La ordenación del territorio y la ordenación urbanística como función pública
1. La Ordenación del Territorio
y la Ordenación Urbanística
como Función Pública
Prof. Francisco A. de Jongh Sarmiento
2. Políticas Públicas urbanas ¿Qué son?
Las políticas públicas surgen como espacios centrales de mediación y resolución de conflictos
entre colectivos con diversas particularidades. Una política es una compleja y flexible
interconexión de procesos en la que los problemas y sus soluciones son constantemente
redefinidos o re-inventados. Estas deben considerarse como propuestas de regulación pública
de los múltiples problemas y contradicciones que afrontan las sociedades actuales. Asimismo,
entraña un mecanismo de asignación pública de recursos y oportunidades entre los diferentes
grupos sociales con intereses y preferencias en conflicto (Brugué y Gomà, 1998).
Las políticas urbanas constituyen la dimensión espacial del Estado de bienestar y, la regulación
pública de la división económica y social del espacio. Estas tienen el reto de diseñar y poner en
práctica nuevos y potentes instrumentos de regulación pública de la ciudad, si no se quiere
que ésta sea el resultado estricto de la lógica del mercado. El ámbito sustantivo de la política
urbana incluye los siguientes sectores de actuación pública y de la gestión del territorio urbano:
la localización y reestructuración económica del territorio, la regulación de usos por medio del
ordenamiento urbanístico, la vivienda en todos sus aspectos, el transporte colectivo y los
equipamientos e infraestructura conectados a la oferta de servicios públicos.
3. En efecto, la secuencia que articula la hegemonía política y técnica de las políticas
macroeconómicas (empleo, cambio, recaudación fiscal, términos de intercambio comercial,
etc.), las políticas económicas sectoriales (agro, industria, transporte, etc.), las políticas
económico-sociales (educación, salud, etc.) respecto de otras dos instancias crecientemente
desconsideradas (las políticas económicas regionales y las políticas económicas urbanas )
resultan notables para el caso latinoamericano y divergentes de procesos contemporáneos,
en otros escenarios, como ser en algunos países europeos.
En general, realidades tan concretas como los espacios regionales o urbanos han sido
convertidos en términos abstractos de esos diseños políticoeconómicos y consecuentemente,
han experimentado efectos de rebote resultantes del desarrollo de tales enfoques.
4. El impetuoso proceso de concentración metropolitana en algunos casos (más precisamente,
las migraciones del campo a la ciudad o de los rangos urbanos medios y menores a los
mayores), el expansivo crecimiento hacia la periferia (la suburbanización) y la fragmentación
socio – territorial son algunos de esos rasgos destacados de la nueva geografía urbana.
En conclusión, el principal problema factiblemente radica en la debilidad creciente del Estado
para articular una política urbana consistente y mediadora de los intereses de diversos
actores, que construya una perspectiva de ciudad como hecho también productivo, que
asegure un adecuado balance entre beneficios privados e intereses públicos, capaz de
anticiparse a los conflictos sociales y urbanos que proliferan en su seno y por último, que sea
administrada democrática y transparentemente.
5. Ambiente
Si bien el concepto de medio ambiente es repetido con frecuencia a nivel individual y
de los grandes medios de comunicación, su real importancia se ha puesto de
manifiesto en los últimos decenios, fruto de la mayor conciencia ecológica y de las
consecuencias de la destrucción del entorno provocada por efectos no deseados del
progreso industrial y económico.
En forma sinóptica, puede entenderse como medio ambiente a todo aquello que
rodea e interactúa con los seres vivientes en general, pero con el hombre en
particular. Esta interacción motiva que la acción de la humanidad modifica al medio
ambiente, pero también este entorno moldea las más variadas circunstancias
individuales y sociales de las personas. Mientras que en términos estrictamente
biológicos el medio ambiente comprende a los factores abióticos del ecosistema, en
el terreno social se involucra otros aspectos, como la educación, la cultura y los
vínculos entre personas, pueblos y naciones.
desde Importancia http://www.importancia.org/ambiente.php#ixzz3EBvAB3Nr
6. Ordenación Territorial
Las experiencias y conceptualizaciones sobre ordenamiento territorial en el
mundo permiten colegir que se trata de una política de Estado y un
proceso planificado de naturaleza política, técnica y administrativa, cuyo
objeto central es el de organizar, armonizar y administrar la ocupación y
uso del espacio, de modo que éstos contribuyan al desarrollo humano
ecológicamente sostenible, espacialmente armónico y socialmente justo.
