Este documento ofrece instrucciones detalladas pero explícitas sobre cómo realizar sexo oral a un hombre de manera placentera. Se enfoca en el uso de la boca, lengua, manos y otras partes del cuerpo para estimular el pene y llevar al hombre al orgasmo a través de diferentes técnicas como lamidas, chupadas y movimientos. También enfatiza la importancia de la comunicación y observación de las reacciones del compañero.
SEMANA 1 GENERALIDADES Y TERMINOLOGIAS EN BIOSEGURIDAD.pptx
Como hacer una buena mamada
1. Como hacer una buena mamada
enviado por Petra Web, Sáb, 10 de mayo, 2008
–adaptado por Yolanda Jiménez G. para su lectura en el programa “Cuéntale a la Yola” por
www.radionocturna.com, lunes 11pm (T.C.) / 9pm (T.P.)
Dar sexo oral es dar sexo, recuerda debe ser sano, seguro y consensuado.
Cuida tu salud, cuida tu vida y la de tu compañía sexual.
Chupar una pija a un hombre es uno de los mejores placeres de la vida. Es triste
pensar que muchas mujeres no aprecian lo placentero y rico que puede ser. La razón es
que no saben cómo hacerlo correctamente y así no acaba de ser excitante. Porque si lo
hechas a perder, no conseguirás tu premio. La pija no se endurecerá, el hombre no goza y
la mujer se siente mal
No tiene importancia el lugar que escojas, puede ser en una casa en la cama o en el
auto detenido entre las sombras de una noche romántica, pero busca todo el nivel de
intimidad que necesites para sentirte relajada y caliente. Si ha de ser tu primera vez te
recomiendo la cama y con mucha soltura y placer.
Tus labios, tus dientes, tu lengua, tu paladar, tu garganta son elementos de placer en
el juego oral, también lo son las mejillas, la barbilla, tu cuello, tus ojos, tu rostro completo.
Tus senos y tus manos complementan tu equipo para lograr provocar en tu hombre
reacciones eróticas que eleven su gozo. Condones de sabores, endulzantes y saborizantes
son solo accesorios, que si bien pueden ayudar en un proceso de experimentación,
también pueden ser contraproducentes por sus olores excesivos o sabores desagradables.
Vale la pena probar antes un poco el sabor y el aroma antes de usarlos para prevenir
cualquier desafío al momento de empezar a jugar.
Supongamos que se está en un sofá. Estás con un buen macho, vergudo, que te
gusta y sabes que él quiere que lo homenajees con una buena mamada, ya te lo ha pedido
un par de veces.
2. Deslízate en el suelo entre sus piernas y abre su bragueta. Busca y palpa su pija.
Siente su calor, su piel suave y como empieza a palpitar y endurecerse para ti. Si aún está
doblada en su calzoncillo, mantén agarrada su pija y sube a su cara, y bésale.
Observa si puedes sentir una respuesta abajo. Cualquier movimiento es buen signo.
Ahora sácale la pija y míralo con ojos de pícara y cara de putita golosa. Si la verga se está
poniendo tiesa tiesa, tuto va bene, en otro caso sácale las pelotas. Si los pantalones están
muy tirantes o ajustados, bájalos. Ahora sujeta sus pelotas en la mano izquierda y la pija
con la derecha. Apriétala poco a poco hacia abajo en dirección de la base del mango y
disponte a chupar.
Recorre tu lengua sobre sus labios para tenerlos listos y húmedos. Mira la cara de tu
hombre, siempre con cara de puta regalada, muerta por esa verga. Siente en tu paladar
como su virilidad tiembla por tus caricias y chupadas. Él quiere mirar como lo chupas. A los
hombres les gusta mirar. Ahora abre tu boca ligeramente para atormentar y excitar a tu
hombre y acércate junto a su pija. Respira en él, sóplale con tu aliento caliente. Saca tu
lengua de nuevo y tócale, atorméntalo. Pásale en círculos muy suaves por el glande y el
orificio del centro, ten presente que la zona más sensible son los laterales del glande
sobre todo cuando la cabeza está inflamada, desbordada de calentura y circulación.
