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Como poner limites con los hijos
1. ¿COMO PONER LIMITES CON LOS HIJOS?
Hay elementos que pueden ser muy valiosos y útiles:
Conocer a los hijos para saber qué podemos esperar de
ellos. Si pedimos mucho más de lo que en realidad pueden
hacer, se sentirán frustrados. Tampoco sirve ser demasiado
blandos y exigir mucho menos de sus posibilidades.
Exigir conductas que correspondan a su edad. No podemos
esperar que se comportencomo adultos formales todo el tiempo.
Es necesario entender que son niños, con necesidades propias,
y que seguramente en muchas ocasiones no cumplirán con
ciertas conductas esperadas.
Platicar con los hijos y conjuntamente poner reglas claras,
concretas, precisas. Y además asegurarnos que las
comprendieron y que les ha quedado claro cuáles son las
consecuencias de su incumplimiento.
Explicar el porqué y el para qué de estas reglas.
Ser congruentes y constantes en la aplicación de las reglas
y límites. NO se vale aplicarlas cuando nos conviene y dejar de
hacerlo cuando no nos interesa. O aplicarlas cuando nos es fácil
y no cuando nos cuesta trabajo.
Permitir que, en lo posible, los hijos asuman las
consecuenciasde sus conductas. Es decir, que paguen lo que
rompieron, que negocien con el maestro sus problemas en la
escuela, que recojan lo que tiraron, etc. Esto no quiere decir que
se les exija de mala manera que lo hagan o que no se apoyen
para que puedan responsabilizarse de sus actos. Sabemos que
no es fácil, pero sabemos también que sí es posible pedirles de
2. manera clara, directa y amable que lo hagan, así como
acompañarlos o apoyarlos para lograr que asuman su
responsabilidad y al mismo tiempo dejarlos que ellos solos se
responsabilicen.
Confiar en que los hijos podrán cumplir con las normas y ser
responsables, si no confiamos en ellos, seguramente ellos
tampoco confiaran en sí mismos ni en nosotros.
Ofrecer alternativas de conducta viables: no solo decir que algo
está mal y punto, sino decir como podría hacerse mejor.
Reconocer las conductas positivas. Educar no consiste
únicamente en corregir lo que esta mal. Todos necesitamos que
se nos reconozca lo que hemos hecho bien, nuestro esfuerzo, y
éste es factor que motiva a seguirse esforzando.
Promover una comunicación familiar clara, abierta y
afirmativa.Sin una buena comunicación entre padres e hijos, es
prácticamente imposible que haya una disciplina apropiada.
Tener claro que poner límites o reglas no esta peleado con la
demostración del afecto. Podemos ser al mismo tiempo
exigentes y cariñosos. Y nunca condicionar el cariño a la
conducta de los hijos. El cariño siempre debe estar allí,
independientemente de los errores que se cometan. Hay que
reconocer estos últimos y buscarles una solución, pedo no
mediante el chantaje, la culpa o la amenaza de retirar el amor.