Cuadro comparativo de trastornos mentales y suicidio
1. CUADRO COMPARATIVO
SUICIDIO Y PSICOPATOLOGIA
Actualmente se acepta que el suicidio es un comportamiento que viene determinado
por diversos factores, entre los que se encuentran aspectos psiquiátricos, biológicos,
sociales, familiares, somáticos, etc.
se centra en analizar las conductas suicidas en los grandes grupos diagnósticos de la
enfermedad mental. Para ello revisaremos la literatura actual que hace referencia a
comportamientos suicidas y trastornos psicóticos, trastornos afectivos, trastornos de
ansiedad, trastornos por consumo de tóxicos y en los trastornos de la personalidad,
analizando paralelismos y diferencias que puedan ayudar al manejo terapéutico de
estas conductas.
ANSIEDAD: Es un término general que
abarca varias formas diferentes de un tipo
de trastorno mental, caracterizada por
miedo y ansiedad anormal y patológica.
los trastornos de ansiedad se clasifican en
dos grupos: síntomas continuos y
síntomas episódicos. Los criterios
diagnósticos actuales psiquiátricos
reconocen una gran variedad de
trastornos de ansiedad.
El término ansiedad abarca cuatro
aspectos que un individuo puede
experimentar: aprehensión mental, tensión
física, síntomas físicos y ansiedad
disociativa. Los trastornos de ansiedad en
el DSM-IV se dividen principalmente en:
1. Trastorno de ansiedad
generalizada.
2. Trastorno de pánico (con o sin
agorafobia).
3. Trastorno obsesivo-compulsivo.
4. trastorno por estrés postraumático.
5. Trastorno por estrés agudo.
6. Fobia social.
7. Trastorno fóbico
8. Otros trastornos de ansiedad no
especificados o producidos por el
consumo de sustancias.
NOSOLOGÌA: es la ciencia que —
formando parte del cuerpo de
conocimientos de la medicina— tiene por
objeto describir, explicar, diferenciar y
clasificar la amplia variedad de
enfermedades y procesos patológicos
existentes. La nosología se identifica
como la ciencia taxonómica de las
enfermedades. Comporta una
organización coherente de los fenómenos
patológicos según un contexto más o
menos establecido donde enmarcarlos. La
nosología comporta varias áreas internas
e interrelacionadas, con diferentes
competencias cada una, a saber:
nosonomía, nosotaxia, nosografía y
nosognóstica. Esquemáticamente:
1. Nosonomia (concepto de
enfermedad). Concepto de vida y
ser vivo. Evolución histórica del
concepto de enfermedad. Salud y
enfermedad. Individuo sano e
individuo enfermo. Nominación de
enfermedades, sinonimia y prefijos
y sufijos más utilizados en
Patología.
2. Nosotaxia (clasificación de las
enfermedades).
3. Nosografía (descripción de la
enfermedad: etiología, patogenia,
nosobiótica, semiótica y
patocronia).
1. Etiología general (causas
de la enfermedad).
Concepto de causa
morbífica. Clasificación de
las causas morbíficas.
2. Patogenia o nosogenia
(génesis y desarrollo de la
enfermedad). Doctrinas
patogénicas. La reacción
viva local y general. El
2. síndrome general de
adaptación. Patología de la
adaptación.
3. Nosobiótica (alteraciones
que conlleva la
enfermedad). Alteraciones
morfológicas. Alteraciones
o perturbaciones
funcionales. Insuficiencia
funcional. El dolor en
Patología.
4. Semiótica (síntomas y
signos clínicos). Concepto
de síntoma y de signo
clínico. Concepto de
síndrome y cuadro
sintomático. Semiotecnia y
semiología.
5. Patocronia o nosocronia
(evolución de la
enfermedad). Periodo de
comienzo. Periodo clínico:
complicaciones y
metástasis. Periodo de
terminación: por curación
(recaídas y recidivas) o por
muerte (agonía, muerte y
metagonía).
