REGLAS ELEMENTALES Y NECESARIAS PARA UNA BUENA Y EFECTIVA DEFENSA PERSONAL.

1. REGLAS ELEMENTALES Y NECESARIAS PARA UNA BUENA
Y EFECTIVA DEFENSA PERSONAL.
En general, todos los sistemas antiguos de lucha eran efectivos tras comprobarse y adaptarse
en numerosas batallas y combates, pero hoy día, el que un sistema sea efectivo o no, depende
de quien lo practique.
Desde tiempos inmemorables la defensa personal ha buscado y basado su eficacia en objetivos
muy concretos, y a pesar del tiempo y los muchos cambios de la sociedad, tales preceptos u
objetivos continúan siendo los mismos; simplicidad, rapidez y energía.
Como simplicidad entendemos: Que las técnicas sean fáciles o sencillas y de acuerdo a
nuestros conocimientos, práctica o habilidad.
Como rapidez entendemos: El ser capaces de encadenar nuestros movimientos con la mayor
velocidad posible, usando el factor sorpresa y buscando siempre el camino o trayecto más
directo hacia el objetivo, sin adoptar posturas preliminares y teniendo en cuenta que la
retracción tras el ataque, debe ser mucho más rápida que la penetración de ataque. Ser lento
de reacción en una lucha o pelea es tener amplias posibilidades de salir herido o lastimado.
Como energía entendemos: El saber utilizar nuestra fuerza y la del contrario en nuestro
beneficio, debiéndose fomentar diversos tipos de prácticas para desarrollar y ampliar
nuestras habilidades, tales como; coordinación, potencia, resistencia, intención, velocidad,
técnica precisa, sexo y realidad.
Coordinación, es el entrenamiento de la habilidad para poder pasar de una a otra técnica sin
necesidad de pensar, con el desarrollo muscular necesario a través de la práctica, y mediante
múltiples repeticiones de las técnicas para lograr crear las necesarias conexiones entre el
sistema nervioso y mental o del subconsciente.
» Potencia, es la habilidad de proyectar nuestra fuerza con el movimiento adecuado y la
rapidez o velocidad.
» Resistencia, es la habilidad que se desarrolla a través del trabajo duro y continuo,
excediendo el límite personal a través de la intensidad, frecuencia y duración del ejercicio.
“El esfuerzo comienza, donde lo habitual acaba”.
» Intención, es como entendemos o definimos la actitud, la disposición de ánimo y la postura
corporal.
» Velocidad de reacción y ataque, es la habilidad de generar un movimiento de nuestro cuerpo
en el tiempo más corto y rápido posible, ya sea simple o complejo, en el entrenamiento
puedes fallar, en la calle no, porque va en ello implícita tu integridad física. “Es mejor varias
gotas de sudor en el entrenamiento, que una sola gota de sangre en una pelea” .
» Sexo. Que existen diferencias biológicas entre hombre y mujer es algo tangible, como puede
ser la fuerza, estatura, peso, agresividad, resistencia, etc., por ello, una técnica realizada por
uno puede no ser efectiva para otro, como por ejemplo una palanca o una proyección, o un
simple golpe. La gran mayoría de las mujeres no practica ningún tipo de defensa personal, y
eso que suelen ser las mayores víctimas de los diferentes géneros de violencia. Ello es por
razones como timidez, vergüenza, miedo, por falta de costumbre, o deseo de hacer otro tipo

2. de ejercicio que no sea el de fomentar su belleza y salud, por ideas preconcebidas como la de
que la mujer es el sexo débil o que ello, sólo es cosa de hombres, etc.
I-N° 5. El aprendizaje de las técnicas y I-N° 6. En la ejecución de cada técnica se
tácticas deben ser de forma progresiva, debe realizar un análisis de factibilidad de
siempre adaptándose a la realidad.
su aplicación y validez.
» Realidad. El entrenamiento de nuestras habilidades para la perfecta defensa personal debe
ser lo más real posible, con la ropa de calle habitual o el uniforme de trabajo, tratando de
crear o imitar posibles y diferentes métodos de confrontación, llevándola al máximo realismo,
es decir nuestro cuerpo no reacciona igual ante la amenaza de un cuchillo de goma o de
madera que ante uno real. Es el momento de hacer examen de conciencia, de mirar a nuestro
alrededor y en nuestro interior para “saber” qué es lo que podemos usar para la defensa de
nuestra integridad y para ello debemos tener presente la siguiente guía, desarrollada por los
antiguos Maestros en sus luchas a vida o muerte:
A.- Evita la confrontación usando la distancia donde no llegue el contacto y escapa.
B.- Busca objetos que puedan servir de obstáculos como una mesa, sillas, coche, árboles,
papelera, etc., y escapa.
