1. EL REAL BRASILERO COMO MONEDA REGIONAL
La dolarización para una región económica puede tener grandes ventajas y
desventajas, estas podrían ocasionar circunstancias muy desfavorables o no para
la estabilidad económica de un país, región y porque no del mundo. La economía
puede encontrar cuellos de botella y fuertes contracciones en donde la recaída en
la recesión y el encaminamiento de una extensa depresión vienen a ser
prácticamente inevitables.
Dentro de las desventajas podemos encontrar que no es muy rentable ya que esto
no genera rentabilidad y se toman riesgos de desvalorización en el comercio,
perdiendo oportunidad de participación, se pierde autonomía en la política
monetaria y cambiaria, por lo demás, pierde el “señoraje” entendiéndose como lo
que cuesta producir una moneda y el valor monetario de esa denominación costo-
valor, por otra parte podemos denotar las ventajas: se genera confianza y
simplicidad en una sola moneda, la estabilidad económica, bajando la inflación y
estableciéndola para evitar la fuga de capitales, el PIB tiende a estabilizarse y los
bajos costos de transacción .
En los últimos años el sistema monetario y los mercados globales se han
encontrado amenazados por la caída del dólar; lo cual no es solo la caída del signo
monetario sino de una moneda que ha estado cumpliendo el papel de dinero
mundial; lo que ha ocasionado que un país como Brasil asuma el riesgo de convertir
su moneda local como el reemplazo del dólar en la región suramericana, siendo una
suceso muy atractivo para este país.
Para el continente sudamericano Brasil en la actualidad es uno de los países de
mayor ejemplo económico, como conocemos “el Real” es su moneda de curso legal
y como la única posibilidad concreta de reducir la ancha brecha que separa a las
monedas sudamericanas con el dólar y el euro.
Brasil como país en su pleno desarrollo ha adoptado una política de apertura de su
economía al capital extranjero, planteando estrategias que buscan favorecer el
comercio exterior, con lo que ha facilitado la negociación, ha implementado sistemas
de pagos con su propia moneda en una institución financiera convenida, también
ha evitado la caída de las barreas arancelarias y políticas, eliminó las trabas
existentes al establecimiento de empresas de capital extranjero en su territorio, y la
reducción de los costos de transacción en el comercio internacional, por ultimo han
promovido estos ajustes en su política con el fin de estimular nuevas inversiones
directas de la economía brasileña, para el gobierno estos son elementos muy
importantes para su pleno crecimiento económico y el desarrollo industrial del país.
2. Las perspectivas que tiene el gobierno brasilero es que el real se fortalezca en
relación al dólar, aunque no necesariamente retorne a los niveles más altos que ha
solido establecer en los últimos días, basándose en el ascendente desarrollo que
ha observado la economía de este país en los últimos años. Este crecimiento y
desarrollo potencial, será un elemento que atraiga un significativo flujo de capitales
externos que influirán hacia la apreciación del real.
Con la fuerte depreciación que ha sufrido el real, la economía brasileña ha logrado
mejorar las condiciones de competitividad, pero a pesar de esto los gobernantes no
están interesados en quedarse en este nivel, ya que este nivel del tipo de cambio,
puede generar un impacto negativo a través de un incremento inflacionario.
La fuerte depreciación del real brasilero es uno de los impactos que mas ha llamado
la atención debido a su magnitud ya que Brasil posee una economía solida y en
crecimiento, con indicadores macro que gozan de muy buena salud y una política
monetaria previsible, transparente e independiente, además, logro un sistema
financiero prospero en donde ingresan grandes cantidades de dólares de manera
continua y creciente con facilidad de intercambio sin obstáculos.
Finalmente el real en momentos de dificultad e incertidumbre puede deparar
interesantes ganancias en el momento que los mercados lleguen a estabilizarse o
incluso antes de que esto ocurra, sin embargo con niveles elevados de las tasas de
interés, la economía brasileña mantiene un atractivo para los capitales de inversión
que se animaran a retomar en cuanto se estabilicen los mercados financieros
internacionales.