El documento proporciona información detallada sobre la película El cielo protector de Bernardo Bertolucci. En resumen: (1) La película sigue a una pareja estadounidense, Port y Kit Moresby, que viajan a África en 1947 buscando inspiración para el trabajo de Port y para salvar su matrimonio en declive, (2) La película se basa en la novela del mismo nombre de Paul Bowles y examina temas de soledad y aislamiento a través de su viaje al desierto del Sahara, (3
1. CUADRO SINÓPTICO DE LA PELÍCULA El cielo protector TÍTULOEl cielo protectorDIRECCIÓNBernardo BertolucciPAÍSReino Unido/ItaliaAÑO1990DURACIÓN133 min.GÉNERODramaREPARTODebra Winger, John Malkovich, Campbell Scott, Jill Benett, Timothy Spall, Eric Vu-An, Amina Anabi, Sotigui Kouyate, Philippe Morier-Genoud, Ben Samail, Nicoletta Braschi, Paul Bowles.GUIÓNMark People y Bernardo Bertolucci, basado en la novela de Paul BowlesPRODUCCIÓNCoproducción GB-Italia; Warner Bros Pictures/Sahara Company/TAO Film/ Recorder Picture Company (RPC)/Aldrich Group.MÚSICARyuichi Sakamoto, Richard Horowitz.FOTOGRAFÍAVittorio Storaro. TEMA El tema de la película es la soledad. La soledad de una pareja que se ama pero que no puede vivir junta. En palabras de Bernardo Bertolucci: “Quieren adentrarse más y más en el desierto. Quieren morir o desaparecer en el desierto. Creo que pretenden reconstruir una historia de amor que quizá esté en peligro. Una relación que ha perdido el rumbo pero que cuánto más se adentran en el desierto, hay una especie de disolución del amor. Su amor, en lugar de fortalecerse en el desierto, cada vez sienten más y más presión. Cuánto más aislados, más presión sufren. Una de las preguntas existenciales es ‘¿Es posible la sociedad? ¿Es tres posible? Es una pareja imposible. Ves la presión que eso ejerce en ellos. Pero si estas solo, enloqueces”. ARGUMENTO Port y Kit Moresby, una pareja de neoyorquinos viaja a África en el año 1947. Llegan al puerto de Tánger. Tras diez años de matrimonio, la convivencia no funciona. Port es músico, lleva un año sin trabajar, ha compuesto la “Obertura Mexicana”, busca en el desierto una fuente de inspiración. Kit, una escritora que sólo ha publicado una obra de teatro mediocre, espera que el desierto le devuelva a su marido. Viajan con Tunner que se siente atraído por Port y enamorado secretamente de Kit. Port es un viajero no un turista. La diferencia es importante, no está muy seguro de adónde va. Todos se adentran en el Sahara intentando encontrar respuesta. Anticiparemos que se trata de un viaje de dirección única. El verdadero viaje es aquel en el que se cancelan los extremos. La condición del viajero es estar siempre de viaje. Como Ulises pero sin Ítaca. No hay un punto de partida, no hay un punto de llegada. Nuestros protagonistas experimentan el síndrome de Ulises. TRATAMIENTO DEL ARGUMENTO ¿CÓMO SE PRESENTA EL ARGUMENTO?Es una historia de viajes. Mark People lo define de la siguiente manera: “El viaje me parece la metáfora más bonita para el cine. Este film es una road-movie y una historia de amor, al mismo tiempo”. El argumento se presenta en tres partes. Primero es un viaje de tres, luego un viaje de dos, finalmente es el viaje de uno solo.¿DE DÓNDE SURGE LA IDEA?Es Bernardo Bertolucci quién nos lo cuenta: “El cielo protector es un libro del que oí hablar mientras rodaba El último emperador. Me hablaron durante mucho tiempo de él, al menos, tres personas lo hicieron: Nandos Kafioti, Marily Golden y sobre todo Mark People, el guionista de El último emperador. Para mí eran los miembros de una sociedad secreta. La sociedad de la gente que adora a Paul Bowles. Yo no sabía quién era. Al final, acabas enfadándote con los amigos que insisten en que te leas el libro. Lo Leí en China. En ese libro hay una destilación de veneno palabra tras palabra. Es el veneno de una especie de existencialismo. La primera vez que fuimos a Tánger a hablar con Paul Bowles aún estábamos montando El último emperador y Mark presionó mucho con El cielo protector, así que me llevó a ver a Paul Bowles, una especie de leyenda en Tánger”.