3. ALTERACIONES INFLAMATORIAS
DEL PÁRPADO
• Conocidas como blefaritis anteriores o posteriores.
• Inflamación crónica del borde palpebral que suele acompañarse de conjuntivitis
(blefaroconjuntivitis).
• Existen dos formas, eccematosa y ulcerosa, ambas con presencia de escamas,
hiperemia del borde palpebral, madarosis (pérdida de pestañas) y a veces triquiasis
(crecimiento de las pestañas en dirección al globo ocular, irritando la córnea y la
conjuntiva).
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5. ALTERACIONES INFLAMATORIAS
DEL PÁRPADO
• Están predispuestos a padecerla los pacientes con acné rosácea y con dermatitis
atópica y seborreica.
• Pueden ser anteriores (glándulas de Zeiss y de MolI) o posteriores (glándulas de
Meibomio).
• En los folículos es posible encontrar el parásito Demodex folliculorum.
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7. BLEFARITIS ANTERIORES
Eccematosa ó Seborreica.
• Asociada a dermatitis seborreica. Se caracteriza por la presencia de escamas
blanquecinas englobando las raíces de las pestañas.
• Causa madarosis temporal y se asocia a conjuntivitis crónica.
• Mejora con calor local, limpieza palpebral y corticoides, pero recidiva a menudo.
8. BLEFARITIS ANTERIORES
Eccematosa ó Seborreica: Signos
• Bordes palpebrales anteriores grasos e hiperémicos, con las pestañas pegadas
entre sí.
• Las escamas son blandas y se localizan en cualquier zona del margen palpebral y
en las pestañas.
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10. BLEFARITIS ANTERIORES
Ulcerosa o Estafilocócica.
• Es la inflamación supurada, aguda o crónica, de los folículos de las pestañas y de
sus glándulas asociadas de Zeiss y de Moll.
• Están predispuestos los pacientes con dermatitis atópica.
• Se trata mediante calor local, limpieza de las secreciones con solución espumosa
de pH neutro y con antibióticos tópicos.
11. BLEFARITIS ANTERIORES
Ulcerosa o Estafilocócica: Signos
• Escamas duras y costras localizadas principalmente alrededor de las bases de las
pestañas (collaretes).
• Hiperemia conjuntival crónica.
• Los casos de larga duración pueden presentar cicatrización y muescas
(queratosis) en el borde palpebral, madarosis, triquiasis y poliosis.
• Provoca síndrome de ojo seco.
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13. BLEFARITIS POSTERIORES
• Secreción excesiva y anormal de la glándula de Meibomio.
• Las blefaritis posteriores aparecen en pacientes con acné rosácea y en asociación
con blefaritis anterior eccematosa.
• Suelen mostrar hipersecreción lipídica y quistes sebáceos (chalazión).
14. BLEFARITIS POSTERIORES: SIGNOS
• Presencia de glóbulos lipídicos en los orificios de la glándula de Meibomio
• Supuración o taponamiento de los orificios de las glándulas de Meibomio
• La presión sobre el borde palpebral provoca la salida de líquido,
• Puede acumularse espuma en los bordes palpebrales o en los cantos internos.
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16. BLEFARITIS POSTERIORES: TRATAMIENTO
• Higiene palpebral y compresas calientes
• Masaje palpebral para que se secreten los lípidos acumulados.
• Las tetraciclinas sistémicas son la base del tratamiento
• Doxiciclina en dosis de 100 mg dos veces al día durante una semana y, luego,
cada día durante 6 a 12 semanas.
• Eritromicina en dosis de 250 mg/día o dos veces al día; puede usarse en los
niños.
• Tópico: antibióticos, corticoides y sustitutos lagrimales .
17. ORZUELO
• Infección estafilocócica aguda de las glándulas de Zeiss o de Moll (externo) o
Meibomio (interno).
