2. DOCTRINA SOCIAL, 1
Doctrina social de la Iglesia católica,
conjunto de enseñanza, orientaciones y
normas prácticas emanadas, en el seno de
la Iglesia católica, de los pronunciamientos
pontificios en materia política, social y
económica a partir del siglo XIX.
3. DOCTRINA SOCIAL, 2
La DSI tiene en cuenta la
vida humana, la familia, el trabajo,
la cultura, las comunicaciones sociales, las instituciones políticas,
las relaciones internacionales, la
ciencia, la técnica, la guerra, la
paz, etc..
Esas realidades tienen un aspecto
moral y religioso. => son objeto de
las enseñanzas de la Iglesia.
4. DOCTRINA SOCIAL, 3
Doctrina social
Consta de tres elementos básicos:
1. Principios de reflexión: señalan las bases para construir una convivencia social según criterios universales aceptables por todos.
2. Criterios de juicio: permiten evaluar sistemas sociales, estructuras sociales y situaciones concretas.
3. Directrices de acción: para orientar la
actividad de los cristianos en la vida social.
5. DOCTRINA SOCIAL, 4
Los juicios del Magisterio no se refieren a
cuestiones técnicas, económicas o políticas,
sino a la dimensión ética de la realidad.
CIC 747, 2: “Compete siempre y en todo lugar a
la Iglesia proclamar los principios morales,
incluso los referentes al orden social, así como
dar su juicio sobre cualesquiera asuntos
humanos, en la medida en que lo exijan los
derechos fundamentales de la persona
humana”.
6. DOCTRINA SOCIAL, 5
Son los laicos, junto con los demás ciudadanos, quienes han de promover soluciones
concretas actuando con conciencia cristiana y aceptando la responsabilidad inherente
a sus decisiones.
Dos extremos: laicismo y clericalismo.
7. DOCTRINA SOCIAL, 6
- acoge e investiga la realidad social a la luz de la
Revelación;
- ha sido elaborada por el Magisterio de la Iglesia;
- va más allá de la filosofía y de las ciencias
sociales, aunque aprovecha sus aportaciones;
- no es una ideología: no proporciona modelos
para la acción social o política, al servicio de
intereses particulares;
- pertenece al ámbito de la teología moral.
8. DOCTRINA SOCIAL: 7
El conflicto histórico en el que se
encontró la Iglesia católica después de la
Revolución Francesa (1789-1799) y de la
subsiguiente difusión de la concepción
liberal del Estado, la indujeron a elaborar,
recurriendo al instrumento de la encíclica,
un vasto programa para fomentar la
actuación de los católicos en la evolución
de la sociedad.
9. DOCTRINA SOCIAL: 8
La primera intervención dedicada específicamente
a la cuestión social le correspondió a León XIII, en
su encíclica Rerum novarum (1891) proponía,
frente al socialismo y al liberalismo capitalista
extremo, una solución de la cuestión obrera que
adoptara el principio de colaboración entre clases
sociales y el reconocimiento del justo salario.
La encíclica favoreció la creación de grupos,
asociaciones y sindicatos católicos y se convirtió
en un punto de referencia constante para los
sucesivos pronunciamientos papales.
10. DOCTRINA SOCIAL: 9
La expresión más acabada de este cambio estuvo
representada por la encíclica Octogesima
adveniens (1971), de Pablo VI, en la cual se
renunciaba de manera explícita a dar una solución
única y de valor universal a las cuestiones
sociales, demandando en cambio del conjunto de
las comunidades cristianas la tarea de “analizar
objetivamente la situación de sus países” a la luz
del Evangelio y según criterios ofrecidos por el
magisterio eclesiástico
11. DOCTRINA SOCIAL: 10
A través de las encíclicas Laborem
exercens (1981), Sollicitudo rei socialis
(1987) y Centesimus annus (1991), del
papa Juan Pablo II, la doctrina social de la
Iglesia católica se situó con mayor precisión
en el ámbito de la teología moral,
ofreciendo ulteriores ocasiones de reflexión
y de análisis de la sociedad contemporánea
12. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 1
Al reconocimiento de la dignidad y libertad
del hombre y al concepto de bien común,
están unidos cuatro principios fundamentales de la Doctrina social de la Iglesia referentes al orden social.
=
13. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 2
Principios de solidaridad y subsidiaridad, que indican
cómo ha de realizarse la cooperación
en la vida social.
Principios de autoridad y participación,
que se refieren al modo de ejercer la responsabilidad en la
vida social.
14. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 3
Principio de solidaridad, 1
La solidaridad es una virtud humana,
pero también una virtud cristiana:
Es manifestación de caridad, y la
caridad es signo distintivo de los
discípulos de Cristo.
15. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 4
Principio de solidaridad, 2
A la luz de la fe, la solidaridad se reviste
de dimensiones específicamente cristianas: el prójimo no es solamente un ser
humano con derechos e igualdad fundamental con todos, sino que se convierte
en imagen viva de Dios Padre.
Debe ser amado con el mismo
amor con que le ama el Señor.
16. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 5
Principio de solidaridad, 3
La solidaridad es también un principio
ordenador del orden social: el hombre
debe contribuir con sus semejantes
al bien común de la sociedad, a todos
los niveles.
17. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 6
Principio de solidaridad, 4
Algunas manifestaciones prácticas:
1. Distribución de bienes y remuneración del trabajo:
creación y mantenimiento de puestos de trabajo.
2. Esfuerzo a favor de un orden social más justo: así los
conflictos encuentran más fácilmente una salida negociada.
3. Resolución de los problemas socioconómicos: la
Iglesia propone diversas formas de solidaridad: “solidaridad
de los pobres entre sí, de los ricos y los pobres, de los
trabajadores entre sí, de los empresarios y los empleados,
solidaridad entre las naciones y entre los pueblos” (CCE
1941).
1941
18. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 7
Principio de subsidiaridad, 1
= “Una estructura social de orden superior
no debe interferir en la vida interna de un
grupo social de orden inferior, privándole de
sus competencias, sino que más bien debe
sostenerle en caso de necesidad y ayudarle a coordinar su acción con la de los demás
componentes sociales, con miras al bien
común” (Centesimus annus 48; CCE 1883).
48
1883
19. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 8
Principio de subsidiaridad, 2
Este principio se opone a toda forma
de colectivismo. Protege a las personas, a las comunidades locales y a los
grupos intermedios, del peligro de perder su legítima autonomía.
Su aplicación evita también el absolutismo político y la centralización de los
poderes del Estado a expensas de las
instituciones locales. Armoniza las relaciones individuos-sociedad.
20. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 9
Principio de subsidiaridad, 3
a
b
Algunas manifestaciones prácticas, 1
En la familia y en la escuela: Dejando que
cada miembro de la familia o cada alumno haga
aquello que es capaz de hacer. Respetar la iniciativa y la responsabilidad de cada uno.
En la actuación del Estado: no debe sustituir la iniciativa y la responsabilidad de grupos sociales intermedios donde pueden actuar (la educación, la sanidad y
la asistencia social). En el ámbito económico, ha de
respetar la iniciativa privada (nacionalizaciones-privatizaciones). Pero él y otras sociedades pueden suplir
acciones necesarias para el bien común que no pueda
llevar a cabo la iniciativa de grupos sociales inferiores.
21. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 10
Principio de subsidiaridad, 4
Algunas manifestaciones prácticas, 2
c
En la empresa: se manifiesta en dar a
los empleados y directivos iniciativa en
el trabajo, autonomía de gestión y
capacidad de decisión.
d
En el ámbito internacional: la solidaridad con los países en desarrollo ha de
orientarse a favorecer las iniciativas de
los nativos.
22. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 11
Principio de autoridad, 1
La autoridad tiene su fundamento
en la naturaleza humana, por cuanto
la sociedad surge del ser social del
hombre y la sociedad necesita de
autoridad.
23. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 12
Principio de autoridad, 2
Este origen da fundamento trascendente a
la autoridad pública, pero también implica
responsabilidad ya que la autoridad debe
ejercerse como una respuesta al orden
justo, querido por la sociedad.
“ la determinación del régimen y la
designación de los gobernantes han
de dejarse a la libre voluntad de los
ciudadanos’ (Gaudium et spes 74)”.
74
24. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 13
1
2
Principio de autoridad, 3
CCE 1903: “la autoridad sólo se ejerce
1903
legítimamente si busca el bien común
del grupo y si, para alcanzarlo, emplea
medios moralmente lícitos”.
Mt 20, 26: “quien entre ustedes quiera
26
llegar a ser grande, sea su servidor”.
=> el ejercicio de la autoridad debe realizarse como un servicio. La autoridad es
para servir, y no para servirse de ella
para lucro personal.
25. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 14
Principio de autoridad, 4
3
Al servicio de la autoridad al bien común
corresponde una leal cooperación a
dicha autoridad por parte de quienes le
están sometidos, obedeciendo sus justos
mandatos y ayudando a un recto ejercicio
de la autoridad.
La obediencia ha de ser un acto de libertad
responsable.
26. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 15
Principio de participación, 1
CCE 1913: “La participación es el compro1913
miso voluntario y generoso de la persona en
los intercambios sociales.
Es necesario que todos participen, cada
uno según el lugar que ocupa y el papel que
desempeña, en promover el bien común.
Este deber es inherente a la dignidad de la
persona humana”.
27. PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, 16
Principio de participación, 2
CCE 1914: “La participación se realiza ante todo
1914
con la dedicación a las tareas cuya responsabilidad personal se asume: por la atención prestada
a la educación de su familia, por la responsabilidad
en su trabajo, el hombre participa en el bien de los
demás y de la sociedad”.
CCE 1915: “Los ciudadanos deben cuanto sea po1915
sible tomar parte activa en la vida pública.
Las modalidades de esta participación pueden
variar de un país a otro o de una cultura a otra”.
28. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 1
El ser humano tiene la dignidad de persona, desde su concepción hasta su muerte
(cfr. CCE 357 y Evangelium vitae (1995) 53).
La dignidad de la persona se basa en tres
tipos de argumentos:
1) Filosófico;
2) Teológico;
3) Antropológico.
29. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 2
1) argumento filosófico: persona es un “sujeto racional”
= está dotado de razón (con la
que busca la verdad) y de libertad (se autodetermina a dirigirse
al bien y tiene capacidad de amar con amor humano). Tiene por tanto alma
espiritual e inmortal. También son personas
los disminuidos psíquicos, los niños no nacidos, los ancianos, los enfermos que han perdido la razón.
30. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 3
2) Desde el punto de vista de la Teología
(fe cristiana):
a. creado por Dios a su imagen y semejanza (con capacidad para conocer y amar
a su Creador);
b. ha sido constituido señor de la entera
creación visible;
c. ha sido creado para servir y amar a Dios;
d. Gaudium et spes 24: “el hombre (es) la
24
única criatura de la tierra que Dios haya
querido por sí misma”.
31. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 4
3) Desde el punto de vista de la
Antropología:
a. El hombre es un ser creador de cultura ;
b. No está determinado, es un ser que se
hace en la historia y en el tiempo; no es un
ser acabado, sino un proyecto inconcluso ;
c. un hombre eternamente insatisfecho de su
propia imagen y de su propia identidad, un
hombre que no descansa en buscarse a si
mismo cada instante
32. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 5
Gaudium et spes 29: “La igualdad
29
fundamental entre todos los hombres
exige un reconocimiento cada vez mayor,
porque todos ellos, dotados de alma
racional y creados a imagen de Dios,
tienen la misma naturaleza y el mismo
origen. Disfrutan de la misma vocación y
de idéntico destino”.
33. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 6
Gal 3, 28:
“ya no hay diferencias entre
judío y griego,
ni entre varón y
mujer, ya que
todos ustedes
son uno solo en
Cristo Jesús”.
Discriminaciones aún
vigentes: esclavitud, racismo, xenofobia, discriminaciones
por religión,
sexo, condición social,
etc..
34. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 7
El concepto de derechos de la persona o
derechos humanos está implícito en toda
la tradición cristiana. Ya en el Decálogo
se “ponen de relieve los deberes esenciales
y, por tanto, indirectamente, los derechos
fundamentales, inherentes a la naturaleza
de la persona humana” (CCE 2070).
2070
35. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 8
a
b
Los derechos de la persona, por derivar
de la dignidad innata de todo ser humano,
“son anteriores a la sociedad y se imponen a ella” (CCE 1930).
1930
Estos derechos están unidos a deberes
u obligaciones morales de quien les posee. Ej.: el derecho a la vida unido al
deber de conservarla, el derecho a buscar la verdad unido al deber de buscarla
cada día con mayor profundidad y amplitud, etc..
36. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 9
Ej. de derechos
personales
Ej. de derechos
sociales, económicos y
políticos
- a la vida (integridad
- a fundar libremente una
corporal, nivel de vida
familia y a acoger y
...)
educar a los hijos
- a la libertad religiosa
- de expresión
- a seguir a la recta
- de información
conciencia
- a acceder a la educa- a poseer personalidad ción y la cultura
jurídica
- a adquirir y poder usar
- a la libertad de
propiedad
educación y cultura
- a participar en el trabajo
- a la buena reputación - de asociación
- a la libre elección de
- a la seguridad jurídica
estado
37. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 10
Varias características de los derechos de la
persona:
1
Fundamentales (manifiestan la naturaleza del hombre y son fundamento de las
relaciones interpersonales)
2
Naturales (fundamentados en la ley
natural, no resultado de culturas o
concesiones sociales o políticas)
38. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 11
3
Universales (todo
hombre)
6
Irrenunciables (aún
por el propio sujeto:
ej. eutanasia)
4
Inviolables (su violación sería atentar
contra la dignidad
de la persona)
7
Jerarquizados
(unos pueden ceder
ante otros: ej. libertad
expresión-calumnia)
5
Inalienables (pero
a veces incompatibles: ej. legítima
defensa)
8
Correlativos (cada
derecho => deber
reconocerlo por los
demás)
39. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 12
LIBERTAD RELIGIOSA, 1
Consiste en que todos los hombres deben
estar inmunes de coacción para obrar en
materia religiosa. No se puede obligar a
nadie a actuar contra su conciencia (en privado y en público, solo o asociado).
Es fundamento y garantía de las libertades, porque es buscar y seguir la verdad
que da sentido definitivo a la vida.
40. DIGNIDAD Y DERECHOS DE LA PERSONA, 13
LIBERTAD RELIGIOSA, 2
La sociedad civil
debe protegerse
contra los abusos
posibles so pretexto
de libertad religiosa.
Su violación es “una injusticia radical frente
a lo que es particularmente profundo en el
hombre” (Redemptor hominis (1979) 17).
17
41. PERSONA Y SOCIEDAD, 1
El hombre es un ser individual y, al
mismo tiempo, social.
Aristóteles (Política, lib I, cap. 2):
2
“quien es incapaz de vivir en sociedad
o no tiene necesidad de ella porque se
basta a sí mismo, tiene que ser un
animal o un dios”.
42. PERSONA Y SOCIEDAD, 2
El hombre recibe de la sociedad medios
materiales y técnicos, ciencia, organización
social, cultura. A su vez, la vida en sociedad
hace posible la entrega a los demás, necesaria para un pleno desarrollo humano.
La vida social engrandece al hombre en
todas sus cualidades y le capacita, con
ayuda de la gracia, para responder a su
vocación cristiana.
La necesidad de la vida social no es un sobreañadido, sino algo inherente a la naturaleza humana.
43. PERSONA Y SOCIEDAD, 3
Valores fundamentales necesarios para un recto
orden social:
- verdad: la convivencia es ordenada, fructífera y
según la dignidad humana si se funda en la verdad;
- libertad: si no se respeta la libertad, tampoco se
respeta la dignidad humana;
- justicia: un orden social justo ha de respetar, en
primer lugar, los derechos de la persona;
- paz (“tranquilidad del orden”): exigida por respeto
a la vida humana y su desarrollo;
- fraternidad: adquiere una fundamentación radical
desde la fe (Dios nuestro Padre; caridad).
44. PERSONA Y SOCIEDAD, 4
Dos concepciones del hombre no aceptan plenamente la doble condición individual y social del ser
humano:
1. Individualismo:
- aboga por el individuo. La vida social y la sociedad
tienen por fin únicamente superar conflictos de
intereses.
- origen de la sociedad = “contrato social” para evitar la guerra de todos contra todos (Hobbes) o para
impedir que la misma sociedad sofoque la libertad
individual (Rousseau).
- Falla al ignorar la dimensión social del hombre.
45. PERSONA Y SOCIEDAD, 5
Dos concepciones del hombre no aceptan plenamente la doble condición individual y social del
ser humano:
2. Colectivismo:
- la sociedad evoluciona siguiendo unas fuerzas
naturales.
- sociedad = organismo “natural” en el que cada
individuo está completamente subordinado al
colectivo social.
- lo determinante de la sociedad son los medios y
procesos de producción y la lucha de clases que
los acompaña.
- las personas no son más que un producto de la
sociedad.
46. PERSONA Y SOCIEDAD, 6
Para la Iglesia, la sociedad
no es ni una mera agregación de individuos (individualismo), ni un colectivo
en el que se diluya la singularidad de cada persona
(colectivismo).
47. PERSONA Y SOCIEDAD, 7
Gaudium et spes 26: “el orden social y su
26
desarrollo deben, en todo momento, dar como resultado el bien de las personas, puesto
que el orden de las cosas ha de subordinarse
al orden de las personas, y no al revés”.
Idem 25, 1; CCE 1881: “el principio, el sujeto
1881
y el fin de todas las instituciones sociales
es y debe ser la persona humana”.
48. PERSONA Y SOCIEDAD, 8
1
La sociedad es para el hombre, pero esto no se opone a que el
hombre esté ordenado a ella como la
parte al todo, aunque la persona no está
completamente subordinada a la sociedad, sino que la trasciende.
49. PERSONA Y SOCIEDAD, 9
2
Las personas han de
colaborar al bien de la sociedad de la cual forman parte, pero
ésta no puede despojar a las personas
de los derechos personales que han
recibido del Creador. La organización
social debe favorecer el ejercicio de
las virtudes y no ser obstáculo
para ellas.
50. PERSONA Y SOCIEDAD, 10
El bien común
algo conveniente para el desarrollo
humano de cada persona en la sociedad. Se define “en referencia a
la persona humana” (CCE 1905).
1905
de él pueden participar todos.
Está relacionado con el desarollo humano integral y afecta a todos los miembros de
una sociedad.
51. PERSONA Y SOCIEDAD, 11
El bien común
= la “suma de las condiciones de la vida
social, que permitan, tanto a las colectividades como a los individuos, conseguir
más plena y fácilmente la propia perfección”
(Gaudium et spes 26).
26
52. PERSONA Y SOCIEDAD, 12
El bien común tiene, ante
todo, una dimensión teologal porque la plenitud humana no es posible sin
Dios, que es el Bien común
trascendente y supremo
de todos los hombres.
53. PERSONA Y SOCIEDAD, 13
La aconfesionalidad del Estado, vigente en
muchos países, y la libertad religiosa no
equivalen a ignorar el hecho religioso ni
a encerrar la religión en la intimidad de
las conciencias.
=> falso humanismo, sin los valores del espíritu y de Dios (en las personas, las familias,
la educación y en toda la vida social).
54. PERSONA Y SOCIEDAD, 14
Junto al Bien común trascendente hay un
bien común temporal.
