1. 4.6. PIGMENTACIÓN Y DESPIGMENTACIÓN
4.7. LA PIEL Y LA HOMEOSTASIS
4.8. LA PIEL COMO INDICADOR DE AFECCIONES LOCALES Y
SISTÉMICAS
2. Pigmentación
La melanina, la hemoglobina y el caroteno son tres
pigmentos que imparten a la piel una amplia variedad de
colores.
La tricosiderina da el color rojo al cabello y un pigmento mal
conocido llamado melanoide.
La cantidad de melanina determina que el color de la piel
varié de amarillo pálido amarrón-rojizo hasta negro, la
diferencia entre las dos formas de melanina, feomelanina (de
amarilla a roja) y eumelanina (de castana a negra), es más
evidente en el cabello.
Pigmentación significa coloración
3. En algunas personas con
predisposición genética, la melanina se
acumula en parches denominados
efélides o pecas.
Las efélides típicas son de color rojizo
o marrón y tienden a ser más visibles
en el verano que en el invierno. Con la
edad pueden desarrollarse maculas
seniles (“hepáticas”), que son
imperfecciones aplanadas que no
tienen relación alguna con el hígado.
Se parecen a las pecas y varían del
color pardo al negro. Al igual que las
pecas, las maculas seniles son el
resultado de la acumulación de
melanina.
Los melanocitos sintetizan melanina a
partir del aminoácido tirosina en
presencia de la enzima tirosinasa, la
síntesis se produce en un orgánulo
denominado melanosoma, la
exposición a la luz UV incrementa la
actividad enzimática dentro de los
melanosomas y, por ende, la
producción de melanina.
4. Tanto la cantidad como la oscuridad de la melanina aumentan por la exposición a los rayos UV,
lo cual le da a la piel un aspecto bronceado que ayuda a proteger al organismo de las
exposiciones posteriores a la radiación UV.
La melanina absorbe la radiación UV, previene el daño del DNA de las células epidérmicas y
neutraliza los radicales libres generados en la piel por los rayos UV.
La exposición de la piel a una pequeña cantidad de luz UV es en realidad necesaria para que se
inicie el proceso de síntesis de vitamina D en la piel. No obstante, la exposición repetida de la
piel a una gran cantidad de luz UV puede causar cáncer de piel.
5. DESPIGMENTACIÓN
Es una decoloración de la piel. Ciertas zonas de la piel no tienen más
melanina, el pigmento natural de la piel, la cual ha sido destruida.
La formación de melanina o melanogénesis tiene lugar
en unas pequeñas estructuras conocidas como
melanosomas que se hallan en el interior de los
melanocitos, células de la capa basal de la epidermis.
Está regulado por los rayos ultravioleta
por estímulos hormonales ((MSH)
por factores hereditarios.
MELANOGENESISDespigmentación carece coloración
6. FISIOPATOLOGÍA DE LA
DESPIGMENTACIÓN
La clave genética de la afección de despigmentación cutánea está relacionada con una mutación
genética que afecta a la actividad del receptor de la tirosina quinasa. Este fallo afecta
gravemente a la formación de la melanina o a su función fisiológica.
7. Ptriasis alba
Es una dermatitis de origen desconocido que produce inicialmente unas placas ligeramente
eritemato-descamativas que conducen a la despigmentación.
Predomina en niños de 3 a 16 años y, las placas de 0,5-2 cm, suelen ser múltiples, localizándose
principalmente en cara y en el 20% también en tronco, cuello o brazos.
8. vitiligo
Es un trastorno despigmentario adquirido, caracterizado por la pérdida progresiva de
melanocitos de la epidermis. Presenta un curso impredecible y suele ser progresivo .
Prevalencia: 0.5 a 1%.1,2 sin distingir raza o etnia.
9. La piel y la
homeostasis
El sistema tegumentario contribuye a la homeostasis a través de la
protección del cuerpo y la regulación de la temperatura corporal.
También permite captar sensaciones de placer, dolor y otros estímulos
provenientes del ambiente externo, las células llevan a cabo múltiples
funciones que ayudan a que cada sistema contribuya a la homeostasis de
todo el organismo.
En forma simultánea, todas las células comparten estructuras y funciones
clave que les permiten sobrellevar su intensa actividad, los cuatro tipos
básicos de tejidos en el cuerpo humano contribuyen a la homeostasis
mediante el cumplimiento de diversas funciones como protección, soporte,
comunicación intercelular y resistencia contra las enfermedades, entre otras.
Función sudorípara: Ligada a la termorregulación y al metabolismo
hidrosalino.
Función sebácea: El sebo producto de las glándulas sebáceas,
interviene en la lubricación de la piel y formación del manto acido, ya
que esta formado por acidos grasos libres, combinados y colesterol,
con propiedades fungicidas y germicidas.
10. La piel interviene en varios procesos metabólicos del
organismo. Almacena agua y por tanto interviene en
su regulación, aunque solo contiene un 64%, puede
almacenar otro 17.7%.
