2. Bloque I: Lenguaje y Comunicación: Elementos y Códigos.
1. La percepción visual. Teorías. Procesos: exploración, selección,
análisis y síntesis de la realidad.
2. Expresividad y creatividad. Factores que intervienen en el proceso
creativo. Estrategias.
3. Lenguaje y comunicación. Lenguaje visual: elementos formales y
sintaxis. Interacción entre los distintos lenguajes.
4. Los medios de comunicación de masas. Códigos en la comunicación
visual. Funciones sociales y culturales.
3. ÍNDICE:
1.-Introducción.
2.-Procesos perceptivos.
2.1.-Percepción Visual.
2.2.-Mecanismo visual.
2.3.-El mundo que habitamos
Espacio perceptivo cotidiano.
Diferentes mundos.
La solidez del Mundo Visual.
La infinitud del mundo Visual perceptivo
3.-Teoría de la percepción
Teoría empirista o estructuralista
Teoría de la Gestalt (tendencia innata de la mente)
Teorías psicofísica o de estímulo.
4.-La tridimensionalidad del espacio perceptivo.
5.- Bibliografía.
4. 1.-Introducción.
Cuando el ser humano elabora un proceso perceptivo frente a
la realidad o frente a alguna de sus representaciones, su cerebro
procesa la información aportada por el estímulo hasta identificar
elementos reconocibles por su memoria. En ese momento le
aporta los sentimientos que sus recuerdos al respecto llevan
asociados y completa el pensamiento visual.
5. 2.-PROCESOS PERCEPTIVOS.
2.1-PERCEPCIÓN VISUAL
De todos los sentidos la vista es el rey y ninguno de ellos puede
hacerle frente. El ojo es capaz con un solo golpe de vista asimilar un
espacio tridimensional, mientras que, por ejemplo, el tacto no es
capaz de captar la distancia. Pero no debemos menospreciarlos
porque la vista se apoya en innumerables ocasiones en todos ellos.
El ojo del observador siempre está alerta a la exploración externa
aumentando su campo selectivo que los conduce a nuevos
descubrimientos que alimentan la conciencia humana. Éste
selecciona a un objeto por destacarse de los demás o por necesidad
del observador. Será el estímulo quien provoque la reacción y el que
se anteponga a la iniciativa del observador.
6. Filósofos y científicos clásicos como Demócrito, mantiene que la
percepción es un traslado del mundo externo al penetrar a través de la
apertura de la pupila, planteando el problema de cómo empequeñecen las
dimensiones de los objetos selectivos para recibirlos en el ojo.
Sabemos que el ojo recibe un equivalente del objeto y no el objeto
mismo. Y que el tamaño de la imagen proyectada dependerá de la distancia
que se encuentre con el propio ojo. Una vez que se percibe el objeto
contemplativo, este encaja con alguna forma organizada en nuestra cabeza.
Pero el ojo no sólo es selectivo, sino que también es adiestrado y enseñado
a visualizar aquello que ha aprendido a ver. En una instrucción continua se va
estableciendo unas leyes universales que marcan la norma.
7. La percepción visual engloba dos posiciones del ojo:
Uno cuando el ojo es inmóvil y la otra cuando el ojo está en
movimiento.
La imagen proyectada sobre la retina queda paralizada y analizada
por la visión del ojo fijo que más tarde se dirigirá al cerebro donde se
descodificará la información.
8. Se distingue dos tipos de visión:
1. La visión foveal
2. La visión lateral.
Esta duplicidad de la función del ojo es la que marca caracteres a la
vez muy preciso y relativos de la percepción espacial.
10. LA VISIÓN LATERAL
Es muy rudimentaria. Esta sirve para tomar conciencia del objeto,
en el campo general. Es muy susceptible a los cambios de
movimientos. Los ojos en este caso, exploran el campo general con
movimientos rápidos que nos apuntan a una imagen precisa dada por
la vista foveal.
La imagen mental de un campo sólo puede formarse por la
situación e integración de estas dos imágenes (foveal-lateral) que va
de lo general a lo particular.