Asegurándote que tu lengua está goteante de humedad, comienza con la base de su
tronco y lame hacia arriba, lentamente. Gira tu cabeza de lado y simula morderle,
suavemente, colocando tus dientes en su carne.
Humedécelo de nuevo con tu lengua y usa tu mano para esparcir el líquido
alrededor si es necesario. Una pija húmeda se ve más suculenta, más brillante.
Tu mano izquierda entretanto está tocando sus huevos, quizá arañándolos
ligeramente con tus uñas. Puedes también querer buscar debajo y detrás de los testículos
para encontrar esa área tan sensitiva justo antes del ano o incluso pasar tus dedos sobre
su agujero muy levemente. Ya que el músculo que causa la erección comienza ahí atrás,
esto producirá una reacción en su pija.
Después que hayas lamido su tronco un montón de veces y está todo húmedo y
duro, tu hombre comenzará a retorcerse con frustración si no comienzas a tomarlo en
3. serio. Una rápida mirada a su cara te hará saber cuando estás llevando las cosas
demasiado lejos. Atormentar es bueno hasta cierto punto. Un poco de experiencias
chupando pijas te enseñará cuando se ha alcanzado ese punto. Da uno de tus balanceos
hacia arriba con tu lengua desde la base de su mástil al borde de su cabeza, no te
detengas.
Continúa tú larga y húmeda lamida sobre la punta de su pija, insistiendo en el
agujero del centro. Mantén tu lengua en él, si puedes, pero no chupes su cabeza aún.
Ahora recorre con tu lengua el borde de su cabeza, por todo el contorno, haciendo
frecuentes pases sobre la piel tierna y encarada hacia ti. Aquí es donde la mayoría de los
hombres son más sensibles, pero ¡no todos los hombres!
Estruja el tronco y mira si brota un líquido claro. Si lo hace, baña tu lengua con él y
espárcelo. Se extenderá contigo y parecerá fantásticamente erótico para tu compañero.
Ahora muestra como te gusta la sustancia: gime, gruñe, saboréatelo.
Acércate a la cabeza de la pija como si fuere un helado de crema de chocolate y
mete toda la cabeza en tu boca caliente. Mantenla ahí.
Escúchalo gemir. Ahora, baja rápidamente y mantén tanta pija como pueda caber
dentro de tu boca. No temas, no te ahogarás. Si doblas ligeramente tu cuello de la manera
correcta, puedes meterla limpiamente en tu garganta.
Permanece así, con la pija dentro de tu boca durante un momento. Siéntela dentro
tuyo, esto puede ser tan exquisito como si estuviera dentro de tu vulva. Crece en ti,
palpita. En este momento puedes hacer varias cosas:
Deslízala hacia atrás hasta el extremo de la pija y chaquea tu lengua contra ella.
Como si hicieras el fonema “CHA”. Tu hombre tendrá un hormigueo ahora, queriendo
profundizar en tu garganta. NO LO DEJES IMPONERSE, si lo hiciera se vendría muy rápido,
qué hay de divertido en eso.
Moviéndote tan rápido como él pueda aguantar, no lo dejes correrse aún, deslízate
arriba y debajo de su pija como si estuvieras follándolo. Si está muy cerca de venirse PARA
o al menos frena.
4. Si no puedes introducirla toda en tu boca, cosa que pasa con muchas vergas grandes
y gruesas, puedes engañarlo un poco usando tu mano derecha para completar la
sensación de “tragártela a fondo”. Parecerá como si la hubieses metido toda en tu boca y
hasta lo sentirá igual. Puedes también deslizar tus dedos moviéndolos en forma de “O”
alrededor de su mango, arriba y abajo con el ritmo de tu chupada.
Además de mantener la pija en la boca, puedes mamarla que es bastante diferente.
Hay mamadas profundas y pequeñas y ambas sientan condenadamente bien. Tu hombre
puede tener una preferencia, pero observa sus reacciones al momento que las hagas para
saber que tanto le está gustando tu modo.
