Pocas empresas (exitosas) siguen empeñadas en contar con plantillas lo más homogéneas posible. La diversidad es valorada no solo porque contribuye a mejorar la imagen de la compañía en el mercado sino por lo mucho que aporta a nivel operativo.
El Valor de la Diversidad en el Lugar de Trabajo - Rodrigo Ruiz de Teresa Trevino
1. E N E L
L U G A R D E
T R A B A J O
R O D R I G O R U I Z D E T E R E S A
T R E V I N O
E L V A L O R D E L A D I V E R S I D A D
2. CONOCIMIENTO
PREVIO
La diversidad no puede imponerse. Se
trata de una filosofía que necesita
tiempo para implementarse y que
requiere de ciertos requisitos previos.
Por ejemplo, si la cultura de algunos
nuevos empleados resulta
notablemente distinta a la imperante en
el lugar de trabajo, nunca está de más
conocer estas particularidades. La
forma más edificante de aproximarse a
otras culturas es conociéndolas in situ
(visitando otros países) pero, dado que
esto no siempre es posible, la lectura
puede ser una alternativa.
3. RESPETO Y
TOLERANCIA
Ligado a lo anterior, no debe
obviarse que la llegada de
profesionales pertenecientes a las
culturas más diversas puede
provocar algún pequeño conflicto
en la oficina. No se trata
necesariamente de racismo sino,
simplemente, de desinformación.
Para fomentar el respeto y la
tolerancia, siempre es útil
desmontar los tópicos sobre otras
culturas. Nunca está de más contar
con algún plan formativo específico
en esta línea.
4. A P E R T U R A A
N U E V A S
I D E A S
Contratar a profesionales muy diversos para que se
adapten por completo al funcionamiento de la empresa
no es del todo correcto. Una de las principales ventajas de
la convivencia entre diferentes es lo que unos pueden
aportar a otros. Una cosa es asimilar y otra muy distinta
combinar. Si se contratan empleados muy heterogéneos
pero se exige seguir un mismo patrón de conducta y/o
trabajo, la diversidad seguirá brillando por su ausencia.
5. P R E G U N T A R N O E S O F E N D E R
Pero sobreentender, sí, cabría añadir. Si no sabemos cómo abordar
alguna cuestión relacionada con la cultura de un empleado, lo más
sensato es siempre planteárselo de manera educada pero directa.
Siempre es preferible reconocer nuestras lagunas culturales que
tratar de vadearlas, dado que en este caso es mucho más posible
que se produzcan roces indeseados. Ten presente que muchos de
estos profesionales se sentirán más valorados si nos interesamos
por su cultura.
6. D I V E R S I D A D T A M B I É N E N L A
D I R E C C I Ó N
Reconocemos que no se trata de un paso sencillo pero, si queremos
que nuestra empresa sea plenamente diversa, el acceso a los puestos
de mayor responsabilidad no puede limitarse a profesionales
culturalmente uniformes. Lógicamente, solo puede promocionarse a los
mejores, pero no debe darse la apariencia de que solo se asciende a
los “nuestros”.