11. DE LO OBSERVADO AL INTERIOR DEL OJO
Si observamos la línea de horizonte y la seguimos con la vista, la
percibimos como una recta debido a la oscilación de nuestros ojos. Si fijamos
los ojos, la línea es lateralmente imprecisa. La recta proyectada se fija sobre el
hemisferio de la retina como un arco de círculo máximo, sobre superficie
esférica. Pero la imagen mental debido a la naturaleza de la oscilación y de la
proyección la traduce por la sensación de la recta. Lo mismo ocurre cuando
contemplamos una recta vertical.
Pero si miramos la recta sin mover los ojos, obtenemos resultados
equivalentes, aunque es muy difícil apreciar la curvatura de las rectas y
además el adiestramiento visual se impone ante la lógica de la percepción.
No debemos olvidar que el fondo de nuestro ojo no es plano, sino una
superficie esférica hueca.
12. De todo esto se deduce que si trazamos dos paralelas en el plano frontal y
estas están próximas y centradas a la altura de nuestros ojos, se acercan una
a la otra hacia sus extremidades. Pero dejemos de considerar la validez de
nuestra propia configuración y reconozcamos que la retina no está hecha para
ser mirada, al igual que el cerebro interpreta las distancias de separación de
diferente manera, según la zona de la retina afectada.
Cuando hacemos un recorrido al exterior a través del movimiento de
nuestros ojos, concentra la atención en al análisis de los detalles y no hace
distinciones entre la visión de los dos ojos. Por el contrario cuando se realiza
una fijación individual de cada ojo inmóvil, se produce una diferencia notable
entre las dos imágenes retinianas, donde el cerebro tomará libertad para tener
en cuenta a cada una de ellas.
La visión no está obligada a darnos una copia exacta de la realidad, pero sí
estabilidad y permanencia al caos en que se encuentra sometido
continuamente el ojo. Si esto no fuera así las numerosas sensaciones que
parpadean en nuestra retina nos sería insoportable concebirlas.
13. BINOCULARIDAD
La explicación del mecanismo de la visión no queda completa si
pasamos por alto que la visión del hombre es Binocular, y que toda
esa complicada funcionalidad se hace por partida doble. Aunque
ambos ojos no reciban imágenes iguales, el ojo izquierdo ve algo más
que el derecho. Pero ambos poseen una mágica coordinación y
sincronización de las acciones, presentando una estructura que tiende
a equilibrar nuestra representación mental de la realidad, corrigiendo
las distorsiones precisas para que la imagen entre en armonía.
14. 2.1.-El MECANISMO VISUAL
Pero a lo que a nosotros nos preocupa es la luz ante las formas, y cómo
el ser humano toma conciencia de las cosas a través de la vista. Toda visión
depende de dos constantes básicas: una los rayos de luz y la otra la
formación de imágenes dentro del ojo.
En nuestro movimiento continuo se forman sucesiones de imágenes
retinianas que se encuentra en ambos ojos. La retina absorbe la luz
produciendo excitaciones nerviosas. Estas excitaciones, viaja por las fibras
de los nervios ópticos hasta alcanzar el cerebro. ¿Pero cómo se propaga
estas excitaciones en el cerebro y cómo se elaboran? Es todo un misterio.
Investigaciones actuales sobre la fisiología y la anatomía demuestran que
hay una correspondencia entre la forma de la excitación de la retina y la
forma alcanzada por el cerebro, produciéndose una semejanza entre la
imagen retiniana con los objetos externos.
15. •El espacio visual
cotidiano
•Diferentes mundos
•La solidez del mundo
visual
•La infinitud del
mundo visual
2.3.-EL MUNDO QUE HABITAMOS
El campo visual monocular de Ernst Mach
16. Nacen las siguientes teorías:
-TEORÍA EMPIRISTA O ESTRUCTURALISTA
-TEORÍA DE LA GESTALT
-TEORÍA PSICOFÍSICA O DE ESTÍMULA
-TEORÍA DE LOS ARTISTAS
17. 1.-Teoría empirista o estructuralista.
En la segunda mitad del S.XVII la mente humana comenzó a despertar con
la idea de que nuestro conocimiento nos viene a través de los sentidos y no
de otra fuente.
