clínico es la «descripción ordenada tanto de los acontecimientos que ocurren a un paciente en el curso de una enfermedad como de los datos complementarios proporcionados por los procedimientos diagnósticos, el curso del razonamiento clínico, la conclusión diagnóstica, el tratamiento empleado y la evolución del enfermo.» 2
3. Que es un caso clínico
Un caso clínico es la «descripción ordenada tanto de los
acontecimientos que ocurren a un paciente en el curso
de una enfermedad como de los datos complementarios
proporcionados por los procedimientos diagnósticos, el
curso del razonamiento clínico, la conclusión diagnóstica,
el tratamiento empleado y la evolución del enfermo.» 2
Un caso clínico (con frecuencia abreviado como «caso») es
una exposición detallada de los síntomas, signos médicos,
diagnóstico, tratamiento y el seguimiento de un paciente. El
informe de un caso clínico puede contener un perfil
demográfico del paciente, y suele describir su situación
sociocultural.
5. Que es un transtorno
mental
Un trastorno mental o del comportamiento se
caracteriza por una perturbación de la actividad
intelectual, el estado de ánimo o el comportamiento
que no se ajusta a las creencias y las normas
culturales. En la mayoría de los casos, los síntomas
van acompañados de angustia e interferencia con
las funciones personales
6. ¿Qué es un trastorno
psicológico?
. un trastorno mental o psicológico es una especie de disfunción
psicológica que padece una persona y que está asociado con
sentimientos de angustia, deterioro y una incluye reacciones que no se
esperan según el contexto cultural.
En cuanto a disfunción psicológica, entendemos este concepto como la
disminución o el cese del funcionamiento de las habilidades cognitivas,
emocionales o de comportamiento. Cualquier trastorno puede
manifestarse de innumerables formas dependiendo de la persona que lo
padezca.
7. Trastorno de ansiedad
generalizada
La ansiedad es considerada como una emoción caracterizada
por sentimientos y estados de tensión, preocupaciones
recurrentes acompañados de alteraciones fisiológicas. Si bien
los sentimientos de ansiedad son normales ante situaciones
potencialmente dañinas o preocupantes, el trastorno de
ansiedad generalizada (TAG) es considerado como un
problema psicológico.
8. Trastornos de la
alimentación
Los trastornos alimentarios o de la alimentación son un tipo de
trastornos psicológicos que de definen por unos hábitos
alimenticios anormales que afectan negativamente a la salud física
y mental de la persona que los padece.
Entre los trastornos de la alimentación más comunes se incluyen:
Trastorno por atracón: en él la persona come de manera
compulsiva una gran cantidad de comida en un corto periodo de
tiempo.
Anorexia nerviosa: la persona restringe el consumo de comida,
comiendo muy poco y, como consecuencia, tienen un peso corporal
muy bajo.
Bulimia nerviosa: tras un atracón, la persona trata de eliminar de
su organismo la comida ingerida mediante conductas purgativas.
Pica: la persona ingiere casi cualquier cosa de manera compulsiva
durante todo el día.
9. ¿Cuáles son los primeros signos de los trastornos
mentales?
R: Un trastorno mental o del comportamiento se caracteriza por una perturbación de la actividad
intelectual, el estado de ánimo o el comportamiento que no se ajusta a las creencias y las normas
culturales. En la mayoría de los casos, los síntomas van acompañados de angustia e interferencia con
las funciones personales.
Los trastornos mentales producen síntomas que son observables para la persona afectada o las
personas de su entorno. Entre ellos pueden figurar:
síntomas físicos (dolores, trastornos del sueño)
síntomas afectivos (tristeza, miedo, ansiedad)
síntomas cognitivos (dificultad para pensar con claridad, creencias anormales, alteraciones de la
memoria)
síntomas del comportamiento (conducta agresiva, incapacidad para realizar las tareas corrientes de la
vida diaria, abuso de sustancias)
Alteraciones perceptivas (percepción visual o auditiva de cosas que otras personas no ven u oyen)
Los signos precoces específicos varían de un trastorno mental a otro. Las personas que presentan uno o
varios de los síntomas enumerados deben consultar a un profesional si esos síntomas persisten,
provocan un sufrimiento importante o interfieren con las tareas cotidianas.