La eliminación del agua se hace por la transpiración
y por la respiración invisible a través del
funcionamiento de las glándulas sudoríparas.
La eliminación de agua varia según las condiciones
climatológicas y la situación de reposo o ejercicio del
individuo.
De la piel parten a través de terminaciones
termosensibes, reflejos rumbo al hipotálamo para el
control de la temperatura
11. Órgano de protección.
La piel es una barrera que protege al individuo de las agresiones externas merced a sus
cualidades de integridad, cohesión, elasticidad.
El manto ácido que la cubre impide el desarrollo de hongos y bacterias (esterilización
espontánea de la piel) y su flora normal impide el desarrollo de bacterias patógenas.
También por sus propiedades eléctricas, ya que tiene una carga negativa y, por tanto, permite el
paso de partículas de carga contraria y rechaza las de la misma carga.
La piel tiene una función de barrera o impermeabilidad, ya que los lípidos del epitelio se
disponen en forma de mosaico que impiden la pérdida de agua y permiten la hidratación de los
corneocitos.
12. Órgano sensorial
Su profusa inervación le hace ser el órgano receptor de
la sensibilidad por excelencia, de todo tipo: tacto,
dolor, temperatura, presión y, por tanto, también
punto de partida de reflejos que conducen también a
la protección.
Cuando una persona pierde la sensibilidad como en el
caso de la lepra, se pueden producir daños no sólo en
la piel sino en estructuras más profundas.
13. Termo regulación
La capa córnea, el sebo y el tejido celular subcutáneo son malos conductores del calor y muy buenos
aislantes para evitar pérdidas de temperatura; a la vez, la piel es sitio de fenómenos de radiación que
permiten perder calor cuando aumenta la temperatura corporal.
La piel responde al aumento de la temperatura ambiental
con aumento de la sudoración y vasodilatación.
La sangre circula como en un gran refrigerador por la piel, el
sudor al evaporarse hace bajar la temperatura de la piel y de
esa manera la sangre se enfría.
14. La piel y el metabolismo general.
La piel es el órgano que contiene más cloro, hasta 60% y regula también los
electrólitos, desechándose grandes cantidades de sodio cuando hay pérdida
de agua.
Por la piel se elimina CO2 y se absorbe oxígeno, pero en forma mínima; no es
una verdadera respiración, sino simplemente difusión de gases.
mediante el sudor se eliminan urea y creatinina como un verdadero
emuntorio limitado y supletorio.
Igualmente pueden eliminarse sustancias que están en circulación como la
tiamina y el ajo.
15. La impermeabilidad de la piel depende de cuatro factores:
a) Contenido de lípidos de la capa córnea.
b) Grado de hidratación de las capas cutáneas.
c) Tamaño de los corneocitos.
d) Grasas del estrato córneo.
16. Función inmunológica.
La epidermis es un órgano inmunológico de primera línea. La inmunología nació en la piel, en
ella se realizaron las primeras inmunizaciones y se siguen haciendo; a través de ella se valora
una buena parte de la respuesta inmune mediante las pruebas intradérmicas y las pruebas al
parche.
En la piel también se reflejan de manera especial y objetiva las diversas reacciones de
hipersensibilidad, es un extenso órgano de choque, un gran blanco para las diversas respuestas
inmunológicas del organismo.
17. La piel como
indicador de
afecciones locales
y sistémicas
La piel es una ventana donde el paciente
refleja los cambios que pudiera tener por
enfermedades internas. Éstas se expresarán
como manifestaciones que pueden ser la
única expresión de trastornos sistémicos,
asintomáticos en un sinnúmero de
ocasiones.
INTRODUCCIÓN
18. La capacidad para diagnosticar las enfermedades internas por medio de la piel será a través de
signos y síntomas .
Una serie de signos, síntomas y trastornos dermatológicos pueden ser invaluables como
marcadores de enfermedad sistémica.
La falta de reconocimiento de éstos puede resultar un retraso de diagnóstico y tratamiento y,
por tanto, permitir la progresión de una enfermedad grave o mortal.
19. SÍNTOMAS CUTÁNEOS MÁS FRECUENTES
PRURITO
El rascado continuo puede generar
excoriaciones, sobreinfecciones y lesiones
crónicas de prurigo nodular o liquenificación.
Lo característico es que no se producirán
lesiones específicas en la piel, sino que el
médico observará solamente lesiones de
rascado.
20. PRURITO
Las enfermedades que pueden manifestarse
con prurito pueden ser:
Enfermedad renal crónica
Colestasis
Alteraciones endocrinas y metabólicas
Alteraciones hematológicas
21. PÚRPURAS
Se producen por extravasación hemática hacia
la piel, pero (a diferencia del eritema) la lesión
no desaparece por vitropresión.