Como consecuencia de todos estos pensamientos surge una corriente
filosófica en Inglaterra (finales del S.XVII y principios del S.XVIII), que da
lugar a la teoría empirista o también llamada de `inferencia´ o de `inducción´.
Esta doctrina sostiene que en el momento de nacer, “la mente es una página
en blanco”-una tabla rasa- en la que nuestras experiencias se van
depositando y dejando huellas.
Los investigadores chocaron con un problema al intentar explicar el espacio
tridimensional, sólo a través de la vista. Tendría que haber algo más, un
proceso mental que construya el mundo que se nos presenta.
Para el empirista el espacio llega como una idea no visual, donde nuestras
experiencias pasadas nos han educado para establecer el sentido de
profundidad visual.
18. 2.-Teoría de la Gestalt (tendencia innata de la mente).
Tiene su origen en los racionalistas europeos del S.XVII destacando entre ellos
a Descarte.
Descarte afirma: que todo conocimiento que venga de experiencias sensibles
pierde valor objetivo, ya que todo conocimiento válido nos viene a través de la
razón. Otra fuente de la corriente del pensamiento gestalista se encuentra en
Manuel Kant que entiende la mente como un elemento que impone su individual
concepción del espacio y el tiempo a los datos recibidos por la experiencia
sensible, y cuyo valor se encuentra en la acción innata de la localización de las
cosas en el tiempo y el espacio.
De la herencia de todos estos pensamientos, nació la escuela de la Gestalt
(forma). Para el gestalista, nuestra percepción es el resultado de espontáneas
interacciones cerebrales originadas por el estímulo sensorial. Esta teoría se
resumen en la afirmación, que el todo es cualitativamente diferente a la suma de
sus partes.
.
19. Según los gestalistas la percepción da lugar a un proceso cerebral originado por
los estímulos.
Estudiaremos las distintas leyes que los psicólogos de la Gestalt establecen para
la organización visual:
-Ley de la simetría
-Ley de continuidad
-Ley de la proximidad
-Ley de la buena forma o Prägnanz
-Ley del cerramiento
-Ley de la experiencia
-Ley de igualdad o equivalencia
-Ley de fondo-figura
-Ley del destino común
Se cree que lo que vemos depende de las características de la organización de
los campos cerebrales. Estos son tratados como el principio básico explicativo,
pero parece haber sido desplazado por las leyes de organización, que son útiles
para proyectar imágenes que se comprendan tal y como queremos
comprenderlas, aunque hay que dejar claro que estas leyes nunca se establecen
objetiva y cuantitativamente.
20. Los psicólogos no solo estudiaron el sistema visual de forma directa, sino que
también lo hicieron indirectamente a través de las ilusiones.
Las ilusiones ópticas, es un engaño muy eficaz, no están sometidos a un acto
de voluntad o aprendizaje por parte del sujeto, sino que actúa directa y
misteriosamente sobre el mecanismo visual que lo impresiona inicialmente como
un señal errónea, que entra en conflicto con la realidad objetiva. Se realizan estas
ilusiones en el primer nivel de la visión, por lo que la información que se remite al
cerebro es ya una información equívoca, y un conocimiento posterior no lo
modifica. Se trata, pues, de una percepción de figuras distorsionadas, que ocurre
muchas veces en el campo de los estímulos y las sensaciones.
El sistema visual muestra sus habilidades al descubrir la escena de forma
ambigua permitiendo descripciones diferentes. Aunque se sabe que la imagen
permanece constante, nosotros la experimentamos de modos diferentes.
Este fenómeno se produce después de un tiempo constante prolongado o intensa
estimulación. El postefecto experimenta con mayor frecuencia viene de
observaciones de luces brillantes (sol o bombilla). Parece ser que después de
estas exposiciones casuales, es muy normal encontrar una postimagen de la
fuente de luz sobre cualquier otra escena que observamos a continuación.
Las postimagenes ilusorias parecen que se producen por un tipo de fatiga,
producidos en la retina por el exceso de estimulación constante.
21. Citaremos alguno ejemplo de ilusiones ópticas:
La ilusión de Ponzo
(ilusiones geométricas)
Ilusión de
Poggendorff;
22.