Lo anterior pone en evidencia que en el ordenamiento territorial confluyen
las políticas ambientales, las políticas de desarrollo regional, espacial o
territorial y las políticas de desarrollo social y cultural, cuya naturaleza es
determinada por el modelo de desarrollo económico dominante en cada
país.
7. Con las políticas de ordenamiento, algunos países latinoamericanos como
Venezuela, Bolivia, Honduras y El Salvador buscan corregir los problemas
de uso y ocupación inadecuada y desequilibrada del espacio y el uso
irracional de los recursos naturales, algo similar se presenta en Nicaragua.
Tales problemas, en conjunto con la creciente conciencia de la
irracionalidad de los modelos económicos desarrollistas y la búsqueda de
alternativas de desarrollo sostenibles, han estimulado la adopción del
ordenamiento territorial como estrategia de los estados para armonizar las
actividades humanas con el aprovechamiento de los recursos naturales y
con la distribución social y regional equilibrada de los beneficios de tales
actividades. Se trata es de intervenir, de manera voluntaria, el orden
territorial injusto y desordenado, creado de manera espontánea por las
fuerzas económicas; para inducir la construcción de escenarios deseados
desde el punto de vista ambiental, social y espacial (Massiris, 1991).
8. Visto así, en el Ordenamiento Territorial el espacio pierde el carácter pasivo propio de la visión
sectorial, para convertirse en estructurante de los objetivos, las políticas y las acciones públicas y
privadas, tanto sectoriales como territoriales. Se trata, en este caso, de articular los objetivos
económicos, sociales, ambientales y administrativos con el territorio, racionalizar las actuaciones
sobre éste y orientar previsoramente su desarrollo y aprovechamiento sostenible, basado,
especialmente, en estrategias de uso, ocupación y manejo del territorio y de desarrollo
territorial.
Dentro de este contexto, el Ordenamiento Territorial trasciende su consideración de apéndice o
complemento de las políticas de desarrollo económico para convertirse en un nuevo enfoque,
un nuevo estilo de planificación, un nuevo sistema de valores, o una utopía, en la que la visión
sectorial y economicista del desarrollo, cede su paso a una visión integral, humanista y
prospectiva, en la cual las políticas económicas incorporan los valores de sostenibilidad
ambiental, equilibrio regional y bienestar social.
9. Urbanismo
El urbanismo es el conjunto de disciplinas que se encarga del estudio de
los asentamientos humanos para su diagnóstico, comprensión e
intervención. El urbanismo utiliza a la geografía urbana como herramienta
fundamental, e intenta comprender los procesos urbanos a fin de
planificar las intervenciones para la cualificación del espacio.
El término "urbanismo" procede de la palabra latina urbs (‘ciudad’),la cual
se desarrolló en la antigüedad y se refería por antonomasia a la capital del
mundo romano, es decir, Roma. Aparece por vez primera en la Real
Academia Española en 1956, donde se define como “ccoonnjjuunnttoo ddee
ccoonnoocciimmiieennttooss qquuee ssee rreeffiieerreenn aall eessttuuddiioo ddee llaa ccrreeaacciióónn,, ddeessaarrrroolllloo,,
rreeffoorrmmaa yy pprrooggrreessoo ddee llooss ppoobbllaaddooss eenn oorrddeenn aa llaass nneecceessiiddaaddeess ddee llaa vviiddaa
uurrbbaannaa”. Es claro que la idea de poblado no se ajusta a la dimensión
actual del urbanismo, siendo la idea de ciudad, en el sentido moderno del
término, la que se adecúa más al campo de esta disciplina.
10. Lo urbano tiene una condición que más profundamente distingue la vida
moderna de aquella tradicional-rural, no es una condición espacial ni una
delimitación demográfica o productiva, sino una conducta, una forma de
vida, que está determinada por las singulares características de la ciudad
en tanto entidad material: específicamente su tamaño, densidad y
heterogeneidad. Lo urbano es el efecto que el tamaño, la densidad y la
heterogeneidad de la ciudad tienen sobre el carácter social de la vida
colectiva.