4. Nosognostica (calificación de la
enfermedad). Los juicios clínicos
(diagnóstico, pronóstico y
terapéutico) y sus fuentes, tipos y
procedimientos.
El primer campo (la nosología) constituye
un discurso completo sobre la enfermedad
que tiene en cuenta la semiología (los
síntomas), la etiología (el origen de la
enfermedad), la patogenia (o patogenesia:
mecanismo según el cual un agente causa
una enfermedad).
El segundo campo (la nosografía) define,
con ayuda de información precisa, una
clasificación a menudo puesta en
entredicho a causa de los numerosos
descubrimientos que se refieren un virus,
una bacteria o una enfermedad mental por
ejemplo.
Un nosocomio es un hospital para
enfermos.
3. DEPRESIÓN: (del latín depressio, que
significa «opresión», «encogimiento» o
«abatimiento») describe un trastorno del
estado de ánimo, transitorio o
permanente, caracterizado por
sentimientos de abatimiento, infelicidad y
culpabilidad, además de provocar una
incapacidad total o parcial para disfrutar
de las cosas y de los acontecimientos de
la vida cotidiana. El término médico hace
referencia a un síndrome o conjunto de
síntomas que afectan principalmente a la
esfera afectiva: la tristeza patológica, el
decaimiento, la irritabilidad o un trastorno
del humor que puede disminuir el
rendimiento en el trabajo o limitar la
actividad vital habitual,
independientemente de que su causa sea
conocida o desconocida. Aunque ése es
el núcleo principal de síntomas, la
depresión también puede expresarse a
través de afecciones de tipo cognitivo,
volitivo o incluso somático. Los principales
tipos de depresión son:
Trastorno depresivo mayor.
Trastorno distímico.
Trastorno ciclotímico.
Trastorno afectivo estacional.
Depresión bipolar.
TRASTORNO BIPOLAR: El trastorno
bipolar, también conocido como trastorno
afectivo bipolar (TAB) y antiguamente
como psicosis maníaco-depresiva (PMD),
es el diagnóstico psiquiátrico que describe
un trastorno del estado de ánimo
caracterizado por la presencia de uno o
más episodios con niveles anormalmente
elevados de energía, cognición y del
estado de ánimo. Clínicamente se refleja
en estados de manía o, en casos más
leves, hipomanía junto con episodios
alternantes de depresión, de tal manera
que el afectado suele oscilar entre la
alegría y la tristeza de una manera mucho
más extrema que las personas que no
padecen esta patología. Existen tres tipos
de transtorno bipolar.
Trastorno bipolar tipo I:El trastorno
bipolar tipo I se da en aquellos individuos
que han experimentado un episodio
maniaco añadido a un episodio depresivo
(de acuerdo con el DSM-IV-TR). Es
frecuente que los sujetos también hayan
presentado uno o más episodios
depresivos mayores. Para el diagnóstico
de esta modalidad de acuerdo con el
DSM-IV-TR son necesarios uno o más
episodios maníacos o mixtos. No es
necesario que exista un episodio
depresivo como requisito para el
diagnóstico, aunque frecuentemente
aparezca.
Trastorno bipolar tipo II:El trastorno
bipolar tipo II se caracteriza por episodios
de depresión mayor así como al menos un
episodio hipomaníaco. Los episodios de
hipomanía no llegan a los extremos de la
manía (es decir, que no provocan
alteraciones sociales u ocupacionales y
carecen de rasgos psicóticos). El trastorno
bipolar tipo II es mucho más difícil de
diagnosticar, puesto que los episodios de
hipomanía pueden aparecer simplemente
como un periodo de éxito con alta
productividad y suele relatarse esto con
menos frecuencia que cuando se sufre
una depresión. Pueden aparecer síntomas
psicóticos durante los episodios de
depresión mayor, pero nunca en episodios
hipomaníacos. Para ambos trastornos
existe un cierto número de especificadores
que indican la presentación y el curso del
4. trastorno, entre otros el de "crónico",
"ciclado rápido" (cuando aparecen 4 o
más episodios en el transcurso de un
año), "catatónico" y "melancólico".