23. 3.-Teoría psicofísica o de estímulo.
La teoría psicofísica o teoría de estímulo, a diferencia de las anteriores recoge,
toda la información necesaria para explicar que nuestra percepción se halla
presente en el entorno.
Todas las imágenes mentales creadas por el cerebro son partes integrantes de
los estímulos percibidos. Por ejemplo; la percepción del color se debe a la
longitud de ondas de la luz.
Cada estímulo provoca una reciprocidad en las sensaciones subjetivas.
Los investigadores psicofísicos (S.XIX), intentaron establecer una
correspondencia entre los fenómenos perceptivos y sus estímulos pero
fracasaron en sus intentos ya que muchos fenómenos perceptivos quedaron sin
sus estímulos correspondientes.
Las nuevas investigaciones de James. J. Gibson aportaron intensidad a la
explicación psicofísica, al encontrar estímulos correlativos para fenómenos
perceptivos que con anterioridad se resistieron. Un ejemplo de correspondencia
entre estímulos y fenómenos perceptivo se encuentra en las distintas distancias
y sus dimensiones experimentadas que tienen su gradiente en las variables de
textura.
24. 4.-La tridimensionalidad del espacio perceptivo.
Los seres humanos toman conciencia de un mundo tridimensional en
la percepción aún cuando nuestra retina es bidimensional.
¿Por qué vemos en tres dimensiones?
¿Qué información debe tener el ojo para que la percepción se base en
este conocimiento?
Los investigadores del siglo XVIII afirman que el ojo puede obtener
una imagen del objeto exterior pero no puede sentir el objeto mismo.
Esto nos hace pensar que si los objetos y las distancias son
productos de nuestras mentes, se deduce, que los objetos físicos no
existen, sólo están en nuestras mentes. Construimos un mundo para
nosotros mismo donde la subjetividad forma parte del proceso de
percepción espacial.
25. Todas estas cuestiones sin respuestas plantean un problema que ha sido
analizado y estudiado por muchos a lo largo de la historia. Se buscará
distintos niveles en las explicaciones para encontrar respuestas
satisfactorias que nos lleve a nuevos enfoques del problema:
1.- Respuesta a la tridimensionalidad.
El nativista suponía que la tridimensionalidad del espacio nos venía dada de
forma intuitiva o innata. En cambio los empiristas creían que era a través del
aprendizaje o inferida de experiencias anteriores. Pero tanto nativistas como
empiristas coincidieron en que el espacio estaba dividido en varias
categorías geométricas:
.-Extensibilidad en dos dimensiones; el espacio se extiende continuamente.
.-Ubicación en dos dimensiones; localización dentro del espacio.
.-Forma en el campo visual; aspecto abstracto de los objetos en el espacio.
.-Profundidad y distancia en tres dimensiones; corresponde con la tercera
dimensión en geometría.
Todos estos términos espaciales se les presuponían que podían ser
sentidos, a excepción de la profundidad y la distancia que sólo podían ser
explicados a través de la pura percepción.
Los psicólogos se vieron obligados a establecer una teoría que explicara el
campo visual, ya que, el espacio físico se constituía por una serie de puntos
con una posición concreta en el espacio y podrían definirse conforme a las
coordenadas cartesianas.
26. 2.- Respuesta a la tridimensionalidad.
Los empiristas explicaban la solidez de los objetos mediante dos teorías:
.-Teoría de las formas planas geométricas.
.-Teoría de la forma tridimensional.
Estas teorías explican la forma como una proyección del objeto. Las formas
eran entendidas como una sensación simple e independiente de su propia
constitución anatómica y desprovista de su análogo de estímulos en la
imagen retiniana, quedando la forma fuera del campo de la percepción y de la
sensación.
Si acudimos al ojo para obtener la solución a nuestro problema, descubrimos
que el ojo no aporta datos suficientes sobre la tercera dimensión, pues la
visión queda representada como un único punto sobre la retina, al igual que
cualquier punto externo a la línea de la visión confluirá en ese mismo punto.
