El documento discute cómo las nuevas tecnologías afectan la vida de los estudiantes. Explica que cuando un estudiante se da cuenta de que está aprendiendo algo nuevo que se conecta con sus experiencias previas, esto se conoce como metacognición. También describe cómo la experiencia del aprendizaje consciente puede vivirse de maneras diferentes dependiendo del ciclo por el que esté pasando el estudiante. Finalmente, analiza el valor de la reflexión y la afectividad en el aprendizaje, y cómo esto permite a los estudiantes valorar su
Que hacen las nuevas tecnologias en la vida del estudiante
1. ¿QUE HACEN LAS NUEVAS TECNOLOGIAS EN LA VIDA DEL
ESTUDIANTE?
La vivencia conciente del aprendizaje de las nuevas tecnologías. Específicamente,
el momento en que un estudiante se da cuenta que algo nuevo se está articulando
a su experiencia anterior. Desde la psicología del aprendizaje, este fenómeno
estás comprendido en el concepto de metacognición. Es la resignificación de la
historia estudiante y la construcción de nuevos conocimientos.
La vivencia conciente del aprendizaje. Específicamente, éste es el momento en
que una estudiante se da cuenta que algo nuevo se está articulando a su
experiencia anterior y le invita a replanteársela, situándole vitalmente de una
manera distinta en adelante. Desde la psicología del aprendizaje, este fenómeno
estás comprendido en el concepto de metacognición.
La experiencia del aprender conciente se vive de maneras distintas, de acuerdo al
ciclo que está viviendo el estudiante. En este ensayo reflexionaremos sobre el
asombro del descubrirse en el aprendizaje de las nuevas tecnologías como
prepararse o de formarse para su futuro. Particularmente, sobre el asombro y gozo
vivenciado por los estudiantes que hacen el papel de receptores de esa nueva
información, los cuales generan nuevas experiencias del mismo orden, con
consecuencias transformadoras, tanto a nivel del estudiante como del resto de la
comunidad educativa. Planteamos que es en este ambiente afectivo dónde se van
formando utopías cotidianas.
Ciertamente, es importante aclarar en qué sentido entendemos el aprendizaje de
las nuevas tecnologías, cuando lo ligamos a los fenómenos metacognitivos. En
primer lugar, entendemos que el aprendizaje es un proceso abierto y complejo,
que se inicia con el nacimiento y llega hasta el término de la vida de cada
estudiante, trascendiéndole, incluso más allá de ella. En segundo lugar,
reconocemos el valor del acto de reflexión, que es un aporte del estudiante, de
una parte, por las características singulares de su estructura psíquica, y de otra,
porque incorpora, en diversos momentos de su vida, un “otro significativo”. Esta
reflexividad permite experimentar la cotidianeidad, y los acontecimientos
especiales como oportunidades de aprendizaje. En definitiva, tanto lo más
elaborado como lo más simple es una oportunidad de aprender de las nuevas
tecnologías. Esta postura vital, tiene como condición la capacidad de integrar
experiencias positivas y negativas propias y de otros, reelaborándolas como
referentes de la multidimensionalidad de la vida. En tercer lugar, este afecto por la
2. vida y su conocimiento, permite al estudiante a comprender su propia existencia
como entrelazada con la de los demás, la orientación a la interacción con los
otros, la construcción de vínculos, y la acción y/o a la reflexión conjuntamente. Se
trata de encontrar sentido a la vida desde nuestro ser sociales, desde la
completitud que significa el otro u otros. En cuarto lugar, se manifieste el valor de
la afectividad, del amor en sentido amplio, especialmente en relación a los otros.
Esta actitud también se puede leer como la capacidad de tener presente la
gratuidad de las vivencias con las nuevas tecnologías y acontecimientos
singulares, considerando el “regalo” que conllevan. Este regalo, sería el
aprendizaje.
Desde esta mirada del aprendizaje, el estudiante que lo vivencia potencia su
valoración de la experiencia de vida, y reconoce en ella hitos de conexión de una
experiencia con otra, que han significado la superación de etapas en un desarrollo
de expectativas de realización estudiante y/o colectiva. La experiencia de superar
etapas agrega otra dimensión de este tipo de vivencia, pues desarrolla la
capacidad de mirarse en perspectiva de largo plazo, aceptando los límites de la
realidad actual, pero también abriéndose a la posibilidad de soñar e imaginar
futuros, con la intuición de la posibilidad de su realización, no como accidentes,
sino porque ya se ha tenido conciencia de haber vivido procesos anteriores, en los
cuales han dado frutos la fuerza de persecución de las metas, los recursos propios
desplegados y el acompañamiento en el camino. En esta reflexión el estudiante
está realizando un acto de valoración de sí misma y de la alteridad como
componentes vitales. Es en este sentido, que conocer más de la metacognición,
será saber más acerca de cómo los seres humanos viven el acercamiento a la
utopía. Utopías múltiples, diversas pero, que han sido significativas para seres
humanos concretos.
Del significado inicial de la concepción de utopía en Tomás Moro tomamos la idea
de un lugar de destino mejor que el actual, la imaginación de una sociedad con un
destino distinto, y un proyecto alternativo a lo actual. Sin especificar ese destino,
pues sería el comienzo de su desvanecimiento como ideal, que casi siempre es
percibido como anhelo de liberación, de libertades por conquistar. Un escritor
latinoamericano lo expresa mejor: “Ella está en el horizonte –dice Fernando Birri-.
Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. /Camino diez pasos más allá y el
horizonte se corre diez pasos más allá. / Por mucho que yo camine, nunca la
alcanzaré. ¿Para qué sirve la utopía?/ Para eso sirve, para caminar” (Galeano
1993:143).
3. Ese tránsito hacia la expectativa es lo más asible, el referente material que
tenemos los estudiantes. El camino construido, recorrido conscientemente, nos
gratifica y nos acerca a alguna plenitud. La epopeya ocurrirá en ese caminar, pero
hemos participado en ella. Esta participación, que puede ser leída como un
encadenamiento de aprendizajes, y sus significados refleja el ejercicio
metacognitivo, a veces individual, a veces grupal, y por tanto de proyecciones
colectivas.