C.- Utiliza cualquier objeto, utensilio o herramienta que haya a tu alrededor para defenderte,
no importa que sea un palo, una piedra, monedas, una revista, una botella, un bolso, un lápiz,
un paraguas, un peine, un manojo de llaves, etc., úsalos con rapidez y precisión y huye.
D.- Una vez que se ha realizado el contacto, se debe buscar el momento adecuado para
realizar la defensa, para ello, debemos sorprender o distraer al agresor, empleando todo el
cuerpo con patadas, desplazamientos, golpes de manos, codos, cabeza, rodillas, etc., agarres,
palancas, proyecciones, empujones, etc. Utilizando todo lo que tengamos a nuestro alcance y
que este en consonancia con nuestras habilidades, enfocando la defensa y contraataque en las
zonas sensibles y áreas vitales con fuerza, seguridad, rapidez, y escapa.
Habitualmente y debido al estilo o método que practiquemos buscaremos llevar la
confrontación a la distancia que dominemos, pero tendremos cuidado de acercarnos o tener
contacto con el adversario, ya que éste podría llevar algunas armas ocultas como un cuchillo,
pistola u otro objeto punzante. Así mismo, no es lo mismo luchar uno contra uno, que uno
contra varios. Debemos evitar el caer al suelo ya que estaríamos en gran desventaja, y no
olvidemos mirar además del agresor, a nuestro alrededor para evitar el factor riesgo o como
dice un viejo proverbio chino:
Autor. Lcdo. Edison Mendoza: Sensei.
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3. “Si miras tan sólo un árbol, perderás la inmensidad del bosque”. De todo lo dicho, toma lo
que a ti te sirva y adáptalo a tu persona, se cómo el agua que se adapta a las circunstancias,
o como el mimbre que con unas buenas raíces, puede ser doblado con el viento, pero muy
difícilmente arrancado.
La defensa personal como su nombre indica, es el modo o método de defender nuestra propia
vida y la de nuestro entorno, con técnicas de artes marciales completamente definidas.
Para alcanzar la perfección y el dominio necesario, se necesita de un largo y duro periodo de
trabajo, es indispensable que estas técnicas, aún después de haberlas aprendido, se sigan
practicando con el fin de adquirir un mayor dominio de lo aprendido, porque como dice un
viejo proverbio chino: “Un buen cuchillo por muy bien afilado que esté, si no se usa, con el
tiempo se embota”. En España el genial Miguel de Cervantes, militar y escritor de la
mundialmente conocida novela de caballería, Don Quijote de la Mancha, también dejo
escrito: “El hombre bien preparado para la lucha, ya ha obtenido la mitad del triunfo” .
Tal esfuerzo simplemente ayuda a las artes marciales en general. Si cualquiera de los
aspectos del Karate o Aikido sirve para sobre vivir en nuestra sociedad actual, donde todo lo
concerniente a nuestro bienestar tiene prioridad, el Karate en sus diferentes estilos no debe
ser un “arte secreto”. Si los Maestros de artes marciales pueden mostrarnos lo mejor de sus
estilos y conocimientos, y si la gente puede ver entre la mistificada, llamativa o espectacular
propaganda de los que carecen de suficientes conocimientos, entonces el Karate o Aikido será
un “arte vivo”, el cual merece la pena preservar.
Hay cuatro recursos o elementos utilizados en las artes de lucha o combate, así como en el
arte de la defensa propia, para conseguir y desarrollar los propósitos de pelea efectiva y
eficiente, estos elementos están divididos según el rango de combate o situación.
1.- El elemento uno se refiere al aspecto de contacto del cuerpo de ya sea rango fuera de su
espacio personal (distancia media o larga) o dentro de su espacio personal (distancia corta).
Este elemento de ataque físico o defensa, incluye técnicas de golpear con nuestras
extremidades, puños o brazos, y piernas o patadas, o un arma, así como empujar o chocar, o
presionar cualquier parte del cuerpo para tirar. Este método rápido y poderoso de combate es
sumamente dañino y explosivo para el adversario y puede causar un serio dolor o lesión
física.
I-N° 7. La ejecución de una técnica dependerá I-N° 8. No te
de lo queremos hacer con el agresor.
confrontación real.
distraigas
en
una
2.- El segundo elemento se basa en agarrar firmemente al adversario, método de lucha para
lograr un control físico o infligir gran dolor, atacando y destruyendo al adversario con
técnicas de barrido o de balanceo, algunas de tales técnicas son, lanzarse sobre el adversario,
Autor. Lcdo. Edison Mendoza: Sensei.
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4. empujar o chocar y, proyecciones los barridos, las intercepciones, coger al adversario por
diferentes zonas del cuerpo, y proyecciones con el cuerpo.
Aunque estas técnicas son altamente útiles, no son suficientes.