Comporta tres elementos esenciales
(cfr. CCE 1907-1909):
1907-1909
1
El respeto a la persona y sus derechos
inalienables. En particular el derecho a
“actuar de acuerdo con la recta norma de
su conciencia, a la protección de la vida
privada y a la justa libertad, también en
materia religiosa” (Gaudium et spes 26, 2).
2
55. PERSONA Y SOCIEDAD, 15
2
3
El bienestar social y el desarrollo
del grupo mismo. La autoridad debe
facilitar a cada uno lo que necesita
para llevar una vida verdaderamente
humana (alimento, vestido, salud,
trabajo, educación y cultura, derecho
de fundar una familia, etc.).
La paz: la estabilidad y la seguridad
de un orden justo.
56. PERSONA Y SOCIEDAD, 16
Gaudium et spes 25: “De los vínculos sociales
25
que son necesarios para el cultivo del hombre,
unos, como la familia y la comunidad política,
responden más inmediatamente a su naturaleza profunda; otros proceden más bien de su
libre voluntad”.
La familia, por corresponder inmediatamente
a la naturaleza del hombre, crea vinculaciones muy fuertes y supone un motivo importante para la entrega generosa a los demás.
57. PERSONA Y SOCIEDAD, 17
A
Hay una tendencia natural que impulsa
a los seres humanos a asociarse con
el fin de alcanzar objetivos que exceden
las capacidades individuales.
B
Las sociedades o asociaciones intermedias,
al tiempo que estructuran la sociedad, facilitan la participación de grupos en defensa de
legítimos intereses o derechos sociales y
hacen posibles muchas acciones que los individuos aisladamente no podrían realizar con
eficacia.
58. DESARROLLO-ECOLOGIA, 1
Mater et Magistra (1961) 222: “el pro222
blema tal vez mayor en nuestros días
es el que atañe a las relaciones que
deben darse entre las naciones económicamente desarrolladas y las que
están en vías de desarrollo económico: las primeras gozan de una vida
cómoda; las segundas, en cambio,
padecen una durísima estrechez”.
Pablo VI: Populorum progressio (1967) sobre el desarrollo de los pueblos; Juan Pablo II: Sollicitudo rei
socialis (1987) sobre la solidaridad universal.
59. DESARROLLO-ECOLOGIA, 2
Muchos países (Tercer Mundo) carecen de
medios elementales para vivir dignamente:
problemas de alimentación, vivienda, educación, sanidad, infraestructuras, empleo, etc.,
sin contar otras formas de pobreza (negación o limitación de derechos humanos,
como la libertad religiosa, libertad de asociación, iniciativa económica, etc.).
60. DESARROLLO-ECOLOGIA, 3
También en los países desarrollados existen amplias bolsas de
pobreza: el Cuarto Mundo.
Sollicitudo rei socialis (1987) 33: “no sería verdade33
ramente digno del hombre un tipo de desarrollo que
no respetara y promoviera los derechos humanos,
personales y sociales, económicos y políticos, incluidos los derechos de las naciones y de los pueblos”.
61. DESARROLLO-ECOLOGIA, 4
CCE 2438: “Es necesaria la solidaridad entre las
2438
naciones cuyas políticas son ya interdependientes.
Es todavía más indispensable cuando se trata de
acabar con los ‘mecanismos perversos’ que
obstaculizan el desarrollo de los países menos
avanzados”.
CCE 2439: “Las naciones ricas tienen una respon2439
sabilidad moral grande respecto a las que no pueden por sí mismas asegurar los medios de su desarrollo, o han sido impedidas de realizarlo por trágicos acontecimientos históricos”. (caridad y a menudo justicia)
62. DESARROLLO-ECOLOGIA, 5
El subdesarrollo no es sólo
económico: la solidaridad
incluye bienes espirituales.
La evangelización es imprescindible para lograr un
verdadero desarrollo en
todos los “mundos”, no sólo
el Tercer Mundo.
63. DESARROLLO-ECOLOGIA, 6
A
B
Respetar el principio de subsidiaridad: la ayuda internacional no puede
suplir la iniciativa y el esfuerzo de los
nativos, sino que lo apoye de un modo oportuno.
Populorum progressio (1967) 35: “el
35
crecimiento económico depende del
progreso social, por eso la educación básica es el primer objetivo de
un plan de desarrollo”.
64. DESARROLLO-ECOLOGIA, 7
La ayuda internacional
no ha de dirigirse a imponer la disminución de la
natalidad por medios
coactivos o moralmente
inaceptables, sino a mejorar las condiciones para
crear nuevas oportunidades de trabajo y mejorar
la educación de la población.
65. DESARROLLO-ECOLOGIA, 8
En algunos lugares, es considerable:
- el riesgo de desaparición de especies animales,
- el esquilmamiento de recursos naturales,
- el empleo de fuentes de energía no
renovables,
- el deterioro del paisaje,
- la contaminación industrial y urbana,
- la falta de reciclaje de desechos,
- la deposición inapropiada de residuos sólidos,
- etc..
66. DESARROLLO-ECOLOGIA, 9
Unos problemas tienen efectos
planetarios:
- efecto invernadero (dióxido de
carbono),
- deterioro de la capa de ozono,
- masiva deforestación amazónica,
- etc..
67. DESARROLLO-ECOLOGIA, 10
Los problemas ecológicos actuales de deterioro
del medio ambiente tienen una dimensión moral relacionada con el
buen uso de los bienes
creados, con el valor de
la vida y con la dignidad
del hombre y sus derechos, incluyendo a las
futuras generaciones.
68. DESARROLLO-ECOLOGIA, 11
Además, el respeto ecológico ayuda al
desarrollo humano porque facilita descubrir al Creador contemplando las maravillas de la creación.
69. DESARROLLO-ECOLOGIA, 12
La doctrina social en relación con la ecología tiene como base la Revelación: en el
principio, el hombre vivía en completa armonía con su medio ambiente, pero como
consecuencia del pecado original esta armonía se destruyó. => Gen 2, 17-18.
17-18
70. DESARROLLO-ECOLOGIA, 13
CCE 2415: “El uso de los recur2415
sos minerales, vegetales y animales del universo no puede
ser separado del respeto a las
exigencias morales. El dominio
concedido por el Creador al hombre sobre los seres inanimados y
los seres vivos (...) exige un respeto religioso de la integridad
de la creación”.
71. DESARROLLO-ECOLOGIA, 14
CCE 2418: “Es contrario a la
2418
dignidad humana hacer sufrir inútilmente a los animales”.
Es legítimo servirse de ellos
para el alimento y la confección de vestidos. Se los
puede domesticar. Experimentos posibles si....