¿QUIÉN ES PAUL BOWLES?Paul Bowles es un escritor neoyorquino “hijo de Scott Fitzgerald y Zelda. Esto es cierto pero a la vez, no porque ellos eran de los 30 y esto es después de la Segunda Guerra Mundial”, señala Bertolucci. No pertenece a la “Generación perdida como Hemingway, Dos Passos o Fitzgeradl pero comparte muchos referentes con ellos. Vivió en Tánger desde 1931 y murió el 18 de noviembre de 1999 a consecuencia de una insuficiencia cardíaca en el Hospital Italiano, a los 88 años de edad. Paul Bowles escribe: “El Sahara es el lugar más bello del mundo, precisamente porque no hay nada. El cielo tiene luz, pero no es verdad, no está allí, sólo está la noche, siempre. Lo que más me impresionó de Tánger cuando vine por primera vez fue una ciudad en la que pasaban cosas constantemente y donde la hechicería horadaba sus túneles invisibles en todas direcciones. Pero eso era antes. Ahora ya no hay nadie aquí. Hay mucha gente, pero no hay nadie. Tánger ya no existe, está arruinado, podrido, corrupto, no queda nada”. En otro lugar comenta: “Jane y yo empezamos con 24 maletas y dos baúles grandes. Uno era de Jane y contenía sólo zapatos. En cada cajón había un par. Su madre decía que necesitaba unos para cada vestido. Su madre estaba un poco chiflada. Pero tenía ideas raras sobre la ropa. Por eso teníamos todas estas cosas. También una máquina de escribir y un tocadiscos. Mucho equipaje. Ahora es imposible viajar así. ¿Quién lo llevaría? ¿Dónde están los mozos?”. Ahora es Bernardo Bertolucci quién observa que “Antes de la guerra había una cadena completa de facilidades para el viajero por todo el Sahara: hoteles. Era una colonia francesa y había una tradición de ir desde Marruecos, por Argelia y adentrarse en el Sahara. Había sitios en los que hospedarse, un montón de hoteles junto a las ciudades, como Tánger, que eran muy vivas donde había hoteles maravillosos y muy cosmopolitas. Luego todo se vino abajo a finales de los treinta. La guerra lo paró todo”.¿QUÉ SIGNIFICA EL TÍTULOPaul Bowles escribe: “Imaginamos el cielo como algo brillante pero en realidad es negro ¿no? Por eso, yo decía ‘no creas en el cielo, cree sólo en el hecho de que nos protege de la oscuridad. Más allá sólo hay negrura. El espacio no es azul, gris o blanco. Es negro y cuando Port dice ‘nos protege de lo que hay detrás’ ¿qué hay detrás? Port es ateo, no cree en la vida después de la muerte. No sé, no lo conozco”. La escena en la que aparece por primera vez la expresión “el cielo protector”, es aquella en la que Port y Kit montan en bicicleta para hacer una pequeña excursión. Van por un paisaje que no es todavía el Sahara. Este es un típico paisaje que no lleva a ningún sitio. Ningún sitio sería Erfoud o Zagora. Bertolucci confiesa: “Para esta escena pensé mucho en los cuadros de Caspar Friedrich, el pintor alemán de finales del XVIII, pensaba en sus figuras en los paisajes. Me sirvió de inspiración para las elecciones visuales de esta parte de la secuencia. Lo pequeños que somos en determinados paisajes (como en la llanura manchega y nuestro ingenioso hidalgo recortado sobre la línea del horizonte, bueno pero esto es otra historia, otro día podríamos hablar de él). En el libro de Bowles, este momento este momento es muy importante. Es cuando la expresión “el cielo protector” se usa por primera vez. Plantea la pregunta ‘¿protegerte de qué?’ Hay cierta angustia y amenaza en este título. Figuras en un paisaje. El desierto es muy atractivo pero también da mucho miedo. Hace que te plantees cosas. Kit, sobre todo. Quieren convencerse. Fue una de las escenas más desagradables de rodar. Para mí dirigirla, para los actores interpretarla. Quieren hacer el amor de verdad. Hacerlo en este lugar significaba poder, de verdad, tener una nueva comunicación. Reconstruir su historia de amor hecha añicos. El gran polvo y, eso, recuerdo, fue muy doloroso. “Quizás los dos tememos amar demasiado”-sugiere Port. Sakamoto compuso para esta secuencia una música muy evocadora. Creo que a partir de aquí, Port sabe que este viaje no tendrá final para él. No podrá llegar al final del viaje. Estaba pensando en el efecto especular entre la historia de Port y Kit y la historia de Paul y Jane Bowles. De hecho, en el libro pasa lo contrario que en la vida real. En la vida real Jane Bowles muere antes y Paul vivió mucho más, murió ya muy anciano. El opuesto simétrico a la novela donde Port fallece antes”.NO ES UNA NOVELA AUTOBIOGRÁFICAEn el libro Port y Kit dejan atrás Estados Unidos, Nueva York, Long Island, una mentalidad, unos valores concretos y van a otro continente, el norte de África, a buscar algo nuevo. Bowles niega que haya una relación entre su vida y El cielo protector. Hace una sutil distinción. Dice “Port y Kit no somos Jane y yo”. Bertolucci afirma: “Jane es, por ejemplo, Kit como una modelo puede ser la inspiración de un pintor. En ese sentido sí hay algo de Jane Bowles en Kit. Con la misma libertad como Masaccio cogía a una campesina con su hijo grande y fuerte y la convertía en una virgen. O como Caravaggio cogía a una ahogada en el Tíber, vista por casualidad con ese color lívido y lo usaba para la ‘muerte de la Virgen’. Sí, es cierto, hay una gran sublimación pero lo importante es que el misterio de la relación Paul-Jane se transfiere totalmente a la relación Port-Kit”. Vittorio Storaro el responsable de la fotografía comenta a este respecto: “Hay una parte solar relacionada con Port y la lunar relacionada con Kit. La solar va con el espectro cromático del amarillo al rojo; la lunar, del azul al violeta, es de Kit, lo femenino y la luna. Como el desierto ocupa la parte final, habrá mucho azul. En el cine la normalidad no existe. Todo es una elección. Una visión personal e individual. En cuanto pones la máquina allí, estás decidiendo. No existe una realidad, existe una interpretación”. Bowles siempre ha mantenido que la novela no es autobiográfica, no obstante opina que: “Debra estará fantástica. Le concederá mucha ternura. En el libro no la hay pero ella le dará eso y creo que está bien. El libro es demasiado frío y ella no lo es. En cuanto a Malkovich, seguramente sea lo suficiente frío, no lo sé” (escena 1). EL BAR DE TÁNGER FRENTE AL CINE ALCÁZAR DONDE PAUL BOWLES TOMA UN TEPaul Bowles está al principio de la secuencia. El escritor viendo a sus personajes que estaban en un libro. “Decidimos poner a Paul Bowles en el último momento. El escritor representaba la literatura. Esa era mi idea. Está mirando algo cuyo control está perdiendo”. Bertolucci se pregunta: “¿Cómo dirigir a un escritor que observa a Port y a Kit, personajes que inventó y escribió hace 40 años? ¿Qué podía decirle a Paul? Le dije algo simple: ‘Quiero encontrar en tu rostro, en tus ojos, el dolor de la memoria, la pena de recordar’. Creo que Paul ha logrado dármelo. Hay una especie de vértigo temporal. Paul Bowles, el escritor hoy, a finales de los ochenta, vuelve a ver como si fuera contemporáneamente a sus personajes a finales de los 40. Ese desfase temporal me da un cierto vértigo que me parecía poético”. Qué opina Paul al respecto: “Sentía que no debía estar allí. Que no me había invitado a mí mismo cuando lo escribí. Así que ¿quién es esa persona que observa? Bertolucci dijo: ‘eres tú, observando tu pasado’. Creo que El cielo protector es autobiográfica. Yo le decía que no, pero él cree que sí. Y les dice a los actores que va sobre mi vida. Y que Kit es Jane. No hubo forma de convencerle, así que no lo intento” (escena 2). TUNNER, EL TERCER PESONAJE Campbell Scott habla sobre su personaje: “La función principal de mi personaje es como a) el único superviviente; b) el catalizador emocional; c) el contrapunto cómico; d) el catalizador emocional, superviviente, cómico. La respuesta correcta es una mezcla de todos los