Trastorno bipolar tipo III:Basado en la
concepción de la bipolaridad en el 2005 el
Dr. Hagop Souren Akiskal, M.D. (Profesor
de Psiquiatría y Dir. Del centro
Internacional de Mood) sugirió el nombre
del trastorno bipolar, para referirse a
pacientes que presentaban demencia
temprana, con inestabilidad anímica,
desinhibición sexual, agitación y conducta
impulsiva.
El trastorno bipolar geriátrico, es la
aparición de la enfermedad del trastorno
bipolar en pacientes de edad avanzada de
más de 50 años de vida, en donde los
mecanismos cerebrales que regulan el
estado de ánimo se encuentran alterados,
ya sea de manera estructural por herencia
poligénica en los mecanismos cerebrales
que regulan los estados de ánimo aunado
a factores ambientales externos
(fármacos, alteraciones hormonales,
drogas, estrés) o bien por lesión cerebral
provocando el trastorno bipolar de inicio
tardío.
PSICOSIS: La psicosis es un término
genérico utilizado en psiquiatría y
psicología para referirse a un estado
mental descrito como una escisión o
pérdida de contacto con la realidad. A las
personas que lo padecen se las denomina
psicóticas. En la actualidad, el término
«psicótico» es a menudo usado
incorrectamente como sinónimo de
psicopático. Las personas que
experimentan psicosis pueden presentar
alucinaciones o delirios y pueden exhibir
cambios en su personalidad y
pensamiento desorganizado. Estos
síntomas pueden ser acompañados por
un comportamiento inusual o extraño, así
como por dificultad para interactuar
socialmente e incapacidad para llevar a
cabo actividades de la vida diaria.Una
TRASTORNO ANTISOCIAL DE LA
PERSONALIDAD: El trastorno de
personalidad antisocial (TPA), a veces
llamado sociopatía, es una patología de
índole psíquico que deriva en que las
personas que la padecen pierden la
noción de la importancia de las normas
sociales, como son las leyes y los
derechos individuales. Si bien,
generalmente, puede ser detectada a
partir de los 18 años de edad, se estima
que los síntomas y características vienen
desarrollándose desde la adolescencia.
Antes de los 15 años debe detectarse una
sintomatología similar pero no tan
acentuada, se trata del trastorno disocial
de la personalidad.
5. amplia variedad de elementos del sistema
nervioso, tanto orgánicos como
funcionales, pueden causar una reacción
psicótica. Esto ha llevado a la creencia
que la psicosis es como la «fiebre» de las
enfermedades mentales, un indicador
serio pero no específico.1 2
Sin embargo,
muchas personas tienen experiencias
inusuales y de distorsión de la realidad en
algún momento de sus vidas, sin volverse
discapacitadas o ni siquiera angustiadas
por estas experiencias.Como resultado,
se argumenta que la psicosis no está
fundamentalmente separada de una
conciencia normal, sino más bien es un
continuum con conciencia normal.3
Desde
esta perspectiva, las personas que son
diagnosticadas clínicamente como
psicóticas pueden estar teniendo
simplemente experiencias particularmente
intensas o angustiantes
Las personas que sufren este trastorno
padecen un mal de índole psiquiátrico, un
grave cuadro de personalidad antisocial
que les hace rehuir a las normas
preestablecidas; no saben o no pueden
adaptarse a ellas. Por esto que, a pesar
de que saben que están haciendo un mal,
actúan por impulso para alcanzar lo que
desean, cometiendo en muchos casos
delitos graves. Es común que se confunda
este trastorno con otras patologías de la
misma clase, como podrían ser la
conducta criminal, la antisocial o la
psicopatía. Pero son trastornos, aunque
relacionados, de diferentes características,
con otros tratamientos y consecuencias.
LICENCIATURA PEDAGOGIA REEDUCATIVA
GERSON CABEZAS GUERRERO
DESARROLLO DE HABILIDADES PREVENCIÓN INTERVENCIÓN EN
CONDUCTAS SUICIDAS