La política pública de Ecourbanismo y Construcción Sostenible de Bogotá promueve el desarrollo sostenible de la ciudad mediante la adopción de nuevas prácticas y tecnologías en el urbanismo y la construcción. El documento analiza las dimensiones ecológica, social, económica, cultural, geográfica y política de la sostenibilidad global implícitas en la política. Concluye que se necesita mejorar la aplicabilidad de la política a nivel local y propender más por la mitigación del cambio climático a través
1. ANALISIS DE DIMENSIONES DE SOSTENIBILIDAD GLOBAL DEL DOCUMENTO DE
POLÍTICA PÚBLICA DE ECOURBANISMO Y COSNTRCCIÓN SOSTENIBLE DE
BOGOTÁ D.C
My ® Julio Cesa Parga Rivas
Carlos Andrés Pardo Zarache
CENTRO DE EDUCACIÓN A DISTANCIA UNIVERSIDAD DE MANIZALEZ
FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES, ECONÓMICAS Y ADMINISTRATIVAS
MAESTRIA EN DESARROLLO SOSTENIBLE Y MEDIO AMBIENTE
2015
2. DOCUMENTO DE POLÍTICA PÚBLICA DE ECOURBANISMO Y COSNTRCCIÓN
SOSTENIBLE DE BOGOTÁ D.C
Introducción
La Política Pública de Ecourbanismo y Construcción Sostenible, adquiere relevancia para
la ciudad de Bogotá en un momento donde las condiciones climáticas y ambientales
exigen la adopción de nuevas estratégicas y prácticas que permitan un desarrollo
sostenible y una relación armónica entre las áreas construidas y las áreas naturales
del territorio. En este contexto de cambio global, las ciudades deben adaptarse a las
nuevas condiciones ambientales y Bogotá no es ajena a esta necesidad. Es en este
marco, donde las prácticas y tecnologías empleadas hoy en día, requieren de un mayor
desarrollo en algunos casos, y en otros, ser reemplazadas por unas que reconozcan las
nuevas dinámicas ambientales, sociales y económicas. En consecuencia, el enfoque de
esta política reconoce que las necesidades materiales pueden ser satisfechas por la
sociedad, sin ir en detrimento de los ecosistemas y tratando de reducir al máximo el costo
ambiental derivado de las actividades productivas y de desarrollo. Esto debe ir
acompañado del reconocimiento de las condiciones socio-económicas diferenciales de la
población. Para la construcción de la Política Pública de Ecourbanismo y Construcción
Sostenible, se realizaron estudios diagnósticos, encuentros con técnicos de
entidades públicas y gremios de la construcción, eventos distritales y sondeos de
opinión virtuales que permitieron identificar las necesidades particulares de Bogotá
D.C. en términos de urbanismo y arquitectura y así plantear la apuesta de ciudad que
se inscribe en la política. Desde las dinámicas de construcción del urbanismo y la
arquitectura, esta Política plantea una ruta para adaptar el territorio a los efectos
adversos de la variabilidad y al cambio climático, mediante la adopción de nuevas
prácticas y tecnologías que deben ser utilizadas por los actores sociales e institucionales,
implicados en los diversos temas urbanísticos y de edificación de la ciudad. Las pequeñas
acciones sumadas traen consigo un cambio significativo en las dinámicas urbanas y
rurales: “la revolución de las pequeñas acciones”, presentando un alto beneficio para la
ciudad y la ciudadanía con un bajo costo ambiental y económico. Una vez analizada la
política, se pretende identificar desde una perspectiva sistémica, las diferentes
dimensiones que pueden estar implícitas en un marco de Sostenibilidad Global.
3. Descripción de la Política
La Política de Ecourbanismo y Construcción Sostenible (2014-2024) estatuida a través de
Decreto 566 de 2014, propende por integrar a todos los ciudadanos bogotanos, para que
se cuestionen sobre las implicaciones que tendría la meta de construir una ciudad y un
hábitat más sostenible, focalizados en el desarrollo de la ciudad, la sostenibilidad de la
misma y las características del trabajo ambiental que viene aplicando y ejecutando con la
articulación de los razonamientos, políticas y asuntos distritales y nacionales, para a su
vez generar argumentos y conceptos que permitirán hacer una valoración de las
capacidades y la gestión ambiental con bases fundamentadas en un Desarrollo
Sostenible.
