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INTRODUCCIÓN
La función docente dentro de la actividad física empieza desde las sociedades
primitivas hasta finales del Siglo XIX. En Grecia, la enseñanza se centraba en las
actividades físicas, la intrepidez y las proezas militares, dirigida únicamente a los
niños, no había escuela para mujeres y esclavos. Había tres tipos de entrenadores
especializados: Paidotriba (especialista en juegos), Sixtarca (especialista en
carreras) y Agonistarca (especialista en lucha). La preparación era integral, es
decir, se instruía al atleta a nivel deportivo, espiritual e intelectual. En Roma, las
Olimpiadas se prohibieron porque los competidores se presentaban bajo el influjo
de drogas, lo que generaba un caos social con robos, altercados y peleas. No
obstante, entrenaban para tener un ejército fuerte (1).
En cuanto al deporte a nivel mundial (1920-1930), la preparación de los
entrenadores fue motivada por la burguesía. Paavo Nurmi ganó casi todas las
pruebas en las Olimpiadas celebradas durante esta década gracias a la labor de
su entrenador Pinkala, y se tomó como modelo para estudiarlo como deportista.
Éste desarrolló varios conceptos clave: 1) Necesidad en la alternancia volumen-
intensidad (cuando uno aumenta el otro disminuye), 2) El entrenamiento específico
se construye sobre un amplio entrenamiento general y 3) La alternancia entre
trabajo y recuperación. En el periodo 1930-1950, los entrenadores Rusos
traspasaron la filosofía social al deporte, realizaron muchas investigaciones y
obtuvieron un avance significativo. Dantin afirmaba que lo más importante era la
especialización a largo plazo (principio de la planificación general del
entrenamiento deportivo), proponiendo la división de la temporada en tres
periodos: Preparación, Competición y Transición (1).
Entre 1950 y 1960, la República Democrática de Alemania tiene gran éxito en el
deporte internacional gracias a su entrenador Ozolin, quien manifiesta que el atleta
debe ser preparado de manera multilateral y, en un segundo momento, realizar
ejercicios que mejoren su competencia. Matveiev propone que el calendario de
competición define el entrenamiento, se debe construir la forma deportiva y hay
pérdida de capacidades cuando se enfrenta al estrés. De 1960 a 1970, se busca el
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apoyo de médicos, cardiólogos y fisiólogos que ayuden a entender lo que ocurre
en el deportista cuando entrena. Se diseñó el entrenamiento a intervalos,
concluyendo que entrenar es tan importante como recuperarse (mientras más se
entrena, más tiempo se necesita para recuperarse). Durante el periodo 1970-1990,
Astrand explica el consumo máximo de oxígeno cuando se entrena; Mader
descubre que la concentración de lactato en sangre es representativa del nivel de
esfuerzo; Platonov menciona la importancia de respetar el tiempo de recuperación
entre las sesiones de entrenamiento. A partir de 1980 se profesionaliza el deporte,
los centros de alto rendimiento, diferentes modelos de enseñanza y una elevada
calidad en los entrenadores deportivos (1). No obstante, Elola (1993) enfatiza que
la enseñanza no es necesariamente un proceso exitoso, no culmina
necesariamente en el máximo de aprendizaje. No es tampoco un proceso que
deba conducir al fracaso de algunos. Es el esfuerzo permanente por el éxito y el
reajuste constante para alcanzarlo en la medida de lo posible; que la mayor
cantidad de alumnos aprenda al máximo (2).
Pero, quién es el docente deportivo?, que características lo definen?, a saber: Es
un sujeto activo, creador, innovador y responsable que se mantiene en una
preparación continua, apoya el crecimiento y desarrollo de la educación de sus
alumnos e inculca la predisposición al aprendizaje. Por ende, para que el
entrenador pueda cumplir sus fines educativos es necesario que esté bien
preparado en saberes, destrezas y valores; es decir, debe tener un amplio
conocimiento de su especialidad ya que enseñar es un arte, por lo que debe ser
eficiente en este aspecto. Es el especialista que dirige todo el proceso pedagógico
del entrenamiento deportivo, para ello planifica, organiza, controla, analiza y
evalúa todas las actividades concernientes a este proceso (Figura 1) (1). No
obstante, independientemente del nivel educativo en el que trabajen, deben ser
profesionales que deben diagnosticar el contexto de trabajo, tomar decisiones,
actuar y evaluar la pertinencia de las actuaciones a fin de reconducirlas en el
sentido idóneo (2).
