1. COMUNICACIÓN NO VERBAL
CARACTERÍSTICAS
Lo más destacable de la comunicación no verbal es su
variedad y complejidad, porque incluye mensajes de
muy diverso tipo: características físicas (altura,
constitución física, color del pelo, rasgos faciales...),
expresión facial, gestos, postura y movimientos
corporales, vestuario y adornos personales,
distribución del espacio, administración del tiempo y
los componentes para verbales relacionados con la voz
(tono, ritmo, volumen...)
Por otra parte, los signos no verbales pueden
mostrarse de forma simultánea, lo que provoca que, en
ocasiones, resulten confusos o lleguen a contradecirse
unos con otros. Todo esto hace difícil delimitar las
unidades mínimas que constituyen la comunicación no
verbal y cuáles son las reglas que siguen para
combinarse entre ellas. No obstante, se pude decir que
las principales características de la comunicación no
verbal son:
En general, existe una gran relación con los aspectos
verbales de la comunicación. El lenguaje verbal
siempre va acompañado de aspectos no verbales,
como la distancia entre emisor y receptor, los gestos,
la expresión facial. En muchos casos, la comunicación
verbal solo se considera completa si se acompaña de
ciertos gestos no verbales, con lo que nos aseguramos
de que se interpreta correctamente la finalidad de las
2. palabras: el saludo, la despedida, la amenaza, el
acatamiento de una orden... Asimismo, los signos no
verbales tienen una gran importancia en la
retroalimentación comunicativa o feed back.
Los signos no verbales pueden tener más importancia
que las palabras dichas. Aunque algunos autores se
atreven a dar datos numéricos sobre la importancia
proporcional que tienen los mensajes no verbales
sobre los verbales, creemos que sólo se basan en
suposiciones. Sin embargo, sí parece que en la
mayoría de los procesos comunicativos lo expresado
por elementos no verbales transmite mucha más
información que las palabras expresadas. Si alguien
nos pide perdón, nos consuela o nos amenaza, sus
palabras sólo serán creíbles si van acompañadas de
ciertos gestos o cierto tono de voz.
La comunicación no verbal es inevitable, porque los
canales no verbales siempre están abiertos: siempre
comunicamos, incluso con el silencio y la quietud de
nuestro cuerpo.
En la comunicación no verbal, predominan las
funciones expresivas y conativas sobre la referencial.
En general, percibimos el estado de ánimo del emisor
más por su aspecto, tono de voz y gestos que por lo
que nos dice: todos hemos adivinado, en alguna
ocasión, que quien nos decía que se encontraba bien,
en verdad estaba deprimido o enfermo o enfadado. De
igual forma, nuestros actos de respuesta a lo que se
nos comunica están más condicionados por la actitud
3. de quien nos lo pide que por su petición verbal: nadie
se ve obligado a obedecer a quien lo hace sin
autoridad.
Los mensajes no verbales forman diferentes sistemas
comunicativos en función de la cultura y la época. No
es que cada cultura tenga un sistema propio, sino que
los sistemas condicionan las culturas. Dominar la
cultura (“tener cultura”, en sentido amplio) es conocer
los rituales que nos permiten expresarnos con la forma
no verbal adecuada a cada situación comunicativa.
Algunos actos que en principio no son comunicativos
se especializan por su forma y su frecuencia como
medio para transmitir información y llegan a ser
comunicativos, por haberse convertido en rituales. Es
el llamado proceso de ritualización.