1. EL LENGUAJE COLOQUIAL
Es el empleo del lenguaje en un contexto informal, familiar y distendido. Coloquio es
sinónimo de conversación. Por extensión, el lenguaje coloquial es el que,
independientemente de la profesión o estatus social del hablante, se utiliza en la
conversación natural y cotidiana.
Aplicaciones del lenguaje coloquial
Algunos ejemplos del uso coloquial en el idioma español actual son:
"¿Qué pasa, cómo va?"; "¿Hola, cómo estás, qué hay de nuevo?"; "¡ay que oso!"; "¡ay,
nada que ver!".
El uso de opciones propias del registro coloquial no es admitido en contextos de gran
formalidad o como alternativa a las jergas especializadas, pues puede dar lugar a
malentendidos. La Asociación de Academias de la Lengua Española, que contribuye al
establecimiento de la norma del idioma, incluye definiciones y usos de los términos
coloquiales en sus obras con la indicación de que pertenecen a este registro.
Características propias del lenguaje coloquial
La oralidad. Al ser oral es un lenguaje más relajado y permisivo, ajeno, en ocasiones, a
la norma lingüística. A veces puede ir acompañado de gestos.
La improvisación. La espontaneidad de este lenguaje hace que parezcan impropiedades,
repeticiones de palabras, uso de un código poco elaborado, etc.
La imprecisión. Este rasgo se manifiesta con el uso de palabras poco precisas (ómnibus),
y el poco uso de adjetivos y adverbios, ya que éstos precisan al sustantivo y al verbo.
Nivel fónico
Entonación. Al ser oral adquiere gran importancia la entonación. Ésta suele ser variada
(interrogativa, exclamativa y enunciativa). También es frecuente la entonación truncada
(puntos suspensivos), porque no se hallan las palabras para expresar algo o el receptor,
que comparte la misma situación comunicativa que el emisor, las sobreentiende.
Contracciones. El uso de éstas obedece al principio de economía del lenguaje. (`Tele',
`pa ca'…).