3.- Ningún practicante es verdaderamente experto sin el tercer elemento, o agarrar y
controlar a su adversario. En la defensa personal hay que especializarse en este aspecto de
agarrar firmemente, con técnicas específicamente diseñadas para controlar o cerrar la
circulación sanguínea, nerviosa, así como dislocar las articulaciones y huesos, separa
músculos y tendones de sus adversarios o presionar ciertas áreas vitales. La habilidad de la
captura o control, es empleada para poner término definitivo a un combate.
I-N° 9. En una confrontación real no hay I-N° 10. En el menor tiempo posible tu agresor
tiempo para jugar con tu agresor.
debe estar deshabilitado.
4.- Los puntos vitales. Este último recurso es de difícil acceso para el estudiante, soliendo
permanecer en secreto y pasando tan sólo de Maestro a Maestro, ya que su aplicación sin el
debido conocimiento puede ser mortal o muy dañina para quien recibe tales técnicas de
presión o golpe.
No hay ninguna manera de practicar estos elementos por separado, ya que el combate en la
vida real no puede ser verdaderamente simulado ni ensayado. Los verdaderos artistas
marciales utilizan todos los elementos presentados, pudiendo fluir de un elemento a otro, pero
nunca en la misma forma, nunca con el mismo movimiento. El truco es lograrlo con astucia,
dañando al atacante, pero sin causar un daño físico excesivo.
Cuando uno se enfrenta en combate como última alternativa, los tres primeros recursos son a
menudo aplicados juntos, y no se pueden separar.
Además de todo lo anterior, añadiremos el aspecto de la sorpresa, realizando algo que cause
sorpresa en el adversario e iremos en busca de aberturas dentro de la defensa del adversario.
Esperando siempre el utilizar sólo la fuerza necesaria. La fuerza excesiva produce siempre
consecuencias como la encarcelación, muerte o lesión. ¿Por qué causar tanto daño cuando no
es necesario?
“Desviar o interceptar la energía del oponente, es la esencia en la verdadera maestría de
cualquier arte marcial”.
Cualquier persona puede romper huesos, cortar tendones o dislocar articulaciones, pero dejar
incapacitado a su adversario con una técnica simple de mano o una secuencia específica de
golpes certeros que causen daño en el adversario, suficiente para que tenga que ser visitado
Autor. Lcdo. Edison Mendoza: Sensei.
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5. por un médico, requiere un largo tiempo de aprendizaje antes de llegar a ser un maestro
capacitado en la defensa personal.
Si se aprenden estas técnicas de un libro, video, o de un practicante o maestro no calificado,
entonces el estudiante corre el riesgo de matar o dañar de forma permanente a aquellos sobre
los que se usen tales técnicas avanzadas, incluso durante la práctica del entrenamiento.
Los ancestros y grandes Maestros de este arte desarrollaron excelentes técnicas de agarre y
control con presión a puntos vitales, que pone en plena acción las funciones de cabeza,
hombros, codos, manos, torso, caderas, rodillas y pies, y se compone de diez habilidades o
apartados bien definidos:
1.- Conocimiento del lugar exacto y tipo de presión o ataque a los puntos vitales.
2.- Ataques con golpe o presión a la cara y/o la cabeza.
3.- Golpear o agarrar la entrepierna.
4.- Golpear o presionar riñones, cadera, cintura.
5.- Lucha cuerpo a cuerpo, agarre y control con giro de articulaciones.
6.- Lanzar, barrer, tirar, proyectar.
7.- Enrollar, envolver, girar, rodar.
8.- Saltar, brincar en las ocho direcciones.
9.- Esquivar, evitar, desviar.
10.- Mover el cuerpo a los lados.
I-N° 11. Si quieres tener éxito en tu técnica I-N° 12. Procura acertarle a tu agresor
frente a tu agresor utiliza siempre los una técnica certera en una extremidad
fundamentos técnicos necesarios y reales.
sensible que cause mucho dolor.
Se puede usar este método de defensa personal para evitar o repeler agresiones, usando la
habilidad, la destreza, la flexibilidad y la rapidez para golpear ingeniosamente y con
precisión los puntos o zonas débiles y frágiles del adversario, teniendo como meta el llevar al
adversario o agresor hasta el colapso o desmayo.
Para ello, en la lucha cuerpo a cuerpo se aprovecha el centro de gravedad del cuerpo, con el
peso centrado se traslada el movimiento principal o la fuerza, usando los principios y teorías
de la defensa personal, para eludir el ataque principal del agresor al tiempo que se ataca con
golpes, agarres, controles, desequilibrios, etc., a los puntos débiles o vulnerables del cuerpo
de nuestro oponente.
Autor. Lcdo. Edison Mendoza: Sensei.
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6. I-N° 13. Vencer al agresor puede ser más fácil de I-N° 14. Todos somos capaces de vencer
lo aparentaba, o más difícil de lo que creías, si se a otro, paro para eso hay que estar bien
inició no hay marcha atrás.
entrenado para lograrlo.
