La intervención educativa con adultos tiene dos objetivos: compensar las desigualdades sociales que impiden la inserción en la sociedad debido a falta de educación básica, y enfrentar los retos del cambio social. Todas las personas tienen derecho a educarse a lo largo de la vida, por lo que los gobiernos deben garantizar la educación de adultos. Además de ser un derecho individual, la educación de adultos tiene una dimensión colectiva al permitir que participen activamente en la sociedad. En el mundo actual de rápidos cambios, es neces
2. Hoy día existe un relativo consenso en justificar la intervención educativa con
personas adultas en una doble dimensión. Por un lado esta intervención tendría su
razón de ser en la compensación global de las desigualdades sociales producidas
por la falta de recursos de numerosos adultos, que por unas u otras razones
carecen de aprendizajes básicos de carácter instrumental, cultural, académico,
profesional... lo que impide su correcta inserción y proyección en la sociedad. Por
otro lado, y desde planteamientos gestados en las últimas décadas, basados en el
principio de la educación permanente, está intervención será siempre necesaria
para enfrentar los retos y los cambios que el dinamismo social impone a los
individuos.
Si entendemos que la educación es un derecho, y lo es para todas las personas,
sin ningún tipo de discriminación, las personas adultas tienen el derecho a la
educación a lo largo de toda su vida, y por ende los poderes públicos tienen la
obligación de garantizárselo.
3. El derecho a la educación de las personas adultas, no debe entenderse
únicamente como un derecho individual, que afecta a cada individuo, sino desde
una dimensión colectiva en donde las personas adultas ejercen una ciudadanía
activa y participativa, convirtiéndose en agentes de la dinámica social, económica
y productiva de su sociedad.
Ciertamente las sociedades humanas de hoy se encuentran mediatizadas por los
fenómenos que la llamada sociedad de la información y del conocimiento ejercen
sobre ellas. En el mundo de hoy los cambios se producen de modo
espectacularmente rápido, y es preciso articular la forma en que las personas no
se queden excluidas del conocimiento, sino que accedan de modo efectivo al
mismo, sea éste de la naturaleza que sea. Es por esto, que el concepto de
“aprendizaje a lo largo de la vida”, cobra un especial significado. Pero los
ciudadanos adultos no sólo realizan aprendizajes desde una perspectiva
economicista o productiva. Es cierto que el espectacular desarrollo de las nuevas
tecnologías, aplicadas a la producción exige la formación continua de los
trabajadores y trabajadoras, que precisan no sólo reciclaje formativo, sino también
reconversión formativa, para el desempeño de distintos tipos de trabajos a lo largo
de su vida laboral.