1. Tipología textual: 2º Bach
Argumentación: “La importancia de las revistas culturales y
de divulgación científica en la actualidad”
Parece razonable pensar que el conocimiento de las normas y costumbres
vigentes en nuestras sociedades, de sus manifestaciones artísticas y culturales y de sus
avances tecnológicos y científicos nos capacitan para participar activamente en ellas;
ciertamente, uno se siente reconfortado y, al mismo tiempo, hasta sorprendido cuando
comprende la importancia de la cultura en la vida del individuo: no sólo le permite salir
de la ignorancia sino que, además, constituye un elemento imprescindible para
instalarse críticamente en el mundo que le rodea. No en vano, los antiguos griegos
pensaban que el conocimiento nos hace más libres, más dueños de nosotros mismos y,
en definitiva, más felices. Sin embargo, es un hecho que no todos poseemos las
herramientas conceptuales y destrezas necesarias para asimilar los últimos
descubrimientos científicos, los recientes discursos filosóficos, los novísimos delirios
de creación artística… trozos, al fin y al cabo, de pensamiento y de imaginación con
rostro humano.
Por ello, hay que valorar y reconocer en su justa medida la impagable labor de
“culturización” y de humanización que ciertas revistas de divulgación del saber como
“Historia y vida”, “National Geographic” o “Muy Interesante” ( grato recuerdo de mi
infancia) juegan a la hora de hacernos copartícipes de eso que llamamos “memoria
colectiva”. Sin ellas se abre una brecha, una ruptura, y, en última instancia, una
desigualdad social entre aquellos que ya saben y aquellos que desean saber.
En este sentido y, para finalizar, estar informado de las novedades científicas,
culturales y, tal como insiste Eduardo Galeano en su texto, también económicas y
políticas, no sólo es un derecho sino una obligación pues, en cierto modo, somos
aquello que conocemos y experimentamos.