Tomando tan sólo la cabeza en tu boca, mámalo como si fuera un pezón o una pajita
–pajilla o popote. Esto le sienta tan bien al hombre, que me pone la vulva caliente tan solo
de pensar en ello.
La otra mamada es larga, profunda, en la que tomas la verga completa y la mamas
todo el tiempo hacia arriba como si fueras un aspirador, bajas y comienzas de nuevo,
mamando hacia abajo también.
Cualquiera de estos movimientos servirán de maravilla los primeros momentos que
las apliques, pero después de un rato, la pija se acostumbra a la sensación. Cuando notes
esto, es el momento de cambiar de juego. No querrás que la verga se vaya a dormir, la
quieres constantemente estimulada, pero sin llegar al punto del orgasmo.
Este es el punto donde estamos ahora: Tienes una furiosa erección en tu mano
derecha y sus pelotas alto tensas en tu mano izquierda. Retrocede un poco y obsérvalo:
¿no es bello? Lleva tu mano derecha a la base de la pija y apriétala. Esto provocará que el
tronco se llene y espese, ahora la cabeza estará brillante y suave. Continúa manteniendo
la pija en tu boca y chúpala. Prueba todos tus movimientos variados hasta que sepas que
el hombre ya no puede más y va a estallar.
Lo que hagas ahora depende de ti y de tu amante. Personalmente yo prefiero
observar el disparo. Me proporciona imágenes para mis sueños húmedos y demás. Es
emocionante ver la leche a borbotones. Es asombroso cuanta cosa sale y lo lejos que llega
el disparo. Puede incluso intentar tomar algo con tu lengua si eres rápida. Puedes querer
5. tragarlo, me gusta mucho beberlo a montones como una cerveza en un día súper caliente.
Ten cuidado de retroceder solo un poco cuando estalle o si no te atragantarás y en veces
no es una imagen muy excitante para ellos. Tómalo en tu boca, mantenlo ahí y después lo
tragar.
Otra solución también exquisita, salvo que lo estés haciendo en un lugar que no
debas ensuciar mucho, es dejar los tibios, maravillosos jugos de él derramarse en tu boca
y entonces deslizarlos alrededor de la ya húmeda pija. La hace tan escurridiza y deliciosa
de tocar. Querrás embarrarla con tus manos sintiendo la verga dura, masturbándolo con
su propia leche. Es una imagen sensual para ambos.
Una última propuesta es que no lleves tan cerca del orgasmo a tu acompañante si lo
que deseas es que te penetre una y otra vez. Logra su erección con tus caricias orales, y
cuando esté en el punto que deseas, dile que es el momento de que te tome. Ya todo es
cuestión de cómo se dejen llevar por sus deseos.
Una cosa que una buena chupadora de pijas tiene que aprender a hacer es “hacer
preguntas”, claro si te es cómodo, pero será mucho mejor y excitante para él el que
puedas comprender sus reacciones como el que responda de viva voz ante tus estímulos.
Si te incomoda hablar durante este proceso, está bien, pero tendrás que enfocarte muy
bien en aprender que sucede con su todo su cuerpo cada vez que le chupas la verga.
Si no te gusta chupar y has intentado aprender a que te guste y todavía no lo logras,
no te rindas. Quizá te guste más con el tiempo. Es como en todo, cuestión de práctica.
Muchas mujeres nos mojamos y tenemos orgasmos dando una deliciosa mamada, claro,
nos deja listas para seguir en el juego erótico que iniciamos.
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Glosario de términos usados en este texto:
Pija: verga, pene, pito.
Vulva: vagina, conejito, panocha.
Eva Yolanda Jiménez Gallardo: Licenciada en Ciencias de la Comunicación, Locutora y productora del
programa “Cuéntale a la Yola” que se transmite actualmente en www.RadioNocturna.com lunes 11pm (TC) /
9pm (TP). Programa donde se da lectura a relatos eróticos, anécdotas, poemas y fantasías sexuales.
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