2. “Los niños que aprenden a leer a los cuatro años
NO muestran ventajas en términos académicos
comparados con aquellos que lo hacen a los siete.
Los pequeños impulsados a leer precozmente
muestran deficiencias en creatividad o curiosidad.”
Joan Almon y Edward Miller*
3. No existe ninguna investigación que demuestre que los pequeños
que leen a los cinco años se desempeñan mejor en el largo plazo
que aquellos que aprendieron a los seis o siete.
La presión que experimentan los niños por aprender en forma
precoz ha traído consecuencias negativas. Los educadores y los
médicos dan cuenta de un número creciente de incidentes de
comportamiento agresivo y extremo en los jardines infantiles y
colegios, vinculándolos a estas exigencias antes de tiempo.
Walter Gilliam, director del Centro de Estudios sobre la Infancia,
en la Universidad de Yale (Child Study Center)
¿Cómo podemos acelerar el proceso de desarrollo en los niños?
4. El incremento de la violencia de los niños pequeños al creciente énfasis en
las pruebas sistemáticas y a la eliminación del tiempo de recreo, de
gimnasia y de otras instancias para jugar.
“Ya no es como cuando nosotros éramos niños, cuando podíamos contar
con una hora o más diariamente para jugar y explorar”, señala la
autoridad. “Ese tipo de tiempo ya no existe más.”
Autoridad escolar de New Haven (Connecticut)
“Más importante que la lectura temprana es el aprendizaje de habilidades
para jugar, que conforman las bases de las habilidades cognitivas.” “La
insistencia para que lean antes de los cinco años genera una presión
innecesaria en el niño”.
Stephen Hinshaw, profesor de psicología en la Universidad de California, Berkeley
5. En la década de los 70, Alemania lanzó un plan para acelerar el
aprendizaje preescolar, convirtiendo sus jardines infantiles en centros
de logro cognitivo.
Un estudio descubrió que “a los diez años, los niños que habían
jugado sobresalían de muchas maneras con respecto a los otros
niños. Estaban más avanzados en lectura y matemáticas y se
adaptaban mejor social y emocionalmente al colegio. Además,
sobresalían en creatividad e inteligencia, expresión oral e ‘industria’.
Como resultado de este estudio, los jardines infantiles alemanes
volvieron a ser espacios dedicados al juego.
Es tiempo de desacelerar el proceso: evidencia internacional
6. “El deseo de conseguir un
camino rápido hacia el
“éxito”, junto con la
presión ejercida por
estándares complejos y
pruebas de rendimiento,
han construido una nueva
‘supercarretera’ sin límites
de velocidad ni vallas de
contención: un lugar muy
peligroso para los niños.”
Los factores tempranos más importantes
para una buena lectura posterior son las
experiencias de lenguaje y aprendizaje
logradas sin una instrucción formal de
lectura.
Debido a que los lectores tardíos siguen
aprendiendo a través del juego, del lenguaje
y la interacción con adultos, su aprendizaje a
largo plazo no se ve afectado.
Al contrario, estas actividades los preparan
muy bien para un posterior desarrollo de la
lectura.
Sebastian Suggate, de la Universidad de Otago, Nueva Zelandia:“
7. En lugar de someter a los preescolares a test de
rendimientos o a mediciones de habilidades
específicas (como saber las letras, sumar o restar), los
educadores debiéramos evaluar de manera más
amplia y flexible el desarrollo infantil, considerando
lo cognitivo, pero también lo socioemocional, lo
físico y aspectos como la creatividad, entre otras
cualidades esenciales de la vida humana.
El lado negativo de la aceleración
8. Entregar una educación parvularia inapropiada a niños en riesgo
social tiene un efecto negativo permanente. Millones de
preescolares han sido sujetos de una escolaridad que exige
mucho en muy poco tiempo.
Lejos de reducir la brecha de aprendizaje con estos métodos, se
están intensificando los problemas. Por eso, es tiempo que los
educadores y los legisladores adopten la regla que guía a la
comunidad médica:
En primer lugar; no hacer daño.
Estudio Preescolar Perry de High/Scope
9. En 2010, luego de analizar casi 300 mil puntajes
Torrance de niños y adultos:
“Más importante que la lectura temprana es el
aprendizaje de habilidades para jugar, que
conforman las bases de las habilidades
cognitivas.”
Kyung Hee Kim, sicóloga del William and Mary College (Estados Unidos)
10. La pérdida de curiosidad tiene profundas implicancias para la educación.
Los educadores de ciencias y de matemáticas hablan cada vez más de la
necesidad de un aprendizaje por indagación; es decir, enfocarse en el
aprendizaje construido por el alumno en oposición a la información
transmitida por el profesor.
Irónicamente, el aprendizaje iniciado por el estudiante es exactamente la
forma en que los niños pequeños aprenden cuando se les permite jugar
e involucrarse en el descubrimiento por la acción.
Lamentablemente, muchos enfoques actuales de educación preescolar
reprimen, de forma involuntaria, la curiosidad y el aprendizaje vivencial
en los niños pequeños, lo que dificulta la enseñanza de ciencias y
matemáticas avanzadas en cursos posteriores.
El lado negativo de la aceleración
11. Es tiempo de dar inicio a una década de la infancia,
que restablezca y preserve la educación parvularia
basada en el juego.
(*)Traducción y adaptación del texto de Joan Almon y Edward Miller:
The Crisis in Early Education, A Research-Based Case for More Play and Less Pressure.
Fuente: http://www.mundonuevo.cl/noticia/72/el-lado-negativo-de-acelerar-a-los-ninos
Original en inglés:
http://www.allianceforchildhood.org/sites/allianceforchildhood.org/files/file/crisis_in_early_ed.pdf
URGE TOMAR CARTAS EN EL ASUNTO
Continua con PPT SICENEI
Notas del editor
0015-14 referencia de acuerdo intreminsterial
Que no interrumpan durante.
Rehabilitación de infraestructura
Instituciones Siglo 21