La depresión, el abuso de sustancias, la esquizofrenia, el retraso mental, el autismo en la infancia y la
demencia son ejemplos de trastornos mentales. Pueden aparecer en varones y mujeres de cualquier
edad y en cualquier raza o grupo étnico. Aunque no se conocen perfectamente las causas de muchos
trastornos mentales, se cree que dependen de una combinación de factores biológicos, psicológicos y
sociales, como sucesos estresantes, problemas familiares, enfermedades cerebrales, trastornos
hereditarios o genéticos y problemas médicos. En la mayoría de los casos, los trastornos mentales
pueden diagnosticarse y tratarse eficazmente.
10. Fobias
Las fobias son otros de los tipos de trastorno
psicológico más común entre las personas.
Categorizadas dentro de los trastornos de
ansiedad, las fobias se caracterizan por ser una
reacción de miedo excesiva, irracional e
incontrolable ante un estímulo, bien sea una
situación, un contexto, un objeto, un animal, etc.
El impacto de una fobia puede variar desde
molesto a altamente incapacitante. En la mayoría
de los casos, la persona es consciente de que su
miedo no posee base racional alguna pero, aún así
no son capaces de controlarlo.
11. Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH)
Este polémico trastorno que afecta, sobre todo, a niños y
jóvenes, es considerado como una trastorno de la
conducta de que incluye síntomas como falta de
atención, hiperactividad y comportamiento impulsivos.
Los síntomas del TDAH tienden a aparecer a una edad
temprana y pueden volverse más intensos cuando las
circunstancias o el entorno del niño cambian. No
obstante, en la mayoría de los casos, la sintomatología
mejora con el paso de los años. Aún así, muchos de los
adultos con un diagnóstico de TDAH a una edad
temprana, continúan teniendo problemas como
problemas de atención o impulsividad.
Las personas con TDAH también puede pueden padecer
otras dificultades adicionales como ansiedad o
trastornos del sueño.
12. Depresión
La depresión es un trastorno psicológico muy común entre la población general que afecta de
manera negativa a la forma en la que la persona se siente, piensa y actúa. Afortunadamente, la
depresión puede ser tratada de manera efectiva con psicoterapia y terapia farmacológica.
Sin embargo, si no se trata puede conducir a una gran variedad de problemas emocionales y
físicos graves que pueden contribuir a la disminución del funcionamiento social y laboral de la
persona.
Para que una depresión pueda ser diagnosticada como tal, los síntomas deben de estar presentes
durante, al menos, dos semanas y pueden variar de leves a severos. Algunos de los síntomas más
característicos de la depresión son:
Sentimientos de tristeza y estado de ánimo deprimido
Anhedonia o pérdida de interés en actividades anteriormente placenteras
Cambios en el apetito y alteraciones en el peso corporal
Pérdida de la energía y aumento de la sensación de fatiga
Sentimientos de infravaloración o culpabilidad
Falta de autoestima
13. Trastorno bipolar
El trastorno bipolar, junto con la esquizofrenia, es uno
de los tipos de trastorno psicológico más
estigmatizados que existen. Esta afección provoca en
la persona una serie de cambios de humor extremos
que van desde altos emocionales, conocimos como
manía o hipomanía) hasta estados bajos o de
depresión severa.
En el estado de manía la persona experimenta
síntomas como euforia, una energía desbordante o
irritabilidad, mientras que la depresión se caracteriza
por la aparición de sentimientos de tristeza,
desesperanza y anhedonia.
Aunque el trastorno bipolar en una condición crónica,
la persona puede llegar a ser capaz de controlar sus
cambios de humor y otros síntomas siguiendo un
plan de tratamiento adecuado.
