1. UNIVERSIDAD FERMIN TORO
VICERECTORADO ACADEMICO
FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y POLITICAS
ESCUELA DE DERECHO
Integrante:
Juvenal Hidalgo
CI: 24.925.526
Barquisimeto 23/09/2015
2. Jeremy Bentham (1748-1832) fue un afamado filósofo, jurista y político inglés. En
su consideración de la utilidad del placer subrayó la importancia de la
imparcialidad para considerar a todo ser humano como ser a tener en cuenta en
su búsqueda de placer. Esto es algo que rompía con el tradicionalismo clasista de
las sociedades antiguas. Significaba que una sociedad no ha de valorar como
superior el placer de una persona por ser aristócrata, o por ser más adinerado que
otra persona no aristócrata o con poco dinero. Entre sus obras destacamos
"Introducción a los principios de la moral y de la legislación".
El contenido y sentido del utilitarismo de Bentham se comprende mejor si se
recuerda la intención de su autor. Esta no era otra que reformar profundamente la
legislación británica, que contribuía en realidad a mantener unas desigualdades
sociales y discriminaciones políticas muy notables. Y, conforme al espíritu
ilustrado de la época, nada mejor que sustituir ese régimen jurídico basado en
privilegios heredados por un sistema transparente, racional y secular. Una vez
determinado el fin natural de la felicidad placentera, todo consiste en dejar que la
luz de la razón ordene y sancione lo justo y lo injusto, aboliendo toda otra regla
procedente de oscuras e injustificadas instancias (metafísicas, religiosas,
tradicionales, etc.). En realidad, se trata de trasladar a la vida social y política el
criterio que sirve para la vida individual, a saber, el sensato procedimiento —ya
expresado por el hedonismo clásico— de calcular los costes y beneficios de cada
acción para elegir en cada caso la más fecunda en términos de placer.
Entonces, lo bueno moralmente sería buscar aquello que diera mayor placer a la
mayor cantidad de gente sin importar su extracción social. Para ello Bentham ideó
una serie de reglas de cálculo de placeres. Esto a simple vista es fácil de entender
y es muy conciliable con la mentalidad democrática actual. No obstante, surgieron
problemas con este cálculo: primero, cómo calcular el grado de placer de cada
individuo de modo cabal, siendo como es la vivencia del placer algo tan personal,
tan subjetivo, y cómo "sumar" experiencias que, al ser tan personales, son
difícilmente equiparables. Otro problema importante era el relacionado con la
posible calidad de los tipos de placeres; aunque Bentham no se pronunció sobre
ello parecía claro que aún considerando valioso por igual el placer de todas las
personas, sin distingos de clases, los seres humanos culturalmente dan más valor
social y/o moral a unos placeres que a otros, por tanto tal vez debería hacerse una
clasificación lo más objetiva posible de calidades morales de los distintos tipos de
placeres
3. El utilitarismo de Bentham aparece relacionado con el hedonismo, ya que
considera que las acciones morales son aquellas que maximizan el placer y
minimizan el dolor.
Es interesante tener en cuenta que la ruptura que Bentham estableció respecto al
clasicismo de las sociedades anteriores la expresó perfectamente en obras tales
como la titulada “Introducción a los principios de la moral y de la legislación”.
En este tipo y en otros de corte similar dejaba patente que lo bueno será todo
aquello que dé placer a un mayor número de personas sin que en ningún caso se
tenga en consideración lo que es el estatus social de ellas. Una afirmación que
asentó además con la creación y desarrollo de lo que dio en llamar cálculo de
placeres, una serie de reglas que le servían para tener claro, en base a esos
criterios, qué era bueno y qué era malo.
Su obra mas resaltante fueIntroducción a los principios de la moral y de la
legislación.
Esta obra fundamental de Jeremy Bentham se abre con una sencilla afirmación:
"La naturaleza ha puesto al género humano bajo el dominio de dos dueños
soberanos; el dolor y el placer; y a ellos solos corresponde indicarnos lo que
debemos o no debemos hacer". La base de la ciencia moral es así "el principio de
la utilidad", o, mejor dicho, de la "mayor felicidad" del individuo o de la comunidad.
Las cualidades definidas empíricamente como comprobables, como los placeres
propios de los sentidos o los de la riqueza, del poder, de la curiosidad, simpatía,
antipatía, benevolencia del individuo o de la sociedad, son de este modo
aprobados o desaprobados según la tendencia que muestran a aumentar o
disminuir la felicidad.
Cuando investigamos la tendencia buena o mala de una acción empezamos
calculando el valor de todos los placeres o dolores probables que aquella acción
produciría en una persona cualquiera; debemos, por lo tanto, calcular su
intensidad y duración, certidumbre o incertidumbre; pero no hemos de tomar en
consideración ninguna supuesta diferencia de cualidad, puesto que "a igualdad de
placer, un juguete vale tanto como una poesía". Seguidamente calculamos la
tendencia de estas cualidades primarias al venir seguidas de sentimientos
análogos u opuestos: entonces sumamos todos los placeres y todos los dolores
resultantes, para decidir acerca de la tendencia buena o mala de la acción para un
individuo.
Bentham fundó el University College de Londres, donde, por expreso deseo suyo,
está expuesto al público su esqueleto.