y adecuadamente equipados, que puedan acoger
una sala de trabajo para investigadores y estudiantes,
permitiendo al mismo tiempo la gestión, manipulación,
estudio y restauración del material; un espacio expositivo,
accesible al público, con las piezas más destacadas, y un
tercer espacio de almacén, de acceso restrin-
gido, para la conservación de la mayor parte
de la colección. Esta organización permitirá a
estudiantes e investigadores de la Universi-
dad tener un acceso directo a este valioso
y singular patrimonio que podrá ser objeto
de estudios pormenorizados, así como de
publicaciones.
Además, dado el alto valor científico y di-
dáctico de las piezas, pueden generarse y de-
sarrollarse otras actividades como la gestión
de posibles préstamos o la transmisión de los
conocimientos básicos de nuestras raíces
culturales a un amplio grupo de visitantes,
mediante el montaje de una exposición
permanente.
En línea con la finalidad didác-
tica de una institución científica
y educativa como la Universi-
dad de Sevilla, se estudia la
posibilidad de organizar visi-
tas guiadas con citas previas
a esta colección, así como el
desarrollo de una oferta de
cursos y talleres dirigidos a
alumnos y también a personas
externas a la institución.
También se contempla la po-
sibilidad de organizar exposi-
ciones temporales temáticas
en torno a aspectos concretos
de la colección (piezas especí-
ficas, periodos históricos, etc.).
L
Más de 2.000 piezas
componen el patrimonio
arqueológico
22. 22 Patrimonio de la Universidad de Sevilla
a Universidad de Sevilla propone, a través
de sus edificios, una relación singular con
la ciudad. Si nos centramos en el patrimo-
nio construido en los siglos XX y XXI nos
encontramos ante la paradoja de una ins-
titución de más de 500 años de antigüedad
que alberga edificios puramente modernos,
entre los cuales se cuentan muestras de la
mejor arquitectura reciente.
Una de ellas es la Escuela Técnica Superior de Inge-
niería Informática. Es clave de la arquitectura del movi-
miento moderno en Andalucía. Obra de Jaime López de
Asiain, sirve de ejemplo de la integración de la herencia
funcionalista con nuevas corrientes organicistas. Otra de
ellas es la Facultad de Matemáticas, Premio Nacional de
Arquitectura en 1974. Sirvió de aulario para el incipiente
campus de Reina Mercedes hasta convertirse en sede
de la Facultad de Matemáticas. Su autor fue Alejandro
de la Sota. La Residencia Universitaria Ramón Carande
es otro de los exponentes de la arquitectura moderna de
la Universidad de Sevilla. Supone un riguroso ejercicio
de arquitectura residencial universitaria. El edificio de
José Antonio Carbajal y José Luis Daroca presta espe-
cial atención a los espacios libres y cuida la ejecución
material.
La muestra emblemática de la arquitectura universitaria
reciente a nivel internacional es la Facultad de Ciencias
de la Educación, obra de los arquitectos Antonio Cruz
y Antonio Ortiz.
El Instituto de Anatomía es otra obra clave de la ar-
quitectura del movimiento moderno a nivel nacional.
Sirve de muestra de la refinada experimentalidad de la
arquitectura del primer tercio del siglo XX. Su carácter
emblemático se despliega a niveles materiales, tecno-
lógicos y estéticos, y sirven de muestra del buen hacer
de Gabriel Lupiáñez y Rafael Arévalo.
L
La Universidad de los siglos XX y XXI,
adaptándose a una nueva realidad
Patio interior de la nueva Facultad de Ciencias de la Educación
Interior de la Facultad de Matemáticas Entrada principal de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática
Instituto de Anatomía de la Facultad de Medicina
23. 23Patrimonio de la Universidad de Sevilla
a Universidad de Sevilla, como se ha visto en
estas páginas, cuenta con un gran legado
histórico tanto a nivel patrimonial como ar-
tístico. Con el objetivo de seguir haciendo
historia y de continuar dejando huella, en el
año 2009 se pensó en la creación del Fondo
de Arte Contemporáneo, que iría engrosando
sus espacios con una obra que cada año sería
encargada, con motivo de la apertura del curso,
a un autor de reconocido prestigio.
Desde su puesta en marcha son distintas las obras que
se han adquirido, como el óleo sobre lienzo de Paco Reina,
«Desnudo», en 2008; el acrílico sobre lienzo de Manuel
Barbadillo, «Cerene», en 2009; o el Paisaje II, de Juan
Suárez, en 2010, realizado en técnica mixta de madera
y metacrilato.
En 2011 la Universidad de Sevilla hace el encargo a la
pintora Carmen Laffón, que en este pasado mes de no-
viembre recibió el II Premio de Cultura de la institución
por «Bodegón con libros», un óleo en el que la artista
expresa su sensibilidad hacia Sevilla y su vinculación al
mundo universitario.
En 2012 y 2013 el Fondo ha crecido con «Espacio hori-
zontal azul y negro» de José Soto, «Las pinturas Vinagre
& Miel I» y «Vinagre & Miel II», de Luis Gordillo; la acuarela
de Miki Leal «Sin título»; la «Pintura acuática: Aurora» de
Fernando Parrilla o la acuarela «Ruidos» de Abraham
Lacalle.
L
Fondo
de Arte
Contemporáneo
Carmen Laffón. Bodegón con libros Paco Reina. Desnudo
Manuel Barbadillo. Cerene
Juan Suárez. Paisaje II