72. ACTIVIDAD ECONÓMICA, 1
Economía deriva del griego oikonomía que significa “dirección o administración de una casa”. Significado vulgar = buena distribución y
ahorro de dinero y otros medios materiales o inmateriales. Como ciencia, se ocupa de las leyes de producción y distribución de bienes
para satisfacer las necesidades y
deseos humanos.
73. ACTIVIDAD ECONOMICA, 2
La Iglesia no hace ciencia económica. Le
preocupa el orden económico en la medida
en que la economía afecta al desarrollo
humano.
CCE 2426: “la actividad económica diri2426
gida según sus propios métodos, debe
moverse dentro de los límites del orden
moral, según la justicia social, a fin de
responder al plan de Dios sobre el hombre”.
74. ACTIVIDAD ECONOMICA, 3
Ciencia económica y gestión de la actividad
económica gozan de autonomía y leyes
propias, pero sólo encuentran su verdadero
sentido cuando están al servicio del hombre.
CCE 2426: “la vida económica (...) está
2426
ante todo ordenada al servicio de las
personas, del hombre entero y de toda
la comunidad humana”.
75. ACTIVIDAD ECONOMICA, 4
=
La riqueza no puede ser un fin, por
encima de las personas. => CCE 2424:
2424
“una teoría que hace del lucro la norma
exclusiva y el fin último de la actividad económica es moralmente inaceptable”.
Gaudium et spes 63: “El hombre es el autor,
63
el centro, el fin de toda la vida económicosocial”.
76. ACTIVIDAD ECONOMICA, 5
Poner la actividad económica al servicio de
las personas implica que los bienes creados
lleguen a todos de un modo justo y solidario.
Principio del uso común de los bienes =
“el primer principio de todo el ordenamiento
ético social” (Laborem exercens (1981) 19).
19
77. ACTIVIDAD ECONOMICA, 6
=
Gaudium et spes 69: “Dios destinó la tierra,
69
con todo lo que ella contiene, al uso de todos los hombres y los pueblos: de manera
que los bienes creados deben llegar equitativamente a todos, dirigidos por la justicia
y acompañados de la caridad”.
78. ACTIVIDAD ECONOMICA, 7
Dos extremos: 1) liberalismo radical = la
propiedad privada es un derecho casi
absoluto, de tal modo que puede ser usada, vendida y consumida sin más límites
que los daños que pueda ocasionar a las
libertades de los demás o lo que establezcan las leyes; 2) socialismo primitivo =
la propiedad privada es el origen de todos los males, y por ello debe ser abolida.
79. ACTIVIDAD ECONOMICA, 8
Iglesia: 1) todos tienen el derecho a poseer
Iglesia
bienes para sí mismos y para sus familias;
2) esos bienes deben usarse no sólo en
provecho de uno mismo, sino también de
los demás.
La prohibición de robar del
séptimo mandamiento ha de
ser entendida de un modo que
armonice el derecho de propiedad privada con el destino
universal de los bienes.
80. ACTIVIDAD ECONOMICA, 9
Una de las implicaciones
de la función social de la
propiedad es hacerla
rendir, de modo que facilite el acceso al destino universal de los
bienes.
El capital, al ser invertido, tiene capacidad
para generar riqueza.
81. ACTIVIDAD ECONOMICA, 10
Hay una “obligación moral de no mantener
capitales improductivos y, en las inversiones,
mirar ante todo al bien común. Esto exige
que se busque prioritariamente la consolidación o creación de nuevos puestos de trabajo para la producción de bienes realmente
útiles” (Libertatis conscientia (1986) 87).
87
82. ACTIVIDAD ECONOMICA, 11
CCE 2443: “Dios bendice a los que ayudan
2443
a los pobres y reprueba a los que se niegan
a hacerlo”: fundamentado en el Evangelio.
Pero también en la Tradición: “El amor de la
Iglesia por los pobres (...) pertenece a su
constante tradición” (Centesimus annus
(1991) 57).
57
El amor a los pobres “no abarca sólo la pobreza material, sino también las numerosas
formas de pobreza cultural y religiosa”
(CCE 2444).
2444
83. ACTIVIDAD ECONOMICA, 12
Gaudium et spes 67: “quien
67
se encuentra en necesidad
extrema tiene derecho a procurarse lo necesario tomándolo de la riqueza de los
demás” (= el derecho de propiedad cede al superior derecho a la vida).
84. ACTIVIDAD ECONOMICA, 13
A
La autoridad política tiene el derecho
y el deber de proteger la propiedad privada como verdadero derecho. Pero
también ha de regularla en función del
bien común (posibilidad de nacionalizar,
expropiar, etc.; recuerdo del principio de
subsidiaridad: posibilidad de privatizar,
etc.).
85. ACTIVIDAD ECONOMICA, 14
B
La sociedad deseable “no se opone al
mercado, sino que exige que éste sea
controlado oportunamente por las
fuerzas sociales y por el Estado, de
manera que se garantice la satisfacción
de las exigencias fundamentales de toda
la sociedad” (Centesimus annus (1991)
35). Ni colectivismo marxista, ni capitalis35
mo liberal.
86. TRABAJO Y EMPRESA, 1
Creación: en Gen 1, 28, Dios confiere al
28
hombre el dominio sobre la tierra, y en
Gen 2, 8, Dios pone al hombre en el jardín
8
del Edén para que lo trabaje.
El trabajo es la colaboración del hombre
y de la mujer con Dios en el perfeccionamiento de la creación visible.
87. TRABAJO Y EMPRESA, 2
El trabajo no surge como consecuencia
del pecado original, sino que está en los
planes de Dios desde el principio de la
Creación.
El pecado original tiene como
consecuencia el esfuerzo
que acompaña al trabajo, pero
la vocación al trabajo es anterior al pecado.
88. TRABAJO Y EMPRESA, 3
Gaudium et spes 67: “el trabajo humano,
67
autónomo o dirigido, procede inmediatamente de la persona, la cual marca a la
naturaleza como un sello y la somete a su
voluntad”.
89. TRABAJO Y EMPRESA, 4
En el trabajo se comprometen la inteligencia y la voluntad del hombre. Es algo
intencional, específico del
ser humano (en sentido
propio). Por eso el trabajo
participa de la dignidad
propia de todo ser humano
y tiene un valor intrínseco,
cualquiera que sea su valor
económico o su consideración social.
90. TRABAJO Y EMPRESA, 5
Gaudium et spes 35: “La actividad hu35
mana, así como procede del hombre,
así también se ordena al hombre.
