Explicación de la obra de Goya titulada Los fusilamientos del 3 de Mayo. Lámina 7 para la EBAU Murcia.

1. LOS FUSILAMIENTOS DEL 3
DE MAYO
AUTOR: Francisco de Goya y
Luciente
AÑO: 1814
MEDIDAS: 266 X 345cm
SOPORTE: Óleo sobre lienzo
ESTILO: Romanticismo
GÉNERO: Pintura figurativa
LOCALIZACIÓN: Museo del Prado de
Madrid
TEMA: Representa un hecho
histórico real.
MARÍA DUARTE CUESTA

3. CONTEXTO HISTÓRICO
Representa una escena de los fusilamientos del 3 de Mayo que fueron la consecuencia del
levantamiento del 2 de Mayo contra los Franceses. Fue el comienzo de la guerra de la
independencia contra Napoleón que había ocupado España en 1808 e iba a poner como rey a
su hermano José Bonaparte.
Todo ocurre en la montaña Principe Pío de Madrid. Este cuadro junto con el titulado Dos de
Mayo o La carga de los mamelucos, (en el que los insurgentes españoles atacan a los
mamelucos, que eran mercenarios egipcios que combaten al lado del ejército francés.)
muestran como la revuelta fue aplastada de forma sangrienta por el ejercito de ocupación.
Es uno de los cuadros de temática histórica más dramáticos de toda la historia del arte.
En este cuadro Goya se expresa de una forma nueva y abre las puertas a principios del s. XIX,
al expresionismo más actual.
Esta pintura fue realizada en La Quinta del sordo o Huerta de Goya, era el nombre de una
extensa finca y casa de campo situada en una colina del antiguo término municipal de
Carabanchel Bajo, a las afueras de Madrid, en la que vivió Francisco de Goya durante sus últimos años en
España, antes de su exilio, y en la que se hallaban las Pinturas negras. En contra de la creencia popular, el
nombre de la finca no se debía a la sordera del pintor, sino a la de un anterior propietario.

4. El dos de mayo de 1808 en Madrid, también llamado La carga de los mamelucos en la
Puerta del Sol o La lucha con los mamelucos, es, junto con El tres de mayo, uno de los
cuadros más célebres de Francisco de Goya y Lucientes

6. COMPOSICIÓN
La pasión que inspira la composición consiguió que este lienzo fuese más que un recordatorio de un hecho
concreto y mucho mas que un manifiesto fruto del fervor patriótico del autor. El autor supo expresar en toda
su violencia, aunque con sobriedad y eficacia, la crueldad inexorable del hombre para el hombre y a la vez
su deseo de libertad.
La escena que se desarrolla durante la noche, está iluminada por un gran faro situado entre el pelotón de
ejecución y el grupo de los condenados. Este recurso de inspiración tenebrosa permite que los
condenados sean iluminados de manera dramática y el pelotón de fusilamiento permanezca en penumbra.
Los soldados forman diagonales dando la espalda al espectador, de manera que quedan ocultos los
rostros, en cambio los ejecutados que son los protagonistas del cuadro, muestran una amplia gama de
reacciones frente a su trágico destino, que se puede ver en los que yacen muertos. Algunos enfrentan ese
momento con valentía como el que levanta el puño, otros dedican este último momento a rezar, los hay
que se muerden los nudillos con horror, como el hombre del fondo que espera su ejecución o los que tapan
sus ojos para no ver lo que sucede.
La profundidad se logra con dos líneas diagonales, la de la montaña Principe Pio con el grupo de civiles y
la del pelotón de fusilamiento. Las líneas ondulantes de brazos y sables y las horizontales de los fusiles
dan a la escena un intenso dramatismo. El espectador contempla la escena desde la posición de los
soldados, así podemos captar la angustia del que va a ser ejecutados.

8. EL COLOR
Caracterizar la paleta empleada Goya utiliza en este cuadro una paleta principalmente oscura, donde
predominan la gama de los negros, color de la muerte por excelencia, con importantes mezclas de
colores relacionados con la gama del verde. La otra gran familia cromática la forman los ocres y
marrones. Sin olvidar el blanco de la camisa del hombre con los brazos abiertos que supone un gran
contraste con el resto de la paleta, en su mayoría oscuros.
LA PINCELADA
Suelta y larga, donde la mancha de color tiene mayor protagonismo que la línea, así tiene mas
expresividad. Usa la perspectiva aérea: las figuras mas cercanas son mas nítidas y el paisaje del fondo
menos, en penumbra donde se reconoce el cuartel del Conde Duque próximo a la montaña del
Principe Pio.
LA LUZ

10. MENSAJE QUE QUIERE TRANSMITIR GOYA
Goya pinta esta obra en 1814, cuando la Guerra de Independencia acaba de concluir. Como es sabido, el
artista fue acusado de afrancesado por haber mantenido su posición de pintor de cámara durante el
periodo de reinado de José I Bonaparte. Por ello el autor realiza los cuadros del 2 y 3 de mayo de 1808;
quiere dejar bien claros su oposición a la invasión francesa y su patriotismo, justo en el momento en que
da comienzo el reinado de Fernando VII. Ese mismo año, este rey declaró abolida la obra de las Cortes de
Cádiz y retornó a los principios absolutistas que habían caracterizado a la monarquía española hasta 1808.
Por todo ello, hemos de considerar este cuadro como uno de los mejores documentos visuales para la
compresión de lo que supuso en España el largo y complejo periodo de transición del Antiguo al Nuevo
Régimen.
ANALISIS ICONOLÓGICO
Goya pretende subrayar la barbarie de la guerra y la tiranía moderna. Concretamente, el dolor sufrido en
España cuando las tropas francesas invadieron el país. Si algún personaje merece la pena destacarse es
el hombre que increpa a los soldados, muere sin ocultar su rostro, heroico y con dignidad, no se calla, no
tiene miedo a morir por aquello que cree justo, por sus ideales. Muchos autores han establecido una
personificación de este personaje con la figura de Cristo, por lo que no resulta extraño, el que en sus
manos encontremos, al igual que en las manos de Cristo, los estigmas de la Pasión: es el reflejo de la
muerte de otro inocente en manos de la barbarie, de la sin razón, lo que vendría también a explicar el color
blanco de su camisa, ya que el blanco es el color de la inocencia