2. Historia
El antecedente más antiguo de la práctica de
la autopsia data en 1282, cuando un médico
abrió numerosos cadáveres en busca de la
causa de una gran epidemia en peste, en
Cremona, Italia.
En América la primera autopsia la realizo el
cirujano Juan Camacho en la isla La
Española, el 18 de julio de 1533, a solicitud
del clérigo para aclarar si en los cuerpos de
dos gemelas siamesas que murieron a la
semana de nacidas, había una o dos almas.
3. Las autopsias pueden clasificarse de muchas formas.
Por la técnica utilizada pueden dividirse en completas y
parciales. Por ejemplo en el abordaje médico legal de
los desastres masivos, cuando hay una gran cantidad de
víctimas por una catástrofe natural, como un terremoto,
un huracán, una inundación, un deslizamiento o un
tsunami, basta realizar un examen externo (inspección)
para poder establecer las causas de muerte.
Asimismo, de acuerdo con el grupo etario, la autopsia
puede clasificarse en pediátrica, que incluye la neonatal
o perinatal e idealmente debe ser realizada por un
patólogo pediátrico; y la autopsia de adultos.
Clasificaciòn de
autopsias
4. Autopsia Clinica
La autopsia hospitalaria persigue objetivos
eminentemente académicos, como la
enseñanza de la técnica adecuada, la
investigación de enfermedades, la
correlación clínico patológica y el control de
calidad de procedimientos y diagnósticos
médicos; así como otros objetivos no
menos importantes de índole
epidemiológica y científica.
5. Autopsia Mèdico-Legal
Aplicando la definición general de la Medicina Legal, como una especialidad
médica que ayuda a las Autoridades Judiciales a administrar justicia se puede
decir que la autopsia médico legal es el examen de un cadáver que tiene como fin
recolectar pruebas, establecer diagnósticos e interpretar hallazgos médicos que
ayuden a esclarecerle a los jueces, fiscales, defensores, abogados litigantes y por
supuesto a las partes involucradas en un proceso, en primer lugar, si existe o no
un delito que perseguir; y en segundo lugar, de haberlo, aportar todo lo que esté
al alcance del especialista, desde la interpretación elemental del lenguaje técnico
hasta diagnósticos basados en pruebas histopatológicas, neuropatológicas o
moleculares, que permitan establecer con claridad los objetivos iniciales del
procedimiento: causa, manera, identificación e intervalo post mórtem,
dependiendo de las necesidades de cada caso.
6. Las principales son:
1. Técnica de Virchow: los órganos son removidos de uno en uno. Este método es el que ha sido
más extensamente utilizado, frecuentemente con algunas modificaciones. Originalmente, el primer
paso era exponer la cavidad craneal y, desde la espalda, la médula espinal, seguido de los órganos
torácicos, cervicales y abdominales, en ese orden.
2. Técnica de Rokitansky: se caracteriza por la disección in situ, en parte combinada con la
remoción de órganos en bloque. Sólo hay descripciones indirectas disponibles. Este nombre se ha
utilizado erróneamente por muchos patólogos para designar las técnicas de Ghon o Letulle.
3. Técnica de Ghon: los órganos torácicos, cervicales, abdominales y el aparato urogenital son
removidos en bloques. Actualmente modificaciones de esta técnica tienen un uso extenso.
4. Técnica de Letulle: los órganos torácicos, cervicales, abdominales y pélvicos son removidos en
un solo bloque (“en masa”) y subsecuentemente disecados en bloques. Esta técnica requiere más
experiencia que los otros métodos, pero tiene la gran ventaja de que el cuerpo puede estar
disponible para los servicios fúnebres en menos de treinta minutos sin apresurar la disección. Una
desventaja es que el paquete visceral es difícil de manejar.
Tècnicas de
Autopsia
7. Examen externo:
Incluye:
Descripción general del cuerpo. Descripción topográfica. Además, de la
descripción por segmentos se incluye la descripción de lesiones y de los
signos de intervención médica.