Pues éste con su acción no sólo transforma las cosas y la sociedad, sino que
se perfecciona a sí mismo. Aprende
mucho, cultiva sus facultades, se supera y se trasciende. Tal superación,
rectamente entendida, es más importante que las riquezas exteriores que
puedan acumularse. El hombre vale
más por lo que es que por lo que tiene”.
91. TRABAJO Y EMPRESA, 6
El trabajo es alienante cuando
impide la realización humana
de quien trabaja, no por realizarse bajo la dirección de otro y recibir en compensación un salario.
92. TRABAJO Y EMPRESA, 7
Cristo asumió el trabajo dándole una
dignidad sobreeminente. (I)
CCE 2427: “el trabajo puede ser un
2427
medio de santificación y una animación de las realidades terrenas
en el espíritu de Cristo”. Christifideles laici (1989) 43: “los fieles laicos
43
han de cumplir su trabajo con competencia profesional, con honestidad humana, con espíritu cristiano,
como camino de la propia santificación”.
93. TRABAJO Y EMPRESA, 8
El principio de la primacía del trabajo frente
al capital “se refiere directamente al proceso
mismo de producción, respecto al cual el trabajo es siempre una causa eficiente primaria, mientras el capital, siendo el conjunto de
los medios de producción, es sólo un instrumento o la causa instrumental. Este principio
es una verdad evidente, que se deduce de
toda la experiencia histórica del hombre” ( Laborem exercens (1981) 12).
12
94. TRABAJO Y EMPRESA, 9
Todavía quedan países y lugares donde a
los trabajadores, al menos en la práctica, sólo
se les valora en función de su producción, y
no en su dignidad de persona.
Sean cuales sean las circunstancias, siempre
ha de tratarse a los trabajadores como personas llamadas a la condición de hijos de Dios.
95. TRABAJO Y EMPRESA, 10
Conflicto capital-trabajo, 1
Más allá de los intereses en conflicto,
el trabajo y el capital han de armonizarse y cooperar entre sí, pues se
necesitan mutuamente: “ni el capital
puede subsistir sin el trabajo, ni el trabajo sin el capital” (Rerum novarum
(1891) 14).
14
96. TRABAJO Y EMPRESA, 11
Conflicto capital-trabajo, 2
Los responsables de las empresas “están
obligados a considerar el bien de las personas y no solamente el aumento de las
ganancias” (CCE 2432).
2432
Más allá de la libertad de las partes contratantes hay una justicia natural, anterior a
la libre voluntad de las partes, que afecta
a cuestiones como el salario mínimo y
unas condiciones humanas de trabajo.
97. TRABAJO Y EMPRESA, 12
CCE 2433: “El acceso al trabajo y a la profe2433
sión debe estar abierto a todos sin discriminación injusta, a hombres y mujeres, sanos
y disminuidos, autóctonos e inmigrados. Habida consideración de las circunstancias, la sociedad debe, por su parte, ayudar a los ciudadanos a procurarse un trabajo y un empleo”.
98. TRABAJO Y EMPRESA, 13
Centesimus annus (1991) 35: “Los beneficios no
35
son el único índice de las condiciones de la empresa. Es posible que los balances económicos sean
correctos y que al mismo tiempo los hombres, que
constituyen el patrimonio más valioso de la empresa, sean humillados y ofendidos en su dignidad”.
Los beneficios son una condición necesaria para la
buena marcha de una empresa mercantil, pero obtenerlos no es suficiente para que la empresa actúe
con legitimidad moral (droga, pornografía, ...). Para
tener legitimidad moral, debe contribuir al bien común.
99. TRABAJO Y EMPRESA, 14
No se puede considerar la empresa como un simple instrumento de beneficios o como
una mera concurrencia de intereses. Debe ser una comunidad de personas.
100. TRABAJO Y EMPRESA, 15
Centesimus annus (1991) 43:
43
“la empresa no puede considerarse únicamente como una ‘sociedad de capitales’; es, al mismo
tiempo, una ‘sociedad de personas’ en la que entran a formar
parte de manera diversa y con
responsabilidades específicas
los que aportan el capital necesario para su actividad y los que
colaboran con su trabajo”.
101. TRABAJO Y EMPRESA, 16
León XIII (Rerum novarum (1891) 14) cita
14
deberes de los empleados “prohibitivos”,
como no dañar la propiedad, no ofender a
los patronos y abstenerse de toda violencia
al defender sus derechos.
102. TRABAJO Y EMPRESA, 17
PERO pueden señalarse también obligaciones positivas, como:
- trabajar bajo la dirección del empresario o personas designadas por el mismo. Es algo inherente al
contrato de trabajo.
- trabajar con diligencia: las obligaciones del empleado no se reducen a un rígido listado de deberes y derechos, sino que suponen una responsabilidad.
- actuar con lealtad, cumplir los compromisos adquiridos, mantener los secretos profesionales y empresariales, tratar de corresponder a la formación
recibida a cargo de la empresa.
103. TRABAJO Y EMPRESA, 18
Algunos de los derechos de los trabajadores que deben ser respetados (I):
- remuneración del trabajo y prestaciones sociales: salario justo (no basta el
acuerdo de las partes), pensiones (jubilación o accidentes laborales);
- condiciones de trabajo: sin perjuicio a
la salud, sin dañar la integridad moral,
higiene, seguridad;
- derecho a expresar la propia personalidad y a la participación: iniciativa,
responsabilidad, conciencia de trabajar
“en algo propio”;
104. TRABAJO Y EMPRESA, 19
Algunos de los derechos de los trabajadores que deben ser respetados (II):
- horarios de trabajo y descanso dominical: obligación de los poderes públicos y de los patronos de asegurar a los
ciudadanos y a los empleados un tiempo destinado al descanso y al culto
divino;
- sindicatos: derecho fundamental,
pero “lucha en favor” del justo bien, no
“contra” los demás.
105. TRABAJO Y EMPRESA, 20
Huelga
“es moralmente legítima cuando constituye
un recurso inevitable, si no necesario para
obtener un beneficio proporcionado. Resulta
moralmente inaceptable cuando va acompañada de violencias o también cuando se
lleva a cabo en función de objetivos no directamente vinculados con las condiciones del
trabajo o contrarios al bien común” (CCE
2435).
2435
106. TRABAJO Y EMPRESA, 21
Igualdad de derechos humanos en varón y
mujer en el campo laboral
“no significa para la mujer la renuncia a su feminidad ni la imitación del carácter masculino, sino la
plenitud de la verdadera humanidad femenina tal
como debe expresarse en su comportamiento, tanto
en familia como fuera de ella” (Familiaris consortio
(1981) 23).