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De hecho, en 1771 las personas que tenían la intención de dedicarse a la
docencia necesitaban cumplir los siguientes requisitos: buena fama, buena
presencia, buenas costumbres y un conocimiento basto comprobado (1). Pues
creo que al paso del tiempo se pueden considerar vigentes, independientemente
del área del conocimiento donde se quiera trabajar como docente. Y, como
muestra de ello, lo corroboran los conceptos aprendidos en los módulos de la
Certificación para Entrenadores de Taekwondo promovida por FMTKD-CONAE-
Sport & go Consultores. De hecho, lo que se pretende con este programa es que
no existan diferencias entre la formación de entrenadores de las grandes ciudades
con los de lugares remotos, es decir, que el acceso a la capacitación no sea
limitado ya que un instructor improvisado puede crear dificultades en la formación
integral de niños, jóvenes y adultos propiciando desde daños a la integridad física
hasta propiciar el abandono de la práctica deportiva (2).
Figura 1. Aspectos relevantes en la función del docente certificado en Taekwondo.
DOCENTE CONOCIMIENTO TAEKWONDOIN
Saberes
Destrezas
Valores
Asimila
Transmite
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RESISTENCIAS AL CAMBIO
En realidad no creo tener resistencias al cambio. Después de hacer un análisis
profundo de algunos conceptos, puedo informar que considerando los vertidos en
la ponencia, puedo afirmar lo siguiente:
1) Con respecto a la ignorancia, si entiendo la importancia de participar como
docente deportivo en la escuela a la que pertenezco, toda vez que me
encuentro inscrito en el CONAE para certificarme como entrenador
deportivo bajo un esquema de enseñanza-aprendizaje que me permitirá
aplicar los conceptos aprendidos en el proceso pedagógico del
entrenamiento deportivo planificando, analizando, organizando, controlando
y evaluando todas las actividades inherentes para obtener los resultados
que me he propuesto como entrenador. Además, es necesario prepararse
científicamente para comprender todos los procesos involucrados en la
forma deportiva y no sólo actuar de manera empírica.
2) En cuanto a no puede cambiar, por supuesto que he aprendido como ser
diferente. Un aspecto de gran ayuda en este sentido es la interacción con
profesores de diferentes asociaciones y escuelas, con los que comparto
conocimientos teóricos y prácticos. Asimismo, quiero resaltar el apoyo y
motivación por parte de mi padre, también profesor de Taekwondo, quien
me ha enseñado que la única forma de ser un buen entrenador es
profesionalizándome, por lo que estamos en constante actualización
tomando cursos no sólo de Taekwondo sino de diversas disciplinas como
Haedong Kumdo, Kali escrima, Arte marcial combate extremo, entre otros.
Su mensaje en la tesis de Cinta Negra 1 Dan es: “la única forma de
enfrentar un reto, es arriesgándose”, y yo estoy corriendo el riesgo de ser
mejor entrenador de Taekwondo al estudiar en el CONAE.
3) No cree en el cambio. Definitivamente siempre he pensado que cualquier
cambio siempre conlleva consideraciones positivas. Por ejemplo,
independientemente de haberme formado en Moo Duk Kwan y que esta
institución cuenta con sus propios programas de formación y actualización,
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conocer y adoptar nuevos esquemas de enseñanza-aprendizaje dentro del
Taekwondo permite integrar innovaciones aplicables a las expectativas de
nuestros alumnos. En ocasiones, cuando algún compañero profesor de otra
escuela, por razones de trabajo o salud no puede continuar con sus clases,
no me importa ponerme un uniforme que tenga su escudo y auxiliarlo
mientras se reincorpora a su actividad deportiva.