Si bien es cierto cada una de las políticas públicas involucra un conjunto de necesidades,
requerimientos y planteamientos, las políticas ambientales como en el caso en particular,
deben orientar y direccionar los esfuerzos y capacidades, para buscar un fin específico
que está ligado directamente a la sostenibilidad ambiental de la ciudad y en la cual se
encuentran involucradas las Secretarias Distritales de Planeación, Ambiente y Hábitat.
Es importante indicar que la precitada política pública, la ciudad de Bogotá proyecta
implementarla hasta el año 2022, con el fin de lograr que el urbanismo y la
construcción, permitan un desarrollo sostenible en condiciones de equidad a nivel
urbano y rural.
Durante el proceso desarrollado en la construcción de una Política Pública para el
Ecourbanismo y la Construcción Sostenible, una de las mayores preocupaciones ha
consistido en lograr que esta política trascienda el ordenamiento territorial y el desarrollo
humano, y que de acuerdo con el espíritu de su creación se estructure desde un enfoque
holístico. Esta idea consiste en que la política integral moviliza la gestión, la
sensibilización, el ordenamiento jurídico, las instituciones, los recursos
tecnológicos y los recursos económicos, dado el interés de hacer un instrumento
de largo plazo y una propuesta eficaz dentro del conjunto de partes que la
componen. En tal sentido y haciendo una revisión del control urbanístico que ejercen la
alcaldías locales, resaltan a simple vista sus falencias, por la falta de compromiso y
capacitación al respecto, al no respetar los lineamientos ambientales impartidos por la
4. autoridad ambiental, donde el ciudadano percibe como las demás entidades se burlan de
las estrategias propuestas para mitigar el impacto ambiental de la construcción
desordena, que se adelanta en el distrito capital, sumado a esto la corrupción impide una
transparencia de los programas y proyectos propuestos, ya que no se vigila ni sanciona
la depredación ambiental en los cerros, y contaminación de canales por empresas
constructoras, es por ello que el control urbano es una tarea necesaria para el manejo
de las Políticas Públicas. Se necesita crecer en una actitud ambiental que permita lograr
controles no solo desde lo público, sino desde lo privado.
El control de la aplicación de la normativa urbana no ha sido muy efectiva en las ciudades
latinoamericanas, situación que ha ido creciendo y consolidándose desordenadamente.
En las áreas periféricas donde se concentran asentamientos formales e informales, los
constructores han utilizado artimañas para generar un espacio de compensación por la
urgente necesidad de mejorar los hogares y el estilo de vida, que nadie percibe y que
involucra una distribución no equitativa del espacio destinado para las llamadas áreas
verdes, las cuales no alcanza a superar el 10% de la relación existente entre estas y las
unidades habitacionales.
Con esta apreciación es muy difícil que los nuevos asentamientos posean áreas verdes
como parte de su constitución como asentamiento urbano. Por lo que existe un alto déficit
de áreas verdes en estas zonas de la ciudad. Hay que considerar que el Ecourbanismo
no consiste en llenar de verde las ciudades, sino en establecer normas más
humanas de utilización del territorio que permitan reducir sectores de calor y
manteniendo más áreas abiertas al interior y periferia de la ciudad.
En este orden de ideas, la política pública articula dos conceptos que si bien es cierto,
están compaginados, deben ser separados en su formulación y de manera muy precisa
los conceptos de ECOURBANISMO y CONSTRUCCIÓN SOSTENIBLE.
Porque si hablamos de ECOURBANISMO, estamos haciendo referencia al manejo de
suelos y sistemas naturales que estructuran un territorio, es por ello que es necesario que
para los temas de tratamiento e instrumentos se precise cuáles son las directrices que
benefician a todos enmarcados dentro de un modelo de ocupación de suelo, el cual debe
5. ser muy flexible en cuanto a que respete la diversidad natural y ecosistémica de
nuestro país.
Igualmente al hablar de CONSTRUCCIÓN SOSTENIBLE, debe ser capaz de sintetizar
todos los criterios de edificabilidad que permitan llevar a las ciudades hacia un modelo de
ocupación responsable con el medio, bajo técnicas avanzadas que incluyan
mecanismos de aprovechamiento sostenibles de los recursos, si de verdad se quiere
responder a un modelo de construcción sostenible indispensablemente, habrá que hacer
uso de innovaciones tecnológicas, que abaraten costos, disminuyan riesgos y garanticen
el buen manejo ambiental tanto internos como externos de la edificación.
6. Análisis
La dimensión ecológica o ambiental
La dimensión ecológica de la sustentabilidad promueve la protección de los recursos
naturales necesarios para la seguridad alimentaria y energética y, al mismo tiempo,
comprende el requerimiento de la expansión de la producción para satisfacer a las
poblaciones en crecimiento demográfico.