anteriores. Tunner es el tercero del trío, es un heredero que está secretamente enamorado por Kit y Port. Está enamorado de ambos pero Port se lo lleva adrede para no estar siempre a solas con su mujer. Es una especie de filtro, como de protección. Están contentos de tenerlo. Es, principalmente, un entretenimiento. Un seguro para ambos. Al menos, en teoría, esa debería ser su función cuando deciden llevárselo. LA PRESENTACIÓN En la presentación de los tres personajes, ves antes las maletas y los baúles que a ellos, al principio de la película. Es importante. Vivirán en Tánger un año o más. No empiezan con la idea de hacer un viaje por el desierto. Empiezan y no paran. La diferencia entre el viajero y el turista. El turista es alguien que va a un sitio y que en cuanto llega, sueña con volver a casa. El viajero es alguien que, una vez en el lugar al que quería ir, decide seguir, seguir y seguir. El viajero es alguien que, idealmente, nunca podrá volver a casa. No tiene un destino. ¿Qué es lo que quiere Kit? Saber que, en teoría, hay un destino. Pero como dije, el verdadero viaje es aquel en el que se suspenden los extremos. La condición del viajero es viajar (escena 3). PERSONAJES SECUNDARIOS Jill Benett y Timothy Spall representan madre e hijo. Parecen unos personajes sacados de Hitchcock. Siempre que aparecen, hay malas noticias. Es ese tipo de gente que siempre te encuentras cuando vas de viaje. Gente plasta, pelmazos que se pegan a ti buscando un consuelo entre la extrañeza, siendo consciente de que no compartes nada con ellos y que los intereses por los cuales tú estás allí, no tienen nada que ver con ellos. No sabemos nada de su pasado. Siguen el itinerario de Kit y Port, son el contrapunto, grotesco o siniestro de la historia. Eric Lyle se siente atraído por Port de una forma muy extraña o quizás por su dinero. EL VIAJE Nuestros protagonistas se hospedan en el Hotel Only Harbour de Tánger, en el paseo marítimo. Es un hotel que existía antes de la guerra. Bowles lo había conocido. Bertolucci intenta evitar los platós. Rodar todo en localizaciones reales. Antes del rodaje estuvieron explorando Marruecos, Argelia, Níger, todo el Sahara. La legendaria ciudad de Agadez. El equipo recorrió miles de kilómetros. Nuestros protagonistas no saben qué clase de desierto les aguarda. Han empezado algo que no podrán parar. Bertolucci se aproxima tanto a las localizaciones como el libro.1ª PARADA: A una hora de Quarzazate. Este paisaje no es del Sahara, es del Atlas. Esa región se llama Bled. Está en las estribaciones del Atlas. Port lee un libro, El extranjero de Camus. Estamos en el mundo del Islam. Ese elemento se oye en toda la película por la música. Port ha llegado antes que Kit y Tunner en Mercedes blanco de Eric y su madre. Aún no sabemos si Kit ha llegado. Tendría que haber llegado por la noche en el tren. Este es el punto de la excursión en bici, cuando aparece por primera vez la expresión “el cielo protector”.2º PARADA: De viaje de nuevo, ahora en bus. No hay trenes. Kit escoge el hombro de Tunner para descansar y dormir. Port no puede dormir. Es la escena en la que las moscas lo invaden todo. Pero a medida que las condiciones empeoraban, el paisaje iba haciéndose más bonito. Una contradicción ¿verdad?, de camino a Erfoud, un palmeral.3ª PARADA: Port se deshace de Tunner al que embarca con Eric y su madre en el Mercedes. Pronto se reunirán o, al menos, es lo que piensa Kit en el Kasbah de Ait Benhaddou, las ciudades amuralladas del desierto. Aquí Port experimenta los primeros síntomas de algo extraño. Siente frío en medio del desierto. La escena del cementerio se rodó en un cementerio de verdad cerca de un fuerte de un pueblo llamado Taroudant que está en el valle del río Draa (los planos de este valle son un homenaje a John Ford). El Draa es uno de los pocos ríos de Marruecos que en verano tiene agua. Está rodeado de montañas extraordinarias que cambian de color cada media hora. Pueden