14. Trastorno de la personalidad
Los trastornos de la personalidad abarcan todo un
abanico de trastornos mentales que se
caracterizan por presentar patrones de conducta
inadaptativa duraderos, de cognición y de
experiencia interna, exhibidos en muchos
contextos y que se apartan de los aceptados por el
contexto social y la cultura del individuo.
La quinta versión del DSM, diferencia entre diez
trastornos de la personalidad específicos:
paranoide, esquizoide, esquizotípico, antisocial,
trastorno límite de la personalidad, histriónico,
narcisista, evitativo, dependiente y trastorno de la
personalidad obsesivo-compulsivo.
15. Trastorno del espectro autista (TEA)
Al igual que muchos de los otros tipos de trastornos
anteriores, el trastorno del espectro autista engloba
toda una variedad de afecciones psicológicas
clasificadas como trastornos del neurodesarrollo.
Las personas diagnosticadas con trastorno de espectro
autista pueden presentar dos tipos de síntomas:
dificultades en la comunicación y en la interacción social,
o patrones de comportamiento, intereses o actividades
restringidas y repetitivas.
En manual de diagnóstico DSM-V, se redefinieron los
trastornos del espectro autista, incluyendo diagnósticos
como el síndrome de Asperger, el trastorno
generalizado del desarrollo no especificado y el
trastorno desintegrativo infantil.
16. Esquizofrenia
Uno de los trastornos mentales más conocidos pero
también muy poco comprendidos por la población
general es la esquizofrenia. En este trastorno
mental considerado como grave, la persona
percibe e interpreta la realidad de manera
patológica o diferente a cómo lo hace el resto de la
población.
La esquizofrenia puede provocar una combinación
de alucinaciones, delirios y pensamientos y
conductas desordenadas que tienden a deteriorar
el funcionamiento diario y pueden ser muy
incapacitantes.
17. Trastorno de pánico
Finalmente, el último tipo de trastorno psicológico
más habitual es el trastorno de pánico. Una
persona con trastorno de pánico experimenta de
manera súbita y repetitiva ataques o episodios de
miedo intenso (pánico) y malestar que alcanzan su
pico en pocos minutos.
Durante estos episodios, la persona experimenta
síntomas físicos como dolor en el pecho,
palpitaciones, dificultad para respirar, vértigo o
malestar abdominal. A veces, temor puede ser tan
intenso que se acompaña de un fuerte temor a
morir o a volverse loco.
18. Claustrofobia
Las personas con claustrofobia se caracterizan por
padecer un miedo intenso a situaciones relacionadas
con espacios cerrados: habitaciones pequeñas,
habitaciones cerradas, sótanos, bodegas, túneles,
ascensores, el metro, etc. En general, estas personas no
suelen tener miedo sólo a una de estas situaciones, sino
que experimentan temor en cualquier situación que
implique cierre, restricción o confinamiento, como por
ejemplo, estar debajo del secador de la peluquería,
esperar en la cola del supermercado, atravesar unas
puertas giratorias, meter la cabeza debajo del agua, etc.
Además, el temor no se centra sólo en el espacio
cerrado en sí mismo, sino en lo que podría ocurrir
"dentro" de ese espacio. Por ejemplo, la persona teme
que en el ascensor no habrá suficiente aire, no podrá
respirar y se ahogará.
19. autoestima
La autoestima es una condición
fundamental para la supervivencia
psicológica, ya que sin ciertas dosis de
autoestima la vida puede resultar
enormemente penosa. El hecho de juzgarse
y rechazarse a uno mismo produce un
enorme dolor. Como consecuencia, es
frecuente que la persona con problemas de
autoestima evite con todas sus fuerzas que
aumente el rechazo que siente hacia sí
misma. De forma que evita situaciones que
conllevan nuevos juicios y posibles
rechazos. Por lo tanto, puede que asuma
menos riesgos sociales, académicos o
profesionales (Se implica en menos cosas, y
consecuentemente, acaba consiguiendo
menos cosas).