Pero sí tenemos en cuenta que nuestro organismo anatómico no está
constituido por un único ojo sino por dos. La convergencia de las imágenes
de ambos ojos podría darnos datos sobre la profundidad y distancia.
Ambos ojos apuntan a un mismo objeto con un punto de fijación concreto. En
el centro de la retina la imagen aparece con mayor nitidez mientras que en los
bordes del centro pierden fuerza visual la imagen. Los ojos actúan como un
telescopio en la distancia, con la diferencia que estos poseen un proceso de
razonamiento automático que se efectúa en el cerebro. O como Helmholtz lo
llama “inferencia inconsciente”.
27. 3.- Respuesta a la tridimensionalidad.
La teoría de la gestalt sugiere que la tridimensinalidad viene desde el
comienzo por un conducto tridimensional que es el cerebro y el
funcionamiento del sistema nervioso de nuestra organización activa.
Parece ser que el cálculo de la distancia nos viene de la
convergencia o divergencia de los ojos que son el producto de las
sensaciones musculares oculares, anunciándonos la cercanía o la
lejanía de los objeto. Esto nos lleva a pensar que la sensación
muscular podría esconder indicios sobre el cálculo. Este
planteamiento ya fue expuesto por el Obispo Berkeley, en su “nueva
teoría de la visión”. Según su teoría: sí la retina es bidimensional el
conocimiento de la tridimensionalidad ha de ser aprendido por otras
vías; como las sensaciones musculares oculares o la captación de
objetos que nos dará ciertas claves que, por asociación, creará la
idea de distancia.
28. 4.- Respuesta a la tridimensionalidad.
Estudios posteriores demostrarán que no era tan adecuada esa teoría (nueva
teoría de la visión, Berkeley), para dar una explicación lógica de la distancia. Pero
en 1833 Wheatstone descubrió una teoría e inventó un instrumento llamado
estereoscopio que creaba una disparidad sintética de las dos imágenes. Esta
disparidad binocular de las imágenes instituía la base de la percepción de la
profundidad y la distancia. Koffka, sin embargo, entiende que la mente asimila la
tridimensionalidad del mundo exterior, no como consecuencia de la disparidad,
sino más bien, porque la mente añade acciones para la resolución de la
comprensión de su fin. Crea entonces una teoría dinámica donde las energías que
desprende la proyección correspondiente de cada punto de la retina, recogerá
todo el entendimiento tridimensional. No obstante esta correspondencia no será
suficiente para la asimilación, debido a que cada punto del espacio externo vive
fuera del propio estímulo.
Por tanto, las imágenes retinianas colaboran entre sí para la organización de la
percepción y lo hace de forma dinámica. El lugar de estas energías o fuerzas
dinámicas nacen no en las imágenes retinianas sino en el comienzo del proceso
cerebral, donde los patrones retinianos convergen. Es en esta zona donde se
produce las combinaciones de los procesos iniciados en cada retina. Ambas
trabajan entre sí según sus caracteres estructurales.
Como conclusión de todo esto, cada punto accionará a su correspondiente punto
único, independiente de la retina, llevándonos al concepto de organización.
29. 5.- Respuesta a la tridimensionalidad.
El artista también aportó datos sobre el tema mucho antes de que se convirtiera en un
problema de psicólogos y filósofos. El pintor y el dibujante habían asimilado el mundo físico a
través de las normas de representación gráfica, que escondían una serie de claves, llamadas
secundarias.
Los fundamentos de las principales claves secundarias están en: tamaño, imbricación,
sombras, texturas, detalles, llenos-vacíos, borrosidad, horizontal, fondo-figura, color…Todas
estas claves engloban tres características esenciales: el traslapo de objetos, la incidencia de
luz en el objeto o sombra y la perspectiva visual.
Se les llamó así para distinguirlas de las claves primarias. Las claves primarias recogen tres
signos fundamentales: el ajuste del cristalino para la nitidez máxima de la imagen exterior
concreta, la convergencia de los ojos sobre un objeto fijado y disparidad retiniana del objeto.
Las claves secundarias han de presentarse simultáneamente para una visualización
adecuada. En cambio, las claves primarias, pueden formularse individualmente y con
independencia de las otras.
