1. Dificultades en la enseñanza de la Matemática ( Primer Ciclo)
Cuando un chico, a los 6 años empieza Primer Grado, quizá lo único importante que tenga
que aprender, es el sistema de numeración. Si arma bien su sistema de numeración, y puede
calcular entendiendo qué tienen que ver con el sistema de numeración, ya está. Llegamos a
la centena y entregamos los chicos a Segundo Grado chochos de la vida. En realidad, el
primer problema que encontramos en Primer Grado es cuando empieza el tema de los que
llamamos las sumas con dificultad o las restas con dificultad. Mucho se ha hablado de esas
dificultades, que no deberían ser tales. Bueno, la historia es que si yo consigo un chico de
Primero Grado, cuando hace 16 + 7, pueda tomar ese 6 y ese 7 y decir eso es 13, que se
canjea por una decena y 3 unidades, y esa decena la agrego a las decenas de la cuenta, si el
chico aprende eso, estamos hechos pero, la verdad, es que la mayoría de las veces no lo
aprende y terminamos en el me llevo uno, que funciona, cuando el chico se aviva que tiene
que decir me llevo uno aunque no sepa muy bien qué quiere decir. Yo he visto chicos de
Primer Grado que, ante la insistencia de la maestra a adoptar el me llevo uno, lo terminan
adoptando porque la maestra está contenta y el padre y la madre también están contentos
porque dice me llevo uno, lo escribo y todo el mundo parece estar en paz, por más que ellos
no entiendan qué es lo que están haciendo.
Ese quizás sea el primer resbalón que tenemos en la enseñanza de la
Matemática. Estamos enseñando un algoritmo, un mecanismo, una receta, del
cual el estudiante no comprende su fundamento.
A esa altura qué pasa con los chicos: saben un montón de cosas, obviamente, los
números, hacen cuentas, ellos cuentan, van al quiosco, sin embargo eso me llevo
uno, si lo aprenden de esa manera, lo adosan como una cosa aparte. Entonces,
saben toda la Matemática del sentido común, que usan para ir al quiosco, y el me
llevo uno pegado ahí, como otra cosa, en la escuela hay que hacer el me llevo
uno, digamos. Por supuesto esto se incrementa con la resta y el le pido al
compañero.
Termina Primer Grado, se llega a la centena y todavía generalmente no se nota
demasiado cuál es el inconveniente. El problema serio empieza en Segundo
cuando arrancamos con la primera cuenta de dividir. La cuenta de dividir, como
mecanismo, es un mecanismo tan sofisticado, podríamos decir, justamente es
sofisticado porque sirve para cualquier cálculo de división, aunque sea con
decimales, con fracciones, lo que sea. Como es tan sofisticado, tiene un montón
2. de abreviaturas, cosas que no figuran en el mecanismo, como los ceros, etcétera.
Entonces, el esfuerzo didáctico que lleva enseñar la cuenta de dividir es tan
grande que se va el resto de Segundo Grado con eso. En realidad, se va Tercero
también y a veces Cuarto. A esa altura empieza una especie de forcejeo en el cual
los papás dicen cómo este chico no sabe hacer las cuentas de dividir, los chicos
no saben las tablas de memoria, también hay quien opina cómo estos chicos no
saben las tablas de memoria, entonces reforcemos para que sepan la tabla de
memoria. Todo eso hace que, cuando llega fin de año, la mayoría por ahí la
aprendió, más o menos les sale aunque dude mucho pero perdió la autonomía;
sabe que tiene que hacer esto, después esto y después lo otro. Pero lo más grave
es que el esfuerzo didáctico fue tan grande que se llevó todo el tiempo. No hay
más tiempo para más nada; no hay tiempo para fracciones, no hay tiempo para
decimales, no hay tiempo para Geometría, no hay tiempo para problemas, más
que para los clásicos, esos que uno rellena los datos y se termina la historia.
Esto parece ser lo que sucede más o menos hasta Cuarto y Quinto Grado. Cuando los
chicos llegan a Sexto Grado, se supone que tienen que saber un montón de cosas, por que el
programa dice que lo saben y la maestra del año anterior dice que lo dio, que lo enseñó. Lo
cierto es que en Sexto Grado las cosas se ponen bastante más complicadas porque la
mayoría de los chicos empiezan a mostrar un montón de inconvenientes; las dificultades
que tiene en Sexto no son las que tienen con el me llevo uno en Primero, ya está más
reforzada, la angustia es más grande, los mecanismos son más complicados.