4) El no quiere cambiar lo considero una posición de mediocridad, porque
precisamente indica evasión de la responsabilidad, miedo a ser desplazado
por personas que se preparan de manera competente y por supuesto, si se
siente en riesgo puede perder su estado de confort. Por el contario, a mi me
gustan los retos, la sana competencia y si puedo interactuar con profesores
que estudian el Taekwondo en sus diferentes contextos, trato de aprender
sus conocimientos, ponerlos en práctica y reconocer que hay personas que
son motivadores del desarrollo en la disciplina.
PROCESO PEDAGÓGICO
Acostumbro a planificar el entrenamiento deportivo de acuerdo con las tres fases
correspondientes: precompetitiva, competitiva y postcompetitiva. El macrociclo se
estructura de acuerdo con los eventos de importancia para las expectativas de la
escuela, por ejemplo torneos metropolitanos y nacionales. Si mi macrociclo inicia
en marzo y termina en julio (5 meses), este periodo se divide en 5 mesociclos (de
un mes) y en microciclos de una semana. Generalmente utilizo un microciclo para
el acondicionamiento físico general y tres para el reforzamiento de las habilidades
básicas del deportista: resistencia, fuerza, velocidad, elasticidad y coordinación.
Para completar el periodo precompetitivo continúo con los aspectos técnicos,
tácticos, psicológicos y de confrontamiento (escuela de combate), intercalando
aspectos de valores y espiritualidad; en algunas ocasiones involucro a los padres
de familia. En el periodo competitivo movimientos especiales y elementos técnico-
tácticos de ataque, defensa y contraataque. Finalmente, en la fase
postcompetencia gestos de desentrenamiento con periodos de relajación. Siempre
respetando la aplicación del calentamiento y los periodos de descanso de acuerdo
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con las cargas de trabajo. Tratamiento y rehabilitación de lesiones.
Retroalimentación. Finalmente, analizo el resultado de la temporada, replanteo
acciones para mejorar en los aspectos donde el rendimiento no fue el adecuado y
reestructuro mi plan de trabajo para el siguiente ciclo.
FACTORES QUE INFLUYEN AL ÉXITO DOCENTE
Mantenerse a la vanguardia: Es uno de los principales factores que me han
permitido desenvolverme como docente deportivo. Permanentemente estoy en la
educación continua (cursos, seminarios, pláticas, congresos, competencias,
exhibiciones, etc.) tanto en el Taekwondo como en mis estudios profesionales; por
cierto relacionados con la práctica deportiva (Fisioterapia). El combinar estas dos
áreas del conocimiento me ha permitido obtener resultados en dos vertientes: 1)
En el Taekwondo, mis alumnos generalmente sobresalen en los torneos,
obteniendo medallas y reconocimiento y 2) La aplicación de técnicas terapéuticas
y de rehabilitación en mis alumnos me ha permitido mantenerlos dentro del
deporte en condiciones favorables.
Responsabilidad docente y disposición al cambio: Siempre asisto a las clases, soy
puntual, siempre doy las clases con el uniforme completo, hablo con respeto a mis
alumnos, modulo la voz cuando es necesario sin llegar a la prepotencia y la
agresión verbal, mucho menos a la física, de la cual en nuestra escuela somos
enemigos. Trato de resaltar los valores fundamentales la mayoría de las veces.