De todas estas respuestas el invento de combinaciones ópticas es aceptado hasta nuestros
días como la explicación más cercana de cómo vemos la tridimensionalidad. Sin olvidar los
resultados de los anteriores estudios sobre la convergencia y el ajuste, que junto con la
disparidad retiniana forman las normas principales en lo referente a la tercera dimensión.
No debemos olvidar en toda esta búsqueda, que ver significa entender y que la visión posee
una serie de propiedades importantes que da lugar a la comprensión visual. Y estas son las
siguientes:
La experiencia visual es dinámica, y es ella donde se produce las tensiones de fuerzas, siendo
este el elemento común que posee las leyes físicas universales.
30. La estructura inducida o de traslapso, trata de completar las partes invisibles o incompletas de los objetos,
donde el pensamiento al interpretarlos añade datos visuales. Cuando la actividad de la acción entra en un
estado de reposo da lugar al equilibrio, donde la energía física alcanza su punto más bajo.
Óptica geométrica nos dice que la luz se propaga en línea recta. El ángulo formado por los dos haces
procedentes de dos puntos cualesquiera de la escena al entrar en el ojo es proporcional al que forman al ser
proyectados sobre la retina.
El tamaño de la imagen será inversamente proporcional a la distancia a que el objeto esté del ojo (ley
euclidiana del ángulo de visión).
A pesar de la gran variación de las imágenes que en el ojo representan un determinado objeto de la realidad
exterior, el objeto nos parece en gran parte el mismo.
Constancias en el tamaño, la percepción del tamaño se sostiene por las distancias ofrecidas por otros
objetos que se encuentren en la misma escena.
Constancias espaciales, la constancia de la forma y la constancia de la orientación.
Constancias de la iluminación, los colores varían en tres dimensiones; la de la propia tonalidad, la de la
saturación o pureza cromática de una tonalidad determinada y la del grado de luminosidad.
Constancia perceptual, existen múltiples caminos que nos llevan a la tercera dimensión. Durante siglos, los
artistas han venido creando vividas impresiones de profundidad con superficies de dos dimensiones,
valiéndose de la perspectiva.
Todas estas constantes y propiedades que se mantienen en nuestra visión fueron estudiadas por artistas y
psicólogos, que establecieron teorías y principios para hacerse con la imagen externa. Estos últimos no sólo
estudiaron las propiedades de la visión sino que le dedicó largas observaciones a la aptitud artística. Éstas
se componen de seis rasgos: la destreza manual, la perseverancia volitiva, la inteligencia estética, la
facilidad perceptiva, la imaginación creadora y el juicio estético.
La teoría de la expresión artística no parte de las actitudes del cuerpo humano, sino de las cualidades
expresivas de las curvas y formas que le da carácter a la proyección.
31. BIBLIOGRAFÍA:
BUHLER, K: Psicología de la forma. Edt. Morata
GOMBRICH, EH: Arte e ilusión. Estudio sobre la psicología de la
representación. Edt. Gustavo Gili
GOMBRICH, E.H: La imagen y el ojo. Edt. Alianza. Madrid. 1987.
ARNHEIM, RUDOLF: Arte y percepción visual. Edt. Universitaria. Buenos
Aires. 1969.
ARNHEIM, RUDOLF: Hacia una psicología del arte (Arte y entropía). Edt.
Alianza Forma. Madrid. 1986.
ARNHEIM, RUDOLF: Nuevos ensayos sobre la psicología del arte. Edt.
Alianza Forma. Madrid. 1989.
ARNHEIM, RUDOLF: El Poder del centro. Edt. Alianza Forma. Madrid. 2002.
ARNHEIM, RUDOLF: El Pensamiento visual. Edt. Paidos Estética.
Barcelona. 1998.
32. • CORDERO RUIZ J. Fundamentos para una gramática de la
visión y la representación. Real Academia de BA. de Stª. Isabel
de Hungría. 1996. BA
• M. H. PIRENNE: Óptica perspectiva visión. En la pintura,
arquitectura y fotografía. Edt. Victor Leru.
• ELLIOT, J. Entre el ver y el pensar. Edt. Fond. Cult. Econ. Buenos
Aires 1976