El Manual de Oslo es una herramienta que se utiliza para medir la innovación de las empresas en los países, pero además trata los conceptos fundamentales que todo empresario debe conocer y es un breve resumen de esos conceptos lo que presento en este artículo.
1. La innovación empresarial según el manual de Oslo.
La innovación debe ser una característica representativa de cualquier empresa
que desee lograr alcanzar el éxito dentro de un determinado mercado. Pero para la
OCDE y Eurostat la innovación no solo es una característica fundamental para las
empresas sino que también debe de serlo para todo un país en general, por ser un
ingrediente básico para lograr el crecimiento económico. Es por esa razón que estas
instituciones desarrollan el manual de Oslo, para establecer una guía adecuada para
medir y analizar las actividades consideradas como innovadoras dentro de las
instituciones de un país.
Pero, ¿qué son las actividades innovadoras? Antes de definir a dichas
actividades, deberíamos conocer lo que significa innovación y según este manual “la
innovación es la introducción de un nuevo, o significativamente mejorado, producto
(bien o servicio), de un proceso, de un nuevo método de comercialización o de un nuevo
método organizativo, en las practicas internas de la empresa, la organización del lugar
de trabajo o las relaciones exteriores”1.
Por lo que las actividades innovadoras vendrían a ser todas aquellas operaciones
que permiten que la innovación sea efectiva, sin importar el área en la que se realice,
como por ejemplo una actividad innovadora vendría a ser el mejoramiento de un
producto que ya se encuentra en el mercado, con lo que se podría dar un valor agregado
a dicho producto, para lograr posicionarse en la mente de los consumidores. De esta
manera las actividades innovadoras podrían ser aplicadas en cuatro áreas distintas:
producción, los procesos, mercadotecnia y organización.
La innovación de productos está relacionada directamente con el bien o servicio
de la empresa, siendo este un producto totalmente nuevo o simplemente un producto
relativamente mejorado a los productos ya existentes en el mercado. Dichas mejoras
podrían aplicarse, ya sea en sus características técnicas o en el uso al cual se le destina,
para lo cual se puede aprovechar el constante desarrollo de nuevos conocimientos y
nuevas tecnologías. Sin embargo para realizar dicha mejora se debe analizar al mercado
potencial y su posible reacción ante este producto mejorado, para que de esa manera la
innovación en el producto logre ser exitosa.
Por otro lado la innovación de procesos puede ser aplicado al proceso de
producción o de distribución, o en todo caso en ambos; con el fin de lograr disminuir los
costos, o incrementar la calidad del producto. Para que dicha innovación sea efectiva la
empresa tendría que desarrollar cambios en sus maquinarias, equipos o técnicas de
1 Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), y Oficina de Estadística de las
Comunidades Europeas (Eurostat) (2006). Manual de Oslo: Guía para la recogida e interpretación de
datos sobre innovación. Grupo Tragsa. Pág. 56.
2. producción o distribución, lo que significaría una gran inversión, pero que en el largo
plazo le podría generar mayores beneficios.
En cuanto a la innovación de mercadotecnia, se podría decir que es la
innovación que está relacionada directamente con la comercialización de un bien o
servicio, de tal manera que los cambios más notorios tendrían que ver con el diseño,
envase y promoción del producto. El objetivo principal de este tipo de innovación es dar
a conocer a los clientes que este producto es el más adecuado para satisfacer sus
necesidades, y que lo puedan adquirir en el momento y lugar que más lo necesitan; para
lo cual se tendría que implementar un nuevo método de comercialización que logre
alcanzar a la mayor cantidad de clientes posibles. Sin embargo si se utiliza los métodos
de comercialización en materia de promoción del producto, se tendría que desarrollar
nuevos diseños en el producto y a la vez utilizar los medios más adecuados para dar a
conocer al público nuestro producto.
El último tipo de innovación pero no menos importante es el de innovación de
organización, el cual está relacionado con los procesos administrativos. El objetivo de
este método es buscar la satisfacción de los trabajadores de la empresa, para de esta
manera incrementar la productividad, o desarrollar estrategias administrativas que
ayuden a disminuir los costos en los que incurre la empresa.
Debemos tener en cuenta que dejar de utilizar un proceso, un método de
comercialización, o un método de organización no son considerados como una
innovación al igual que la sustitución o ampliación de equipos, al igual que cualquier
otro modelo ya instalado y utilizado de manera general por la mayoría de empresas. Es
decir que para que un producto sea considerado como innovador debe incluir un
elemento de novedad ya sea para la empresa, el mercado o el mundo entero, o en el
mejor de los casos para los tres niveles mencionados.
Para una empresa por si sola le es más complicada la innovación, por lo que
dicha actividad depende mucho de los vínculos que esta tenga ya sea con las
universidades, ministerios, proveedores, etc. Si la empresa presenta buenos vínculos
podrán cooperar entre instituciones para poder desarrollar un mejor programa de
innovación, que genere mayores beneficios para todos los involucrados.
Como toda actividad la innovación tiene sus riesgos, de los cuales uno de los
más importantes es el costo de aplicarla, sin embargo también tiene sus beneficios y
estos se obtendrán en razón de los objetivos planteados, los cuales dependen del tipo de
innovación que se utilice.
En conclusión la innovación es una herramienta que si se utiliza adecuadamente,
con la cooperación interinstitucional, podría generar grandes beneficios, no solo para las
empresas, sino que también para los consumidores que podrán adquirir mejores
productos, a un mejor precio, en la cantidad necesaria y en el momento adecuado.