• Tiene lugar una inflamación local que evoluciona a la formación de un absceso,
que puede drenar a la piel o a la conjuntiva tarsal espontáneamente.
• Se trata con compresas calientes, antibióticos y antiinflamatorios locales y
drenaje quirúrgico, si es preciso.
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19. CHALAZIÓN
• Inflamación granulomatosa crónica de las glándulas de Meibomio, con retención de
secreciones.
• Se palpa un nódulo duro situado en el tarso, no desplazable e indoloro a la presión.
• Puede abocar a la piel o a la conjuntiva. A veces se infecta, dando lugar a inflamación
supurada.
• El tratamiento consiste en la inyección de corticoides intralesionales o cirugía, si no
se resuelve.
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21. PINGUÉCULA
• Lesión degenerativa, bilateral,
yuxtalímbica, redondeada, amarillenta,
elevada, situada más frecuentemente en la
conjuntiva nasal.
• A veces se inflama. Su tratamiento se basa
en protección solar con gafas con filtro de
rayos UVA, lubricación con lágrimas
artificiales.
• Si no mejora, se plantea extirpación
quirúrgica (no siempre recomendado)
22. PTERIGIÓN
• Pliegue triangular de la conjuntiva bulbar que avanza sobre la córnea,
generalmente en el lado nasal, pudiendo llegar hasta el área pupilar.
• Se consideran factores de riesgo la exposición a la luz ultravioleta, o cualquier
otro irritante crónico y la sequedad ocular.
• Provoca un astigmatismo progresivo, y es posible que afecte a la visión, si
alcanza el área pupilar.
• Da lugar a una irritación crónica.
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24. PTERIGIÓN
• El tratamiento médico se basa en lubricación con lágrimas artificiales, protección
solar con gafas con filtro de rayos UVA.
• Si persiste la inflamación y las molestias, el pterigión alcanza el eje visual o produce
un astigmatismo importante, se planteará tratamiento quirúrgico.
• El principal problema es la recidiva. En aquéllos con bajo riesgo de recidiva, podría
estar indicada la extirpación simple.
• Sin embargo, si el riesgo de recidiva es alto, es aconsejable aplicar antimitóticos sobre
el lecho escleral (mitomicina o 5FU) o bien realizar un autotrasplante de conjuntiva.
25. DACRIOCISTITIS DEL RECIÉN NACIDO
• Es la infección del saco lagrimal por imperforación del conducto lacrimonasal.
• Se produce epífora y episodios recidivantes de tumefacción y enrojecimiento en
la zona del saco, además de supuración por los puntos lagrimales.
• Se trata mediante antibiótico y oral.
26. DACRIOCISTITIS DEL RECIÉN NACIDO
• En el 90% de los casos, esta imperforación
se resuelve espontáneamente,
• En principio, se hacen masajes en el saco
varias veces al día.
• Si no se resuelve y una vez controlado el
proceso infeccioso, es preciso recurrir al
sondaje de las vías.
27. DACRIOCISTITIS DEL ADULTO
• La infección del saco lagrimal suele ser secundaria a la obstrucción del conducto
nasolagrimal.
• Puede ser aguda o crónica y habitualmente está causada por estafilococos.
28. DACRIOCISTITIS AGUDA
• La presentación consiste en dolor de
inicio subagudo en el área del canto
medial, asociado con epífora.
• Tumefacción muy sensible, roja y a
tensión en el canto medial, que puede
asociarse con celulitis preseptal.
• Pueden formarse abscesos.
29. DACRIOCISTITIS AGUDA: TRATAMIENTO
• El tratamiento inicial incluye la
aplicación de compresas calientes y
antibióticos orales, como
amoxicilina-ácido clavulánico.
• No se debe realizar irrigación ni
sondaje.
• Incisión y drenaje. Puede
considerarse si se acumula pus y en
un absceso. Sin embargo, esto tiene
el riesgo de desarrollar una fístula
lagrimal.
