El salto de altura ha sido parte de los Juegos Olímpicos desde 1896 para hombres y desde 1928 para mujeres. Richard Fosbury ganó el oro en los Juegos de 1968 usando una nueva técnica llamada "Fosbury Flop" donde cae de espaldas, la cual ahora es usada universalmente. Fosbury comenzó a experimentar con esta técnica a los 16 años porque encontraba difíciles los estilos tradicionales como el rodillo ventral.