20. Trastorno Antisocial de la Personalidad
La persona que sufre este trastorno se caracteriza por su
tendencia a no relacionarse en sociedad, evitando
cualquier interacción.
Los distintos síntomas y conductas que caracterizan el
TASP incluyen: robos, agresividad, tendencia a la soledad,
violencia, mentiras… Además, las personas afectadas por
el TASP tienden a ser tímidas, depresivas y tienen
ansiedad social. Este último punto se debe a su temor a ser
rechazadas. Con todo, la terapia psicológica es muy
efectiva a la hora de manejar los inconvenientes del
trastorno antisocial.
21. Síndrome de Estocolmo
El Síndrome de Estocolmo es un trastorno mental
relativamente frecuente en las personas que han
sido víctimas de un secuestro. Muestran algún tipo
de sentimiento positivo hacia sus captores.
Archivos policiales internacionales muestran que
alrededor del 27% de las víctimas de secuestros
presentan este desorden.
El Síndrome de Estocolmo también se aplica en casos
como abuso infantil, violación o maltrato. No es un
trastorno que se viva de forma angustiosa, pero
llama mucho la atención porque resulta difícil de
entender.
22. Síndrome de Lima
El Síndrome de Lima es, justamente, un
trastorno opuesto al Síndrome de
Estocolmo. En este caso, los secuestradores
muestran simpatía hacia su rehén.
Este trastorno fue acuñado después de un
incidente que ocurrió en la capital de Perú
en 1996. El MRTA secuestró a centenares de
políticos, diplomáticos y militares en la
embajada japonesa en Lima. Horas
después, los secuestradores fueron
empatizando con los rehenes, y
paulatinamente fueron liberándolos.
23. Trastorno Obsesivo
Compulsivo
El Trastorno Obsesivo Compulsivo es un desorden
ansioso caracterizado por recurrentes
pensamientos que producen miedo, desasosiego,
preocupación, conductas compulsivas, etc.
Algunos de los síntomas del TOC son las
comprobaciones compulsivas, lavar o limpiar
excesivamente, pensamientos religiosos, rituales
nerviosos tales como abrir las puertas un número
determinado de veces antes de entrar en la
habitación, o aversiones irracionales a cifras
determinadas. Afortunadamente, la psicoterapia y
aprender algunos hábitos permiten una gran
calidad de vida a las personas afectadas.
24. Dislexia
La Dislexia es un trastorno del aprendizaje. La
persona disléxica no puede leer correctamente
debido a la discrepancia entre el potencial de
aprendizaje y su nivel de rendimiento, sin que
exista cualquier tipo de problema, ya sea sensorial,
físico, motor o deficiencia educativa. Esto causa
ciertos desajustes en la lectura que a su vez pueden
causar otro tipo de psicopatologías del aprendizaje
y de la autoimagen.
25. Síndrome de Cotard
En este raro trastorno psiquiátrico, el afectado cree
que ha muerto, o que ha perdido la sangre o algún
órgano interno. Este delirio puede ser peligroso ya
que el trastornado puede actuar imprevisiblemente.
Frecuentemente se asocian este tipo de conductas a
personalidades nihilistas e hipocondríacas.
26. Trastorno obsesivo
compulsivo (TOC)
El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) se
caracteriza por un patrón de pensamientos y
miedos no deseados (obsesiones) que
provocan comportamientos repetitivos
(compulsiones). Estas obsesiones y
compulsiones interfieren en las actividades
diarias y causan un gran sufrimiento
emocional.
27. trastornos del espectro
autista (TEA)
El trastorno del espectro autista es una afección
relacionada con el desarrollo del cerebro que
afecta la manera en la que una persona percibe y
socializa con otras personas, lo que causa
problemas en la interacción social y la
comunicación
28. epilepsia
La epilepsia es un trastorno del sistema nervioso
central (neurológico) en el que la actividad cerebral
se vuelve anormal, lo que provoca convulsiones o
períodos de comportamientos o sensaciones
inusuales y, a veces, pérdida de conciencia.
