Este documento describe cómo la literatura puede usarse para promover valores como la honestidad y la tolerancia entre los estudiantes. La autora eligió este enfoque debido al aumento de la violencia entre los niños. Los estudiantes responden con agrado a las actividades de lectura porque no suelen hacer esto en casa. En conclusión, la lectura permite crear un ambiente escolar más positivo y amistoso mientras se mejoran las habilidades de lectura y escritura.