Este documento analiza los desafíos actuales de la educación y el potencial del e-learning y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para innovar la enseñanza. Identifica factores como la herencia judeocristiana, la resistencia al cambio y la institucionalización de los sistemas educativos como obstáculos para la reforma. Si bien el e-learning no revolucionará la educación, el autor cree que podría ayudar a superar prácticas obsoletas siempre que se enfoque en objetivos pedagó

1. ENSAYO TIC
Magister en Educación y Docencia Universitaria
Al introducirme en el tema del e-learning y las TIC me encuentro con bastantes sorpresas y
también con muchas opiniones que concuerdan con los planteamientos contemporáneos
acerca del rol de la educación en la actual sociedad. Estos planteamientos se relacionan con
críticas acerca del modelo educativo en que nos hemos formado, sus dificultades para
propiciar aprendizajes útiles para la adecuada ciudadanía, la masificación de la educación
terciaria, la crisis de los marcos epistemológicos tradicionales que se aplican a la didáctica,
entre otras.
El e-learning y las TIC se suman, desde sus particularidades, a esta búsqueda de la innovación
y del emprendimiento (ambos conceptos, manoseados hasta el cansancio en la actualidad),
tan en boga en las discusiones que hoy se plantean. En este nivel sólo se queda como esa
búsqueda de realizar nuevas prácticas, pero estas nuevas prácticas no siempre se han visto
relacionadas con verdaderos objetivos pedagógicos, sino que obedecieron a una simple
incorporación de la tecnología al proceso formativo, pero que heredó sus dificultades y sus
carencias.
El hablar acerca del e-learning y las TIC, nos permite adentrarnos en temas que requieren
mayor profundización y que son bien señalados desde los modelos psicológicos más
contemporáneos, que sitúan la re-significación de las vivencias y de la historia, en la base del
aprendizaje, pero estas vivencias, se circunscriben a la experiencia, aquella que adquirimos
por medio de un raciocinio íntimo y valedero, aquella que se enmarca dentro de una estrecha
relación entre significado y significante, entre cognición-emoción-valor, entre presente e
historia.
Antes de comenzar directamente el análisis de los alcances del e-learning, quisiera señalar
algunas de los que, para mí, son los problemas del actual sistema educativo. En primer lugar
sitúo la herencia judeocristiana, la cual no ha aportado el ritual de adquisición del credo,
especialmente la misa, la cual establece una relación frontal entre el que está más cerca de
Dios, con aquellos que lo escuchan e intentan aproximarse a este ideal, en este modelo, el
sacerdote es quien “ilumina” a los feligreses y los llama a aprender modos de vivir conforme a
un texto, es decir, a través de un escrito, el cual nos dicta normas de comportamiento,
aprendemos acerca de las bondades de una vida humilde y servil. Este modelo, se centra en la
replicación y memorización de ruegos y plegarias, las cuales deben ser recitadas por todo
aquel que se precie de buen cristiano. El espacio en que se distribuyen los personajes del acto
litúrgico, se encuentran muy establecidos, quien dicta la misa, es quien guía y determina qué
se hace, cuándo, y porqué. El sacerdote, escoge las lecturas, las enseñanzas y los rezos. El
buen cristiano es pasivo en su formación espiritual, no tiene espacio para cuestionar o para
interpretar las escrituras, sólo reproduce lo que La Palabra le dice. Creo que este modelo, tan
internalizado por nuestra cultura, ha calado tan profundamente que ni siquiera el computador
nos permite reemplazarlo.

2. Pues bien, creo que este no es el único elemento que está a la base de nuestra dificultad a la
hora de realizar verdaderos cambios, en la forma en que educamos. Otro de los factores, que
(creo) está afectando en que se produzcan cambios, es la tendencia natural del ser humano al
status quo, que se manifiesta en una permanente actitud de rechazo hacia la novedad, de
menosprecio hacia las preguntas y la imaginación, aunque paradójicamente se suele decir que
se fomenta.
Un tercer factor que pudiese estar dando cuenta de las dificultades en la implementación de
innovaciones pedagógicas y curriculares, es la institucionalidad educativa, la cual se ha
consolidado como una de las entidades sociales con mayor peso cultural, en donde pasan
gran parte de las personas por cada vez más tiempo. Llegando incluso a lo que hoy llamamos
educación permanente. Las instituciones de educación están legitimadas en su rol formativo e
intentan velar por este rol, utilizando lo que mejor conocen, la herencia cultural. Aquella que
perpetúan por medio de las prácticas y metodologías convencionales.
El último factor que quiero señalar, es el paradigma positivista, el cual tiñó de manera
profunda la forma de conceptualizar y entender el conocer. Este paradigma epistémico definió
la forma en que se conoce de manera tan radical y tan certera (en su momento), que muy
pocos cuestionaron sus irrefutables planteamientos y la utilidad de sus hallazgos. Su
hegemonía, su institucionalización y las comunidades que se crearon a su alrededor, basadas
en una impecable lógica de poder, consiguió que sus planteamientos se consideraran
“verdades”. Sus “leyes” definieron en buena parte el tipo de relación que se establece entre el
sujeto y el objeto del conocer, este paradigma en educación está asociado a la teoría
conductista de Watson y Skinner.
Bien, ahora que ya he revisado, lo que para mí, son las grandes trabas que impiden la
realización de profundos cambios en la educación retomaré el e-learning. La incorporación de
las nuevas tecnologías y metodologías que suelen adscribirse al paradigma constructivista,
poseen una visión diferente del conocer y de la relación que se establece entre el sujeto y el
objeto a conocer. Este aprendizaje es mediado, pero esta mediación no es aséptica, sino que
se enmarca en un momento histórico y en una cultura particular. Desde allí que hoy, sean las
tecnologías de la información y la comunicación las que están mediando y en este momento
histórico es (como la mayoría en realidad) inigualable.
El e-learning y las TIC, son una manifestación palpable de la crisis que atraviesa la educación
convencional, han puesto en tela de juicio las prácticas ortodoxas y han desvelado las malas
prácticas, que se han sostenido en viejos convencionalismos, que algunos aún sostienen como
verdaderos. Pero no hay que creer que estas nuevas prácticas vienen a revolucionar la
educación, yo creo que esto tan sólo cumple el rol de chivo expiatorio, el rol que anteriormente
han ocupado otros movimientos, como las reiteradas reformas educativas, las cuales nunca
llegan a implementarse en su totalidad cuando aparece alguna que señala ser mejor que la
anterior.
Bueno, yo aún me considero un ser humano optimista y que creo en los cambios positivos y
constructivos, así que desde esta mirada esperaré a que el e-learning venga a colaborar en la
mejora de la educación.