Cualquier persona puede desarrollar epilepsia.24
feb.
29. Consumo problemático de alcohol y otros
sustancias psicoactivas
Ocurre cuando el consumo de alcohol u otra
sustancia (droga) de una persona lleva a que se
presenten problemas de salud o en el trabajo,
escuela o casa. Este trastorno también se denomina
abuso de sustancias.
30. anorexia
La anorexia nerviosa, a menudo simplemente
denominada «anorexia», es un trastorno de la
alimentación que se caracteriza por el peso
corporal anormalmente bajo, el temor intenso a
aumentar de peso y la percepción distorsionada
del peso.
31. bulimia
Es un trastorno alimentario por el cual una persona
tiene episodios regulares de comer una gran
cantidad de alimento (atracones) durante los cuales
siente una pérdida de control sobre la comida. La
persona utiliza luego diversas formas, tales como
vomitar o consumir laxantes (purgarse), para evitar
el aumento de peso.
32. ¿Cuáles son los primeros signos de los trastornos
mentales?
Un trastorno mental o del comportamiento se caracteriza por una
perturbación de la actividad intelectual, el estado de ánimo o el
comportamiento que no se ajusta a las creencias y las normas culturales.
En la mayoría de los casos, los síntomas van acompañados de angustia e
interferencia con las funciones personales.
Los trastornos mentales producen síntomas que son observables para la
persona afectada o las personas de su entorno. Entre ellos pueden
figurar:
síntomas físicos (dolores, trastornos del sueño)
síntomas afectivos (tristeza, miedo, ansiedad)
síntomas cognitivos (dificultad para pensar con claridad, creencias
anormales, alteraciones de la memoria)
síntomas del comportamiento (conducta agresiva, incapacidad para
realizar las tareas corrientes de la vida diaria, abuso de sustancias)
Alteraciones perceptivas (percepción visual o auditiva de cosas que otras
personas no ven u oyen)
33. Diagnostico
Diagnóstico
Una exploración física. Tu médico tratará de
descartar problemas físicos que podrían causar tus
síntomas.
Análisis de laboratorio. Estos pueden incluir, por
ejemplo, un chequeo de tu función tiroidea o un
examen para la detección de alcohol y drogas.
Una evaluación psicológica.
34. tratamiento
La mayoría de los profesionales de la salud mental
practican uno de los seis tipos de psicoterapia:
Terapia conductual.
Terapia cognitiva.
Terapia interpersonal.
Psicoanálisis.
Psicoterapia psicodinámica.
Psicoterapia de apoyo.
35. Terapia conductual
La terapia conductual implica cierto número de
intervenciones que tienen por objetivo ayudar al sujeto a
desaprender conductas mal adaptadas en tanto que aprende
otras que sí son adaptadas. La terapia de exposición, usada
a menudo para tratar fobias, es un ejemplo de terapia
conductual. En la terapia de exposición, se expone a la
persona a objetos, actividades o situaciones temidos en un
entorno seguro. El objetivo es reducir el miedo y ayudar a los
afectados a dejar de evitar aquello que temen.
La terapia conductual está relacionada con la terapia
cognitiva. En algunos casos se emplea una combinación de
ambas, conocida como terapia cognitivo-conductual. La base
teórica de la terapia conductual es la teoría del aprendizaje,
según la cual las alteraciones de la conducta son
consecuencia de un aprendizaje incorrecto.
36. Terapia cognitiva
La terapia cognitiva ayuda a la persona a identificar
posibles distorsiones en los pensamientos y a
comprender cómo estas distorsiones generan problemas
en su vida. Por ejemplo, la persona puede pensar de
una manera tipo "todo o nada" ("si no obtengo un éxito
total, soy un completo fracasado"). La premisa de
trabajo empleada establece que el modo de sentir y de
comportarse de una persona está determinada por la
forma en que interpreta sus experiencias previas. A
través de la identificación de sus creencias y
suposiciones fundamentales, la persona es capaz de
aprender otros modos de analizar sus experiencias,
logrando una disminución en la intensidad de los
síntomas y una mejoría en la conducta y en la
percepción de sus sentimientos.