Descripción de fenómenos cadavéricos. Los Hallazgos del examen
externo deben consignarse en el protocolo de necropsia y
documentarse mediante diagramas, fotografías o videos, si dispone de
estos recursos.
Tècnicas de
Autopsia
8. Descripción general del cuerpo.
Incluye:
Las características físicas básicas: sexo, talla, peso aproximado,
complexión, patrón racial aparente, color de la piel, edad aparente
(mencionar si no coincide con la cronológica y aclarar cuando se
requiera de estudios complementarios para estimarla).
Aspecto general o apariencia, que incluye la descripción del estado
nutricional, de aseo y de cuidado corporal y de las prendas de vestir.
Las señales particulares: cicatrices, deformidades, tatuajes, ausencias
de partes corporales, etc.
Es importante mencionar de manera general la presencia o ausencia de
signos externos de trauma.
Tècnicas de
Autopsia
9. Descripción topográfica. Comprende:
El examen sistemático céfalo-caudal de los segmentos corporales según
técnicas usuales y registrar si los hallazgos son normales o si el cuerpo
presenta alteraciones.
Describir si hay evidencia de Intervención médica. Este dato se debe
documentar en un ítem específico o en la descripción de cada uno de los
segmentos corporales, diferenciándolos específicamente de lesiones por
trauma y señalando si la intervención médica alteró de alguna manera la
evidencia previa.
Descripción de lesiones. Describirlas según el tipo de caso, teniendo en
cuenta además la información previa disponible y las circunstancias
particulares de cada caso.
Registrar la presencia o ausencia de lesiones diferentes a aquellas que
explican directamente la causa de muerte pero que pueden orientar sobre las
circunstancias en que sucedieron los hechos.
Tècnicas de
Autopsia
10. Descripción de los fenómenos cadavéricos.
Se debe hacer con el detalle y la precisión requerida según el estado del
cuerpo; si se dispone de termómetro es útil precisar la temperatura corporal y
la hora en que fue tomada, ya sea en la escena, al ingresar el cadáver, al
inicio o durante la autopsia.
En cuanto a la estimación de tiempo de muerte es importante aclarar que
técnicamente no es adecuado basarse únicamente en los hallazgos de la
autopsia sino que estos se deben interpretar en correlación con:
Las circunstancias de la muerte.
Las condiciones de hallazgo del cuerpo.
La ventana de muerte.
Se debe tomar en cuenta también la información obtenida mediante
investigación en el momento de la diligencia de inspección policial, o en
fechas posteriores.
Tècnicas de
Autopsia
11. Cavidad craneana: una autopsia completa requiere siempre la exploración
del cráneo. Se debe explorar por planos revisando el espacio subgaleal y
epicraneano. La apertura del cráneo debe ser amplia para permitir la
extracción cuidadosa del encéfalo (registrar si la calota se retira con segueta
o con sierra). Se recomienda levantar la musculatura temporal y la membrana
epicraneana para detectar fracturas que comprometen solo la tabla externa.
Se debe retirar totalmente la duramadre de la bóveda y de la base. En la piel
se utiliza la incisión intermastoidea, pasando por el vértice cefálico.
Técnicas de apertura del cadáver.
12. Cavidades torácica y abdomino-pélvica: se recomienda realizar la incisión
anterior en “Y” que es más estética, permite visualizar las estructuras de la
parte posterior de la cavidad oral y disecar el cuello. Sin embargo, el tipo de
incisión puede elegirse a criterio del médico forense que realiza la autopsia
basado en su experiencia y en la complejidad y contexto de cada caso. Se
debe registrar la separación y retiro del peto esternal, el examen in situ de las
cavidades y la extracción del bloque visceral o de los órganos
individualizados, según la técnica utilizada.
Técnicas de apertura del cadáver.
13. Alzamiento o levantamiento facial: es el examen minucioso de los tejidos
blandos y duros que conforman el sistema estomatognático, las estructuras
del cráneo y macizo facial, con el fin de buscar evidencias físicas y poder
documentar la presencia de lesiones en casos sospechosos de:
Traumas craneoencefálico y facial.
Asfixia por sofocación.
