Para prevenir el estrés laboral, es importante planificar el trabajo para tener claros los objetivos y metas. También ayuda reducir las tensiones con compañeros y jefes mediante una buena comunicación. Se debe mantener el equilibrio enfocándose en cumplir los objetivos de manera profesional y sin dejar que los problemas se acumulen. Cuando surja estrés, respirar profundamente y contar ayudará a calmarse para continuar trabajando.