volverse grises, malvas y rosas. Sin duda, Marruecos es uno de los países más bonitos del mundo. Sólo viven allí cuatro o cinco familias. Las piedras por las que pasean Kit y Port son tumbas. Bertolucci afirma: “los cementerios musulmanes de Marruecos tienen algo bonito. Son lugares emotivos muy definidos pero también anónimos. De hecho, no queríamos pisarlos. Rodamos al caer la noche. Al fondo, la forma de los jinetes es muy prístina”. De noche, presenciamos la escena del Burdel. Port va solo y siente soledad, incluso entre tanta gente. La música es muy contagiosa e hipnótica. Hay una bailarina que entra en trance y Port está cada vez más enfermo. Port estaba envuelto en un aura de soledad y un dolor muy extraño. De algún modo, acepta la enfermedad como destino. La enfermedad de Port es haber leído demasiado a Albert Camus. Port siente una gran fascinación por la nada.Port ha perdido el pasaporte, fue Eric Lyel quien se lo robó. Tunner lo ha encontrado. Por la mañana se encontrarán. Port no quiere esto y sale huyendo arrastrando a Kit hacia su propio destino.4 PARADA: El Kasbah al que llegan se llama El Gaa. El Gaa es un laberinto de callecitas muy estrechas y pequeñas. Está construido así con grandes murallas por dos razones: una, para que esté fresca y protegida del calor y del sol; la otra razón es que al anochecer la kasbah se convierte en una cárcel. Hay un guardián con una llave que cierra la puerta al anochecer. Abre por la mañana a las 5,30 o 6. Nadie puede salir ni entrar. Nadie sabe qué le pasa a Port. Para Kit es una pesadilla. Hasta más adelante cuando van al fuerte de la Legión Extranjera, no descubre que tiene fiebre tifoidea. Va en busca de un lugar dónde hospedarse. Deja a Port solo. Le acompaña un joven. Es como un viaje al interior del vientre de una ballena. Kit se siente perdida. Es un momento angustioso. Cuando regresa, Port está en una especie de delirio. Él es músico y asiste a una Jam Session imprevista. Intenta llevarle a un lugar donde haya un médico. Ha oído que hay una epidemia de fiebre tifoidea en los pueblos de alrededor. La música es de Horowitz (escena 5)Por fin, llegan al fuerte de la Legión Extranjera. “El equipo ha viajado a Argelia aunque nuestros protagonistas están en Marruecos. Había que buscar un lugar donde el desierto diera la sensación de océano, un enorme e infinito océano de arena. Al sur de Argelia, en un lugar llamado Beni Abbès. Paul Bowles se alojó en el hotel muchos años antes. El decorado del fuerte, fue una de las pocas grandes construcciones que levantamos. La fortaleza se llamaba Bilbah” –advierte Bertolucci. LA MUERTE DE PORT MORESBY Aquí vemos por primera vez la gran duna y el desierto. Debra mira abajo. Primero ves las capas de arena, luego los camellos y la verdadera primera imagen del desierto. Como vemos, la película es un viaje de tres personas, luego de dos y finalmente, de una. La escena del sufrimiento de Port es terrible. Bertolucci escribe: “Mientras miraba por la cámara pensé en La Piedad de Miguel Ángel y pensé en Malkovich como un Jesús muerto, visualmente no lo había buscado pero ocurrió así. La noche ha sido terrible Le vent di sable no ha dejado de castigar. A la mañana siguiente Port ya no sufre. Volvemos al plano del principio de la película. Kit lo mira fijamente, es como si absorbiera su forma de ser. El viajero era él, ahora ella se convierte en viajera. Quiere seguir hasta donde habría querido ir Port a través del desierto. La única forma de defenderse de lo que ha ocurrido es perderse, desaparecer. Como un espejismo llegan los Tuaregs. ¿Es un sueño? Llevan sal. Para Kit no hay otra forma de seguir con el viaje (escena 6). EL DESIERTO La caravana a través del océano de desierto llevando gente, cosas y sal. El Sahara es como un mar rodeado de puertos. Hay pueblos sin nada de lo que vivir, sólo pueden vivir en el desierto. Los tuaregs son los hombres azules por sus atuendos. El tinte de los llamados hombres