11. Aunque el término urbanismo se utilizó inicialmente para designar todos los
fenómenos de ordenación urbana, a medida que el fenómeno
constructivo y edificatorio ha traspasando el espacio propiamente urbano,
dicho término ha sido desplazado en la práctica por el de Ordenamiento
territorial cuando se quiere hacer referencia a intervenciones en suelos
extra urbanos, donde entran en juego intereses supralocales protegidos
desde instancias públicas superiores: defensa nacional, carreteras, medio
ambiente, etc. En España, el término Ordenación del Territorio se emplea
también para la planificación en ámbitos supramunicipales, en los que
generalmente existen relaciones funcionales importantes entre los
municipios y se aprecia la necesidad de coordinar los planes urbanísticos
municipales.
12. En la actualidad el término urbanismo se aplica a la ordenación urbana; a
todos los conocimientos relacionados con la construcción de ciudades o
núcleos urbanos, y se distingue del término “urbanización”, el cual está,
hoy en día, directamente relacionado con los procesos constructivos, pero
no con la ordenación urbana. El término ordenación del territorio se utiliza,
en cambio, para designar la actividad urbanística orientada a la
planificación del suelo interlocal, desde una óptica más amplia de
ordenación espacial, abarcando ámbitos de carácter rural.
13. El Objeto de la Ordenación Territorial -
Ambiental
Tomado de la exposición del Prof. Elías Méndez Vergara en la XXV
Convención de la Unión Panamericana de Asociaciones de Ingenieros.
Todo proceso de ordenación territorial - ambiental pretende incidir sobre
unas condiciones geobiofísicas en un territorio determinado, articuladas a la
dinámica socioeconómica. Ello significa que el objeto de la ordenación
territorial - ambiental es intervenir los sistemas geobiofísicos y socioeconómicos
para lograr objetivos socioterritorial y ambientales referenciados
geográficamente, de manera de lograr satisfacer las necesidades del
crecimiento económico y social, la dinámica del poblamiento, la asignación
de usos y la localización de actividades económicas permisibles, el
equipamiento territorial y la accesibilidad, en un todo armónico con la base
de sustentación ecológica, en la búsqueda, además, de mitigar, corregir y
prevenir los efectos negativos provocados por las actividades económicas y
sociales que promueve el Estado o los particulares.
14. Ello implica tener el conocimiento apropiado sobre los sistemas
geobiofísicos (condiciones físico - naturales) y socioeconómicos y los
efectos que provocan sobre estos sistemas las actividades económicas y
sociales, particularmente las referidas a la ocupación de los sistemas
socioterritorial y ambientales y a la afectación de los recursos naturales.
Si el objeto expresa el campo de trabajo donde opera la ordenación
territorial - ambiental, su comprensión exige establecer los alcances de
esta modalidad de planificación, los cuales son, entre otros, los siguientes:
15. La concepción de una opción de desarrollo, que coloque al hombre y a los agentes del
poder público como miembros conscientes de una sociedad que comprende relaciones
interactuantes : del hombre con sus semejantes y con su entorno vital.
La dinámica del poblamiento y la afectación de los recursos naturales como
consecuencia del crecimiento demográfico y económico
La definición de zonificaciones ambientales, la asignación de usos del territorio y la
localización de actividades permisibles, en función de una dinámica social y de las
condiciones del medio físico - natural.
La localización de los asentamientos humanos y de la infraestructura de servicios en
consideración con los efectos sobre la base de sustentación ecológica.
La organización de las infraestructuras de equipamiento y de la red vial y de transporte,
como elementos configuradores del territorio y modificadores de unidades ecológicas.
La zonificación de áreas de elevado valor estratégico, de áreas susceptibles a riesgos
naturales, de áreas a ser protegidas, de áreas de producción económica y de áreas de
usos múltiples.
La preservación de la diversidad biológica y el fortalecimiento de la diversidad cultural.
La organización de una estructura institucional, legal y técnica adecuada para la gestión
del proceso dentro de mecanismo de participación.