23
Al mismo tiempo, “que la sociedad cree y desarrolle
las condiciones adecuadas para el trabajo doméstico” (Idem).
Idem
107. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 1
a
La comunidad política encuentra su origen en la sociabilidad humana. Junto con
la familia, responde de modo inmediato a la
naturaleza íntima del hombre.
Los individuos y las familias necesitan leyes, tribunales, gobernantes que velen por el orden público, apliquen adecuadas políticas educativas,
sanitarias y culturales y procuren que no falten las
oportunas infraestructuras, etc..
108. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 2
b
La comunidad política tiene su razón
de ser en el bien común. El Estado,
como forma organizativa de aquélla,
tiene también como fin procurar el bien
común de los ciudadanos y de las instituciones intermedias.
109. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 3
El Estado está en función de las personas,
a modo de garante y defensor de sus derechos. Los que ejercen en él funciones de
autoridad están para servir al bien común
y no a sus intereses particulares o de partido.
110. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 4
A su vez, “deber de los ciudadanos es cooperar con la autoridad civil al bien de la sociedad en espíritu de verdad, justicia, solidaridad y libertad” (CCE 2239). “La sumisión a
2239
la autoridad y la corresponsabilidad en el
bien común exigen moralmente el pago de
los impuestos, el ejercicio del derecho al
voto, la defensa del país” (CCE 2240). El
2240
bien común señala los límites de obediencia a las autoridades del Estado.
111. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 5
No es competencia de la Iglesia determinar
cuál ha de ser el régimen político de un país,
ni precisar las instituciones necesarias, ni
señalar los contenidos de las leyes constitucionales. Pero puede alabar o reprobar determinadas formas de organización política
en relación con el respeto a la dignidad y al
bien de las personas y al bien común.
112. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 6
Centesimus annus (1991) 46: “La
46
Iglesia aprecia el sistema de democracia, en la medida en que asegura la participación de los ciudadanos en las opciones políticas y garantiza a los gobernados la posibilidad de elegir y controlar a sus
propios gobernantes, o bien la de
sustituirlos oportunamente de
manera pacífica”.
113. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 7
Centesimus annus (1991) 46: “Una auténtica de46
mocracia es posible solamente en un Estado de
derecho y sobre la base de una recta concepción
de la persona humana”.
=
Idem 44: “La raíz del totalitarismo moderno
44
hay que verla (...) en la negación de la dignidad trascendente de la persona humana,
imagen visible de Dios invisible y, precisamente por esto, sujeto natural de derechos
que nadie puede violar: ni el individuo, el grupo, la clase social, ni la Nación o el Estado”.
114. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 8
Idem: “Cuando una mayoría parlamentaria
Idem
o social decreta la legitimidad de la eliminación de la vida humana aún no nacida,
inclusive con ciertas condiciones, ¿acaso
no adopta una decisión ‘tiránica’ respecto
al ser humano más débil e inocente?”.
115. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 9
Riesgo importante para la democracia: el
relativismo ético.
A
Evangelium vitae (1995) 70: “Es cierto
70
que en la historia ha habido casos en los
que se han cometido crímenes en nombre de la ‘verdad’. Pero crímenes no
menos graves y radicales negaciones
de la libertad se han cometido en nombre del ‘relativismo ético’”.
116. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 10
Riesgo importante para la democracia: el
relativismo ético.
B
Centesimus annus (1991) 46: “Si no existe
46
una verdad última la cual guía y orienta la
acción política, entonces las ideas y las convicciones humanas pueden ser instrumentalizadas fácilmente para fines de poder. Una
democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto,
como demuestra la historia”.
117. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 11
Riesgo importante para la democracia: el
relativismo ético.
C
Evangelium vitae (1995) 70: “En realidad, la
70
democracia no puede mitificarse convirtiéndola en un sustitutivo de la moralidad o en
una panacea de la inmoralidad. Fundamentalmente, es un ‘ordenamiento’ y, como tal, un
instrumento y no un fin. Su carácter ‘moral’
no es automático, sino que depende de su
conformidad con la ley moral a la que, como
cualquier otro comportamiento humano, debe
someterse”.
118. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 12
Riesgo importante para la democracia: el
relativismo ético.
D
Idem 71: “Para el futuro de la sociedad y el
71
desarrollo de una sana democracia urge pues
descubrir de nuevo la existencia de valores
humanos y morales esenciales y originarios,
que deriven de la verdad misma del hombre y expresen y tutelen la dignidad de la
persona. Son valores, por tanto, que ningún
Estado puede crear, modificar o destruir,
sino sólo reconocer, respetar y promover”.
119. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 13
Las leyes no pueden prescindir de
su base ética. = “sólo el reconocimiento de una ley moral objetiva,
en cuanto es ‘ley natural’ inscrita
en el corazón del hombre, es punto
de referencia normativa de la misma ley civil” (Evangelium vitae
(1995) 70).
70
Las leyes civiles son menos amplias que la ley moral.
En algunas ocasiones podrán quedar sin penalizar por
la ley civil determinadas acciones contrarias a la moral
(adulterio, prostitución...). Pero la ley siempre ha de proteger los derechos inalienables de la persona.
120. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 14
Las leyes justas obligan en conciencia.
PERO
“Si los dirigentes proclamasen leyes
injustas o tomasen medidas contrarias al orden moral, estas disposiciones no pueden obligar en conciencia” (CCE 1903).
1903
121. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 15
Cuando una ley se estima injusta es necesario luchar por cambiarla. La democracia permite contribuir a conseguirlo. PERO a veces serán necesarias
varias etapas. Ejemplo: “cuando no sea posible
evitar o abrogar completamente una ley abortista,
un parlamentario, cuya absoluta oposición personal al aborto sea clara y notoria a todos, puede
ofrecer su apoyo a propuestas encaminadas a limitar los daños de esa ley y disminuir así los efectos negativos en el ámbito de la cultura y de la
moralidad pública” (Evangelium vitae (1995) 73).
73
122. ESTADO Y VIDA PUBLICA, 16
I
Las relaciones de colaboración entre la Iglesia y el Estado son de carácter institucional
y tienen gran importancia, pero no deben confundirse con las acciones políticas que los
fieles católicos, en nombre propio y como ciudadanos guiados por su conciencia cristiana,
llevan a cabo, ya sea individualmente o unidos a otros ciudadanos católicos o no católicos.
II
El cristiano debe vivir una ejemplar unidad de
vida. La actitud cristiana en la vida pública es
de apertura y colaboración, pero no de renuncia a la verdad conocida.
