2. Tras 40 millones de años nadando por el Atlántico y el
Mediterráneo, el atún rojo estuvo a punto de
desaparecer hace una década debido al creciente éxito
del sushi. El exceso de capturas de esta especie —para
satisfacer el voraz apetito de los consumidores
japoneses— amenazaba su supervivencia y en 2006 se
puso en marcha un programa que limitaba y
controlaba las capturas y perseguía la pesca ilegal.
Ahora, responsables gubernamentales, científicos y
ecologistas coinciden —con mayor o menor grado de
certeza— en que el atún rojo se está recuperando.
3. El atún rojo está totalmente recuperado; la
prueba es que este año hemos agotado nuestra
cuota, de 1.500 toneladas, en 24 horas.
El declive de hace unos años del atún rojo se
convirtió en un icono de la lucha promovida por
los grupos ecologistas por la sobrepesca. Estas
organizaciones pidieron a los consumidores que
dejaran de comer esta especie para presionar a
los responsables de pesca para extremar los
controles.
4. Los pescadores de palangre, de arpón y de
redes de cerco se centraron en los gigantes,
inducidos por los elevados precios pagados
en Japón, que consume el 40% de los
desembarcos de atún a nivel mundial. Estas
flotas están utilizando medios cada vez más
sofisticados para dar con los atunes,
incluidas las avionetas de observación y
equipos de sónar.
El último avance, las explotaciones de atunes
en granjas del Mediterráneo, podría ser la
puntilla para la población oriental en vías de
extinción.
5. Gran parte de la reducción de la población adulta de atún rojo en el
mediterráneo se debe a los barcos que operan bajo bandera de
conveniencia, buques que navegan con la bandera de un país que
no controlan que estas embarcaciones cumplan la legislación
internacional. Estos barcos no informan de sus capturas y no
cumplen con ninguna de las regulaciones
internacionales establecidas para la gestión
y conservación del atún rojo.
6. Según la FAO “desde 1996, el
porcentaje de atún rojo para engorde
se han incrementado continuamente,
de forma que la mayor parte de los
atunes capturados en el mediterráneo
se destinan a jaulas de engorde.
7. Plan de recuperación del atún rojo
Ante la situación de explotación excesiva, en
2007 la UE aprobó el plan de recuperación
del atún rojo del Atlántico Este y
Mediterráneo, de quince años, que se
reexaminará periódicamente en función de
los dictámenes científicos para mantener su
eficacia.