Este documento resume los argumentos a favor de la educación diferenciada, donde niños y niñas estudian en escuelas separadas. Afirma que esta educación separada favorece un mayor logro académico y desarrollo del liderazgo en las niñas, así como una mayor disciplina y estructura en los niños. También sugiere que permite una educación más personalizada y el desarrollo de amistades sinceras del mismo sexo durante la adolescencia.