123. ORDEN INTERNACIONAL, 1
En el ámbito del orden internacional, las enseñanzas del Magisterio se basan en la igualdad fundamental entre los hombres, en la unidad del género
humano y el origen común de toda la humanidad,
en la Redención de Cristo, que se extiende a todos,
y en la llamada universal a la santidad. Todo ello
lleva a la Iglesia a fomentar la fraternidad entre personas y pueblos de todo el mundo.
CCE 1911: “La unidad de la familia
1911
humana que agrupa a seres que poseen una misma dignidad natural,
implica un bien común universal”.
124. ORDEN INTERNACIONAL, 2
En los tiempos actuales “no sólo ha crecido la conciencia del derecho de los individuos, sino también la de los derechos de las naciones” (Centesimus annus (1991) 21).
21
Pacem in terris (1963) 302: “las naciones son su302
jetos de derechos y deberes mutuos (...). La misma ley natural que rige las relaciones de convivencia entre los conciudadanos debe regular también
las relaciones mutuas entre las comunidades políticas”.
125. ORDEN INTERNACIONAL, 3
Derechos básicos de las naciones: - a la
existencia; - al propio desarrollo; - a los
medios necesarios para este desarrollo;
- a ser cada una la primera responsable en
procurar y alcanzar todo lo anterior; - a la
buena fama;- a que se les rindan los debidos honores.
126. ORDEN INTERNACIONAL, 4
Discurso de Juan Pablo II en la sede de la ONU,
5.X.1995:
“El derecho a la existencia implica naturalmente
para cada nación, también el derecho a la propia
lengua y cultura, mediante las cuales un pueblo
expresa y promueve lo que llamaría su originaria
‘soberanía’ espiritual. La historia demuestra que
en circunstancias extremas, (...) es precisamente
su misma cultura lo que permite a una nación
sobrevivir a la pérdida de la propia independencia política y económica”.
127. ORDEN INTERNACIONAL, 5
Particular importancia reviste la defensa de los derechos de los pueblos
más débiles y de las minorías étnicas.
128. ORDEN INTERNACIONAL, 6
El ordenamiento de la comunidad internacional necesita instituciones apropiadas, que
deben “proveer a las diversas necesidades
de los hombres tanto en el campo de la vida
social, alimentación, higiene, educación,
trabajo, como en múltiples circunstancias
particulares que surgen acá y allá” (Gaudium et spes 84). Florecimiento de organi84
zaciones promovidas por los gobiernos y
ONGs.
129. ORDEN INTERNACIONAL, 7
Existe también la necesidad
de una autoridad para la comunidad internacional: su
poder debe alcanzar vigencia
en el mundo entero y ha de
establecerse con el consentimiento de todas las naciones y no imponerse por la
fuerza. Debe servir al bien
común según el orden moral. Actualmente esta autoridad mundial recae en la ONU.
130. ORDEN INTERNACIONAL, 8
Las relaciones entre las naciones “deben
regularse por las normas de la verdad, la
justicia, la activa solidaridad y la libertad”
(Pacem in terris (1963) 302).
302
a
La verdad exige que “se reconozca
como principio sagrado e inmutable
que todas las comunidades políticas
son iguales en dignidad natural”
(Idem 304).
304
131. ORDEN INTERNACIONAL, 9
b
c
d
La justicia exige el reconocimiento de los
mutuos derechos y el cumplimiento de los
mutuos deberes, sin abusos de los más poderosos sobre los más débiles.
Activa solidaridad: en la economía, la vida
social y política, la cultura, la salud, el deporte.
Libertad: las naciones ayudadas deben ser
las protagonistas y las principales responsables de su propio desarrollo.
132. ORDEN INTERNACIONAL, 10
La justicia y solidaridad
entre las naciones requiere
cooperación internacional de diversa índole: jurídica, económica, educativa,
cultural, etc..
133. ORDEN INTERNACIONAL, 11
La paz en la comunidad internacional es parte imprescindible del
bien común. Ha de ser una paz
justa, no forzada por un dominio
opresor. CCE 2304: “La paz no
2304
puede alcanzarse en la tierra sin la
salvaguardia de los bienes de las
personas, la libre comunicación
entre los seres humanos, el respeto de la dignidad de las personas
y de los pueblos, la práctica asidua de la fraternidad”.
134. ORDEN INTERNACIONAL, 12
CCE 2308: “Todo ciudadano y
2308
todo gobernante están obligados a empeñarse en evitar las
guerras” (quinto mandamiento).
Gaudium et spes 79: “Mientras exista el riesgo de
79
guerra y falte una autoridad internacional competente y provista de la fuerza correspondiente, una
vez agotados todos los medios de acuerdo pacífico, no se podrá negar a los gobiernos el derecho
a la legítima defensa”.
135. ORDEN INTERNACIONAL, 13
Para que la defensa militar tenga legitimidad
moral, es preciso que se cumplen a la vez las
condiciones rigurosas siguientes (CCE 2309):
2309
1. Que el daño causado por el agresor a la
nación o a la comunidad de las naciones sea
duradero, grave y cierto.
2. Que todos los demás medios para poner
fin a la agresión hayan resultado impracticables o ineficaces.
136. ORDEN INTERNACIONAL, 14
3. Que se reúnan las condiciones serias de éxito.
4. Que el empleo de las armas no entrañe
males y desórdenes más graves que el mal
que se pretende eliminar. El poder de los medios modernos de destrucción obliga a una
prudencia extrema en la apreciación de esta
condición.
137. ORDEN INTERNACIONAL, 15
Terrorismo:
Sollicitudo rei socialis (1987) 24:
24
“Aun cuando se aduce como motivación de esta actuación inhumana cualquier ideología o la creación de una
sociedad mejor, los actos de terrorismo nunca son justificables. Pero mucho menos lo son cuando, como sucede hoy, tales decisiones y actos, que a
veces llegan a verdaderas mortandades, ciertos secuestros de personas
inocentes y ajenas a los conflictos, se
proponen un fin propagandístico en
favor de la propia causa”. Peor si se
mata sólo por matar.
138. ORDEN INTERNACIONAL, 16
CCE 2310: “Los que se dedican
2310
al servicio de la patria en la vida
militar son servidores de la seguridad y de la libertad de los
pueblos. Si realizan correctamente su tarea, colaboran verdaderamente al bien común de la nación y al mantenimiento de la
paz”.
139. ORDEN INTERNACIONAL, 17
CCE 2315: “La carrera de armamentos no
2315
asegura la paz. En lugar de eliminar las
causas de guerra, corre el riesgo de agravarlas. La inversión de riquezas fabulosas
en la fabricación de armas siempre más
modernas impide la ayuda a los pueblos
indigentes, y obstaculiza su desarrollo”.