1. Netiquette
El surgimiento del correo electrónico y otros
servicios de Internet implica también el
surgimiento de una nueva forma de comunicarse.
Esta forma nos impone ciertas reglas de
educación a las que no estamos acostumbrados,
pero que los usuarios avezados de Internet no se
cansan de atender y corregir: la netiquette.
A punta a hacer la comunicación en Internet lo
más agradable y útil posible para la correcta
convivencia en este mundo virtual, puesto que
cuando se mantiene una conversación
electrónica, ya sea un e-mail o una discusión en
un grupo, es fácil malinterpretar los significados.
Entonces netiquette es una conjunto de reglas de
etiqueta, es decir, consejos de uso y buenas
costumbres en Internet. El término viene de una
contracción de dos palabras de origen inglés: Net
(red, término familiar para Internet) y etiquette
(etiqueta, en el sentido de “educación’’). En
2. castellano la traducción sería algo así como “red-etiqueta’’.
¿Para qué sirve?
Básicamente, netiquette sirve para: ser mejor
comprendido.
Cada medio de comunicación tiene sus códigos.
Conocerlos y utilizarlos fluidamente es
imprescindible para que el mensaje sea
correctamente decodificado; de lo contrario,
puede producirse un malentendido. Internet es,
entre cosas, un nuevo medio de comunicación.
Una línea correcta en el lugar incorrecto puede
generar fricciones como, por ejemplo, un chiste
colocado donde no se debe o enviado a quien
puede ofenderse.
Utilizar los recursos de la red más
juiciosamente
La red tiene una cantidad finita de recursos
(máquina, números IP, conexiones, ancho de
3. banda, paciencia de sus integrantes). Si no se
utilizan racionalmente, la red se caerá encima de
millones de usuarios debido a su propio peso y
lentitud. Un clásico ejemplo es el arte de
responder: siempre conviene citar de los correos
electrónicos sólo aquellas partes que realmente
hacen al tema. Al contestar, mucha gente
simplemente copia de datos que deben viajar por
toda la red, sino que además hace menos útil el
correo electrónico para el destinatario, que debe
buscar en todo el contenido dónde está la parte
importante.
Hacer la vida más agradable, útil y provechosa
en el espacio electrónico
Al igual que en la vida física de todos los días,
ciertas convenciones funcionan para hacer la vida
más fácil y agradable, como dar las gracias o
pedir por favor. En este sentido, una regla
importante es la que indica que no se debe hacer
publicidad o enviar mensajes no solicitados al
4. correo electrónico de las personas (mensajes de
correo basura o spam), a menos que ellas lo
hayan pedido expresamente.
Netiquette en diferentes servicios
Correo electrónico
Si estás escribiendo a una persona desconocida
que vive en un país de lengua diferente al
español, utiliza en lo posible el idioma inglés.
Cuando tengas dudas o problemas con un
determinado host, existe una persona a la que
puedes consultar: el postmaster. El postmaster es
el administrador de una o varias computadoras
de Internet. Para enviar un mail al postmaster,
hazlo a postmaster@computadora.dominio. Por
favor: cuando envíes mensajes postmaster, sé
amable, breve y ten paciencia. El postmaster suele
estar muy ocupado y la respuesta puede tardar
varios días.
5. No usar mayúsculas. En los correos esto equivale
a ¡GRITAR!
Trata de no escribir líneas que contengan más de
80 caracteres, o algunas personas que usan otros
programas pueden tener problemas para leerlas.
No uses acentos, ni eñes, ni símbolos raros que
no estén directamente en el teclado, ya que en el
camino que recorre tu mensaje pueden ser mal
“traducidos’’ por otra computadora y
transformarse en otro tipo de símbolos.
Evitar cuoteos (citas del mensaje original)
innecesarios.
Utiliza juiciosamente la línea de tema (subject),
porque usar una línea corta y concreta permite
ubicar rápidamente el mail correcto en una larga
lista.
Si consideras que la importancia del mensaje lo
justifica, respóndelo inmediatamente con una
línea breve de “Lo recibí’’ para que el autor sepa
6. de su llegada, aun cuando se lo respondas en
forma completa más tarde
Ser cuidadoso al responder un mensaje. Hay
direcciones (por ejemplo, las de listas de correo)
que si bien parecen personas pueden ir a un
grupo de gente.
De este modo se puede enviar un mensaje que se
pensaba que era privado a cientos de personas.