1. PLAN ESCOLAR DE MANEJO DE RIESGOS
PRESENTACION
La Península de Yucatán es uno de los lugares más expuestos del país a eventos causantes de
desastres.
Entre los más comunes están los incendios forestales y los huracanes, cuyas temporadas de
aparición son
de cuatro y seis meses respectivamente. Por ello existe la necesidad de contribuir al
fortalecimiento de una
cultura de prevención, así como de reducir la vulnerabilidad ante desastres, en especial en
aquellas
comunidades que por sus condiciones suelen ser más vulnerables a las contingencias.
Partiendo del reconocimiento que los niños, niñas y jóvenes son un grupo social que tiene
derecho a un
entorno seguro, así como a un sistema integral y especial de protección que garantice el pleno
cumplimiento
de sus derechos, aún en situaciones de emergencia. Este documento tiene la intención de
contribuir a la
máxima reducción de riesgos y a la protección de las posibles amenazas en los planteles
escolares, pero
fundamentalmente a mantener seguros a los niños y niñas, en caso de que ocurra un desastre,
a través de
promover su participación activa y protagónica dentro de la elaboración del Plan
Es nuestro interés que los educadores (as) hagan de este tema un contenido dentro de sus
planes de
estudio de tal forma que las y los estudiantes se vayan formando en una cultura de prevención
y de
reducción del riesgo. Se propone que las escuelas cuenten con un programa para enfrentar
desastres
2. naturales, para ello se promueve la elaboración de “Planes Escolares de Manejo de Riesgos”
que permitan la
movilización de la escuela y de la comunidad, con la finalidad de tomar medidas adecuadas de
prevención y
protección en caso de un desastre o una emergencia.
Tal como lo establece la Convención sobre los Derechos de la Niñez, el eje fundamental que
debe dirigir las
acciones a favor de la infancia es, el Interés Superior de los niños y las niñas. Este enfoque
debe
considerarse en la elaboración de los Planes Escolares de Manejo de Riesgos, tomándolos en
cuenta en las
reuniones de organización, la asignación y participación en las tareas del diagnostico de
amenazas y riesgos,
en el levantamiento del inventario existente, la elaboración del mapa de riesgos y en la
conformación final del
propio Plan; y fundamentalmente considerando sus intereses, opiniones y requerimientos
como sujetos
activos de las situaciones que los afectan en este caso, del manejo de riesgos. Estas acciones
permiten que
esta tarea sea incluyente y participativa, además de que garantiza que los propios niños y
niñas sean
partícipes del cuidado de su escuela, al asumir responsabilidades concretas junto con los
padres y madres
de familia y con las autoridades educativas.
El Plan Escolar de Manejo de Riesgos es un instrumento de planificación que el educador o
educadora, junto
con la comunidad escolar (niños, niñas, padres y madres de familia) realiza para prevenir,
mitigar y afrontar
las emergencias individuales o colectivas, provocadas por la naturaleza o por el hombre.
Esta es una técnica sencilla que nos aportará información relevante sobre las amenazas y los
factores de
vulnerabilidad que existen en la escuela y sus alrededores.
3. La técnica consiste en que, un grupo (algunos maestros y maestras, padres y madres de
familia, niños y
niñas) con varios marcadores de colores y con un pliego de papel bond, dibujen la escuela y
sus
alrededores. Una vez dibujados los rasgos básicos, (espacios de la escuela, su ubicación dentro
de la
comunidad, lugares cercanos a la escuela, etc) comienzan a ubicar los puntos en los que
existen amenazas
ó factores de vulnerabilidad, (“aquellas cosas que nos hacen débiles ante un desastre” y que ya
han sido
explicadas en el paso 4). Es conveniente que estos puntos que representan amenazas o
vulnerabilidades
sean marcadas con colores que ayuden a facilitar su ubicación.
Al final, los mapas deben ser analizados por todo el grupo que esta trabajando en la
elaboración del Plan, y
la informacion que se encuentra en el mapa complementa la que ya esta integrada en la tabla
de riesgos.
EMERGENCIAS: Alteración en las personas, los bienes y medio ambiente por un evento
natural o provocado por el hombre y en el cual la comunidad tiene capacidad de respuesta.
DESASTRE: Evento natural o provocado por el ser humano que causa intensos impactos
negativos en las personas, sus pertenencias, servicios y/o medio ambiente y que excede la
capacidad de respuesta de las comunidades o de los estados.
AMENAZA: Se refiere a la potencial ocurrencia de un evento natural o provocado por el ser
humano que tiene consecuencias negativas al impactar sobre las personas, sus bienes y/o
medio ambiente.
VULNERABILIDAD: Condición interna de susceptibilidad de una persona, familia o comunidad
de ser afectada por un evento destructivo.
4. CAPACIDAD: Son las fortalezas y habilidades que tienen las personas y comunidades para su
propio desarrollo, para resistir y recuperarse de un evento destructivo.
RIESGO: La posibilidad de que un evento ocurra, dentro de un período de tiempo específico y
en una área determinada.
EVACUACIÓN: Medidas de seguridad para alejar a los integrantes de una comunidad de una
zona de peligro a un lugar seguro, donde debe preverse la colaboración de la población de
manera individual o grupal.
ALERTA: Estado declarado con el fin de realizar acciones específicas debido a la probable,
cercana o real ocurrencia de un evento que puede ocasionar daños al medio ambiente y
pérdidas tanto humanas como materiales.
ALARMA: Es el aviso o señal que se hace cuando es inminente o está ocurriendo un evento,
se deben seguir las instrucciones, que formen parte del plan familiar y el plan comunitario.
MITIGACIÓN: Medidas tomadas con anticipación al desastre, con el ánimo de reducir o
eliminar su impacto sobre la sociedad y medio ambiente. Incluye ingeniería y otras medidas de
protección física, así como medidas legislativas para el control del uso de la tierra y ordenación
urbana.
PREVENCIÓN: Actividades diseñadas para prever protección permanente y evitar daños a las
personas, las cosas y el medio ambiente.