La dimensión social
Implica promover un nuevo estilo de desarrollo que favorezca el acceso y uso de los
recursos naturales y la preservación de la biodiversidad y que sea “socialmente
sustentable” en la reducción de la pobreza y de las desigualdades sociales y promueva la
justicia y la equidad; que sea culturalmente sustentable en la conservación del sistema de
valores, prácticas y símbolos de identidad que, pese a su evolución y reactualización
permanente, determinan la integración nacional a través de los tiempos; y que sea
políticamente sustentable al profundizar la democracia y garantizar el acceso y la
participación de todos en la toma de decisiones públicas.
La dimensión económica
Se requiere admitir como modelo económico sostenible desde el punto de vista ambiental
a aquél que se adecua a los ciclos biogeoquímicos de la materia, y le permite así
perpetuarse en el tiempo. Existen una serie de acuerdos que, al establecer determinadas
metas ambientales, de manera de influir en las formas, productos y subproductos de las
actividades económicas. Existen también normas que promueven influir en la mejora
ambiental de la actividad de una empresa, pero cuya aceptación y desarrollo son
plenamente voluntarias, (normas ISO 14000).
La dimensión cultural
La sustentabilidad cultural comprende la situación de equidad que promueve que los
miembros de una comunidad o país, tengan acceso igual a oportunidades de educación y
aprendizaje de valores congruentes con un mundo crecientemente multicultural y
multilingüe y de una noción de respeto y solidaridad en términos de sus modos de vida y
formas de relación con la naturaleza.
7. La dimensión geográfica
Las dimensión geográfica –también denominada territorial-, de la sustentabilidad
constituye uno de los principales desafíos de las políticas públicas contemporáneas –de
ordenamiento y planificación ambiental-, que requiere territorializar la sustentabilidad
ambiental y social del desarrollo y, a la vez, sustentabilizar el desarrollo de las regiones,
es decir, garantizar que las actividades productivas de las distintas economías regionales
promuevan la calidad de vida de la población y protejan el patrimonio natural para
resguardarlos para las generaciones venideras.
La dimensión política
El fundamento político de la sustentabilidad se encuentra estrechamente vinculado a los
procesos de democratización y de construcción de la ciudadanía, y busca garantizar la
incorporación plena de las personas a los beneficios de la sustentabilidad.
Figura No.1 Estructura de la PPECS
8. Conclusiones
Desde la aplicabilidad de la política hay que enfrentarse con la necesidad de
revisar las competencias de las distintas entidades, hay demasiada
institucionalidad y muy poca operatividad a la hora de llevar recursos y garantizar
las intervenciones a nivel local, nivel en el cual es casi nula la capacidad humana y
técnica instalada.
La política en su afán de construir territorios resilientes que se adapten y mitiguen
el cambio climático, debe propender más por el principio de mitigación a través de
la vinculación de la innovación y tecnológica con el fin de adelantarse a
problemáticas medioambientales (del orden natural), que incidan
significativamente en la calidad de vida de los habitantes de territorios urbanos y
rurales.
Es evidente que la política es una reorganización frente a la realidad actual de la
ciudad, la cual también deberá ser proactiva mediante modelamiento de
escenarios futuros, por ejemplo: tendencias y efectos del cambio climático.
La ciudad de Bogotá puede ser catalogada como una ciudad multicultural, por esto
se requiere tener en cuenta esta dimensión para que los programas de
sensibilización y comportamientos sostenibles se lleven a cabo acorde a la
realidad del contexto.
La transición a modelos y/o comportamientos sostenibles consideramos que en un
término de 10 años apenas estaría tomando forma, por lo que se requieren
periodos significativos para adoptar e interiorizar tales comportamientos.
9. BIBLIOGRAFÍA
Duran, D. 2010. La Dimensiones de la Sustentabilidad. Recuperado de:
http://www.ecoportal.net/Temas-Especiales/Desarrollo-
Sustentable/las_dimensiones_de_la_sustentabilidad
Alcaldía Mayor de Bogotá D.C. Secretaría Distrital de Ambiente. Secretaría Distrital de
Hábitat. Secretaría Distrital de Planeación. 2014. Documento Ejecutivo Política Pública de
Ecourbanismo y Construcción Sostenible de Bogotá. Recuperado de:
http://ambientebogota.gov.co/c/document_library/get_file?uuid=452fb8dd-7bc0-4f70-9f38-
ba9e30b4c9f8&groupId=55387