4. Hoy la justicia está de moda, hay psicosis de justicia en
la sociedad. Ante el infortunio de un asesinato es
frecuente el reclamo: “¡Sólo quiero que se haga
justicia!”.
Y sin embargo: ¡Si Dios hiciera justicia! (como nosotros
la entendemos). ¡Si los ángeles exigieran justicia!.
Felizmente lo mejor de Dios es la MISERICORDIA. Y
también lo mejor del hombre; aunque hoy sea un
artículo de lujo al que se le quiere dar de baja.
El día que la misericordia tenga un poco más de
espacio y la dejemos circular generosamente por las
calles de este mundo, estoy convencido de que la vida
será un poco más leve y la sociedad caminará sobre
ruedas.”
5. ¡Qué significa misericordia?
“Usamos, manoseamos, tanto la palabra que su
significado se nos antoja sencillo. Pero,
precisamente, sabemos que lo sencillo es lo más
profundo y difícil. En este caso aun los maestros,
o los que tales se juzgan, pueden equivocarse.
Enfrentado con los doctores de la ley, cierta vez,
Jesús tuvo que aconsejarles, después de haber
realizado un milagro un día de sábado: ‘Id y
aprended lo que quiere decir: Misericordia
quiero y no sacrificios´ (Mt 9, 13).
6.
7. Reflexionad sobre el sentido y el valor de la
misericordia, porque en ello os jugáis el secreto
personal de vuestra relación con Dios, y en ello también
está el secreto del Reino.
Entonces, vale la pena aceptar el desafío de Jesús,
porque es demasiado lo que se juega.
¿Qué significa misericordia?
Semánticamente en castellano, la palabra misericordia
viene compuesta, con toda probabilidad, por los dos
vocablos de la lengua latina: “miserum cor”. Pero, el
adjetivo “miserum” no en el sentido de mísero o
miserable, sino en sentido de piadoso y compasivo.
8.
9.
10. San Mauricio fue un
soldado romano, cumplido
y valeroso. Su espada al
cinturón lo hacía más
elegante.
Cierta vez, al pasear por la calle, fue insultado por un
pobre hombre, que de inmediato se echó a correr.
Mauricio lo persigue, lo atrapa y lo tienen entre las
manos. “Mátalo, mátalo, le gritan los curiosos”. Y él
responde: “lo haría con mucho gusto, pero no puedo
hacerlo, porque soy cristiano”.