Maltrato infantil.
Muertes asociadas a delito sexual.
Violación de los derechos humanos.
Estimación de la edad.
Identificación de cadáveres.
Responsabilidad profesional y otros.
Exploraciones especiales.
Se debe realizar y registrar las incisiones especiales que se requieran
según el caso:
14. Incisión en “V” y exploración anterior, por planos, del cuello. No debe obviarse
en casos en los que existen lesiones cervicales o en donde se sospecha
estrangulación de la víctima. Debe llevarse a cabo después de la evisceración
tóraco-abdominal y remoción del cerebro; esto permite que toda la sangre drene
de la región y se reduzca la posibilidad de artificios. Esta disección se realiza in
situ, documentándose y fotografiándose todas las lesiones a medida que se
descubran. Se realiza en casos sospechosos de:
Asfixia por estrangulación.
Heridas por arma blanca en el cuello.
Ahorcamiento.
Tumores de cuello.
Responsabilidad profesional.
Trauma cervical contundente.
Síndrome del latigazo cervical.
Exploraciones especiales.
Se debe realizar y registrar las incisiones especiales que se requieran
según el caso:
15. Incisión posterior en “X” para exploración, por planos, del dorso. Es
particularmente importante en casos de muertes ocurridas bajo custodia
del estado, donde se sospeche uso excesivo de fuerza, igualmente en
casos en donde se investiga maltrato infantil.
Incisión posterior para exploración de columna vertebral y extracción de la
médula espinal. Donde se sospeche traumatismo craneoencefálico con
lesión raquimedular concomitante. Extracción del bloque cervical para
examen de las arterias vertebrales: importante en lesiones por “Síndrome
de latigazo cervical”, o en traumas que ocurren en eventos de aceleración-
desaceleración.
Disección perineal: en estudios de responsabilidad profesional del campo
ginecoobstétrico y en casos donde se investiga delito sexual asociado.
Exploraciones especiales.
Se debe realizar y registrar las incisiones especiales que se requieran
según el caso:
16. Disección intestinal: es la extracción del intestino separándolo
del borde mesentérico para apertura en toda su extensión,
siempre que no esté clara la causa de muerte o cuando las
circunstancias o diagnósticos del caso lo requieran. Se
recomienda ligar el intestino a nivel del ángulo de Treitz y a
partir de allí iniciar su extracción a partir de la posición in situ.
Exploraciones especiales.
Se debe realizar y registrar las incisiones especiales que se requieran
según el caso:
17. El examen macroscópico: se parte del conocimiento y familiaridad con la normalidad para detectar las
desviaciones desde ese punto de referencia.
Incluye:
Describir y pesar los órganos con el grado de detalle requerido según el caso, con énfasis en aquellos en
los que se encuentren alteraciones que sustenten la causa de muerte y observación y registro de los
datos negativos o ausencia de cambios, de especial relieve, en un caso en particular.
Describir los cambios observados por enfermedad, trauma, signos de intervención médica y cualquier otro
cambio, inclusive si es inespecífico. En cualquier caso el corazón, los pulmones, el hígado, los riñones,
genitales, tubo digestivo y el encéfalo ameritan examen y descripción cuidadosa. La descripción de los
órganos incluye la superficie externa y la de cortes seriados.
En el examen de cavidades (oral, craneana, torácica y abdominal) se debe observar y registrar normalidad
y disposición de los órganos o presencia de colecciones (aspecto, medir la cantidad o estimarla si no
es posible una valoración exacta).
La descripción de lesiones debe seguir las recomendaciones para cada tipo de caso, pero en general se
debe mencionar la localización anatómica precisa, su forma y sus dimensiones.
Examen interno.
18. Para el examen microscópico se preservan muestras en formalina al 10% en
proporción 1:10 partes de tejido por cantidad de formol, de:
Las zonas anormales.
Los cambios por enfermedad.
Zonas alteradas por lesiones traumáticas que deban ser documentadas
histológicamente.
Las muestras de tejido se procesarán y se remitirán según se disponga la
norma.
Examen interno.