Acepto comentarios de alumnos y padres de familia, lo cual forma parte importante
de la retroalimentación. Si en un momento dado noto que los alumnos no ponen el
mismo interés en algunas actividades, solicito su opinión e intento modificar las
circunstancias para hacer más ameno el entrenamiento. En muchas ocasiones he
adoptado y adaptado modalidades de actividad física que observo en otros Dojang
o gimnasios, sobre todo si su contenido refleja un avance dentro de la forma
deportiva
Empatía y respeto con los alumnos: Siempre trato de ser empático con mis
alumnos, es decir, “trato de ponerme en sus zapatos”. Cuando alguno de ellos
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tiene problemas familiares o en la escuela, con mucho tacto y respeto trato de
ayudarlo a entender lo que le está sucediendo y le propongo algunas alternativas
de solución. Cuando son situaciones que comprometen su etapa de desarrollo, le
comento mis experiencias al respecto y cómo las enfrenté. Asimismo, cuando él
ha cometido algunas faltas importantes le comento que no estoy de acuerdo con
sus actitudes y que debe considerar la afectación de las personas que le rodean
ante tal situación. Cuando llegan a tener problemas con algunas materias de la
escuela, nos ponemos de acuerdo con él y sus padres, nos reunimos con mi
mamá y mi papá para proponer una estrategia en apoyo a las dificultades por las
que está pasando y tratamos de resolver su problemática. Me agrada ayudar a los
demás.
Factores para el fracaso docente: Siempre trato por igual a todos mis
Taekwondoines, no acostumbro interesarme en los “logotropos”, pues pienso que
todos tienen las mismas oportunidades de desarrollo, aunque no todos llegan al
éxito como deportistas (seleccionados, talentos, etc.). Aunque no considero como
factor de fracaso el combinar mis estudios profesionales con la práctica y la
enseñanza deportiva, si es un obstáculo al que siempre me da gusto
sobreponerme, pues ser Entrenador Certificado de Taekwondo es uno de mis más
grandes anhelos. Y, como he mencionado antes, me gusta prepararme de manera
continua, lo que me permite apremiar y no reprender a mis alumnos, mis clases
siempre son diferentes, pongo atención en las necesidades de mis alumnos y
siempre estoy al pendiente de convocatorias para inscribirme a eventos de
enseñanza-aprendizaje. Mi objetivo: trascender dentro del Taekwondo.
DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
En coincidencia con Fernando Akilian (2009) y lo expuesto en la introducción de
este estudio, el docente de Taekwondo es un profesional de la enseñanza, y el
compromiso básico de ese rol consiste en crear las condiciones para que se
produzca el aprendizaje. Gómez (2004), menciona que actualmente el Taekwondo
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es un deporte olímpico que sigue en constante evolución, por lo que la teoría del
entrenamiento deportivo debe ser específica para esta disciplina y avanzar a la
misma velocidad que demanda el deporte de alto rendimiento (3). Por tales
razones, el entrenador de Taekwondo debe ser un verdadero docente deportivo
capaz de diagnosticar, planificar y evaluar su actuación con el propósito de cumplir
con las expectativas tanto de sus alumnos como de las autoridades que proponen
metas a corto, mediano y largo plazo a nivel nacional e internacional.
En conclusión, todo individuo que intente certificarse como entrenador certificado
de Taekwondo debe tener en cuenta las siguientes consideraciones:
a) Ingresar a una institución educativa de prestigio.
b) Tener predisposición al cambio. Es decir, convertirse en un estudioso y
profesional del Taekwondo.
c) Estar convencido que la sociedad requiere entrenadores que, con una
formación adecuada, asuman un compromiso social e institucional.
d) Que su capacitación sea continúa a lo largo de toda su carrera, por lo que
debe prepararse como un docente deportivo.
e) Conducirse con una escala de valores coherente, donde resalten la lealtad,
la honradez, el respeto, la compasión, etc.
f) Ser un promotor de la buena práctica deportiva
g) Tener en mente que la metodología del entrenamiento deportivo rinde
mejores resultados que la práctica empírica.
h) Desarrollar la capacidad de transmitir los conocimientos obtenidos
BIBLIOGRAFÍA
1) Mendoza G V M. Manual Módulo II para Certificación de Entrenadores de
Taekwondo. México: Ediciones Sport & go, 2012.
2) Akilian, F J. Taekwondo Olímpico. Enseñar el arte de jugar el deporte.
Buenos Aires: Editorial Kier, S.A., 2009.
3) Gómez C P E. Taekwondo. Teoría y Metodología de la Preparación
Competitiva. México: Edición personal, 2004.