De este modo, una persona pequeña o débil, puede vencer a otra más grande y fuerte,
valiéndose de los propios puntos fuertes, contra los puntos débiles del enemigo, es decir, por
medio de una hábil técnica, utilizamos cuatro gramos de fuerza para destruir la fuerza de mil
Kg. Apresando y derrotando al adversario, esta es la habilidad del experto en defensa
personal para controlar al oponente.
Es muy importante el conocer el lugar exacto de los puntos vitales, la presión adecuada en
cada punto y el modo correcto de ejecutar la técnica, la dirección, el giro, etc. Los pasos, la
fuerza y los desplazamientos.
Estas técnicas son un método muy útil en combate real, para ello se usan los canales de
Acupuntura y los puntos vitales, así como las articulaciones y otras zonas especiales del ser
humano, la habilidad corporal de cada persona, la mecánica corporal y el centro de gravedad
son importantes para agarrar al contrario, de esta manera, el pequeño puede derrotar al
grande y el débil al fuerte. La defensa personal es un método de lucha con muy buenos
resultados en todo tipo de pelea.
EL ENTRENAMIENTO DEL CUERPO FISICO: El practicante de artes marciales debe
convertir su cuerpo en un arma, sus puños deben ser como mazas, sus manos como sables y
sus brazos y piernas como palos o garrotes, generando con ello armas naturales en las que
podrá confiar al cien por ciento, ya que forman parte de su anatomía y siempre las lleva
consigo.
Por lo tanto, es imprescindible, el tener un físico preparado y fuerte, es decir, en situación
óptima, ello implica además que debe conocer su cuerpo, la anatomía del cuerpo humano y
sus zonas débiles, para así poder tener un conocimiento elemental de los puntos fuertes y
vulnerables del cuerpo humano y poder atacarlos o defenderlos cuando la situación así lo
amerite.
I-N° 15. Para solucionar una arremetida del
agresor tenemos un amplio contingente de
técnicas y tácticas letales, prepárate para
sobrevivir la vida es complicada.
I-N° 16. Todas las dudas tienen que ser
absorbidas positivamente por tu Sensei, si no
estás plenamente convencido insiste hasta que
encuentres la respuesta lógica.
Autor. Lcdo. Edison Mendoza: Sensei.
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7. EL ENTRENAMIENTO DE NUESTRA MENTE O INTELECTO: Nuestra mente o intelecto
es de suma importancia para poder salir ilesos de ciertas situaciones. Con la mente debemos
evaluar la situación, si sabemos evaluar una situación hostil, y conocemos los pasos a seguir,
podremos prever con mayor efectividad los posibles hechos, y por lo tanto evitarlos o
controlarlos, para ello nuestra mente debe seguir un estricto entrenamiento y aprendizaje.
La evaluación de una situación es un proceso sencillo que tan sólo conlleva tres pasos, que
consisten en encontrar las denominadas zonas de peligro, las áreas de responsabilidad y el
punto de enfoque. Las zonas de peligro son todos aquellos lugares que están en el ambiente y
que nos esconden posibles ataques, como una chaqueta, un bolso, cualquier cosa que
obstaculice nuestra visión de sus manos y piernas. Las áreas de responsabilidad son los
puntos donde puede originarse un ataque, como cabeza, manos, codos, rodillas y pies.
El punto de enfoque es el punto de donde viene el ataque, es decir, si el agresor nos lanza una
patada, el punto de enfoque serán sus pies o piernas.
Con este simple proceso mental podemos anticiparnos a cualquier posible situación, ya que
las categorizamos en todo momento, ubicamos las áreas de donde puede surgir el peligro y
tratamos de evitarlas o las enfocamos con precaución y cuidado.
EL ENTRENAMIENTO DEL CORAZÓN O EMOCIÓN: Con las diversas fases del
entrenamiento se busca también darle al estudiante la firmeza emocional para forjar el
carácter, poder soportar los nervios o el estrés generado por la situación y llegar así en todo
momento al control de sí mismo y de la situación o peligro.
Aprendiendo además a contrarrestar la violencia, no con más violencia, sino con fuerza y
firmeza, ya que la violencia es un estado emocional incontrolable, pero no así la fuerza, que
si se puede controlar. Por lo tanto, al someternos a simulacros de peligro, nos exponemos
a las emociones y sentimientos que tendremos en situaciones reales, lo que nos ayudará a no
quedarnos bloqueados, más bien al contrario, aprenderemos a controlarlas, a utilizar dichas
emociones para polarizarlas y revertirlas en contra de los agresores.
Fuente: Internet. Compilador: Lcdo. Sensei Edison Mendoza.
Autor. Lcdo. Edison Mendoza: Sensei.
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