c3.hu3.p1.p3.El ser humano como ser histórico.pptx
NJP - Promoviendo la lectura en niños, niñas y jóvenes.
1.
2. • La lectura y la escritura son dos habilidades fundamentales que permiten
desarrollar el pensamiento y el lenguaje y nos abren las puertas a un mundo
increíble de conocimientos, aprendizajes, comprensión y expresión.
• Podemos decir que son dos habilidades necesarias para desenvolverse en el
mundo actual y que son imprescindibles para el desarrollo personal.
• El aprendizaje de los procesos de lectura y escritura es uno de los más
importantes en la vida de las personas, con muchos matices y múltiples
beneficios. Es la base de aprendizajes posteriores y es además motor de
desarrollo del pensamiento, del lenguaje, y de la inteligencia. Dominar estos
procesos es garantía de éxito en los estudios y en la vida.
3. La lectura y la escritura están repletas de magia. La magia de
comprender y de poder expresar, que nos lleva a la ilusión por
aprender y que nos mete de lleno en el conocimiento y en el
saber.
El ritmo de vida actual, ha cambiado el sentido de la educación,
perdiendo su verdadero valor para el desarrollo de las personas.
Los niños y niñas no pueden disfrutar de los aprendizajes, en
muchas ocasiones se ven sumergidos en un camino lleno de metas
por superar lo antes posible. Esto les lleva a recorrer el camino,
pero perder su ser en el mismo camino, perder la experiencia de
desarrollo y aprendizaje que supone el camino en sí.
4. Nos quejamos de que no comprenden y de que no saben
expresarse y por consiguiente no aprenden, solo repiten lo que
saben que han de repetir para superar los objetivos.
Detengámonos en el camino y démosles las herramientas de
comprensión y expresión, que no son otras que las habilidades
de LEER y ESCRIBIR. Herramientas estas que aportan la ilusión
imprescindible para el desarrollo y la creación de aprendizajes.
Desarrollar estos procesos supone devolverles la magia, de
aprender y de desarrollarse.
5. La construcción del aprendizaje de estos procesos no es una
tarea sencilla. En primer lugar los pequeños deben aprender la
relación arbitraria producida entre cada letra y su sonido, deben
aprender a realizar trazos y dominar nociones de orientación,
pero la cosa no se queda aquí. Conocer las letras, sus sonidos y
saber escribirlas no es saber leer y escribir; los pequeños deben
dar un paso más y aprender a entender el sentido de lo que
leen y a dar un sentido adecuado a lo que escriben.
6.
7. 1. Crea un ambiente donde los niños y niñas convivan con la lectura y la escritura
desde pequeños. Es importante que los pequeños observen estas habilidades en
su vida diaria, que nos vean leer y escribir, que vean libros y cuentos en casa.
2. Proporcionales aprendizajes relacionados, en lugar de aprendizajes aislados. Les
ayuda a motivarse y a entender el sentido. Por ejemplo si el niño o niña nos
pregunta por una letra de una palabra, le diremos que letra es, y relacionaremos
esa letra con otras palabras (siempre del vocabulario que conoce el niño/a y de su
interés)
3. Lee en voz alta a los pequeños desde un primer momento. Cuando les leemos en
voz alta, incluso cuando son bebés contribuimos al desarrollo de su lenguaje y de
su pensamiento, y favorecemos el futuro aprendizaje de la lectoescritura.
4. Escribe conjuntamente con ellos. Cuando estén aprendiendo a escribir, es bueno
que no lo vean como algo súper complicado o como una actividad aburrida o una
obligación. Por ello transformaremos esta ardua tarea en una actividad lúdica
compartida.
5. Relaciona la lengua oral con la lengua escrita. Haz hincapié en los diferentes
sonidos y en como las letras se colocan para dar lugar a esos sonidos. Para ellos
esto es un aprendizaje complicado es fundamental ayudarles a dar sentido a ese
conjunto de símbolos.
8. 6. Anima al niño/a a experimentar leyendo y escribiendo. El aprendizaje se basa
en la experimentación. No debemos poner límites a su experimentación. Es
bueno que el pequeño lea palabras que encuentra en un cartel, en un bote, etc.
7. Ten en cuenta la edad y el nivel de desarrollo de cada niño/a. Los aprendizajes
son personales y cada persona los va construyendo a su propio ritmo.
8. Valora más los aciertos que los errores. No prestes demasiada atención a los
errores, siempre que aprendemos es habitual equivocarnos.
9. Usa materiales del medio. Todo lo que podamos emplear es bueno. Ya que hace
que los pequeños vean la lectura y la escritura presentes en todo lo que les
rodea.
10. Háblales de la lectura y de la escritura.