2. ¿Que es un Aprendizaje Colaborativo?
El Aprendizaje colaborativo o cooperativo es un
enfoque que trata de organizar las actividades dentro
del aula para convertirlas en una experiencia social y
académica de aprendizaje. Los estudiantes trabajan en
grupo para realizar las tareas de manera colectiva.
El aprendizaje en este enfoque depende del
intercambio de información entre los estudiantes, los
cuales están motivados tanto para lograr su propio
aprendizaje como para acrecentar los logros de los
demás.
3. Elementos del Aprendizaje Colaborativo
Formación de grupos: Éstos son heterogéneos, donde se debe
construir una identidad de grupo, práctica de la ayuda mutua y la
valorización de la individualidad para la creación de
una sinergia.
Interdependencia positiva: Es necesario promover la
capacidad de comunicación adecuada entre el grupo, para el
entendimiento de que el objetivo es la realización de
producciones y que éstas deben realizarse de forma colectiva.
Responsabilidad individual: El resultado como grupo será
finalmente la consecuencia de la investigación individual de los
miembros. Ésta se apreciará en la presentación pública de la
tarea realizada.
4. Ventajas de un Aprendizaje Colaborativo
Realmente promueve la construcción de conocimiento porque obliga a
activar el pensamiento individual, a buscar formas de investigar sea en
forma independiente o en grupo, y promueve valores en forma
semiconsciente como la cooperación, la responsabilidad, la
comunicación, el trabajo en equipo, la autoevaluación individual y de
los compañeros.
Valora la contribución individual dado que cada miembro del grupo
asume íntegramente su responsabilidad en la tarea, a la vez que al
socializarla recibe las contribuciones del grupo.
Presenta la posibilidad de realizar procesos en paralelo en función de la
división del equipo en comisiones o subgrupos, que permiten aligerar la
presentación de la solución, producto u opinión según la situación para
la cual trabajan.
5. Posibles Desventajas de un
Aprendizaje Colabotativo
La “construcción y organización de los grupos” es un punto clave para su
posterior funcionamiento: debemos asegurarnos de que los participantes no
sólo desarrollen las actitudes y valores adecuados para el trabajo
colaborativo, sino que también reconozcan y tengan en cuenta sus propios
procesos internos.
Puede que el tutor plantee la metodología de su curso basándose en el
aprendizaje colaborativo, es decir, proponiendo a los participantes actividades
a realizar en equipo. Sin embargo, acostumbrado a dirigir y controlar su
trabajo, se convierta en una actividad demasiado directiva bien porque el tutor
estructure en exceso el tipo de tareas o bien porque intervenga con demasiada
frecuencia en la organización interna del grupo.
El trabajo en grupo colaborativo supone un “ritmo de aprendizaje” diferente
al aprendizaje individual. A la hora de temporalizar un curso basado en
estrategias metodológicas colaborativas no sólo debemos tener en cuenta la
dificultad de las actividades propuestas, sino también el tiempo que cada grupo
necesita para organizarse, tomar decisiones y llegar a acuerdos.