37. Terapia interpersonal
La terapia interpersonal fue inicialmente concebida como un
tratamiento psicológico breve para la depresión y está
diseñada para mejorar la calidad de las relaciones
interpersonales del sujeto depresivo. Se centra en lo siguiente:
Duelo no resuelto
Conflictos que surgen cuando el individuo tiene que
desempeñar papeles que difieren de sus expectativas iniciales
(como, por ejemplo, cuando una mujer establece una relación de
pareja esperando ser madre y ama de casa y se encuentra con
que además debe ser el sostén económico de la familia)
Transiciones en roles sociales (como pasar de ser un trabajador
activo a estar jubilado)
Problemas para comunicarse con los demás
El terapeuta enseña al sujeto a mejorar aspectos de sus
relaciones interpersonales, como por ejemplo a superar el
aislamiento social y a responder a los demás de un modo
diferente al habitual.
38. Psicoanálisis
El psicoanálisis es la forma más antigua de psicoterapia y
fue desarrollado por Sigmund Freud en los primeros
años del siglo XX. Conforme al método clásico, con una
frecuencia de 4 o 5 veces por semana, el sujeto, tendido
en un diván en el consultorio del terapeuta, trata de
verbalizar cuanto le pasa por la cabeza. Esta práctica se
denomina asociación libre. Gran parte del método se
centra en ayudar a la persona a comprender cómo los
patrones pasados de las relaciones se repiten en el
presente. La relación entre el sujeto y el terapeuta es una
parte clave de este enfoque. Entender cómo el pasado
afecta al presente ayuda a desarrollar formas nuevas y
más adaptadas de funcionamiento en las relaciones
personales y en el entorno laboral.
39. Psicoterapia psicodinámica
La psicoterapia psicodinámica, de modo similar al psicoanálisis, se
centra en la identificación de patrones inconscientes en los
pensamientos, los sentimientos y las pautas de conducta del
sujeto. En esta modalidad terapéutica, sin embargo, la frecuencia
de las sesiones varía de 1 a 3 veces por semana, permaneciendo el
sujeto generalmente sentado y no tendido en un diván. Además,
se le da un menor énfasis a la relación entre el sujeto y el
terapeuta.
Psicoterapia de apoyo
La psicoterapia de apoyo, la más frecuentemente utilizada, se
basa en el establecimiento de una relación empática y de apoyo
entre el sujeto y el terapeuta. Este tipo de relación estimula la
expresión de sentimientos por parte del sujeto de manera que el
terapeuta puede proporcionarle ayuda para la resolución de sus
problemas. La psicoterapia centrada en el problema, una forma
de terapia de apoyo, puede ser realizada de manera eficaz por
los médicos de atención primaria.
40. Las complicaciones que, en ocasiones, se asocian a
la enfermedad mental comprenden las siguientes:
Infelicidad y disminución de la alegría de vivir.
Conflictos familiares.
Problemas de pareja.
Aislamiento social.
Problemas vinculados al consumo de tabaco,
alcohol o drogas.
41. Hay muchos factores diferentes que pueden afectar
su salud mental, incluyendo:
Factores biológicos, como los genes o la química del
cerebro.
Experiencias de vida, como trauma o abuso.
Antecedentes familiares de problemas de salud
mental.
Su estilo de vida, como la dieta, actividad física y
consumo de sustancias.
42. LINK DEL VIDIO:
TEMA :
Casos clínicos de trastornos mentales
.https://www.youtube.com/watch?v=eF8jWVCpHSo
. https://www.youtube.com/watch?v=A-
dptXkJzS0https://www.youtube.com/watch?v=A-dptXkJzS0