30. DACRIOCISTITIS AGUDA: TRATAMIENTO
• La dacriocistorrinostomía (DCR)
suele ser necesaria después de que la
infección aguda se ha controlado.
• La cirugía no debe retrasarse en
presencia de epífora persistente por
el riesgo de infección recurrente.
31. DACRIOCISTITIS CRÓNICA
• Se presenta con epífora, que puede asociarse con una conjuntivitis unilateral
crónica o recurrente.
• Tumefacción indolora en el canto interno que está causada por un mucocele
• Puede que no haya una tumefacción evidente, aunque la presión sobre el saco
suele dar lugar al reflujo de material mucopurulento }
• El tratamiento consiste en DCR.
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33. CELULITIS PRESEPTAL
• La celulitis preseptal es una infección de los tejidos subcutáneos por delante del
tabique orbitario. Puede producir una progresión rápida a celulitis orbitaria.
• Causas:
a. Traumatismo cutáneo, como una laceración o la picadura de un insecto.
b. Diseminación de la infección local, como un orzuelo agudo, dacriocistitis o
sinusitis.
c. A partir de una infección a distancia de las vías respiratorias superiores o del
oído medio, por diseminación hematógena.
34. CELULITIS PRESEPTAL
• Edema periorbitario con párpado doloroso y enrojecido.
• No hay proptosis y quemosis; la agudeza visual, las reacciones pupilares y la
motilidad ocular están inalteradas.
• La TC muestra opacificación anterior al tabique orbitario.
• El tratamiento se realiza con amoxicilina-ácido clavulánico por vía oral 500/125
mg cada 8 h.
• La infección grave puede precisar antibióticos por vía intravenosa
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36. CELULITIS ORBITARIA (POSTSEPTAL)
• Infección con riesgo vital de las partes blandas por detrás del tabique orbitario.
• Puede aparecer a cualquier edad, pero es más habitual en los niños.
• Los microorganismos causales más frecuentes son Streptococcus pneumoniae, S.
aureus, S. pyogenes y Haemophilus influenzae.
37. CELULITIS ORBITARIA: ETIOLOGÍA
• Habitualmente, es secundaria a sinusitis etmoidal.
• Extensión de celulitis preseptal a través del tabique orbitario.
• Diseminación local a partir de dacriocistitis, infecciones mediofaciales o dentales.
• Diseminación hematógena.
• La postraumática se produce antes de las 72 h de una lesión.
• La posquirúrgica puede ser una complicación de la cirugía lagrimal u orbitaria.
38. CELULITIS ORBITARIA: CUADRO CLÍNICO
• Inicio rápido de malestar grave, fiebre, dolor y afectación de la visión.
• Edema palpebral con enrojecimiento, dolor y calor.
• La proptosis, que a menudo está enmascarada por la tumefacción palpebral,
suele ser lateral y mirando hacia abajo.
• Oftalmoplejía dolorosa y quemosis conjuntival.
• La TC muestra opacificación posterior al tabique orbitario.
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40. CELULITIS ORBITARIA COMPLICACIONES
• Las complicaciones oculares consisten en queratopatía por exposición, aumento
de la presión intraocular, oclusión de la arteria o la vena centrales de la retina,
endoftalmitis y neuropatía óptica.
• Las complicaciones intracraneales son infrecuentes pero muy graves e incluyen
meningitis, absceso cerebral y trombosis del seno cavernoso.
41. CELULITIS ORBITARIA TRATAMIENTO
• El tratamiento con antibióticos incluye ceftazidima intravenosa, con
metronidazol oral para cubrir los anaerobios.
• La vancomicina es una alternativa útil en caso de alergia a la penicilina.
• El tratamiento antibiótico se mantiene hasta que el paciente esté apirético
durante 4 días.
• Debería plantearse la intervención quirúrgica en la que se drenan los senos
infectados y las colecciones orbitarias.