azules se desprende de la piel. El azul se llama índigo. Dejamos a Kit con los Tuaregs. El jefe siente algo por ella. Una extraña atracción que tiene que ver con lo fantástico. La examina como si fuera un animal: la dentadura, la oreja, la pierna. ¡Cómo ha podido encontrar una persona así en el desierto! Es una aparición. Una alienígena en el Sahara. Kit se siente angustiada. El Océano de arena. Las dunas parecen formas del cuerpo: pechos, ombligos, brazos, rostros. Tras la muerte de Port, Kit se siente liberada. Lo que intenta hacer Kit es liberarse del recuerdo.Hay una escena de Tunner ante la tumba de Port. Algo ha quedado atrás. Esta parte no es como Paul Bowles la escribió. Él escribe sobre la violación de Kit por los líderes tuaregs. Pero Bertolucci cambia la violencia sexual contra Kit en intercambios de miradas y una caída tonta de nuestro héroe tuareg porque mira demasiado a la chica que ha encontrado. LA TRAVESÍA POR EL DESIERTO HA ACABADO: KIT SE HA TRANSFORMADO La ropa de la mujer la entierran en la arena. Kit se ha convertido en un chico. Bertolucci confiesa: “Hay dos nombres con los que siempre soñé en mi adolescencia: uno era Tombuctú; el otro, Agadez. La caravana está entrando en Agadez. Arquitectura de barro, decoraciones de barro, interiores de barro. La torre de la mezquita con influencias de Mali. Es imposible construir un decorado que quede así. La idea de esta parte es que después de todo el conflicto psicológico entre Port y Kit, ahora lo que le pasa a Kit con los Tuaregs es todo físico, fisiológico. Kit está en una cárcel y acepta estar en ella (escena 7). No intenta escapar. Sus diarios se convierten en una especie de decoración. A las esposas que hay fuera les cuesta trabajo creer que el chico que está en la torre no oculte nada. Belqassim se ha ido. Ahora tendrá que seguir y seguir. LA ESCENA EN EL MERCADO DE AGADEZ El mercado de Agadez es real. Bertolucci filma esto como un documental. Los exóticos vestidos de las distintas tribus por el barrio. “Usé lo que encontré”. Kit camina entre la gente como un náufrago salvado de la tormenta: avestruces, aves, cabras, carniceros, tiendas de comestibles, cabezas de felino, bullicio, la multitud. Descubre un grupo que comparte un refresco de leche. Se lanza compulsivamente a beber. Intenta pagar pero su dinero no sirve. Estamos en otro país, otro mundo, otra sociedad. Hay un pequeño altercado. La confunden con una delincuente. Intentan castigarla con unas varas. “Ninguna de las personas que aparecen en la escena son profesionales. Debra tenía mucho miedo. Fue muy valiente. No sabíamos lo que iba a pasar” comenta Bertolucci (escena 8). DEBRA VUELVE A LA CIVILIZACIÓN Así es como Debra vuelve a la civilización. Como un parto doloroso, de nuevo. La grúa del principio que saludaba a los viajeros aparece de nuevo. Estamos en Tánger. No hablamos de esta grúa antes. Una grúa inutilizada en el muelle de Tánger. Llevaba allí años y años. Testigo mudo de un pasado irreconocible. Como el pasado de Kit. Tenían que desmantelarla a los pocos días. “Tuvimos que convencerles para que no lo hicieran y poder rodarla” –advierte Bertolucci. Kit regresa al Gran Hotel punto de partida y de llegada de esta historia. Baja del taxi, recorre el paseo marítimo. Al final se cierra el círculo en el Alcázar ponen otra película. En frente el café donde planificaron el itinerario. Allí, de nuevo, volvemos a la límpida mirada de Paul Bowles que se dirige a Kit: “¿Se ha perdido?” –pregunta; “´sí” –responde Kit. A lo que Bowles replica: “Al no saber cuándo moriremos, pensamos que la vida es inagotable. Pero todo ocurre un cierto número de veces y son muy pocas veces. ¿Cuántas tardes más recordará una cierta tarde de su infancia? ¿Una tarde tan arraigada en su ser que no puede concebir su vida sin ella? Quizás tres o cuatro veces. Quizás menos. ¿Cuántas veces contemplará la luna llena? Veinte quizás. Sin embargo, nada parece tener límite” (escena 9). Fin.