Las enfermedades sistémicas que pueden
manifestarse con púrpura pueden ser:
Vasculitis
Úlceras, livedo reticularis, urticaria
22. PANICULITIS
Son un amplio y heterogéneo grupo de
enfermedades caracterizadas por la presencia de
nódulos subcutáneos inflamatorios localizados
habitualmente en miembros inferiores.
Las enfermedades sistémicas que pueden
manifestarse con paniculitis pueden ser:
Eritema nudoso
Síndrome de Ehlers-Danlos
Cutis laxa
Síndrome LEOPARD
Enfermedad de Kawasaki
Fiebre reumática
23. PANICULITIS
Psoriasis: enfermedad frecuente de la piel que acelera el ciclo de vida de las células cutáneas. Hace que las células
se acumulen rápidamente en la superficie de la piel. Las células cutáneas excedentes forman escamas y manchas
rojas que causan comezón y, a veces, dolor.
Pseudoxantoma elástico: es un trastorno del tejido conectivo hereditario caracterizado por una calcificación
progresiva y fragmentación de fibras elásticas de la piel, retina y paredes vasculares arteriales.
Sarcoidosis: es una enfermedad caracterizada por el crecimiento de pequeñas acumulaciones de células
inflamatorias (granulomas) en cualquier parte del cuerpo, más comúnmente en los pulmones y en los ganglios
linfáticos. Pero también puede afectar los ojos, la piel, el corazón y otros órganos.
26. GOTA
Se trata de una alteración del metabolismo de
las purinas.
Los ataques recurrentes llegan a la fase crónica,
con tofos (depósitos de cristales de uratos).
Su ubicación más frecuente es en orejas, codos
y dedos.
Son nódulos rosados que pueden ulcerarse y
drenar material blanco tiza.
27. ALTERACIÓN EN EL METABOLISMO DE
LOS LÍPIDOS
Cuando hay alteración del metabolismo de los lípidos se genera una
dislipoproteinemia que se expresa en la piel por la presencia de xantomas,
que son elevaciones cutáneas amarillentas o rojizas, puntiformes o en
placas de tamaño variable, de forma por lo general redondeada y con
límites casi siempre precisos.
28. AMILOIDOSIS
Esta enfermedad resulta del depósito extracelular de proteínas fibrilares
amiloides y de la proteína componente amiloide P en los tejidos corporales.
29. PORFIRIAS
Las porfirias son trastornos hereditarios o adquiridos
de enzimas específicas que intervienen en la vía de
biosíntesis del grupo hemo.
30. DIABETES
La diabetes (DBT) puede determinar en la piel una
multiplicidad de cuadros dermatológicos,
fundamentalmente a través de la microangiopatía
que la caracteriza.
31. TIROIDES
En la consulta dermatológica y que frecuentemente
sucede en la clínica, se puede sospechar la existencia
de una alteración tiroidea, ya sea por el motivo de
consulta (ej. alopecia difusa o prurito sin lesiones)
donde la manifestación cutánea es causada por la
enfermedad tiroidea; o porque existe una asociación
de la dermatosis del paciente (p. ej., vitíligo, alopecia
areata, onicolisis) con enfermedades de la tiroides.
33. ENFERMEDADES HEPÁTICAS
Las funciones del hígado tienen una íntima
relación con el normal funcionamiento de la
piel, y sus desórdenes presentan con
frecuencia alteraciones cutáneas precoces.
34. SÍNDROME DE GARDNER
Es una variante de la poliposis adenomatosa
familiar. Pueden presentar hallazgos cutáneos
como tumores cutáneos o quistes epidérmicos
de inclusión.
Los quistes pueden aparecer en cualquier parte y
pueden presentarse antes que los pólipos
intestinales. Estos quistes son generalmente
asintomáticos, pero pueden causar prurito,
inflamarse y romperse.
35. SÍNDROME DE PEUTZ-JEGHERS
Dentro de sus manifestaciones clínicas
podemos encontrar máculas
hiperpigmentadas que suelen aparecer en la
primera infancia y se localizan en dedos,
palmas, plantas, labios, mucosa bucal, lengua
y regiones perioral, periorbital y perinasal.
Se asocia con múltiples pólipos
hamartomatosos gastrointestinales.
36. SÍNDROME DE RENDU-OSLER
Se presenta con telangiectasias en las
mucosas (lengua, labios, mucosa nasal,
esclerótica), en la piel (orejas, cara y pulpejos)
y en las uñas. Puede comprometer órganos
internos y presentar epistaxis recurrentes,
hemorragia gastrointestinal (más
frecuentemente a nivel del estómago y
porción superior del duodeno) y convulsiones.
37. BIBLIOGRAFIA
Lecciones de Dermatología, Amado Saúl, Méndez Editores, Edición 15, 2004
Principios de Anatomia y Fisiologia TORTORA DERRICKSON 13ª Edición (capitulo e “EL SISTEMA
TEGUMENTARIO” Paginas 153-169)